Tras obtener el ADN de Gunhead, el villano vestido de negro había invertido los siguientes cinco días preparando una enorme variedad de aparatos médicos que le permitieran llevar a cabo la mejora del quirk de Kaina. Sin embargo y pese a ser un científico con varios años de experiencia encima, este sentía miedo, miedo de hacer algo mal, miedo de perder a su amada por un simple error de calculo, miedo de fracturar a su familia por su propio egoísmo, miedo a ser como su padre 

Impulsado por dicho miedo, el pecoso llevó a cabo tantas revisiones y pruebas que la cantidad de sujetos de prueba debía ser contada con números de tres cifras. Al principio fueron quirks similares o casi iguales, pero con el transcurso de los días este fue pasando a unir quirks tan distantes entre sí que directamente podían decirse que eran lo opuesto la una de la otra. Por suerte, su obsesión conoció límites cuando por fin había logrado comprender todo sobre unir quirks sin consecuencia alguna y había llenado al menos tres diarios con anotaciones sobre que y que no hacer 

Al sexto día este por fin descansó, durmiendo durante 24 horas para poder reponer las energías que había perdido tras no dormir por cinco días seguidos, haciendo una especie de hibernación en miniatura antes de llevar a cabo el experimento más importante de su vida hasta ese momento. Tras despertarse al día siguiente, este se vistió con sus ropajes de Bondrewd y llamó a sus expertos en genética más talentosos para que le asistieran en el proceso -Si esto sale bien, serán capaces de presenciar el inicio del fin de la humanidad como la conocemos, no obstante, si esto sale mal por su culpa, no podrán considerarse como seres vivos después de lo que les haré- Amenazó mientras que llenaba una especie de ataúd de vidrio o cristal con una sustancia verdosa brillante que manejaba con extrema precaución, usando su casco para que nadie viera las muecas que delataban sus intenciones de abandonar el proyecto 

Eventualmente, la paciente llegó vistiendo una bata similar a la de los hospitales junto con una intravenosa en la mano derecha, deteniendo su marcha hacia el ataúd de cristal donde se realizaría su mejora genética para sostener la camisa de su marido con su mano izquierda, hacerlo bajar hasta la altura de su cara y depositar un beso simple en el cristal de su casco -Sé en lo que me estoy metiendo cariño, lo he hecho desde que me casé contigo, sólo sigue confiando en ti tanto como yo y el resto lo hacemos- Pronunció con amor mientras que presionaba los botones a los costados del casco de Izuku para quitárselo y revelar su rostro de arrepentimiento, sosteniendo sus mejillas con ambas manos antes de darle otro beso, esta vez en los labios -Has lo que mejor sabes lagartija sub desarrollada- Fue lo último que dijo la mujer antes de entrar al recipiente y empezar a ser perforada por decenas de agujas que le suministraban anestesia en conjunto con estabilizadores genéticos que el propio Izuku había desarrollado

Al ver esto, el pecoso tomó su casco y nuevamente lo posó sobre su rostro, volteándose para ver a su equipo -Demos inicio a las pruebas caballeros, llevaremos a la humanidad a otro nivel esta noche!- Exclamó este mientras que presionaba una serie de botones en el ataúd, viendo con asombro como el brazo de Kaina intentaba convertirse en el rifle usual, pero en lugar de salir un sólo cañón extremadamente largo, salían tres más cortos, más específicamente de la mitad del tamaño, que empezaron a crecer mientras se mantenían unidos gracias a una cinta de músculos delgada que surgió para envolver la parte cercana al brazo de la mujer y mantener todo en su lugar 

( Luego haré un dibujo, pero por ahora imagínense una ametralladora gatling hecha de huesos, carne y músculo )

-Fascinante........señor, se da cuenta de lo que acaba de lograr, verdad ?- Preguntó asombrado uno de los acompañantes del pecoso al ver como la mujer dentro del ataúd de cristal mutaba a gran velocidad sin recibir ningún daño físico o mental, revisando en una tableta para ver si había algún daño genético y sorprendiéndose al no encontrar nada -Si sabe que esto puede poner al mundo de cabeza ?, sólo saber el procedimiento y ser capaz de replicarlo haría a alguien el ser más buscado del mundo, usted literalmente entiende todo sobre esto, podría hacerse todavía más rico- Dijo otro acompañante mientras que miraba a su jefe caminar de un lado al otro con algo de ansiedad, volteándose a verlos durante unos breves segundos para hacer una seña de amenaza que les hizo callar al instante, decidiendo estos enfocarse en el experimento para evitar su propia muerte por sus comentarios fuera de lugar

El procedimiento continuó durante cinco horas durante las cuales nadie salió ni entró a la habitación, la cual se mantuvo en un silencio sepulcral durante todo el tiempo que le tomó a Kaina asimilar el nuevo ADN en su código genético, no deteniéndose ninguno de los involucrados ni para darse un breve respiro o descanso. Por suerte, el pecoso estaba demasiado concentrado en su esposa como para notar como sus acompañantes se movían de manera lenta y cuidadosa a su espalda para tomar algunas donas que habían escondido antes del procedimiento, lo que les permitió mantenerse de pie gracias a la azúcar contenida en el postre, contando cada segundo que pasaba para intentar adivinar cuando se irían hasta que finalmente la pequeña alarma de la máquina avisó de la finalización del proceso -Caballeros, lo hemos conseguido- Fue lo último que dijo el pecoso antes de quitarse el casco y dejarlo sobre una mesa cercana, exhalando una pequeña llamarada antes de mirar directamente a sus colaboradores con ojos llenos de alegría y gratitud hacia los mismos, dándoles un pulgar arriba para reafirmar el éxito que acababan de alcanzar

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Horas después del final del procedimiento Kaina abrió sus ojos con una sensación de dolor inigualable, encontrándose recostada en una cama mullida y cómoda pero rodeada por una buena cantidad de máquinas que medían diferentes condiciones de su cuerpo. Una breve inspección extra le reveló que estaba de vuelta en el penthouse, más específicamente en la habitación que compartía con su pareja, pudiendo observar a su gigantesco marido descansando en una sillón individual cercano a la cama en la que reposaba 

Al intentar moverse, esta sintió como su brazo derecho estaba completamente entumecido y le era imposible moverlo, tocándolo curiosidad usando su brazo restante para intentar moverlo con la ayuda del mismo -( Esto es me recuerda a el día en que conocí a esa lagartija en esteroides )- Pensó la mujer mientras que dejaba caer suavemente su brazo inutilizado sobre sus piernas, empezando a buscar algo en la pequeña mesita de noche al lado de la cama que pudiera aventarle por la cabeza a su marido para intentar despertarlo de su siesta, pudiendo poner su única mano sobre una taza blanca vacía que arrojó directamente a la cabeza de Izuku, quien usó su cola para destrozar el pedazo volador de arcilla antes de que impactara contra él

-Veo que estás despierta y tienes la suficiente energía como para no dejarme dormir- Dijo el pecoso que ya no vestía su traje de villano y en su lugar había optado por su ropa casual, levantándose lentamente del sillón con una sonrisa cansada en el rostro, revisando rápidamente los signos vitales de la mujer pelimixta antes de poner sus enormes manos sobre el brazo de su esposa para retirar las intravenosas que estaban en este -Es sorprendente lo rápido que volviste a la consciencia, los sujeto de prueba necesitaban de cinco a seis horas para volver a siquiera abrir los ojos y mover el cuello, pero tú.......tú sólo necesitaste de dos, honestamente no pienso que seas humana en lo absoluto- Comentó este mientras que terminaba de desconectar a su pareja y le ayudaba a ponerse de pie al lado de la cama, soltándola por orden de esta para permitirle erguirse por si sola 

Pese a que le costó, la mujer rápidamente recuperó su fuerza en la piernas junto con su balance, usando toda su fuerza de voluntad disponible para mover su brazo derecho hasta llevar su mano a la altura de su cara -Si estoy viva y sin daños visibles eso quiere decir que lo lograste, verdad ?- Preguntó con una sonrisa confiada en su boca, haciendo que Izuku asienta con seriedad mientras que tomaba el brazo opuesto a donde estaba el rifle orgánico de su esposa, tomando un pequeño táser para dar un toque a la extremidad y generar la transformación -Allí tienes, tu nuevo y mejorado quirk- Comentó con humor mientras que su esposa apreciaba su nueva arma en su brazo izquierdo, temblando levemente a causa del dolor similar a un calambre que sentía en esos momentos 

Claramente era una pistola gatling que iniciaba desde la punta de su dedo medio hasta un poco antes de llegar al codo. A nivel anatómico, todos los huesos de la mano izquierda de Kaina se habían reacomodado para que el pulgar, el índice, el anular y el meñique se posicionaran arriba, debajo y a los costados del dedo medio. Todos los dedo ahora presentaban agujeros en sus puntas y también se habían hinchado a causa del crecimiento de los huesos para poder convertirlos en cañones por donde Kaina dispararía las balas de cartílago características de Gunhead -Es mucho más ligero que mi rifle, pero supongo que debe de tener sus contras, me equivoco ?- Preguntó al pecoso, quien sólo se encogió de hombros, ya que si bien le dieron un informe del nuevo quirk de Kaina, este había estado demasiado ocupado revisando de manera casi obsesiva el progreso de la recuperación de su esposa, ignorando por completo cualquier información no relacionada con la salud de la misma 

Algo aburrida por la respuesta de su esposo, Kaina le apuntó con su nueva arma y disparó una ráfaga de dieciseis pequeños proyectiles afilados de cartílago, los cuales sólo lograron romper la camisa de Izuku y causar pequeños arañazos en su piel reforzada -Cadencia a cambio de potencia, no está mal, servirá para el combate cercano y estoy segura de que matará a cualquiera que no seas tú, quieres que salgamos a probarlo ?- Propuso la pelimixta a su marido mientras que este empezaba a evaluar los pros y contras de hacerlo, murmurando velozmente durante unos segundos antes de sonreír y alzar su pulgar, algo que puso indescriptiblemente feliz a Kaina, quien prácticamente saltó de su camilla, sintiendo como todas las agujas que estaban clavadas en su cuerpo eran arrancadas violentamente por su propia estupidez 

Sorprendentemente y como muestra del enorme orgullo de la mujer, Kaina caminó como si nada aguantándose el pequeño quejido que quería dejar escapar hasta llegar a el ascensor, todo bajo la mirada confundida y preocupada de Izuku, quien apenas y lograba comprender el como su esposa era capaz de lastimarse tanto con sólo emocionarse, rezando mentalmente para que su hijo no heredara esta conducta tan estúpidamente autodestructiva -Kaina te amo pero a veces desearía agarrarte por el cuello- Dijo el pecoso mientras que caminaba junto a su esposa sosteniendo delicadamente su brazo para así poder ayudarla en caso de una posible caída o tropiezo -Eso es parte de mi encanto querido- Fue la respuesta de la atrevida mujer, a la cual no le molestaba en lo mínimo el trato tan delicado que tenía su marido con ella, la hacía sentir especial y era su forma de saber que Izuku aún se preocupaba por ella.

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Nezu estaba simplemente estresado, no sólo recientemente Gunhead había sido atacado por Bondrewd y fue dejado fuera de combate por unos días, si no que además la presión de tener el Festival Deportivo de la UA a la vuelta de la esquina lo estaba volviendo loco. Ya tenía bastante con que lidiar teniendo en cuenta tanto el doctor demente como la Liga de Villanos estaban vigilando atentamente los movimientos de los héroes, agradeciendo a lo que sea que fuera superior a todo que la Liga no fuera ni la mitad de osada que el villano de traje negro -Podría cancelar el festival, pero eso sería dejarles saber al mundo que no somos capaces de lidiar ni siquiera con un montón de villanos de poca monta liderados por un hombre con complejos de chuunibyo- Se dijo a si mismo Nezu mientras que miraba el reloj con molestia, todavía le faltaban muchas horas de trabajo antes de poder ir a su casa a cuidar de la indefensa Mitty a quien ya de por si odiaba dejar sola por largos periodos de tiempo.

En su estrés, el director rata había llegado a gritarle a varios alumnos a lo largo del día por asuntos que para él eran menos que estupideces infantiles, cosas que por lo general se tomaría con humor, pero sólo necesitaba hablar con Izuku Midoriya una vez en una semana para arruinarla por completo . Y lo peor de todo era que a diferencia de otros seres que le irritaban, Nezu no sabía nada de Midoriya, o al menos nada que pudiera usar en contra del arrogante pecoso; no podía chantajearlo ni manipularlo, ya que cualquier intento siempre terminaba siendo lo mismo que darse un tiro en el pie y le ocasionaba más gastos de los que de por si ya tenía -Por lo menos este año pude obtener más patrocinadores que de costumbre, tal vez pueda sacar a Midoriya de la junta de inversores este año ?- Se preguntaba a si mismo el pequeño mamífero mientras que caminaba alrededor de los pasillos de su escuela, acariciando la parte inferior de su hocico mientras pensaba en cual sería el mejor curso de acción para llevar a cabo el festival deportivo 

Cancelarlo estaba fuera de discusión o siquiera la más mínima consideración, ya que era la manera distintiva de la UA para anunciar a sus nuevos héroes al mundo y conseguir el financiamiento necesario como para seguir trabajando, y desgraciadamente, Izuku Midoriya era uno de los más grandes inversores en su escuela. Todavía recordaba cuando había conocido al pecoso hace unos años atrás y como lo había juzgado erroneamente, tomándolo como uno más de los idiotas que buscaban sentirse como parte de algo más grande al invertir en la mejor escuela de héroes del país, cómo desearía Nezu poder hablarse a si mismo en el pasado para evitar que el pecoso pudiera meter sus manos en sus asuntos y así evitar que tuviera tanta autoridad como la que tenía actualmente dentro de su escuela -Arrepentirse no servirá de nada, por ahora lo mejor ser.......- Antes de poder terminar de hablar, a su teléfono llegó una notificación para nada agradable, recibiendo un aviso de ataque de villano, no obstante al leer como la villana era Lady Nagant quien se encontraba atacando a todo un grupo de héroes que se encontraban patrullando alrededor de los barrios bajos 

Inmediatamente el pequeño ratón bípedo corrió a toda velocidad hacia su oficina esperando poder mandar refuerzos para poder salvar las vidas de sus héroes, no obstante, mucha fue su sorpresa cuando frente a él, sentado en su escritorio desde donde lo miraba sin poder saberse que pensaba, Bondrewd le miraba fijamente tras abrir la puerta de su oficina -Nezu, querido, por favor haznos el favor de cerrar la puerta, estas dejando salir el aire- Dijo como si nada el enorme villano mientras que tomaba el juego de vasos de cerámica chino propiedad de Nezu y usaba su tetera inglesa del siglo XIX para servir un líquido verdoso pero transparente, invitando al pequeño roedor a sentarse en un pequeño taburete que ni siquiera le dejaba ver la parte superior de su propio escritorio -Creíste que no preveería algo como esto ?, te has hecho predecible Nezu, y honestamente, esto se está empezando a volver aburrido muy rápidamente, por favor, toma asiento- Pidió con una aterradora amabilidad el villano, dejando al roedor con un imperceptible sudor frío pero obedeciendo este para así poder charlar cara a cara con el villano