El viento frío movía ligeramente su cabello, el vaho que salía su boca empañaba la mira.

-No se debe traicionar a los tuyos- susurró mientras apuntaba con su rifle.

Presionó el gatillo, un certero disparo destrozó el cráneo de un tipo.

Sonrío levemente, se alejó del balcón que estaba apoyado. Desarmó el rifle y lo guardó en su maletín, escuchó gritos y disparos.

Salió de la habitación, caminando lentamente.

-¡El disparo vino de este lugar!-Escuchó desde el ascensor, frunció el ceño.

Fue por la escaleras de emergencia, tratando de evitar ese pequeño problema que provocó.

Ya en la calle, arregló el cuello de su camisa. Muchas personas estaban mirando curiosos la escena de ese tipo muerto.

-¡Maten a ese maldito!¡Él le disparó al jefe!-gritaron de un balcón.

-¡Maldito bastardo!-se acercó y sacó un arma, le apunto y disparó.

Pero falló.

-¡Aaah!-Los curiosos huyeron por temor.

El azabache comenzó a correr por la calle, empujando a los transeúntes asustados.

Varias personas lo seguían.

Conocía muy bien esos lugares, pero sabía que podría ser peligroso ir solo.

-Maldición- miró la hora de su reloj-Es tarde, ¿Dónde está?-se escondió en un callejón.

Frunció el ceño, siempre pasaba lo mismo con aquel jovencito.

-¡Te encontré!-Miró al azabache, disparó.

-¡Nhg!-se quejó al recibir la bala en su brazo.

Rápidamente devolvió el disparo, atravesando el cuello de ese maldito.

-Mierda-Corrió al fondo del callejón al sentir pasos y gritos.

Le dolía un poco, pero tenía agujero de salida. Eso lo mantenía más tranquilo.

Fue por la salida del callejón, atravesó la calle, otro disparo cerca lo hizo detenerse.

-Eres un bastardo. Él hizo mucho por ti y tu maldito tío-se acercaba de a poco azabache.

-Si, no lo dudo-se dió la vuelta-Pero nos traicionó. Eso no tiene perdón-lo miraba con odio- por la culpa de ese inútil, perdimos mucho dinero y varios murieron. Con tal de tener inmunidad-

-Así es como funciona-Sonrió de lado- Le dejaremos un lindo recordatorio a tu tío- apuntó con su arma a la cabeza del azabacve- con la cabeza del futuro líder de los Ackerman-

-No me importa...-acortó la distancia, apoyando su cabeza sobre el cañón del arma- dispara si quieres.... Pero te prometo que vas a sufrir mucho más que en el mismísimo infierno-

-No me hagas reír...-fingía una risa muy exagerada.

Unos focos iluminaron por completo la calle, ambos miraron hacia esa dirección.

-¿Eh?-Estaba confundido.

-Ya era hora...-susurro.

Una camioneta blindada se acercaba a toda velocidad hacia el par.

-¡Mierda!-desvio su arma y disparó a la camioneta.

El azabache aprovechó de golpearlo y saltar, vió como el maldito fue atropellado.

Los huesos tronaron como ramitas secas.

-¡Tsk!-le dolió su brazo por su herida.

La puerta de la camioneta se abrió, un jovencito se asomó con una gran sonrisa.

-¿Qué haces ahí?¿Estás descansando?-Soltó una risa.

-Mierda...- se puso de pie- se suponía que debías estar frente al hotel-Lo miraba molesto.

-Puchis, lo siento... Pero es que ví una joyería y había un hermoso anillo de oro con una bella esperalda-se lo mostró-Mira, hasta combina con mis ojos-pestañeo varias veces.

-Eres un irresponsable-Lo empujó y se sentó -Maldición-manchó con sangre el tapiz blanco de la camioneta.

-¡Aaahhh!-Lo miró-¡¿Que haces, estúpido?!¡Lo estás manchando todo!-

-....-Lo miró aún más molesto.

-¡Jajaja!-Se reía-Sólo bromeo-suspiró-Ya vámonos a casa-

-Si, señorito-

-No me digas señorito, dime Mi señor-

-No seas estúpido, Eren...-Revisaba su herida.

-Es una broma...-Sacó una botella de vodka- Mira, es de frutilla-la abrió para beber, pero el azabache se la quitó-¡Levi!-

-La necesito- vertió todo el líquido en su herida-¡Nnhg!-se quejó, hizo presión.

-Sabes que hay un botiquín de primeros auxilios debajo de los asientos- apoyó su nuca sobre sus brazos, alzando su mirada al techo de la camioneta.

-Lo sé, sólo quería molestarte-

-Haaa...-Suspiró- Creo que pronto me llegará el celo-

-...-lo miró raro-¿Y?-

-Que no me gusta... Estoy debilucho y cualquiera me puede marcar... Es fastidioso ser un maldito omega-

-Tal vez-

-Tu tienes suerte... La mayoría de tu familia son sólo alfas... ¡mírame!-se apuntó- estoy flacucho pero curvilíneo, no parezco amenazante para nadie y tú tienes músculos hasta en tus músculos-

-No seas exagerado-

-Ya estamos por llegar a su casa... Mi señor- dijo algo incómodo.

-Gracias-estiró su cuerpo- mamá hizo un pastel para conmemorar el aniversario de la familia-Miró por la ventana.

-Tu madre cocina delicioso-

-Es una experta-vio como entraban en su hogar- Déjanos aquí, iremos caminando-

Se detuvo el automóvil.

Alfa y omega bajaron para dirigirse a la casa de los empleados.

-¡Aah!¡Dios santo!¡Joven Levi, está herido!- gritó la ama de llaves al verlos.

-Señora Jessica, necesitamos ropa de Levi y el botiquín de primeros auxilios con hilo y aguja-

-Si, de inmediato-se alejó preocupada.

-Sientate-Se quitó su saco y remango las mangas de su camisa- te dejaré unos bonitos puntos. ¿Puedo hacerte una mariposa?-

-No- rasgó su ahora inservible camisa, dejando ver sus abdominales.

-Musculos en los musculos-

-No me mires...-

-Jovencito Eren-llegó la beta con el botiquín y la ropa-¿Necesitan algo más?-

-Avisale a mi madre que ya hemos llegado- vertió alcohol en sus manos.

-Si, jovencito-se alejó dejándolos solos.

-Uuhhg que feo tienes... Al menos tiene orificio de salida-lo tocó-  vamos a desinfectar los utensilios-

-Si...-Lo miraba despreocupado.

-Bien...- con una gasa remojada en alcohol, quitó la sangre y desinfecto.

Con una aguja e hilo comenzó a cocer la herida. Necesitó tres puntos por cada orificio.

El azabache fue a darse una ducha y se puso la ropa nueva.

Salió del baño.

El castaño miraba su celular, mientras bebía directamente de una botella de whisky.

-Ya estoy...-Se acercó al castaño.

-Genial-sonrió- vamos... Nos están esperando- dejó a un lado la botella y guardó su celular.

Caminaron por un camino de piedras que llegaba directo a la mansión de los Jeager.

Varios hombres armados custodiaban los alrededores.

-¿Mmm?-El azabache se fijó en una camioneta- ¿Kenny?-

-¿Qué? Oh, es la camioneta de tu tío-ladeo su cabeza-¿Por qué está aquí?-lo miro curioso.

-No lo sé-Frunció el ceño.

En la entrada fueron recibidos por el guardia personal de Grisha Jeager, padre de Eren quien los guío hasta la sala de reuniones.

Al abrir la puerta, todos los presentes dirigieron sus miradas al par.

-¡¿Había una fiesta y nadie lo dijo?!-Gritó Eren-¿Dónde está el bar libre?-

-No es una fiesta, cariño-Se puso de pie y se acercó a su hijo.

-¿Qué pasa, mamá?-La miró extrañado.

Levi fue directo hacia su tío, quien estaba con los brazos cruzados y una pequeña sonrisa.

-¿Por qué no me dijiste que ibas a estar aquí?- miró a la alfa- Se lo dijiste a ella y a mi no-

-Yo terminé rápido mi misión, Levi- dijo molesta- te odio...-susurró.

-¿Eh?-La miraba extrañado.

-No te le hagas caso a tu prima, Levi-ladeo su cabeza- yo en tu lugar estaría muy contento-soltó una risa.

-¿A qué se debe está reunión sorpresa?- preguntó el azabache confundido.

-Bueno-El líder de los Jeager se puso de pie- Con la traición que hemos sufrido por parte de Los Zion... Que fue un golpe muy duro para nosotros- se acercó a Kenny- decidimos que para el bien de nuestras familias... Nuestros clanes... Sigan la prosperidad-

-Papá, ¿De que hablas?-El castaño estaba en el piso, acariciando a su gato siamés.

-Queremos que Levi y tú... Se comprometan-

Un gran silencio hubo en la sala.

-¡JAJAJAJA!-el castaño reía divertido, cubrió su boca con la mano-¡Levi es como mi hermano!¡Jajaja!-Vio la sería mirada de su padre-Je...-dejó de reír-¿No es una broma?-se puso de pie.

-No, es por el bien de todos... No existirán traiciones si existen lazos de sangre. Ustedes se comprometerán... Se casarán y formarán una familia, los futuros herederos de los clanes-

El omega miró al alfa, ambos asintieron.

-Si es por el bien de la familia, lo haré- dijo serio el omega- ustedes saben que soy capaz de todo por el bienestar de nuestros lazos-

-Digo lo mismo-siguio el azabache- la prosperidad es primero, mucho antes que nada-

-Que bien-Ambos líderes sonreían y comenzaron a aplaudir.

Eren tragó grueso, fue corriendo por un vaso de vodka y lo bebió casi todo de un sorbo.

Levi estaba algo nervioso, tratando de ignorar las amenazantes miradas de reproche de su prima.