°Capitulo Once°

"Es normal, ¿es normal sentirme tan identificado contigo?"
-Park Jimin.




Una semana.

Una larga semana había pasado.

Yoongi no lo ignoraba, pero era distante, no le gustaba que fuera distante.

Las clases ya habían terminado, ¿lo malo? Estaba lloviendo, las nubes grisáceas tapaban los bellos rayos de sol, Jimin no estaba con el humor para ver un cielo gris, necesitaba un cielo azul, uno que le diera la esperanzan de poder estar con Yoongi.

No tenía paraguas, estaba esperando en la entrada de la universidad, esperaría hasta que la lluvia por lo menos dejará de caer un poco.

Tenía mucho frío, estaba temblando, y en ese momento se odiaba así mismo por haber llevado shorts en vez de un pantalón, a menos tenía su chaqueta, pero no era tan calientita.

Estornudo.

- ¿Park?

Esa voz. Sabía de quien se trataba, pero no quería voltear a verlo, giro su cabeza para evitar la mirada del azabache.

Min Yoongi apenas había salido de su salón de clases, llevaba puesta una chamarra y en sus manos un paraguas de color azul cielo, estaba dispuesto a irse cuando un estornudo de su lado derecho hizo que volteará, encontrándose con un Park Jimin tembloroso por el frío, y que supuso que estaba esperando a que la lluvia pare.

- ¿No tienes paraguas, verdad? -Jimin no respondió.

Yoongi suspiro y se acerco a él, dejo el paraguas recargado en la pared, bajo el cierre de su chamarra y se la quito, se acerco a Jimin que aún apartaba la mirada de él, y coloco la chamarra sobre los hombros de Jimin.

El rubio dejo de apartar la mirada en cuanto sintió algo cálido ser puesto sobre sus hombros, rápidamente volteo para ver a Yoongi, se percato de que tenía su chamarra puesta, vio que Min Yoongi tenía puesto otro suéter, pero no se veía que ese suéter lo cubriera muy bien del frío. Jimin estaba a punto de devolverle la chamarra, pero Yoongi se lo impidió.

- Pontela -fue más una orden que una sugerencia.

- No es nece... -no pudo terminar de hablar.

- Es necesario, estás temblando, ven. Hay que irnos -dijo Yoongi tomando de nueva cuenta su paraguas azul.

Jimin no protesto más y simplemente se acerco a Yoongi. El azabache abrió el paraguas, he hizo que Park Jimin se pegará a él para que no se mojará.

Yoongi se mojaba un poco el hombro derecho por tratar de cubrir a Park. Pero eso no le importo en lo más mínimo.

- Vamos a mi departamento, está más cerca, te prepararé una bebida caliente y te prestaré una chamarra y unos pantalones, así no tendrás frío.

Y Jimin no pudo evitar que un sonrojo y una sonrisa se pintarán en su rostro.

- Gracias -dijo casi en un susurro, pero Yoongi si logró escucharlo y también sonrío.

¿Cómo quería el azabache que Jimin no se enamorará de él, cuando hacia tales acciones que lo hacían enamorarse más?

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top