Después de un largo día, no había nada mejor que descansar a tomar una pequeña cerveza, eso había comentado el Bad Capitán a su pareja estando este no muy contento con su propuesta, a Tim no le desagradaba pasar tiempo con su capitán, era todo lo contrario pero sabía que cuando su capitán le proponía tomar algo en un lugar ajeno todo salía mal.

Incluso mucho antes de ser pareja escuchaba que el capitán cuando iba al bar armaba toda una escena, el problema no era que tomara, el verdadero problema era que el tomando fuera de su casa aprovechaba esto y no solo tomaba cerveza, se daba más "libertad" y dejaba de un lado la cerveza agarrando bebidas más fuertes con las que se en emborrachaba más fácilmente: Vodka, Tequila, Whisky, etc... 

No estaba tan contento y convencido de ir pero creía que no pasaba nada con una vez, verdad?. Quizás el ya había cambiado, claro, apenas llevaban saliendo un año y en todo ese tiempo jamás había pasado algo así, todas sus borracheras lo hacían en la comodidad de su casa y jamás salían de la cerveza. 

Ya era demasiado tarde para arrepentirse, ambos se encontraban ya en el bar, todo iba con normalidad, estaban sentados en la barra esperando sus bebidas. Llevaban ya una hora en el lugar y parecía que el capitán no planeaba nada especial, ambos en todo ese rato solo platicaban como lo solían hacer con normalidad.

Al pedir sus bebidas empezó un gran silencio entre ambos, al parecer ya no tenían nada más de que conversar o no se les ocurría nada, estuvieron así un largo rato. Hasta el que el capitán decidió romper ese silencio.

– Tim... ¿Que planeas hacer cuando... Todo esto acabe?. — pregunto el capitán mirando frente de el sin llevar una ninguna expresión en su rostro —.

– Jamás lo había pensando. Quizás... Irme a vivir a otro lado, siempre quise conocer otros lugares. — volteo a mirarlo con una gran sonrisa reflejando pura inocencia — ¿Y usted?.

– ¿Y crees seguir viviendo para cumplir ese pequeño sueño?. — volvió a preguntar con un tono muy serio sin voltearlo a ver —.

– Señor, sucede algo?. — borrandose esa sonrisa en su rostro, pasando a estar confundido por la actitud de este —.

– ¿No puedo preguntarte algo?.

– Usted no suele hacer este tipo de preguntas, además, no contesto la mía. 

– Je je tienes razón... — dijo soltando una pequeña risa — De todas formas, no creo vivir para salir de aquí o continuar con mi vida.

– ¿Porque lo dice? Sea positivo se-

– Jamás lo seré.— interrumpió a secas a su pareja, diciéndolo como si estuviera molestó — Yo así soy, se que tu siempre vez el lado bueno de las cosas pero yo no puedo. Simplemente en esto no hay un lado bueno.

– ... Tiene razón... Es estupido tener sueños. — con un tono melancólico y triste, se borró aquella felicidad —.

De nuevo, regreso aquel silencio volviéndose ahora incómodo. Ninguno de los dos ya se dirigía la mirada, solo volteaban a ver a otro lado. Tim se levantó de su asiento sin decir nada saliendo del bar, el capitán solo lo volteo a ver, viendo como este se alejaba para solo soltar un pesado suspiro. 

El soldado camino a solo unos pasos de distancia del bar, se detuvo enfrente de varios escombros sentandose en el suelo. Solo se quedó ahí pensando en aquella actitud de su capitán, el ya sabía que era así desde que lo conoció pero no podía evitar que le molestará un poco su actitud pesimista. En ese solo recordaba las palabras de todos los soldados cuando se enterraba de su relación: "¿En verdad están saliendo? Vaya, quién diría que ese amargado consiguió pareja.", "Hasta que alguien se fija en el, no te ofendas pequeño pero el... Es diferente, demasiado a ti", "¿Salir? Ja ja que buena broma te haz jugado, ese tipo es un amargado de primera, dale tiempo para que te demuestre su verdadero y veraz que es un error ser su pareja.", " ¿Usted son pareja? Pero... Si son polos opuestos, como es que te fijaste en el?." 

Esas entre tantas cosas solían siempre decirle, nunca se lo menciono a su pareja no veía necesario, no quería arruinar la relación que llevaban. Siempre esos comentarios lo perseguían, por una parte tenían razón, eran muy diferentes, como era posible que su relación aún siguiera a pie si no tenían casi nada en común. Pero... El a pesar de todo lo amaba, amaba cada momento que pasaba con el, porque gracias a su relación se dio cuenta que no era tan malo como solían comentarle.

Se quedó perdido en sus pensamientos por un largo tiempo, no notaba que el tiempo pasaba demasiado rápido. Terminando de pensar en todo eso, soltó un suspiro levantándose para regresar al bar. 

Apenas llegó notó que un grupo de personas como si rodearán algo o alguien, se acercó confundido para notar que entre rodeaban a su capitán estando este totalmente borracho y con un fuerte olor alcohol, se veía demasiado agresivo y como si estuviera molesto, ahora Tim sabía cómo se ponía al estar ebrio.

El capitán trataba de soltarse de las personas que lo rodeaban mientras gritaba maldiciones, siendo cuatro que lo tomaban de sus brazos incluyéndose el barrero. Tim solo lo veía con algo de miedo, acercándose a ellos aún conservando su distancia por si llegara a pasar algo.

– ¿Pero que le hacen?. — con miedo hacia la situación pero a la vez con confundido —.

– ¡Esta súper borracho, no para de gritar y exigir más alcohol!. — grito el barrero aún sujetando al capitán con fuerza — ¡No se lo puedo dar en su estado, no se encuentra bien!.

En eso, el capitán escuchando la conversación de ellos logro liberarse de todos llendo a la barra tomando todas la botellas que podía, abriendolas tomando de una en una como si estuviera apurado. Se acercó el soldado a el con un poco de miedo gritándoles las otras personas que se alejara y que podría lastimarlo.

– Capitán... ¿Que le sucede?. — dijo con un tanto de miedo colocando su mano en la espalda de este —.

— al sentir su mano volteo rápidamente llevando consigo una mirada llena de furia — Lárgate... — comento solo esa palabra volviéndose a voltear tomando de nuevo las botellas —.

– Señor, creo que deberíamos irnos. No está bien en su estado. — hablo con miedo hacia el —.

– ¿Y eso que importa?. No soy suficiente para el.

— confundido por su respuesta se acercó más a él cambiando su sembrante de miedo a uno de preocupación — ¿Para quien?.

– Tim... El se merece alguien mejor, y que el doy yo? Solo le arruinó su vida, el es tan feliz... Y yo solo soy un amargado. — mostrando una mirada llena de dolor solo siguió tomando directo de las botellas pero ahora cada vez más lento —.

– Pero el lo ama mucho.

– .... Lo sé, por eso me odio... No puedo hacerlo feliz.

– ¿Cómo sabe que ya es feliz con usted?.

–... Por qué lo veo, veo su cara y... Carajo, siempre lleva esa sonrisa... Y yo la borro.

— lo abrazo agarrando la cabeza de su pareja colocando en su pecho, para luego acariciar su pelo de una manera suave y relajante — Usted es perfecto como es, el lo ama con todo y sus defectos. 

– Pero debo ser mejor, para el... — se acorruco en su pecho cerrando los ojos tranquilizandose con este pequeño acto —.

– Ya lo es, para el, usted es lo mejor que le pudo haber pasado.

Quedo congelado por sus palabras, para después que Tim solo sintiera como sollozaba y lloraba en silenció, mojándose su ropa por las lágrimas de esté. Solo siguió acariciándolo mientras las personas del bar lo venían extrañados por la escena, no podían creer que de la nada se tranquilizara y más por ese chico.

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PD:. No se si quedó muy claro, pero la confesión fue que el capitán tenía miedo de su relación y arruinarla.

También no se, pero me gustaría comentar que mi Bad Capitán cuando está pasando por malos momentos o nos e encuentra bien emocionalmente, se borracha volviéndose agresivo. El se quería emborrachar aproposito por qué creí que su relación iba mal.