Lugar: El bosque

El tiempo al parecer ya se movía con normalidad, el viento se sentía y hacia mover las plantas con un ligero movimiento gracias al viento, el ambiente era fresco gracias a la humedad del lugar, al parecer el día anterior había llovido demasiado.

La búsqueda del Querubín, seguía vigente, ambos ángeles seguían en busca sin saber que ya había dejado de existir, ocultándose de la vista humana con las blancas nubes del día, además aprovechando los despistados que llegan a ser.

Lucifer aun se sentía mal por la muerte del ángel, era la primera vez que asesinaba literalmente, ya que el torturar, desgarrar y atormentar almas hasta hacerlas desfallecer no es lo mismo que asesinar en carne propia, es por eso que decidió adentrarse en el solitario y misterioso bosque para reflexionar, un comportamiento común en ángeles, aunque ya no era considerado uno como tal, sus comportamientos seguían vigentes.

-- A donde vas? -- Pregunta la peli roja un poco confundida
-- Solo iré a ver los alrededores.. -- Dice con una voz baja y cabizbajo
-- Te acompaño! -- Dice la chica mirándole atentamente
-- No! No, esta bien así, tu encargate de encontrar la espada, debe estar en algún lado --
-- Esta bien.. -- Lo dice para empezar a mirar a los alrededores buscándola con la mirada.

Mientras tanto, Lucifer se daba la vuelta caminando hacia el bosque, la cantidad de arboles era impresionante, de todos los tamaños, aves se escuchaban volar y cantar, la fría brisa que acompañaba al demonio de alguna manera le daba una pequeña sensación de relajación, la tierra estaba adornada con hojas secas en la hierba del lugar.

-- Y si Dios tiene razón.. Nací para ser el villano? -- Se pregunta así mismo
-- No! Claro que no! -- Responde su subconsciente

En ese momento escucha un llanto que al principio no le había prestado atención, saliendo de su zona de confort, se dispuso a tratar de escuchar y localizar a quien o lo que produzca aquel llanto, seguía caminando, el sonido de sus pisadas acompañaba el incomodo silencio del lugar que dejaba el llanto a no volverse a oír, aquel misterioso llanto volvió hacer presencia en el bosque, el chico corrió hacia donde provenía lo mas rápido que pudo, esquivando arboles, arbustos y flores.

Se detuvo abruptamente al ver un montón de sabanas envueltas, se acercó mas y vio dos pequeñas manos salir de ellas, ya estando frente a las sabanas logro ver a un pequeño bebé, miro a su alrededor buscando a quien lo había dejado ahí, pero claramente no encontró a nadie, tomo las sabanas que abrazaban el pequeño e indefenso cuerpo del pequeño dejándolo en sus brazos, el pequeño niño sonreía de una manera autentica al demonio, como si le causara gracia.

Las sabanas estaban un poco húmedas, era algo muy extraño que ese bebé se encontrará en ese lugar pero quien habría dejado una criatura tan indefensa a la deriva?

-- Que haces en el bosque, pequeño? -- Pregunta al bebé mirándole enternecido por el
-- Te ayudare, ya estas a salvo! Te llevare donde una amiga.. -- El pequeño solo miraba con asombro el chico con una ligera sonrisa mientras con sus pequeñas manos intentaba tomarle un mechón de cabello.
-- Los humanos son crueles.. Incluso con su misma especie, porque!? Porque una madre abandonaría su hijo en medio del bosque..? -- Se sentía decepcionado aun mas de la humanidad

Lucifer, veía al pequeño como un buen comienzo para demostrar que no es malo, caminaba con el niño en manos, volviendo por donde había entrado, estaba realmente feliz por su nuevo comienzo, al parecer se había grabado mentalmente bastante bien el camino, los arboles se movían gracias al viento dejando caer algunas hojas, el niño le encantaba ver la fina y delicada caída de una hoja, con sus manos hacia ligeros movimientos intentando "agarrar alguna".

-- Eres muy gracioso pequeño! Por que te abandonarían? Eres una criatura hermosa! -- Dice el demonio sonriendo, mientras seguía a paso constante y recto.

(...)

Mientras tanto Lilith, seguía en búsqueda de la espada, la necesitaban para usarla como arma contra quien quiera detenerlos, ya cansada de buscar en los alrededores del lago decidió entrar en el lago, desnudándose por completo quitándose su vestido, brazaletes, botas y lanzando sus prendas de vestir en la orilla, caminaba lentamente hacia el frío agua, hasta que cubriera sus senos, el suave vaivén del agua la arrulla mientras contempla la llegada de la noche, ignorando completamente que tipo de criaturas nadaran a su alrededor, el agua estaba fría, helada realmente pero eso no era problema para ella.

-- Esto me trae vagos recuerdos.. El edén, me perdí de una vida dichosa decían, pero todo este tiempo en el infierno dicen lo contrario -- Suelta una pequeña risa.
-- Pobre Eva, tener que aguantar un imbécil toda una vida, pero admiro el valor que tuvo para confrontar a Dios, te recordaré como una mujer fuerte, siempre. -- Decía para así misma, mientras observaba el cielo que empezaba a teñirse gris con tonos mas oscuros.

Dio una última vista al cielo para después hundirse en el lago, sumergiéndose y nadando un poco y encontrándose con algo que brillaba en el interior, nado acercándose para tomarlo y sacarlo, volvió a la superficie y caminaba de una forma un poco torpe hasta la orilla empuñando la espada del difunto ángel, de su cuerpo se deslizaban gotas de agua, su cabello escurría agua, lo tomo con sus manos y lo sujeto apretándolo y escurriendo el agua que contenía, dejando la espada en la orilla.

-- Me siento fresca, nueva.. -- Dice mientras toma su vestido y sus cosas para ponérselas de nuevo.

El sonido de hierba moviéndose dentro del bosque llamo su atención, poniéndose en cuclillas frente a la espada, tomándola y apuntando con ella hacia el lugar de donde provenía aquel sonido, su mojado cabello cubría sus senos, aun no empezaba a vestirse, veía como una sombra empezaba acercarse haciéndose familiar para ella con cada paso, bajando la espada y tomando su vestido para ponérselo y sus brazaletes.

-- Mira lo que encontré! -- Exclama un poco emocionado el chico con el bebé en brazos cubierto por las sabanas
-- Que es? A ver dejame darle un vistazo -- Dice la chica mientras se acomodaba el vestido

La mujer mira dentro de las sabanas un poco confundida, no entendía la expresión de alegría del demonio a menos de que ya no pensara en demostrar su lado bueno, es así que la chica tratando de entender se atreve a preguntarle.

-- Que piensas hacer con eso? --
-- No es obvio? Quiero ayudarlo para que vean que no soy malo -- Dice el demonio muy convencido de la acción que tenia en mente.
-- P-pero, ese bebé que traes en brazos.. Esta muerto. -- Dice en un tono de voz bajo
-- No hagas bromas con ello, el esta viv... -- Su rostro se encontraba petrificado al ver de nuevo el bebé, estaba sin vida, su cuerpo estaba frío, tenia hojas en las sabanas y su rostro, mugre de los arboles en su cuerpo y algunos rasguños que algún animal le había hecho para comerlo, una escena espantosa. Incluso para el rey de la oscuridad.

De sus ojos brotaban lágrimas que poco a poco se deslizaban por la piel de su cara, en ese momento tenia tantos sentimientos encontrados, no asimilaba la situación, por ningún motivo quería aceptar lo que sus ojos veían, aun sostenía el bebé sin vida sobre sus brazos, pero como? Pues la respuesta es simple, el demonio tenia tantas ganas de empezar a demostrar sus buenas intenciones que imagino al niño con vida, los llantos que se escucharon fueron producto de su imaginación, sin embargo, es algo muy probable que haya pasado mientras el bebé seguía con vida.. Algo muy lamentable.

-- Porque Dios, permite estas mierdas!? No logro entender.. Creo que jamas lo haré! Joder! -- En sus palabras se podían sentir su rabia, impotencia, tristeza y decepción.

Lilith, corrió hacia su amigo y lo abrazo para después limpiar sus lágrimas con sus manos, corriéndole un poco el cabello y viendo una mirada perdida y triste, su nariz se encontraba roja igual que sus ojos, teniendo pequeños espasmos de tanto llorar, el no paraba de hacerlo, sus lágrimas caían sobre el cuerpo sin vida del niño quien tenia en su mirada un sentimiento tan humano como lo es, el miedo.

Khamiel, había visto todo desde los arboles en completo silencio, analizaba el demonio y al verlo tan decidido a mostrar su lado bueno no interrumpió en la escalofriante escena, el hablándole a un pequeño sin vida, al principio le pareció un comportamiento un tanto macabro pero al escuchar que quería hacer con el niño, ese pensamiento se fue de su mente. El ángel quería acercarse al chico pero no sabia como reaccionarían ante su presencia, pero la vida esta llena de riesgos ¿no?.