18

Meryem.

La semana pasó rápido, algo monótona y estaba bastante cansada. Bebía café mientras miraba cómo Henry traía los periódicos para sus comensales.

-¡Al fin es viernes!-dijo entusiasmado.

-¿No quieres ir por mí a trabajar?-dije con sueño.

-¿Y soportar a Totemo? No,gracias, muchacha, sólo tu puedes-me reí.

-Vamos, Henry y yo atiendo aquí-le guiñé el ojo

-Si quieres renunciar a Totemo hazlo, sabes que aquí siempre tendrás un cupo, además, me tienes muy solo muchacha, ya no vienes a cenar conmigo y Cher

-¿Sigues con Cher?-asintió-impresionante

-¿Qué quieres decir con eso?

-Después de Nicoletta pensé que no durarías tanto

-Nicoletta fue mi gran amor, Mer, pero ya me sentía bastante solo y Cher es genial-dijo con el suspiro de quien se comienza a enamorar.

-Vas en serio esta vez entonces ¡Al fin! Y no con cualquier mujerzuela, te felicito Henry-el rio

-Niña falta de respeto, deberías respetar a tus mayores, ¿Cómo el señor Arslan te aguanta?

-Es mi padre, tiene que hacerlo

-Pobre

Reí y le pagué el cafe, el sándwich de queso con orégano lo dejaría para almorzar, acomodé mi chaqueta de jeans y de forma resignada me dirigí al consultorio, en los sucesos del día Fer se mostraba cariñoso como siempre, pero algo en ello no se sentía correcto, coqueteaba con el venezolano cuando el otro día me encontraba en quién sabe qué con el británico, habían chicas a las que eso les iba y funcionaba, pero no para mí, ¿cómo lo hacían? De todos modos, Fer lo notó y no insistió, cosa que agradecí. Tampoco ofreció en llevarme, por lo que tuve que tomar el autobús a casa.

Una vez en el departamento lo primero que hice fue tirarme en la cama, vaya había sido un día pesado, y mañana lo sería aún más, hace mucho tiempo que no pasaba todo un día con mis padres, y peor, aguantar a mi madre casi por dos días. Esperaba que la presencia de Bruce la ablandara un poco, papá tenía razón, ella tenía una incontrolable necesidad de caer bien a todo el mundo (excepto a su hija,con su hija era una real perra), por lo que de inmediato haría lo posible por ser su amiga.

Tocaron la puerta, y en cuanto abrí supe que había invocado al gringo, todo enojo y celos que sentía se había esfumado en cuanto lo vi ante mi puerta con uno de sus pijamas.

-Entonces... ¿A qué hora es nuestra cita mañana?- apoyé mi mano en el marco de la puerta y rodé los ojos.

-Ni pienses que es una cita, Hetch

-Bueno, ¿y ni si quiera me dejas pasar? Tú entras a mi departamento cuando se te da la gana y a mí me dejas afuera como una niña que vende galletas- reí, y moví mi brazo para dejarle pasar-Por cierto- agregó una vez dentro- ¿puedo llevar a Snake?

-Claro, tendrá mucho para correr, y tenemos que irnos donde mis padres por la mañana, dijeron a las 09:30, por lo que deberíamos ir saliendo a las 08:40-

-Vaya, ¿ya todo calculado?-

-No quieres llegar tarde con mi madre

-¿Debería preocuparme?-

-Nah, yo debería preocuparme- Bruce levantó una ceja, pero no dijo nada, si bien no sabía nada de la fatídica relación con mi madre pronto lo descubriría.

-Muy bien, ¿debería llevar algo?, ¿Un traje de baño, quizás?-

-De hecho, hay un lago, así que si quieres puedes-

-Te gustaría, nos vemos mañana, chica árbol- me dio un beso en la mejilla que sentí hasta que lo sentí entrar a su departamento, Dios.

Definitivamente si había creído que hoy fue un día agotador, mañana lo sería mil veces más. Tan pronto como se fue mi vecino me puse mi pijama y me volví a tirar en la cama, esta vez quedando dormida al segundo en que toqué la almohada.

-¡MERYEM, MERYEM! - Unas manos me sacudieron por los hombros despertándome de mi sueño en Hollywood, provocando que casi me cayera de la cama.

-QUÉ, QUÉ, QUÉ, ¡¿QUÉ TE PASA, BRUCE?!, ¿¡CÓMO ENTRASTE A MI CASA!? SALE DE AQUÍ PERVERTIDO

-¡SON LAS 08:20!

-¿¡QUÉ!? Me quedé dormida, por la mierda

-No contestabas y he estado tratando por una hora abrir la puerta hasta que mis talentos manuales lo lograron, por cierto, lindo pijama de Hello Kitty

-YA SALE DE ACÁ Y DÉJAME VESTIRME- lo empujé hasta la salida y corrí a la velocidad de la luz a bañarme y luego al armario a colocarme lo que encontraba, por suerte, había sido precavida y había arreglado mi bolso antes de ayer; comería algo donde mis padres.

En el living un muy divertido Bruce se encontraba acostado en el sillón hojeando un libro que tenía en el estante.

-Así que... ¿Las 50 Sombras de Grey? Nunca te creí una de esas chicas- me guiñó un ojo.

-¡Deja eso ahí y corre que vamos atrasados!-

-¿Por qué me retas? Eres tú quien se ha quedado dormida

Tiré de Bruce con mi bolso en el hombro y ni si quiera nos tomamos la molestía de esperar el lento ascensor, bajamos por las escaleras directamente. Ambos estábamos corriendo y decidimos de llamar un Uber, la opción más rápida, así que salimos fuera del edificio para esperarlo.

-¿Meryem?- dijo una voz conocida detrás de mí.

-¿Fer?, ¿Qué haces aquí?- no respondió en seguida, en cambio, se dedicaba a cambiar su mirada de mí a Bruce, con los ojos entrecerrados y claramente despreciando a mi vecino.

-Ayer parecías cansada... te venía a invitar a desayunar, supongo que tienes otros planes...- su mirada ahora se encontraba exclusivamente en Hetch, con quien se encontraba haciendo un concurso de miradas, podía jurar en que ninguno había pestañeado por los pasados dos minutos.

-Lo siento, será para otro día...- estaba a punto de explicarle a dónde me dirigía y que no era lo que estaba pensando, pero me corregí en que no debía darle explicaciones, ¿o sí?

-Sí... supongo, bueno, adiós- no le importó que tuviese un gran bolso colgado a mi hombro y se acercó para darme un gran abrazo del que no me podía soltar, de manera que quedaba frente a frente con Bruce, haciendo imposible ver sus caras.

Levantó el brazo para darle la mano al británico.

-Un gusto....- dijo mientras le apretaba la mano más de lo necesario.

-Igualmente- repitió Hetch, estaba claro que no había sido un gusto para ninguno de los dos.

Fer parecía querer decir algo más, pero Bruce lo interrumpió diciendo que el Uber había llegado, por lo que sólo asintió y se fue en la dirección contraria, Dios, ¿pudo haber sido más incómodo? Hetch tomó mi bolso y los colocó en la maletera para luego subir al auto, todo sin parar de reír.

-¿Por qué te ríes?

-Ahh, nada, me agrada conocer amigos tuyos- dijo antes de colocar su brazo alrededor de mis hombros, lo miré raro, pero no dije nada, en cambio, disfruté el camino a casa de mis padres de esa forma.


.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
¡Nuevo capítulo!  ❤ Gracias por votar y comentar el capítulo anterior ❤ 

Capítulo editado y co-creado por SmileWithHoran

sigan a @finallyfreenovela para material exclusivo

RECOMIENDO TRES MARAVILLOSAS HISTORIAS

⏩ ZERO GRAVITY de Sayakatrenzo

⏩ No engañes a tu corazón de Laura Kanester

⏩ Por siempre jamás de GeeMoon

EL EP DE LIAM PAYNE ES ARTE PURO AYUDAAAAAA

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top