𝑫𝒊𝒔𝒄𝒖𝒍𝒑𝒂𝒔
"Sonic por favor contesta mis llamadas, necesito hablar contigo. Resolver todo..."
Sonic se encontraba sentado en el suelo mientras que escuchaba los mensajes en su buzón de voz. Claramente todos pertenecían a una sola persona.
"Soy Shadow, contesta mis llamadas."
Sonic levantó el rostro para ver la pantalla de su celular. De la rabia lo había lanzado a la pared y aún seguían repitiéndose los mensajes. Torció una mueca de desagrado para después incorporarse y alejarse.
Ya había tenido suficientes problemas después de ese día con Shadow. Infinite estaba muy molesto con ese chico y Sonic se sentía responsable por no contarle quién era.
Ambos optaron por tomar distancia unos días y calmarse para hablar, pero para Sonic aquello no era tarea fácil. Shadow había logrado conseguir su celular y hostigarlo hasta el punto de aturdirlo.
Sonic entonces se encontraba a la deriva de sus emociones, nunca pensó que Shadow llegaría hasta ese punto y mucho menos cuando era tan feliz con el chacal.
Entonces, se encerró en su depresión y ansiedad, de nuevo el ciclo se repetía y su pasado lo atormentaba.
Pero si algo recordaba muy bien fue que debía detener a Shadow. Estaba muy enamorado del chacal, amaba a ese chico. La aparición de Shadow no confundió sus emociones, pero detestaba quedar mal con él mismo.
Lo había pensado mucho, hablar con Shadow para darle fin a esa parte de su vida y llevarse un bonito cierre al menos en sus emociones, pero el problema era Infinite, después de esos días se mostró mucho más celoso con él y más cuando descubrió que Shadow trataba de comunicarse.
Sonic lo calmaba, pero era en vano, Shadow realmente lo jodía.
Solo podía acabar de una forma y eso no le agradaba en lo absoluto, pero si deseaba dejar de arrastrar esas cadenas debía detenerlo.
Tomo su celular y marco hasta esperar unos minutos.
—¿Sonic? ¿Qué sucede, estás bien? —le contesta el chacal mientras se muestra preocupado al otro lado de la línea.
Sonic se asombra al escucharlo de ese modo.
—Infinite. Estoy bien no pasa nada —le contesta con calma para tranquilizarlo.
—¿Amor entonces qué sucede? —le pregunta intrigado de su llamada.
Sonic juega con sus dedos, no está seguro de cómo vaya a reaccionar Infinite ante su noticia.
—Yo... necesito decirte algo —inicia pausando sus palabras.
Infinite entonces nota que es importante, deja de lado su trabajo para escucharlo.
—Dime, te escucho —le contesta poniendo atención.
Sonic tarda un poco en seguir, pero debe hacerlo, la confianza es lo que no desea perder del chacal y menos por fantasmas del pasado.
—Sé que no te va a gustar esto, pero quiero ponerle fin a la situación que tengo con Shadow. Quiero aclarar todo con él.
Un pesado suspiro se escucha la otro lado de la llamada.
—¿Sonic qué tienes en mente? —le pregunta apretando unas hojas
—Hablar con él, encararlo —le contesta suavemente.
Infinite rompe la hoja de papel.
—Sonic no hagas eso —le pide, pero en su voz suena el enojo que eso le provoca.
—Sé que parece una mala idea pero en serio yo... —sigue Sonic hablando cuando se ve interrumpido por su prometido.
—¿Todavía lo amas? —suelta aquella incógnita que le tortura.
Sonic quedó en silencio cuando escuchó esa pregunta. Sintió un escalofrío en su cuerpo cuando Infinite pronunció esa pregunta.
—Sabes que no, Infinite yo te amo a ti. ¡Me voy a casar contigo! —le aclara.
—Entonces déjalo, solo te hará dudar de mí y de nosotros —le pide temblando levemente.
—Infinite no va a pasar nada. Confía en mí —le susurra.
—Sonic la última vez que escuché eso... me dejaron plantado —contesta con ironía.
Sonic sabe que a Infinite le han tocado situaciones muy desagradables por lo que es comprensible su comportamiento y sabe que tiene miedo a que cambie de opinión y lo dejé en el olvido.
—No va a suceder, ahora voy a terminar con todo esto —finaliza.
—Sonic no hagas esto por favor... —pide por último su novio.
—Confía en mí —Sonic se muestra tan seguro en ese instante.
Infinite solo puede negar, se siente fatal.
—Sonic, yo te amo. Eres el amor de mi vida, nunca olvides eso —expresa con sinceridad hasta colgar el celular.
Sonic entonces toma sus cosas y tiene un trabajo que hacer.
[...]
Sonic había quedado con Shadow de encontrarse en un parque. Por primera vez iba con un retraso de dos horas pues, pensaba en lo que debía decir. Caminaba con el rostro cabizbajo hasta que lo elevó y noto a un erizo sentado en una banqueta. Era Shadow quien al verlo se muestra emocionado.
—¡Sonic! Yo creí que ya no vendrías —sale a su encuentro.
Sonic mantiene su distancia y se limita a saludarlo con un apretón de manos.
—Hola, Shadow, bien qué es lo que me quieres decir —va directo al grano.
Shadow toma asiento en la banqueta mientras Sonic se sienta al otro extremo lejos de él. La brisa los acompaña en ese momento muy incómodo que a Sonic no le gustará preservar para nada.
—Sonic... han pasado tantos años desde la última vez que nos sentamos en un parque a observar el panorama —recuerda.
Sonic permanece en silencio y se limita a lanzar un quejido como respuesta.
—Todo pasó tan rápido la última vez que apenas y recuerdo lo que era —prosigue Shadow.
—¿A qué quieres llegar? —le cuestiona Sonic dejando de lado su pasado.
Shadow se ve apenado y se encoge de hombros.
—Me puse la meta de tenerte de nuevo a mi lado, ahora ya no me importa lo que los demás digan. Yo quiero abrazarte, besarte y decirte lo mucho que te amo porque no deje nunca de hacerlo. Pero solo puedo hacerlo si tú me lo permites —le pide.
Sonic le mira con sorpresa.
—Por eso tarde todo este tiempo en encontrarte y ahora qué te veo me topo con la noticia de que te vas a casar con alguien —se detiene mientras mira al horizonte— me ha dejado atónito.
Sonic acaricia su anillo de compromiso cuando escucha esa confesión.
—¿Cuándo me dejaste de amar? ¿En qué momento se apagó todo eso que sentías por mí? Para que después alguien más se adueñara de tu corazón —le pregunta el veteado dando un sonoro suspiro.
—Fue ese día, en el parque, bajo la lluvia. Me di cuenta de que no quería pasar el resto de mi vida de ese modo y menos con alguien que me demostró lo que no deseaba ver —confiesa, y para su sorpresa lo dice con tanta seguridad, sin derramar lágrimas o sentirse mal por ello.
—Fui un estúpido, al hacerte eso. Me di cuenta tan tarde que ya te había perdido. Después quise enmendarlo, pero ya te habías ido —menciona.
—Fue lo mejor para ambos —concluye Sonic—. Ni tú me amabas lo suficiente y yo te amé mucho más de lo que debía.
Un incómodo silencio los acompaña. La brisa insiste en remover sus púas.
—¿Ya no me amas? —suelta Shadow con un poco de inseguridad.
Sonic sonríe ampliamente.
—No, definitivamente no —le revela.
Shadow trata de mantenerse tranquilo.
—Entonces por qué accediste a hablar conmigo si sabías que yo... —me pregunta por último.
—Para perdonarte —le contesta enseguida—. No me tendrás de nuevo, pero tendrás mi perdón y paz en tu mente y alma. Lo que sucedió contigo me sirvió mucho para aprender de mí mismo y conocerme mejor. Por eso te estoy agradecido aun así muy respetuosamente te pido que ya no intentes volver a mi vida porque sabes que no lo voy a aceptar.
Shadow no puede evitar llorar y derrumbarse frente del erizo. Rápidamente se quita las lágrimas y vuelve a hablar.
—Sonic yo fui un asco contigo, porque no vi antes lo valioso que eras.
—Encontrarás a tu amor, ese que te dará la paz que necesitas. Y cuando eso sucede, por favor no lo dañes, no como a mí —le aconseja.
Shadow le mira con sorpresa y Sonic le mira a los ojos.
—Estarás bien, ya lo verás. Por ahora —Sonic se incorpora— esta será mi despedida definitiva. Gracias por todo Shadow —se despide.
—Sonic te debo tantas disculpas por todo lo que eche a perder —dice Shadow negando que ese es el final.
Un abrazo de Sonic le hizo perderse entre sus recuerdos, de cuando ambos estaban juntos y eran muy buenos amigos.
—Cuídate, perdónate y sé feliz —le pide soltándose de él.
—Sonic...
El azul se da media vuelta y comienza a alejarse de ese lugar.
Shadow alza su mano tratando de detenerlo, pero Sonic no retrocede. Ese era el final de su historia con Shadow.
[…]
Infinite había viajado de emergencia al apartamento de Sonic y se encontraba sentado en la sala mientras esperaba a Sonic. Aunque su mente le jugaba con pensamientos muy deprimentes debido a que le preocupaba lo que pudiera suceder entre Shadow y él.
Escucha como la puerta se abre y ve a Sonic verlo con sorpresa.
—¿Sonic?
El erizo le sonríe, se coloca a su nivel y le abraza mientras se acurruca sobre su pecho.
—Estoy aquí, futuro esposo.
El chacal lo abraza tan fuerte que sin darse cuenta comienza a llorar.
Había ganado.
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