Summer.

Me encontraba en mi oficina haciendo un par de diseños, mi móvil en ese instante sonó mostrando un mensaje de Nikolai.

Sonreí mientras abría el mensaje.

Nikolai.

¿Que tal está llendo tu día, preciosa?

Summer.

Bien, un poco ocupado. ¿Y el tuyo?

Nikolai

Estoy en el aeropuerto, llegó en la noche. No sabes lo que muero de verte.

Summer.

Estoy tan feliz de que regreses.

Nikolai.

Ha sido un mes espantoso, la gira ha sido genial pero no verte ha sido horrible.

Yo también lo había extrañado demasiado.

Summer.

Estaré esperando ansiosamente tu llegada, Nikolai.

Nikolai

Yo también estoy esperando ansiosamente mi llegada.

Summer.

Ten buen viaje, Nikolai.

Nikolai.

Gracias, preciosa.

Deje el móvil mientras sonreía, tenía dos meses viviendo aquí a New York, y poco después Nikolai tuvo que continuar con su gira.

—Summer. —Tocaron la puerta y enseguida se abrió.

—¿Sí? —Mire a Katherine

—Es nuestra hora de comida. ¿Vamos juntas?

—Sí, vamos. —Acomodé mis diseños y los metí en un folder mientras me levantaba de mi lugar y buscaba mi bolsa, al tomarla salimos de mi oficina.

—¿A dónde van? —Preguntó Jack.

—Iremos a comer. —Le dijo Katherine

—Las acompaño.

Salimos de la empresa mientras íbamos directamente a nuestro restaurante favorito.

—¿Y esa sonrisa, Summer?

—¿Que sonrisa?

—Pues la que tienes.

—Oh, no. No es nada.

—¿Estás segura?

—Hoy vuelve Nikolai.

—Oh, el hermano de tu amiga. —Jack asintió

—Exactamente.

—¿Estás emocionada?

—Sí, hace un mes no lo veo.

—¿Y lo extrañas?

—Puede ser.

Katherine se río.

—¿Puede ser? Claro que lo extraña, Jack.

—Vayamos a comer. —Les dije con las mejillas rojas.

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Al llegar al edificio me encontré con el de seguridad que me sonrió al verme.

—Que bueno que la veo, señorita Abbey.

—Hola —Lo saludé con una sonrisa.—¿Que sucede?

—Le han enviado esto. —Me entregó un sobre y un arreglo floral.

—¿Y esto quien lo manda?

—No lo sé, tan solo me pidieron que se lo entregará.

—Gracias. —Dije mientras lo tomaba y caminaba hasta mi apartamento.

Tome el ascensor deseando llegar a mi piso, estaba ansiosa de saber quién había mandado estás rosas tan preciosas

Puede que haya sido Nikolai, sonreí de tan solo pensarlo. Entre a mi apartamento y abrí el sobre encontrándome con una nota.

Sé que estás muy molesta conmigo, y tienes razón en estarlo. Sé que te lastime pero no sabes cómo me arrepiento, me gustaría verte y poder hablar contigo.

- Heath.

Maldito.

El timbre del apartamento había sonado así que camine hasta la puerta y la abrí encontrándome con Nikolai, quién sonreía.

—Hola, Evangeline.

Me acerqué a él y lo abracé, sus brazos rodearon rápidamente mi cintura mientras besaba mi sien.

—Que bueno que estás aquí.

—Estoy tan feliz de estar aquí. —Puse mi nariz en su cuello y suspiré su olor. —¿Estás bien? Te noto tensa.

—Sí, estoy bien.

—¿Segura?

Asentí.

—¿Ahora puedo besarte?

—Hazlo, por favor.

Él sonrió mientras dejaba un pequeño beso en mis labios, suspiré contra sus labios.

—Te extrañé mucho.

—Yo más, preciosa.

Tomé su mano mientras lo atraía al interior del apartamento, él cerro la puerta, nos sentamos y sus ojos fueron directamente al arreglo de flores.

—¿Y eso? No recuerdo haberte mandado nada.

—Ha sido Heath.

—Qué mierda. —Dijo mientras apretaba la mandíbula.

—Quiere que hablemos. —Suspire.

—¿Lo sigues queriendo?

—Lo odio.

—Eso no responde mi pregunta, Summer.

—No, Nikolai. Ya no lo quiero.

—Joder, gracias.

Sonreí al escucharlo.

—¿Entonces que harás, no hablaras con él o si?

—No se, Nikolai.

—No merece hablar contigo después de lo que te hizo, y tú no mereces llorar por idiotas. Y él te hizo llorar.

—Pero no sé que es lo que quiere.

—Es muy tu decisión, Summer.

Suspiré mientras ponía mis manos entre mi cara.

—¿Quieres ir a cenar?

—No, no tengo hambre.

—Pediré algo de comer, estoy muriendo de hambre.

—Esta bien..

—¿Vemos una película?

—Sólo con la condición de que me dejes escogerla.

—Claro, Evangeline.

Nikolai se levantó mientras llamaba para pedir su comida, después se acercó a mi mientras miraba como buscaba la película.

—¿Ya sabes que miraremos?

—Sí.

—Bien.

Él se sentó a mi lado mientras ponía sus manos por mis hombros, atrayendome a él, mi cabeza descansó en su pecho mientras sentía los latidos de su corazón.

—Tu corazón esta latiendo muy fuerte.

—Sí, es porqué estás cerca de mí

—¿Realmente te gusto?

—Sí, Summer. No puedo dejar de pensar en ti.

—Yo estoy enamorada de ti, Nikolai.

—¿Sí?

—Desde siempre he estado enamorada de tí. —Confesé, ahora no temía el decirlo en voz alta, él había dicho que le gustaba.

—Joder. —Dijo mientras atraía sus labios a los míos, lo besé mientras ponía mis manos en su cuello atrayéndolo a mí. —No debí hacerle caso a Kayden. —Susurró mientras dejaba un par de besos en mis labios, me aleje.

—¿Qué? ¿Que no debiste hacerle caso a Kayden de que? —Pregunté confusa.

—Estuve enamorado de ti cuando tenía dieciocho, cuando estuve apunto de invitarte a salir tu hermano me pidió que me alejara de ti, tiempo después comenzaste a salir con un chico, así que decidí mantenerme alejado de ti.

Simplemente lo tome del cuello y lo acerque a mi para poder besarlo, él acomodo un mechón atrás de mi oreja mientras correspondía el beso.

Debía de admitir que nunca imaginé que Nikolai sentiría algo por mí, pero realmente sentía como si estuviera soñando. Eso hubiera pasado simplemente en mis sueños pero saber que era verdad me volvía muy feliz.

Había estado enamorada de Nikolai desde siempre, no podía creer que él había sentido lo mismo por mí tiempo atrás, todo aquello fue culpa del imbécil de mi hermano.

❊❊❊❊❊❊❊❊

Sonreí mientras dejaba que Jack entrara al apartamento, Katherine venía atrás de él casi pisándole los talones.

—Traje está botella de tequila.

—Y yo traje bocadillos.

—He preparado la cena. —Les dije.

—Me encanta tu apartamento, es precioso.

—Lo es. —Admití.—Vengan, siéntense.

Katherine jalo un banco mientras se sentaba.

—Estuve hablando con un chico. —Dijo ella de repente.

—¿Sí, y que tal?

—Es abogado, y vive en Canadá, tiene veinticuatro años y es guapísimo.

—¿Dónde lo conociste?

—Love-Love.

—¿La has descargado?

—Sí, no podía perderme la oportunidad de conocer a nuevas personas.

—Eso es genial.

—Lo es, Summer. Es un chico genial.

—¿Estás segura que no es un idiota? —Jack la miró.

—Muy segura.

Serví un poco de vino mientras les entregaba a cada uno una copa.

—¿Y tu vecino sexy?

—Creo que está en el estudio.

—¿Cómo es vivir con un hombre tan sexy a lado?

—No es nada del otro mundo. —Traté de mostrarme indiferente, Kate se río.

—Y pensar que estás enamorada de ese chico.

—Pero no tiene nada que ver con que seamos vecinos.

—Tiene mucho que ver, Summer..

—Claro que no.

—Sí, porque Nikolai pudo ir a otro edificio en busca de apartamentos pero casualmente quiso el apartamento que estaba a lado de el de él.

—Sólo es casualidad.

—Nikolai está enamorado de ti, y si no, él se enamorará de ti, ya verás.

—Él sólo hablo de gustar, nunca hablo de nada más.

—Pero luego hablara de algo más, Summer eres preciosa y si él te tiene, te querrá completa no a medias.

—Y es lo que mereces, no mereces que te quieran a medias, Summer.

—Realmente no se que es lo que vaya a suceder con Nikolai y conmigo, siento que todo está llendo muy rápido. No tiene mucho que termine con Heath, y no sé si estoy lista para tener algo con Nikolai.

—Estas enamorada de él.

—Pero no estoy lista para nada.

—Heath te rompió el corazón, no le importo tus sentimientos, Summer. —Jack susurró.

—Ella tiene razón, debes de darte una oportunidad con tu vecino sexy.

—Él no ha hablado de oportunidad ni relación. —Les recordé.

—Chicas. —Habló Jack, llamando nuestra atención.

—¿Qué sucede?

—Lo he estado pensando demasiado y creo que le propondré matrimonio a Avery.

—¿Estás seguro de eso?

—Sí, llevamos un año juntos, la quiero y creo que es lo correcto

—¿Lo crees? —Pregunté confusa.

—Estoy seguro —Admitió, yo asentí.

—Haz lo que creas mejor, Jack. Si decides proponerle matrimonio deseo que todo vaya bien. —Admití.

—Sólo que aún no se muy bien como hacerlo.

—¿No has planeado nada aún?

—No, pero sé que pronto se me ocurrirá algo

—Si necesitas ayuda puedes decirlo.

—Gracias, Kate.

—¿Tienen hambre?

—Sí

—Vamos a sentarnos en la cocina, esto ya está listo.

—Huele delicioso, Summer.

—Espero que les guste.

Había decidido preparar una lasaña, era la receta de mi madre y sabía que a ellos les encantaría.

—¿Cómo se llama el chico de la aplicación? —Le pregunté a Kate, realmente quería saber más.

—Se llama Evan.

—¿Y realmente es bueno?

—Realmente él es genial Summer, en lo que llevamos hablando siento que las cosas van bien, por el momento

—Me alegro mucho por ti, Kate. Te lo mereces, sólo temo que sea un idiota como Heath.

—Lo dudo. —Ella sonrió de lado.

—¿Cuando se conocerán?

—No lo sé, me ha dicho que vendrá dentro de poco a New York, y quiere que nos veamos.

—Suena muy bien.

—Aunque debo de admitir que estoy un poco nerviosa, aun no sé cuando nos veremos y no tengo ni la mínima idea, pero estoy nerviosa porque se que ese día llegará, Summer.

Me reí, realmente la entendía.

—Te entiendo, esperemos que ese chico no sea un idiota.

Bebí un trago de mi vino cuando escuché que él timbre de mi apartamento me había sonado, estaba segura que era Nikolai. Nadie más venía a mi apartamento.

—Hola, Summer. —Se acercó a mí y beso mi frente.

—Hola.

—¿Que bebes?

—Vino tinto, ven pasa. —Tomé su mano, jalandolo.

Él me siguió un poco confuso, alzó la ceja encontrándose a mis amigos.

Los ojos de Katherine brillaron mientras lo observaba.

—Hola. —Dijo ella de inmediato.

—Hola. —Él respondió con confusión.

—Son mis amigos. —Le dije al ver su cara.—Él es Jack y ella es Katherine.

—Mucho gusto, soy Nikolai el novio de Summer.

Abrí la boca sorprendida y Jack sonrió de lado mientras Katherine parecía que iba a dar saltos y aplausos.

—¿Novio? —Lo mire de reojo.

—Sí.

—No eres mi novio, una cosa es que nos besemos pero no eres mi novio.

—Bueno, puede ser que aún no lo sea.

—Aparte si quieres que seamos novios me debes muchas citas.

—Te prometo que las habrá.

—Sientate.

Él negó.

—Pensé que estabas sola, Evangeline. Por eso vine contigo, no pensé que tenías visita.

—No hay problema, quédate.

—No preciosa, no quiero incomodar a tus amigos.

—Para nada. —Jack se encogió de hombros.

Nikolai lo pensó pero aún así se sentó a mi lado mientras ponía sus manos en mis hombros, acercándome más a él, en ese instante Katherine sonrió, mientras nos observaba.

—¿Que has estado haciendo? —Le pregunté.

—He estado en el estudio, grabando para mí nuevo álbum

—Muero por escucharlo.

—Sé que te gustará.

—Soy tu mayor fan, obviamente me gustará

—Yo también soy tu mayor fan. —Besó mi frente, Jack sonrió de lado.

—¿Has comprado un anillo? —Cambié de tema rápidamente, quería que mis amigos se sintiera incluidos y no incómodos.

Nikolai podía ponerse un poco meloso, y no quería que se incomodaran, después de todo ellos eran mis invitados el día de hoy.

—No, aún no. Pero tengo unas opciones que sé que le gustarán.

—¿Cuando planeas pedírselo?

—Dentro de una semana, el plan que tengo es invitarla a cenar, y después pedírselo.

—¿En un restaurante?

—Sí.

Las pedidas de matrimonio en un restaurante era lo menos romántico, o al menos eso era lo que yo pensaba. Pero no quería decírselo a Jack y hacerlo sentir mal.

—¿Estás seguro que en un restaurante, no tienes otro plan? —Kate preguntó.

—Por el momento no, eso es lo único que tengo planeado.

—Bueno, podemos buscar más opciones.

—Si, nosotras te ayudaremos.

—¿Tu cómo le pedirías matrimonio a la mujer de tus sueños? —Kate miró a Nikolai, y él rápidamente me miró a mi con una sonrisa.

—No lo sé, me guiaría en lo que ella desearía.

—¿Entonces no lo sabes?

—¿Como te gustaría que te pidieran matrimonio? —Él me preguntó

—No lo sé, nunca lo había pensado, pero me gustaría que fuera donde pudiera observar las auroras boreales y luego se hiciera la pregunta. Creo que sería romántico.

—Si suena muy romántico. —Ella admitió, viéndome.

—Lo es. —Suspiré.

Nikolai puso sus labios en mi sien mientras dejaba un beso, Katherine suspiro viéndonos.

—Se miran tan lindos juntos

Nikolai sonrió.

—¿Realmente no son novios, Summer?

—No

—Parecen novios.

—Pero no lo somos.

—Por el momento —Dijo Nikolai, mientras me guiñaba un ojo.