Summer.

Llegué a la cafetería. Mackenzie me había enviado un mensaje diciéndome que Nathan y ella se habían mudado a New York, al igual que Gillian así que nos habíamos puesto de acuerdo para vernos y ponernos al día.

—Summer. —Ella me saludo con una gran sonrisa, me acerque a ella y le di un abrazo.

—Hola, Mack.

—¿Cómo estás?

—Mucho mejor y tú.

—Super feliz, ya casi terminamos con los preparativos de la boda.

—Me alegro por ti, Mack.

—Gracias.

—¿Y Gillian?

—Dijo que en un rato vendría

—Oh, entiendo.

—¿Y cuéntame, cómo te va aquí en New York?

—Muy bien, me encanta.

—Eso es genial. ¿Has comenzado a salir con alguien?

—En eso estoy.

—Cuentame sobre ese chico. —Ella sonrió.

—Es Nikolai Larsen.

—¿Nikolai Larsen? ¿El famoso cantante?

—Sí, ese mismo.

—Oh dios mío. ¿Cómo fue eso?

—Es hermano de mi mejor amiga. ¿No te lo había contado?

—No recuerdo la verdad.

—Siempre he estado enamorada de él, desde antes de conocer a Heath. Pero yo sabía que él no sentía nada por mi, pero al parecer eso cambió.

—Espero que ese chico no sea un idiota.

—No me esperaba para nada cuando dijo que le gustaba, estoy muy feliz por eso. Siempre pensé que eso sería algo platónico.

Mack sonrió

—Algo así yo pensaba que era con Nathan, yo lo bese, creyendo que él sentía lo mismo pero después me dijo que sólo era la hermana de su mejor amigo y que no me veía como algo más.

—Me imagino que te destrozó

—Lo hizo, hasta que tiempo después nos reencontramos en Love-Love, te juro que yo odiaba a Nathan, hasta que él volvió a reconquistarme.

—Lo bueno que lo hizo, y mírate ahora están tan cerca de casarse.

—Estoy muy feliz por eso, lo amo demasiado.

—Puedo ver qué él también te ama, todo eso es mutuo.

—Realmente lo es.

En ese instante observé como Nathan y Kenneth venían llegando, sonreí viéndolos

—Hola, chicos.

—Summer. —Ellos sonrieron, Kenneth se acercó a mí y beso mi mejilla.

—Hola. —Escuché la voz de Heath, mire rápidamente a Mack que pareció igual de sorprendida que yo. —Summer. —Él me miró y su mirada de suavizó, yo suspiré rodando los ojos.

—Heath.—Dije entre dientes, no sabía que mierda estaba haciendo aquí.

—¿Tu lo has invitado, Nathan? —Mack hablo duramente, Nate negó rápidamente.

—No, para nada.

—Fui yo, Summer. Creo que Heath debe disculparse contigo.

Mire a Heath, él se sentó a lado de mí y respiro observándome

—¿Puedo hablar contigo?

—No tenemos nada de que hablar, Heath.

—Tenemos muchas cosas de las que hablar, Summer.

—Las cosas han quedado claras, Heath.

—¿Podemos hablar, por favor

Bufé.

—Bien..

—Vamos a sentarnos a otra mesa.

—¿Estás segura, Summer? —Mack me observo, asentí.

Me levanté de mi lugar y tome mi bolsa mientras nos alejabamos un poco de los chicos, me senté de inmediato.

—¿Que es lo que quieres?

—Me comporte como un idiota.

—Lo hiciste.

—Me he dado cuenta de algo.

—Bien, a mí realmente eso no me importa.

—Te comportas muy fría.

—¿Y que quieres que haga, Heath? ¿Que de saltos de alegría por qué estás enfrente de mi?

—Me di cuenta que las cosas con Hallie ya no eran las mismas.

—¿Y eso crees que me importe, Heath? Lo nuestro acabo.

—Las cosas con Hallie no funcionaron por qué me di cuenta que a la que amo es a ti.

—Yo no te amo, yo estoy enamorada de alguien más.

Sus ojos me miraron con dolor, trago saliva viéndome con fijeza.

—Dejame reconquistarte.

—No, Heath. Yo tengo a alguien más.

—¿No vez que me estás matando diciendo esas palabras?

—Tu también me destrozaste cuando me dijiste que lo ibas a reintentar con Hallie. Ahora no vengas queriéndote acercar a mi nuevamente.

—Cometí un error dejándote por Hallie.

—Bueno, de los errores se aprende.

—Te quiero de regreso.

—No tienes derecho de querer entrar nuevamente a mi vida después de haberme lastimado.

—Lamento eso.

—Ya te dije, es pasado. Ahora realmente estoy cerca del chico del que siempre he estado enamorada.

—Summer.

—Summer, nada. —Dije entre dientes.—Sólo mantente alejado de mí.

—Pero..

—Pero nada.

Me levanté de mi lugar y sentí como el tomaba mi mano.

—Suéltame.

—No te vayas.

—¿Que no me vaya? Dime, que quieres que haga.

—Que te quedes conmigo.

—¿Quieres que finjamos ser viejos amigos que se volvieron a reencontrar? No seas ridículo, Heath.

—Aun no te vayas.

—Sólo suéltame y déjame que me vaya.

Él bufó

—Bien, puede que aún estés muy molesta por lo sucedido.

—Ya lo supere, ya te supere a ti, quizás te quise, pero ya no lo hago.

—Perdóname

—Si que te perdone te hace sentir mejor contigo mismo, entonces lo hago. Te perdono.

Heath suspiro mientras me soltaba, tome mi bolsa y salí rápidamente de ahí, después hablaría con Mackenzie.

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Toque el timbre del apartamento de Nikolai, el abrió con una sonrisa en el rostro.

—Hola, preciosa. —Se acercó a mí y beso la comisura de mis labios.

—Hable con Heath. —Dije rápidamente.

—¿Qué? ¿Que hablaste con tu exnovio?

—Fui a verme con Mackenzie, y después él llegó ahí.

—¿Que quería ese maldito?

—Dijo que me amaba.

—Es un imbécil, debe de darse cuenta que su oportunidad se fue, ahora eres mía.

—¿Tuya? —Dije con él corazón latiendome con rapidez

—Si, mía. —Sus labios besaron mi cuello y luego beso mis labios.

—Entonces si yo soy tuya, tu eres mío.—Susurre en sus labios, él los capturó rápidamente en un beso.

—Siempre tuyo, Evangeline. —Dijo sin dudarlo.

Lo mire a los ojos, sus ojos azules estaban tan oscuros mientras mientras el tomaba mis manos y las llevaba a su boca para besarlas.

—No quiero ver a ese imbécil cerca de ti, ni que respire a tu dirección, por que lo mato. —Gruñó de inmediato.

—Obviamente no puedes hacer eso. —Casi chillé.

—Claro que puedo hacerlo. —Me besó, mis manos fueron directamente a su cuello.—Te recuerdo que eres mía, Summer. Y nadie puede ver ni respirar cerca de lo que me pertenece.

En ese instante sentí un escalofrío en mi piel, nunca había escuchado a Nikolai así.

—Ahora hagamos algo.

—¿Cómo que?

—Tengamos una cita. —Beso mi hombro.

Parecía que siempre que estaba a mi lado no podía dejar de tocarme aunque realmente no me quejaba, adoraba que Nikolai fuera así conmigo.

—Bien. ¿Que haremos? —Puse mis manos en su cuello atrayéndolo a mí, él beso mi nariz y rápidamente cerré los ojos.

—¿Que quieres hacer?

—No lo sé.

—Vayamos a dar un paseo en bicicleta. —Beso mi sien.—Ve a ponerte algo cómodo, dentro de diez minutos nos vemos en tu apartamento

—Okey —Salí del apartamento de Nikolai y camine hasta el mío, fui en busca de ropa cómoda y me hice una coleta, lo menos que quería era que el cabello me estorbara.

Al estar lista escuché como tocaban el timbre, camine hasta la puerta y él me tomo de la mano para después salir del apartamento antes de que yo pudiera decir algo.

—Me encanta la idea.

Al salir del edificio fuimos directo al estacionamiento donde el abrió la puerta del copiloto y me ayuda a entrar, sonreí viéndolo.

Al instante que alquilamos las bicicletas, Nikolai las metió al auto para después conducir hasta un lago.

Bajo las bicicletas y sonrió viéndome.

—¿Estás lista?

—Sí.

—Veamos quien puede ir más lejos y mucho más rápido.

—¿Y si me caigo?

—Aquí estoy yo para levantarte.

Me reí mientras comenzaba a pedalear, el venía a lado de mí y me guiñó un ojo

—¿Cuál será mi premio si gano?

—Ya veremos.

—Necesito motivación.

Él se río mientras pedaleaba, sus brazos estaban un poco tensos, y observé ese tatuaje que tenía el brazo derecho y como sus venas se marcaban.

—Te noto un poco distraída, Evangeline. —Él me miró de reojo y al momento que lo mire a los ojos mire como tenía una sonrisa de burla en la cara, bufé y de inmediato lo escuche reírse.

Comencé a pedalear con más rapidez alcanzandolo y escuchándolo gruñir, ahora la que se río fui yo.

—Fue por qué me distraje un segundo.

—Claro, debes de saber perder. Yo soy más joven y por ende más rápida.

—¿Me estás diciendo viejo?

—Tienes veintiséis y yo veinticuatro, claramente estás llegando a un edad donde no te estás haciendo más joven.

—Gracias por recordarlo, Summer.

Al llegar al lago sonreí mientras me bajaba de la bicicleta y me sentaba segundos después llegó Nikolai y se sentó a mi lado, mientras me ponía sus brazos sobre los míos y me atraía hacía él para besar mi cabeza.

—Me gusta estar aquí, es demasiado tranquilo.

—A mi me gusta estar contigo.

—Bueno, a mí también. ¿Cuando te diste cuenta que comenzaba a gustarte? —Le pregunté. Realmente me estaba muriendo de curiosidad por saberlo.

—Realmente no lo sé, no me he puesto a pensar en el momento exacto que supe que te quería.

Mi corazón latió con fuerza ante esas palabras.

—Tan solo sé que cuando te bese por primera vez, sé que no fue por impulso.

—Pero nombraste a Elsie. —Dije recordando eso, realmente eso me había dolido demasiado.

—Fui un imbécil.

—Si lo fuiste. —Concordé.

—Pero ahora lo único que me importas eres tú.

—¿Crees que las cosas entre nosotros podrían funcionar?

—Estoy muy seguro, Summer.

—Tengo miedo de perderte

—Yo también, pero tengo fe en que funcionará.

—Eres el hermano de mi mejor amiga, y antes de ser un hombre para mí, también eres mi amigo.

—No tengas miedo, si no funciona todo seguirá igual como antes te lo prometo, pero sé que funcionará.

Suspiré y recosté mi cabeza en su hombro, él acaricio mi cabello, esperaba que las cosas con Nikolai funcionarán, lo menos que quería era perderlo.

Después de un rato habíamos decidido regresar al auto, me baje de la bicicleta mientras respiraba con fuerza estaba agotada.

Nikolai coloco en el asiento de atrás las bicicletas, abrió la puerta del copiloto para que yo subiera al auto.

—¿Puedo poner música?

—Claro.

Busque en mi móvil una canción de Justin Timberlake.

—Mirrors, buena elección. —Me miró de reojo mientras ponía su mano en mi pierna y le daba un ligero apretón, pegue un pequeño brinco y mi piel se erizo por completo.

Puse mi cabeza en la ventanilla del auto mientras suspiraba y de reojo observé a Nikolai y otra vez noté sus venas al ver como se tensaban al tener sus manos sobre el volante.

El auto fue parando poco a poco, confusa alcé la cabeza mientras escuchaba a Nikolai maldecir.

—¿Qué sucede? —Pregunté de inmediato.

—El auto se a quedado sin combustible. —Gruñó

—Oh, no. ¿Cómo es posible?

—Olvide ir a ponerle combustible.

El bajo del auto, así que hice lo mismo.

—Queda una gasolinera un poco cerca de aquí, sube al auto y  lo llevaremos hasta ahí.

—No, yo puedo ayudarte.

—Sube al auto, Summer, yo puedo solo.

Negué y me puse a lado de él mientras comenzaba o intentaba mover el auto, pero pise mal, cayendo en un charco de lodo, pegué un grito y Nikolai comenzó a reírse de mi.

—¡No te estés riendo de mi! Estoy pretendiendo ayudarte.

—Lo sé, lo siento. Sólo que te miras adorable, preciosa.

—Joder, joder. —Murmuré, él se acercó a mí intentando ayudarme pero también resbaló cayendo encima de mi. Su cara estaba tan cerca de la mía que podía sentir su aliento golpeando mis labios.

Puse mis manos atrás de su cuello y lo acerque a mi, queriendo besarlo él sonrió, poniendo un mechón de mi cabello atrás de mi oreja.

—Te miras tan preciosa.

—¿Embarrada de lodo?

—Sí. —Su nariz rozó la mía, suspiré.

Sentí como su mano acariciaba mi mejilla dejando un rastro de lodo mientras me miraba con adoración, cerré los ojos sonriendo.

—Deberíamos de levantarnos.

—Sí, deberíamos.

Él se levantó y tomo mi mano mientras me ayudaba a levantarme

—Estoy toda sucia

—Pero aún así te sigues mirando preciosa.

—¿Y ahora que haremos?

—Iré caminando por combustible

—¿Me dejaras aquí sola? —Alcé una ceja.

—¿Me acompañaras? —Pareció sorprendido.

—Sí. —Respondí sin dudarlo.

—Bien, vayamos.

Nikolai tomó mi mano mientras comenzabamos a caminar, observé el atardecer se miraba tan hermoso.

—Es una cita muy rara. —Él habló de repente, alce una ceja viendolo de reojo.

—¿Porqué?

—Nunca me imaginé que terminaría así.

—Es una cita única, y realmente lo único que importa es que estoy contigo.

Mientras más caminábamos la gente nos miraba raro al pasar por su lado, ambos estábamos embarrados de lodo y mi cabello estaba hecho un desastre pero realmente no me importaba, estaba con Nikolai y eso era lo único que me importaba.

✨✨✨

Hola, holaa. ¿Cómo están? Espero que bien.

Espero que les guste el capítulo, chicas. Y no olviden dejar sus opiniones.♥️