“¿Está bien reprimir mis sentimientos hacia ti?”

AU|Escolar, sin quirks.

[ K A M I D E K U ]

Denki conocía a Izuku desde que era un niño.

Sabía de memoria las manías que tenía el pecoso. Cuando se avergonzaba solía tapar su rostro rojizo de una forma extraña mientras tartamudeaba. Solía hecharse a llorar fácilmente pero poseía una gran determinación.

Al igual que una hermosa mirada esmeralda que parecía iluminarse aún más cuando hablaba de los héroes de sus cómics.

Le gustaba cuando reía de sus chistes sin sentido, cuando lo podía invitar a su hogar y se quedaba a pasar la noche, cuando le sonreía o lo abrazaba cuando miraban una película de terror, cuando le escuchaba y aconsejaba, sin importar que él fuera el menor de ambos.

En realidad, le gustaba todo de él.

Era el único que lo comprendía, con quien sólo bastaba estar a su lado y sentirse cómodo, sin necesidad de conversar.

Pero se sentía un idiota, un cobarde que era incapaz de admitirle a Izuku que le gustaba.

Y simplemente, tenía que conformarse con la gran amistad que le ofrecía.

Por una simple y sencilla razón: temía que Izuku se alejara de él por ese motivo, por sentir más que amistad.

No quería perderlo.

Tal vez con el tiempo podría lograr que sus sentimientos se esfumaran.

Ambos eran de grados distintos, mientras Kaminari se encontraba en su último año de preparatoria, Midoriya apenas iniciaba su primer año. Una pequeña cifra de edad los separaba, por lo cual aunque estuvieran en clases diferentes se tomaban su tiempo para reunirse y almorzar juntos, luego iban al hogar del otro para pasar el rato o hacer las tareas –a obligación del pecoso porque Denki realmente prefería hacer cualquier otra cosa–.

Izuku siempre le ayudaba, no importaba que fuera de grado menor, era inteligente y comprendía fácilmente. Además, de esa manera podría practicar desde antes sus actividades futuras, como siempre decía.

Lo contrario a Denki.

Y como era costumbre, luego de estar un día en el hogar de los Midoriya, se despidió de la señora Midoriya y Izuku lo acompañó a la puerta.

Mientras se alejaba y sin notarlo, Izuku lo observaba desde el marco de la puerta, pues sólo los separaban unas cuantas casas, y dejó escapar un suspiro.

—Será otro día —murmuró, antes de entrar a su casa.

Será otro día sin haber reunido valor y decirle –sin que se atascaran las palabras en su boca–, “Me gustas”.

Podía ser valiente y todo, pero tenía miedo a la reacción del rubio, ¿se alejaría? ¿Lo vería como un bicho raro?

Ambos ignoraban lo que otro guardaba en silencio y se lastimaban en el proceso.

Nota: No sé si usé la temática del día de buena forma, pero me gustó el resultado final.

Corto, lo sé. Pero en realidad no tenía muchas ideas y estuve ocupada, realmente lo acabo de terminar y para no atrasarme con más días, lo deje así.

¡Gracias por leer y nos vemos en el siguiente día!

Actual:

Al fin lo pude publicar >:v

Wattpad no estaba de humor para dejarme hacerlo y después de varios intentos que no parecían dar resultado, ¡lo logre!