La tarde se estaba cubriendo de nubes, y no sólo era en el cielo, si no que también todo en mí se estaba cubriendo de esas malditas nubes, ¿acaso esta vida me tenía preparado lo peor? Primero me enamoro sin querer de la persona que sé que no me corresponderá. Segundo, me he confesado y he salido casi rechazado, y para acabar, el tercer punto; ¡el idiota de Jimin beso a Yoongi!

- ¡Te odio Park Jimin! -me atreví a gritar, de todas formas lo necesitaba-. ¡AASH!

Me gire sobre mis talones para toparme cara a cara con Yoongi, deje que mi enfado se fuera para después pasar a dar un salto, demonios, odio cuando Yoongi llega sorpresivamente, pensé que no me vería, aunque tal vez no debí haber empujado a aquella chica y hacer que tirara su bandeja con su almuerzo, fue un escándalo.

Además estaba el hecho de que Yoongi sabe perfectamente en dónde puede encontrarme cuando algo no me gusta, y es en la azotea de la escuela, tenía mis propios contactos para poder estar allí sin molestia alguna, un grave error de mi parte haber venido aquí, debí encerrarme en los baños de hombres cuando tuve la oportunidad.

Los brazos de Yoongi estaban perfectamente cruzados sobre su pecho mientras mantenía su ceño fruncido, pero no tanto apenas y podías notar el fastidio, pero sus ojos si que te decían con simples palabras que no le había agradado nada lo que había hecho.

- ¿Qué? -pregunte.

- Sé que no hemos hablado después de mí... -hizo un ademán con su mano derecha para después soltar un suspiro, sé a lo que se refiere-, en fin, creo que deberías superarlo ¿no crees?

¿Superarlo? ¡¿Quiere que lo supere?! Sonreí ladino, no voy a superar nada de esto, en este preciso momento quiero ir donde Jimin y propinarle una paliza, ¡joder!

- ¿Superar? -camine hacía él-. No, Min Yoongi, no lo entiendes, no estoy confundido, no es una de esas estupideces, me gustas, ¿quieres que te lo vuelva a repetir? Porque lo haría un millón de veces hasta que te quepa en esa cabeza tuya que me gustas, ¡¿bien?!

Tal vez no le debí hablar así, pude ver su expresión de sorpresa, no eramos mucho de discutir, casi nunca lo hacíamos, pero últimamente es en lo único que podemos estar, y eso me tiene harto, ya no quería seguir con estos sentimientos ocultos, ya no quería que Yoongi pensase que todo sólo se trataba de una broma estúpida. A pesar de que pensé que posiblemente Yoongi me insultase y se fuera, no lo hizo, solamente comenzó a reírse.

Lo mire con confusión, ¿qué era lo divertido?

- ¡Ya, deja de reírte!

- Jeon Jungkook -soltó otra nueva risa-, eres muy divertido -trato de calmar su risa, respirando de vez en cuando tranquilo, pero la sonrisa plasmada en su rostro no desapareció-, no es para que te pongas de ese modo -se encogió de hombros-, y Jimin no me beso.

Espera ¿qué?

- No mientas, Yoongi, lo vi con mis propios ojos -él rodó los ojos.

- No viste muy bien, mi querido Jungkook -coloco su mano en mi hombro, dándome pequeñas palmaditas-, ¿te veo en el viejo cobertizo de mi abuelo en la tarde? -lo pregunto, y no sabía si darle una respuesta-. Habla con Jimin, te dirá toda la verdad -me volvió a sonreír-, no se te olvide nuestra cita.

¿Cita?