Capítulo diecisiete. - Puedes estar conmigo.

Summer.

—Te vamos a extrañar mucho. —Alyssa me abrazo, sus ojos estaban llenos de lágrimas mientras me miraba.

—Yo también las extrañaré mucho. —Murmuré sintiendo los ojos llenos de lágrimas, iba a extrañar mucho a mis amigas.

—Te iremos mucho a visitar —Kinsey sonrió, mientras me abrazaba.

—Por favor, y yo vendré a visitarlos a ustedes.

—Ten un buen viaje, Summer. —Evan me abrazo y me beso la frente, asentí mirándolo.

—Los extrañaré demasiado.  —Repetí mientras sentía como la garganta se me cerraba, las lágrimas estaban amenazando con salir, agarré con fuerza mis maletas, lo menos que quería era ponerme a llorar.

Escuché como anunciaban mi vuelo, así que suspiré..

—Debo de irme.

—Ten un buen viaje y no olvides enviarnos mensaje cuando estés en New York.

—Nos vemos pronto, chicas.

Me despedí de ellas con un ademán mientras caminaba hasta la puerta de abordaje, mis ojos se llenaron de lágrimas nuevamente. Iba a extrañar mucho a los chicos.

Durante el vuelo me puse a ver una película para mantenerme ocupada, y dejar de pensar que iba a vivir a lado de Nikolai. Era algo que aún no me cabía en la cabeza.

Tampoco que él había pagado la renta del apartamento, trate de mantenerme ocupada viendo la película, después de un par de horas habíamos aterrizado.

Suspiré mientras jalaba las maletas, estaba muy ansiosa por este nuevo comienzo.

Ginger me había dicho que había hablando con Nikolai sobre el apartamento por lo cual él se involucró, debo de admitir que al principio me disgusto demasiado pero después me di cuenta que él quiso ayudarme.

Camine hasta la salida cuando algo llamo mi atención, era un cartel que decía. «Bienvenida Evangeline» y Nikolai lo sostenía.

Me fue inevitable no sonreír mientras me acercaba a él.

—Hola.

—Hola, preciosa.

Me quedé parada pero lo que él hizo fue halarme hasta él y abrazarme con fuerza, sentí como sus labios se posaban en mi sien dejando un suave beso.

—Estoy tan feliz de que estés aquí.

—Y yo estoy feliz de estar aquí, aunque debo de admitir que también estoy un poco nerviosa sobre este nuevo comienzo.

Él me sonrió.

—Dejame te ayudo.. —Tomo una de mis maletas mientras la jalaba, yo tomé otra y él me sonrió mientras tomaba mi mano y entrelazaba nuestros dedos.

Sentir la mano de Nikolai en la mía debía de admitir que estaba haciendo cosas locas en mi vientre.

—¿Que tal estuvo el vuelo?

—Bien. —Me encogí de hombros, restándole importancia.

—¿Tienes hambre?

—Demasiado, la comida del avión estaba asquerosa.

—Bien, iremos en busca de comida.

—Suena genial.

—¿Que se te antoja?

—Lo que sea, solo necesito que sea comida.

Él se rió mientras salíamos del aeropuerto, caminamos hasta su auto y guardo en el maletero mis maletas, mientras me ayudaba a abrir la puerta del copiloto y me ayudaba a entrar.

—Gracias.

—Me enteré que terminaste con el imbécil de tu novio. ¿Quieres contarme que paso?

—Regresó con su exnovia. Ellos tienen un hijo juntos, dijo que me quería pero que a ella la amaba.

—¿Y tú lo amabas?

Negué de inmediato, pude quererlo pero no lo amaba, esos sentimientos creo que solo le pertenecía a Nikolai. Puede que sea un poco irónico el saber que él amaba a Hallie y yo a Nikolai, aunque realmente yo no iba a dejar a Heath por Nikolai.

Por eso cuando comencé una relación con Heath deje de hablar con Nikolai.

—Amar es muy fuerte, simplemente lo quería.

—Te dije que podía romperte el corazón.

Asentí suspirando.

—¿Entonces ahora no puedo sentirme mal si hago esto?

—¿Hacer que co....? —La pregunta quedó en el aire cuando en un semáforo se acercó a mí y junto sus labios a los míos, cerré los ojos sintiendo como agarraba mi cabello en un puño acercándome más a él.

—Besarte —Susurró separándose lentamente, lamí mis labios un poco aturdida..

—Soy una mujer soltera. —Me encogí de hombros.

—Eso me hace muy feliz.  —Susurró nuevamente antes de volver a besarme.

Mi corazón latía con tanta fuerza que sentia que en cualquier momento se iba a salir de mi pecho.

—Heath fue un imbécil, me alegro por ti que te hayas deshecho de él.

Me fue inevitable no reírme.

—Él se deshizo de mi, mejor dicho 

—No lo necesitas. —Me besó nuevamente, mi cabeza estaba muy desconectada, no entendía que estaba sucediendo con Nikolai.

Estaba muy besucón, aunque realmente no me quejaría.

Empezamos a escuchar como golpearon el vidrio del auto, ambos nos separamos de golpe. Pensé que Nikolai vería que era lo que sucedía, pero simplemente arranco el auto rápidamente.

—Olvide que estábamos en medio de la carretera.

—Me he dado cuenta de eso.

Nikolai se río mientras tomaba mi mano y la llevaba hasta su boca mientras me miraba de reojo y me guiñaba un ojo, mentiría si dijera que no me convertí en papilla en ese instante.

Mi móvil en ese instante vibró, confusa lo tome y noté que tenía un mensaje de Heath.

Heath.

Hola, Summer. ¿Podemos hablar? Me sabe muy mal como terminaron las cosas entre nosotros, te quiero y no quiero que esto termine así.

—Vete a la mierda. —Murmuré, Nikolai alzó una ceja observandome de reojo.

—¿Va todo bien, Evangeline?

—Sí, todo bien.

—¿Estás segura? Te noto molesta.

—Heath me acaba de enviar un mensaje, me está pidiendo hablar. No quiero saber nada de él, él me lastimo.

—¿Lo sigues queriendo?

—¿Has intentado de dejar de querer a alguien de la noche a la mañana?

—Sí, pero es casi imposible.

—Entonces ahí tienes la respuesta.

—Él te lastimo

—Estoy muy conciente de eso.

—No debes de quererlo.

—Eso mismo decía yo de Elsie, que después de que terminaron se fue atrás de tu mejor amigo, pero así la quieres.

—Quería.

—¿Estás seguro de eso Nikolai?

—Demasiado seguro.

—Voy a superar a Heath, solo es cuestión de tiempo.

—Tiempo. —Murmuró.

—Si, Nikolai. Tiempo. Te recuerdo que tu tardaste demasiado en superar a Elsie.

—Pero lo hice

—Yo también lo haré con Heath, pero ocupo espacio. Tiempo para pensar.

—Tienes razón.

Suspiré y me solté del agarre de Nikolai mientras pasaba las manos por mi cara..

Las cosas habían cambiado, ahora yo era la que hablaba de su exnovio y Nikolai era el que estaba más raro de lo normal.

No entendía para nada que era lo que pasaba.

—Hemos llegado. —Extendió su mano para que la tomara, pero simplemente lo ignore y me bajara del auto.

El mensaje de Heath me había puesto de mal humor.

—Oye, sé que estás de mal humor pero yo no tengo la culpa. —Nikolai susurró mirándome.

—Odio que me haya hecho eso.

—Bien, creo que debes de calmarte un poco, vayamos a comer.

—Es que no me entiendes. —Le dije, sentía un nudo en la garganta.

—Claro que te entiendo.

—¡No, no lo haces! Elsie y tu lo dejaron antes de que ella estuviera con Jayce.

—Pero te recuerdo que me sentí traicionado por mi mejor amigo y mi exnovia, a quién creía que era el amor de mi vida.

—¿Ahora ya no crees que es el amor de tu vida?

—Estoy seguro que ella no era la indicada, ahora déjame tomar tu mano y vayamos a comer algo. Te recuerdo que morias de hambre. —Tomó mi mano, sus nudillos acariciaron los míos, así que suspiré pesadamente.

—Se me ha quitado el apetito.

—Eso no puede ser posible, vamos. —Me halo hasta la entrada del local.

—¿Que se te antoja comer?

—Una ensalada.

—¿Ensalada?

—Se me ha quitado el apetito. —Le recordé.

—Bien, la ensalada estará bien.

Durante la comida ninguno dijo nada, yo picaba mi ensalada y a ratos llevaba un poco a mi boca, tenía la duda que era lo que quería hablar, pero por otra parte no quería saber nada de él.

—Estás muy pensativa.

—Estoy bien.

—¿Estás lista para irnos?

—Sí.

Llegamos al edificio y suspiré, aún seguía sin creerme que viviría a lado de Nikolai, estaba entusiasta con la idea debía de admitirlo. Pero si hubiera sabido eso antes de salir con Heath, hubiera pegado gritos de fan loca.

Entramos al edificio mientras Nikolai halaba mis maletas y con la otra mano libre tomaba mi mano, como si yo fuera a perderme.

Dejo las maletas en el suelo y puso un código en la puerta antes de abrir la puerta del apartamento.

—Bienvenida a tu hogar, Summer..

—¡Me encanta! —Admití, viendolo.

—Me alegra.

Dejamos las maletas y observé el apartamento, se miraba bastante acogedor, las paredes eran de color neutro, había tres habitaciones en el apartamento, más el salón, y cocina. Nikolai me indico que abajo del apartamento se encontraba un gimnasio donde iba todo los días y que deseaba que pudiera acompañarlo.

—Aunque es espectacular, no debiste porqué pagarlo.

—Sólo fueron unos cuantos meses.

—Sólamente.

—Sí.

—No debiste.

—No debí, pero quise hacerlo. —Acomodó un mechón de mi cabello atrás de mi oreja, cerré los ojos al sentir sus cálidos dedos en mi mejilla.

—Bueno, me parece que tú aún necesitas desahogarte con lo de Heath y como tú me escuchaste cuando pasó lo de Elsie, estoy deseando escucharte, preciosa.

—No quiero hablar de eso. —Bufé.

—Sé que no, pero te hará sentir mejor, saca toda la rabia..

—¿Cómo?

Realmente necesitaba hacerlo, odiaba con todo mi ser que ese mensaje de Heath me haya revuelto los sentimientos otra vez.

—Tengo una idea, acompáñame.

❊❊❊❊❊❊❊❊

Diría que fue una idea terrible, pero no. Nikolai me había sugerido que tirara un par de cosas, realmente funcionó.

Mis dedos se encontraban en una taza de corazones ridículos que Elsie le había regalado a Nikolai en un san Valentín, la idea de romper las cosas fue de Nikolai.

—Vamos, debes romperla con todas tus fuerzas.

y él fue quién puso esa taza en mis manos. Así como un reloj carisimo que pise tantas veces, que destroce como Heath había destrozado mi corazón.

Nikolai fue el de la idea de romper las cosas que Elsie le había regalado, dijo que sería un alivio para él saber que ya no tenía nada de ella.

Con las manos temblorosas tire la taza en el suelo estrellandola por completa, Nikolai aplaudió.

—Bien, bien. —Me temblaban los hombros, las lágrimas estaban cayendo mientras miraba los trozos de cerámica en el suelo.

—¿Estás mejor? —Me abrazo por los hombros, pero al ver que lloraba, se acercó a mí y limpio mis lágrimas.

—Eso debería de estarme ayudando pero no lo hace, siento que aún tengo algo atorado en el pecho.

—Vamos ahogar tus penas en alcohol.

—Sí, con tequila.

—Vamos por tequila, Summer.

En el primer trago sentí como me quemaba la garganta, en el segundo el ardor fue menos, en el tercero ya no sentía casa nada.

—Él es un imbécil. —Dije después del quinto trago.

—Al fin empezarás a hablar. —Susurró Nikolai con la voz ronca.

—Dijo que me quería, pero al final se fue con ella.

—Si es un imbécil, te advertí muchas veces, Summer.

—Fui una tonta por no hacerte caso, siento eso.

—Lo bueno que ya no estás con él.

—¿Porqué es lo bueno? —Hipé.

—¿Porqué? ¿Todavía me lo preguntas?

—Sí. —Dije algo confusa.

—Porqué ahora puedes estar conmigo..

✨✨✨

Hola, holaaa. ¿Que pasará con estos borrachos? Bueno, tarde pero seguro.

Espero que les haya gustado el capítulo. Por cierto, si alguien quiere unirse al grupo de WhatsApp ya he puesto el link en mi bio.

Si tienen alguna pregunta déjenla por aquí, o por Ig. Por dónde gusten.

Ig: Jaz.bs.

Nos leemos pronto, quizás mañana. Besos ❤️

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