21.

Elise empieza a tamborilear con su lápiz sobre el cuaderno, pensando en su admirador. No puede dejar de pensar en otra cosa y en cómo el niño pelirrojo puede estar conectado con todo ese misterio.
—Ptsss, Elise, ¿Ya resolviste la dos? —le llega un susurro de la mesa de al lado. Elise levanta la vista y sale de sus cabilaciones para ver al chico morenito a su lado, el gemelo de Enora: Morgan.
—¿De qué hablas?
Morgan sonrie con diversión y señala la pizarra, dónde el profesor de matemáticas ha escrito toda una lista de ejercicios para resolver. Elise abre los ojos como platos. No se había fijado en ello.
—No la tengo lista —murmura la chica antes de ponerse a escribir. Ni siquiera ha escrito el primer ejercicio, ni hablar de resolverlos.
Escucha como Morgan se ríe y ella se sonroja de la vergüenza.
No puede creer que el admirador la haya distraído de tal modo que olvidara prestar atención a la clase.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top