Paso una semana y el mayor seguía esperando por la ansiada llamada del menor, no sabía porque pero quería saber de él y escuchar su tierna voz por lo menos unos segundos.

Perecía una colegiala enamorada, tanto esperaba por la llamada que no se daba cuenta, que su actitud había cambiado ya no era tan amargado o mandón y sus compañeros les entraba curiosidad por la nueva actitud del chico con orejas de oso.

Freddy: vamos llama – dijo bajo mirando su celular en su habitación – tanto es tu odia así mí que no quieres ni escuchar mi voz

De la nada empezó a sonar y con algo de rapidez contesto, pero se deprimió y mando a la mierda a la otra persona de la línea ya que se trataba de chica y corto.

Freddy: ¡joder! – Dijo molesto y se cayó de espaldas en su cama – quiero ver a Teddy ¡es tanto pedir! – dijo aguantando un grito con su almohada –

Xxx: yo puedo ayudarte

Freddy: ¡¡tú ni de broma!! – dijo destapándose rápido la cara y lo miraba –

Xxx: oh vamos sabes que me necesitas – dijo mirándolo – quien es mejor para ayudarte, que la sombra de la persona que tanto anhelas ver

El mayor se le quedo mirando unos cuantos minutos y chasqueo la lengua en señal de frustración para poder hablar.

Freddy: bien ¿pero qué quieres a cambio? – Dijo mirándolo – tu no me ayudarías sin algo a cambio

Shadow TF: valla me descubriste – dijo mirándolo con una sonrisa – es simple quiero que tú y los demás nos dejen salir no es divertido siempre estar encerrados o escondidos, mientras ustedes pueden rondar todo lo que quieran – dijo cruzándose de brazos –

Freddy: bien parece justo – dijo estirando una de sus manos pero antes que el otro la tomara la corrió – pero sin causar destrucción, malos pensamientos suicidas o manipulación sino no hay trato

Shadow TF: tks bien jugado pero está bien – dijo y sellaron el trato – bien empecemos

Y así la sombra y el líder de los animatrónicos empezaron su alianza, para un objetivo en común y ere encontrar donde estaba ahora T.Freddy.

Mientras que el antes mencionado se encontraba otra vez en su misma rutina la cual consistía dar unas cuantas vueltas por el establecimiento y luego buscar un rincón bien oscuro y dormir para esperar otro día más.

Paso unos 3 días y el menor se encontraba durmiendo ya que su día laboral ya había terminado otra vez y realmente se sentía cansado ya que hoy tuvo varios cumpleaños seguidos y no tenía tiempo de descansar por varias horas ya que tenía que levantarse al día siguiente muy temprano, pero ahora por fin podía descansar unas horas más.

T.Freddy: ugh – soltó un pequeño quejido de dolor – valla el piso se volvió más duro de lo que recordaba – dijo sentándose y se sobaba la cabeza –

El pequeño Toys decidió pararse y recorrer el establecimiento para ver si le entraba sueño después y se iría a dormir de una vez por todas.

Pero por más que lo recorriera no le entraba sueño, hasta que vio las máquinas de juegos ya que el local que pertenecía era como una mezcla de restaurante y máquinas de video juegos para el entrenamiento de los niños mientras los adultos comían tranquilos o se ponían a conversar entre familias.

T.Freddy: no tengo de otra – dijo y se acercó a una maquina cualquiera y la prendía muy fácilmente –

Mientras que en la pizzería el jefe de los animatrónicos estaba discutiendo con los 3 chicos de su banda ya que se enteraron por chismosos, mientras que la única mujer del grupo no sabía nada ya que sabían que se lo contaría a los menores y no quería que eso sucediera.

Freddy: ¡que no y punto final!

Bonnie: ¡Freddy sabes que no es seguro! – Dijo mirándolo – ¡como estas tan seguro de que la sombra de T.Freddy sabe dónde está exactamente!

Freddy: ¡¡porque ya eh ido y lo comprobé con mis propios ojos!!

La habitación se quedó en silencio total.

Golden: ¿Cuándo saliste?

Freddy: hace unos días después de hacer un acuerdo con la sombra

Foxy: aun así, no crees que un poco precipitado – dijo mirándolo – aunque el local que tu Toy pertenece ahora no tenga guardia, las calles son peligrosas

Bonnie: Foxy tiene razón Freddy – argumento – además tú crees que él tenga deseos de vernos y por la última vez que lo vimos se le notaba un gran odio y más hacia ti cuando te volvió a ver

Freddy: por eso necesito ir – dijo mirándolos – quiero irle a pedir perdón por todo lo que le hice en el pasado y demostrarle que eh cambiado

Golden: .... Bien pero te acompañaremos por las dudas – finalizo –

Freddy: bien – dijo rodando los ojos –