Ginger.

Años atrás

El timbre no había dejado de sonar, molesta salí de mi habitación, caminando a la puerta principal, ninguna de las chicas se encontraba en casa por lo que me tocaba a mí ir a ver quién tocaba con tanta urgencia.

Al abrir la puerta me encontré con Ethan quien sonrio al verme.

—Ethan. —Dije sorprendida.

—Ginger. —Me sonrió, mostrándome sus dientes.

—¿Que haces aquí?

—Bueno, quiero recuperarte.

¿Recuperarme? ¿Acaso el estaba mal de su cabeza?

Habían pasado ya varios meses desde que él me había abandonado, y ahora aparecía como si nada diciendo que quiere recuperarme.

—¿Perdón?

—Quiero que estemos juntos, recuperar tu amor. —Susurró, acercándose a mi, pero me aleje de inmediato.

—No hay nada que recuperar Ethan, te recuerdo que me abandonaste.

—Queria que tuviéramos una buena vida y para eso necesitaba irme, y poder trabajar, quería darte lo que mereces.

—Yo lo único que quería, lo único que necesitaba era estar contigo pero decidiste dejarme sin importante lo que yo sentía, tan solo pensaste en lo que creíste mejor para mí.

—Lamento mucho eso, pero por eso he regresado, quiero darte lo que te mereces, mi amor.

—No soy tu amor, deje de ser tu amor hace tiempo.

—¿Estás con alguien más?

—Si, estoy con alguien más desde hace tiempo y lo amo.

—¿Lo amas? —Preguntó con el dolor reflejado en su ojos.

—Lo hago. —Admití, viendolo.

En ese instante la silueta de Eros atravesó el pasillo, y al llegar a mi puerta me miró fijamente y después miro a Ethan.

—Gin. —Ethan quiso tocar mi mano, me aleje nuevamente.

—Te pido amablemente que quites tus sucias manos de mi novia. —Eros demandó de forma posesiva.

—¿Él es tu novio?

—Ajá. —Me acerque a Eros, él sonrió viéndome y me tomo de la cintura apretándome a él, mientras dejaba un beso en mi mejilla, suspiré al sentir su aliento golpeando mi mejilla.

—¿Y tú quien eres? —Eros lo miro.

—Soy Ethan su exnovio.

—Oh, si ya recuerdo quien eres. Eres quien la abandonó ¿No?

Noté como Ethan apretaba la mandíbula mientras observaba a Eros.

—Nunca la abandone —Él quiso aclarar.

—Si, claro. —Mi novio susurró.—¿Para que has regresado?

—Bueno, quería hablar con ella.

—¿Hablaras con él?

Negué

—Ya hemos dejado todo en claro.

Realmente aún me sentía resentida de que él se haya ido pero sabía que no debía de ponerme como una loca.

—Te amaba Ethan, realmente lo hacía pero sabía que no debía de vivir tras la sombra de un amor que no le importe lo suficiente. —Eros frotó mi espalda.

—Yo también te amaba, te amo aún y me importabas más que cualquier cosa en la vida por eso mismo me fui pensando en ti, en nuestro futuro.

—¡Eh! —Eros gruñó.—Te recuerdo que estás hablándole a mi novia. —Remarco la última palabra, le di una mirada de advertencia, estábamos siendo serios en esta conversación, yo quería que él estuviera presente para que se diera cuenta que no le ocultaba las cosas.

—No sirvió de nada que pensarás en eso.

—Sé que es algo que ya no habrá, y lo lamento demasiado, por qué con la única persona que deseaba un futuro era contigo.

Eros parecía que iba a volver a hablar así que puse mi mano sobre su boca silenciandolo.

—Espero que encuentres a alguien que te haga feliz Ethan, te lo mereces.

—Lo única persona que me haría feliz en este mundo eres tu, siempre serás el amor de mi vida

—Eres mi pasado. —Le dije, no pretendía ser una perra pero eso era verdad.

—Si, si. Lo sé. Tu también mereces lo mejor, Ginger.

Asentí.

—Espero que la hagas feliz por qué tienes a una mujer de las buenas, no la hagas sufrir ella merece lo mejor de este mundo. —Le dijo a Eros, él asíntió de inmediato.

—¿Crees que haría algo aproposito para lastimar a la mujer que amó?

—Realmente espero que no, ella vale oro.

—Lo sé. —Eros susurró sobre mi cuello.

Actualidad.

El día de hoy había decido en salir a dar un paseo con Haven, había tenido unos días bastante ocupados y las chicas eran quienes me ayudaban a estar al pendiente de mi hija y les agradecía aquello pero también quería pasar tiempo con mi bebé.

Aliste una maleta con todas las cosas que creía necesaria para hoy, guarde una manta y después camine hasta la cocina, escuchando los pequeños pasos de mi hija atras de mi.

—Ma-má —Me llamó, parecía molesta, la volteé a ver tenía el ceño fruncido y estaba haciendo un puchero. Me reí y me acerque a ella para cargarla se miraba tan tierna así de enojada.

—¿Que le pasa a mi bebé?

—¿Pa-pá? —Me miró con confusión en su pequeño rostro, sus cejas estaban fruncidas.

—¿Eh? —Mire a Haven.

—Pa-pá —Volvió a decir

Sentí como el corazón me latía con fuerza, ella había dicho papá por primera vez y Eros no estaba aquí para escucharla.

—Papi está ocupado, bebé

—Pa-pá, ño. —Negó con su pequeña cabecita mientras metía dos de sus deditos a su boquita.

—¿Que? —Dijo Lyssa entrando a la cocina, mientras intentaba a tomar a Haven de mis brazos, ella negó aferrandose a mi cuello—¿Por qué no quieres que te cargue Haven?, mis brazos son más cómodos que los de tu madre.

—Ño. —Ella le dijo, Lyssa resoplo.

—¿Alucine o ella dijo papá?

—Pa-pá —Ella repitió

—Mierda, ya me imaginé a Eros volviéndose loco con esto.

Alyssa había hablado con Eros y habian arreglado sus diferencias siendo tan amigos como siempre y me alegraba por ellos, no me gustaba saber que la razón de su pelea había sido yo.

—¿Todo bien con Elliot?

Ella se encogió de hombros, Lyssa estaba un poco desanimada ya que hace unos días había tenido una pelea con su novio, me imagino que aún no han podido arreglar nada, su humor sigue igual de triste.

—No hablemos de mi, mejor cuéntame ¿Irán solas?

—Si, día de madre e hija.

Ella sonrió.

—Espero que se diviertan. —Ella se acercó a Haven y quiso besar su mejilla ella negó con su cabecita

—Ño.

—Ño, ño. —Lyssa río besando su mejilla—Puro ño, Haven.

Lyssa se despidió de mi así que tome un poco de fruta y un par de galletas mientras caminaba hasta la habitación, al entrar deje a Haven en la cama mientras buscaba mi móvil y le enviaba mensaje a Eros.

Ginger

Tengo noticias importantes sobre Haven ella a aprendido algo nuevo, adivina que es..

Espere unos minutos y su respuesta llegó de inmediato, sonreí abriendo el chat.

Eros

No soy adivino, gin. Aunque realmente quisiera serlo para saber que es lo que pasa por tu mente.

Rodeé los ojos de inmediato, él era tonto.

Ginger

Haven a dicho papá por primera vez.

Espere que su respuesta llegara pero en vez de eso el móvil comenzó a sonar, indicando una llamada, descolgue la llamada y cerré la maleta, verificando que las cosas estuvieran en el bolso.

—¿Estás bromeando, no?

—Hola, Eros. Estoy muy bien, gracias por preguntar y tu como estás?

—Lo siento, ¿Pero como es eso que mi bebé ha dicho papá por primera vez?

—Eh, si.

—¿Es una broma, verdad gin?

—¿Porque debería de hacerlo?

—Ella a dicho papá cuando no estoy yo para escucharla.

—Bueno, ya la escucharás y te moriras de ternura al escucharla, se escucha bastante tierna, al parecer está molesta por qué papá no está aquí, me ha estado preguntando por ti.

—Pasámela. —Pidió.

Sonreí y me acerque a la cama donde Haven jugaba con una muñeca, puse la llamada en altavoz.

—Ella ya te puede escuchar.

—Hola la bebé hermosa de papá

Haven volteo a todos lados buscando de dónde venía la voz, sonreí nuevamente ella era adorable.

—¿Pa-pá?

Sus grandes ojos de color avellana buscaban por todas partes.

—De aquí viene la voz, bebé.

—Pa-pá —Repitió.

—Mierda, pensé que al principio escuché mal, pero ella acaba de llamarme papá. —Me dijo como si yo no me hubiese dado cuenta de eso, me reí con ganas.

—Si, ya me había dado cuenta de eso.

—¿Puedo ir a verlas?

—Iremos a un día de campo, puedes unirte a nosotras.

—Por mi estaría perfecto, solo mándame la ubicación.

—Te mando los datos en unos minutos, nos vemos, Eros.

—Nos vemos, Gin, nos vemos bebé de papá.

Colgué la llamada y mire que Haven hacía un puchero.

—¿Que pasa, bebé? —Me acerque y la cargue, ella comenzó a llorar con fuerza, se aferró a mi cuello y confusa la aleje un poco de mi para revisarla. ¿Y si se lastimo, o peor aún y si le pico algo?

Revise detenidamente su pequeño cuerpo, todo estaba bien.

—¿Porque lloras, mi amor?

—Pa-pá. —Balbuceó.

—Ahora verás a papá, bebé.

Bañe a Haven y la arregle, sus rizos estaban peinados en dos coletas así como tenían moñitos de florecitas, Haven miraba atentamente sus pequeños converse mientras miraba como se movían sus pequeños piecitos.

Me arregle con rapidez no quería que se nos hiciera demasiado tarde para el picnic.

El móvil comenzó a sonar nuevamente con otra llamada de Eros.

—¿Si?

—¿Paso por ustedes?

—Nos iremos por nuestra parte.

—Casualmente he llegado a su apartamento creo que pueden venirse conmigo, no puedo esperar más tiempo para verlas.

Me reí

—Ahora voy para poder abrir.

—Gracias, gin.

Deje a Haven sentada en la cama mientras caminaba hasta la puerta y abría, Eros sonrió viéndome, me entrego un ramo de margaritas y traía un ramo pequeño de lirios.

—Te miras preciosa.

—No tanto —Sonreí—Venga, te llevaré con Haven

—Si por favor, quiero ver a mi bebé.

Caminamos hasta la habitación, Haven seguía jugando con su muñeca.

—Bebé. —Él la llamo, ella alzó sus ojitos de repente y al mirar a Eros comenzó a querer bajarse de la cama.

—Pa-pá. —Lo llamó, Eros corrió hasta ella y la cargo, porque parecía que podía caerse de la cama.

—Por dios, que bonito se escucha que mi hija me diga papá. —Beso la frente de Haven, noté que sus ojos se habían cristalizado y trago gruso como si estuviera reprimiendo las lagrimas Haven se río abrazandolo.—Mira bebé, papá te ha traído tus flores favoritas.

Eros le entrego el ramo pero ella no le tomo mucha importancia le importaba más estar en los brazos de su padre.

—Bueno, podemos irnos. —Le dije, mientras tomaba el bolso con todo lo que había preparado.

—Claro, después de ti. —Eros se hizo a un lado para que pasara.

Al salir del apartamento caminamos hasta su auto, me entrego a Haven mientras el comenzaba a conducir, después de unos minutos ya estábamos enfrente del parque al que habíamos decidido venir.

Acomodamos las mantas y la canasta con comida, Haven estaba sentada en la manta mientras golpeaba una botella de agua contra el césped, ella daba unos pequeños gritos emocionada y estaba riendo.

Observé a Eros quien la miraba con una gran sonrisa en la cara, nuestra hija era espectacular.

Éramos una familia, aunque Eros y yo no estuviéramos juntos, lo éramos por qué teníamos en común a esta niña que ambos amabamos con nuestra vida entera.

—Esto debimos de ser desde un principio. —Eros susurró en mi oído, lo mire fijamente.

—¿De que hablas?

—Desde el principe debimos ser una familia, soy feliz con ustedes, ustedes son mi todo Ginger.

❄️❄️❄️

Holaa, holaa. ¿Como están? Espero que bien.

Capítulo tarde pero seguro.

Una pregunta para conocerlos mejor. ¿Libro favorito y persona favorito?

Empiezo yo, creo que mi libro favorito es Prohibido enamorarse y Garret es mi personaje favorito.

Es que tengo tantos libros favoritos que siento que si escojo a uno ya los estoy traicionado, pero bueno..

Espero que les guste, denle amor y dejen sus opiniones sobre el capítulo.

Lxs quiero, besos.❤️