2. Atardecer - NanaIta

Foto de recuerdo

Si podía, Nanami evitaba ir a la playa, la arena intrusiva, el agua salada y el inmenso calor... no, no era nada de eso lo que le molestaba. La razón real se debía a los últimos recuerdos que paso con quien en vida fue su mejor amigo.

Un castaño sincero y juguetón que disfrutaba de esa hermosa vista.

-- ¡Ah! ¡Ya se ve el atardecer! ¡Vamos Nanamin!

Desde atrás ve como su... pareja, corre hacia la playa emocionado por el atardecer, alzando su celular para tomar todas las fotos posibles.

Ve su carita brillar en emoción cuando toma la primera foto, después de esa muchas más, desde diferentes ángulos donde quería capturar lo mejor posible el hermoso panorama frente a él.

-- ¿No es genial Nanamin? -- pregunta el chico luego de tomar al menos unas 30 fotos del atardecer.

Se quedó callado, pero no por maleducado, sino porque no quería romper la alegría del menor.

Ese mismo panorama ya lo ha visto muchas veces a lo largo de su vista y perdió parte de su encanto.

Pero eso no sucedió con Yuuji, quien aún luego de estornudar por el frio siguió mirándolo sonriente, recalcando la diferencia de edad entre ambos.

-- Te advertí que te abrigaras más, por las noches la playa es bastante helada.

Yuuji rio al mismo tiempo que Nanami se acerca y le pasa un pañuelo en la nariz para limpiarlo, gesto que encontró bastante dulce.

-- Jaja, lo siento Nanami, es que estaba emocionado por venir a la playa.

-- Eso puedo verlo Itadori, pero no creo que tampoco sea bueno que te resfríes, ¿Verdad?

Yuuji lo piensa por un momento, pero el solo pensamiento de Nobara gritándole idiota por no haberse abrigado lo hace asentir con algo de temor.

-- ¡No lo volveré a hacer!

Se sorprendió por el repentino grito por parte del menor, pero prefirió no darle mucha importancia, concluyendo que era una de las excentricidades del chico.

Por un momento miro los hermosos colores del sol antes de que terminara de ocultarse, no podía negar que era hermoso, pero seguía incómodo.

-- ¡Vamos a remojarnos los pies, Nanamin! -- pidió tomando su brazo.

No negó su pedido, sacándose los zapatos lentamente mientras que el otro ya había lanzado sus zapatillas a quien sabe dónde y corrió hacia el agua fría.

-- F-Frio -- Yuuji sintió un escalofrió cuando sus pies ya estaban sumergidos -- debo moverme sino me congelare.

Rio un poco ante su comportamiento tan infantil, sintiéndose algo rejuvenecido, miro el mar y luego sus propios pies, todavía algo lejos del agua helada, no quería sentir frio, pero el ver al menor tan entretenido jugando en el agua le contagio un poco el querer hacer lo mismo.

Se acercó hasta sentir la tierra húmeda bajo sus pies y tan solo fue cuestión de segundos antes de que el mar lo mojara, haciéndolo sentir un escalofrió inicial que comenzó a disminuir poco a poco conforme caminaba hacia el pelirosa quien saltaba y pateaba como un niño pequeño.

Aún sigue siendo algo doloroso, los pequeños recuerdos de Haibara van y vienen mientras mira a Itadori quien era muy parecido a quien fue su mejor amigo.

Recuerdos que están desapareciendo conforme los traumas y el tiempo pasan, algo que lo aterra.

Le aterra la idea de que, en su muerte, lo único que recuerde sea las muertes de sus compañeros, las maldiciones que cada vez son peligrosas, los kohais que dejara atrás algún día... este chico que aun con todas las negaciones del mundo siguió perseverando hasta que acepto ser su pareja.

Nanami no quiere olvidar, porque cada recuerdo, por más feliz o triste que sea, forman a Nanami Kento, un hechicero de primer grado que siempre veía que proteger a las generaciones detrás de él.

-- ¡Ven Nanamin!

Y a este chico que ha llegado apreciar demasiado.

-- ¡Tomémonos una foto!

Para Itadori Yuuji también pasaba algo similar.

No había pasado ni un año de la muerte de su único familiar, pero los traumas que le generan día a día las maldiciones y las muertes debido a estas generaron que la figura de su abuela se volviera algo lejana.

Aún recuerda su aspecto y su voz, pero los recuerdos que están prevaleciendo son los traumas después de su muerte.

Y la muerte siempre a su espalda no lo ayudaba a sentirse mejor, tal vez por eso es que comenzó a tomar tantas fotografías.

Ha conocido a varias personas maravillosas y no quiere olvidarlos, así que un día se le ocurría mientras veía a Nobara tomar fotos de los postres que compraba.

''¿Porque no tener un recuerdo?''

Ese fue el comienzo de su pequeña aventura, donde comenzó a tomar foto a todos, desde a sus amigos que lo miraron por un momento antes de aceptar tomar fotos entre ellos, su sensei quien entre risas acepto el pedido del chico y comenzaron a tomarse fotos, incluso uno de ellos fue en el cielo y también obligo a Yaga junto a Ijichi a tomarse una foto.

Sus senpais también se emocionaron por la idea, al menos Panda y Toge ya que Maki había fruncido el ceño al principio, pero poco a poco se soltó.

Tampoco podía faltar su ''brother'' quien apenas supo de lo que hacía, se apareció para tener una sesión de fotos con él.

Ahora por las noches se dedica a mirar las fotos que tomo con su celular, sintiéndose más pleno.

Sensación que aumento cuando Nanamin acepto ser su pareja después de tantos rechazos.

La galería se llenó de fotos de ellos en diferentes lugares, un parque, panadería, restaurante, incluso dentro del auto que Ijichi conducía mientras los llevaba a su siguiente misión.

Pero no era suficiente, porque Yuuji ama a Nanamin... mucho, tanto que la simple idea de que sus recuerdos sean borrados por el trauma es su mayor temor.

No quiere que sus últimos momentos, cuando le llegue el momento, sean puros recuerdos traumáticos, quiere que su cabeza se llene de los buenos momentos que paso con el mayor y los demás.

-- ¡Chis! -- exclamo antes de que la cámara tomara la foto -- ¡Oh~! ¡Nos vemos bien!

Había un poco de contraste en sus expresiones, pero eso era lo de menos, las mejillas sonrojadas del menor mostraban lo feliz que estaba con esa foto.

-- ¿Y si tomamos más? -- propone el chico.

Nanami asiente antes de decir.

-- Todos lo que quieras... y por favor mándamelos después.

Ya que él también quiere guardas esos hermosos recuerdos que fueron guardados en fotos. 

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