La mirada de Hyunjin era de puro estupor. La noticio lo tomó por sorpresa y su lento cerebro quería procesar la información.

Te fui infiel.

Esas palabras le retumbaron en los oídos, una y otra vez cual si de una tortura se tratase. Y empezó a volverse loco por ello. La incomprensión era motor de su molestia e indignación.

- ¿Qué acabas de decir? -gruñó feroz como un animal.

Felix tembló temeroso. Hyunjin no era un hombre irracional, pero obviamente estaría disgustado al saber que su novio estuvo..., con otro hombre. Lo que Felix esperaba era que no le preguntase por el nombre de su amante o estarían en serios problemas. Hwang se sentiría gravemente ofendido de saber que fue con Bang Chan el malvado motociclista con quien se suscitó la infidelidad.

- ... Te engañé -murmuró bajo.

- ¿Por qué demonios hiciste eso? -farfulló Hyunjin-. He sido un buen novio y...

- Sólo pasó. No es una excusa. De hecho, no tengo una y sólo diré que lo lamento.

Hyunjin se puso en pie y con desesperación caminó por la sala de un lado a otro, dando pisotones que hacían retumbar el suelo. Interiormente, su corazón dolía por la traición, pero no era desgarrador, no se partía, ni sentía estarse muriendo por ello. Se dijo a sí mismo insensible, pero su mente hizo el supremo esfuerzo por entender su carencia de dolor y sentimientos. Ya no amaba a Felix.

Esa idea venía rondando su mente desde hace tiempo y seguramente el jovencito lo notó, no que quisiese justificar un acto tan vil como una infidelidad. Su amor empezó curiosamente forzado porque él sólo quería follar con Felix cuando lo conoció en el club; sin embargo, el muchacho fue altanero y parecía estar completamente fuera de su liga, y después se propuso conquistarlo, totalmente cautivado por el misterio que se ocultaba en esos ojos avellana tan bonitos.

Lamentablemente, desde hace un par de semanas, casi un mes y medio o tal vez más, sentía que su relación no era la misma, algo faltaba o algo se perdió con el tiempo. Ahora sabía cuál era la pieza extraviada: el amor. Lo quería, innegablemente, pero sólo como un amigo y no podía mezclar sus sentimientos y pretender sostener una farsa. Eso resolvía el asunto de su insensibilidad, pero aún no podía digerir la idea de ser traicionado.

- Ambos sabemos lo que sucedió, ¿no es así? -increpó Hyunjin una vez logró quedarse quieto en un solo lugar.

- Se acabó el amor, pero aún eres un gran amigo y no merecías que yo te mintiera.

-... ¿Cuándo sucedió?

- Hace un par de semanas. Esa noche que regresé del club y tu no pudiste ir por mí.

Hyunjin abrió los ojos ampliamente al reparar que su novio lo engañó antes, después o..., durante su sexcall. ¡Demonios! ¿Acaso Felix perdió todo rastro de decencia? Imaginar la situación le causó repelús, la bilis subiendo por su garganta podía ya saborearla.

- Esa noche..., tú y yo...

- No me preguntes cómo pasó porque no podría decírtelo. ¡Dios, lo siento! No quise engañarte -creo-, y eres demasiado importarte para mí como para ocultártelo.

- Si fuese importante para ti no lo habrías hecho en primer lugar, habrías hablando conmigo. Pudimos terminar antes de que me engañaras como una perfecta zorra -masculló Hyunjin, herido.

Felix bajó el rostro y dejó que un par de gruesas lágrimas saliesen de sus ojos. Una zorra. Él mismo admitía que no era más que eso y la visión de sí mismo le avergonzó en demasía. Pasó de ser un joven rico y elitista a una simple zorra que le abrió las piernas al primer sujeto que se cruzó frente a él. Ahora no tenía ni orgullo, ni dignidad y tampoco el cariño de Hyunjin.

- L-lo lamento.

- No quiero escuchar tus disculpas, eso no solucionará nada. -Hyunjim dio un suspiro y se sentó junto a su, ahora, ex novio-. ¿Con quién fue?

- No puedo decírtelo, eso no...

- No voy a golpear al tipo, sólo quiero saber si lo conozco, y si es así saber si es una persona digna de ti.

- Dijiste que soy una zorra.

¿Quién merecería a una zorra?

Hyunjin esbozó una sonrisa avergonzada y respondió:

- Aún si lo eres, para mí sigues siendo un gran chico y..., mereces ser más que un acostón.

- ¿Por qué crees que...?

- Un presentimiento. ¿Y bien?

-Vas a odiarme y...

- Suéltalo. Ya me tranquilicé -mencionó con una sonrisa que ocultaba el disgusto que aún tenía formado en su interior.

- Bang Chan.

-... ¿Ese burdo motociclista?

Un asentimiento con la cabeza fue todo y Hyunjin sintió la ira volver a azotar sus entrañas. ¿Cómo Felix pudo cambiarlo por ese torpe motociclista cuyo intelecto era parecido al de un simio? La ofensa estaba ahí latente, pero trató de calmarse pues de nada le serviría empezar a compararse con ese individuo.

- Sucedió esa noche y luego creí que nunca más lo vería; yo no sabía ni siquiera quién era -dijo y se sintió aún peor pues decir que tuvo relaciones con un desconocido sólo lo ponía en la misma categoría que una prostituta, quizás inferior-. No creí que volvería a verlo y menos en esa carrera.

Entonces la mente de Hyunjin viajó a esa noche, cabe decir que no estuvo pendiente de Felix pues sus cinco sentidos estaban enfocados en ganar la competición, pero recuerda que desde un inicio Felix y Bang Chan parecían conocerse a un nivel particularmente íntimo. Se miraban con complicidad. Bang Chan sostuvo una sonrisa altanera y triunfal que, ahora sabía, no se debió a la competencia, sino a haber tenido a Felix para sí mismo. Estaba vanagloriándose el descarado.

- Creí que todo acabaría ahí y..., luego tú lo retaste a pelear.

- ¿Eso por qué es relevante?

- Porque él me advirtió que acabaría contigo. Dijo que quería bajarte la arrogancia a golpes y no iba a permitir que te enviara al hospital.

- ¿Qué hiciste? -inquirió con un tono de advertencia, suponiendo muy bien lo que pasó después.

- Lo persuadí para que no fuese tan rudo contigo, esa fue la razón por la que saliste vivo y no en un féretro.

- No tenías fe en mí -masculló con amarga ironía.

- ¡Por Dios, Hyunjin! -jadeó Felix-. Nunca en tu vida has estado en una pelea de cuerpo y te enfrentabas a un boxeador que pasa cada noche rompiéndole los huesos a su pobre contrincante. ¿Qué querías que hiciera?

- Nada. Hubiese preferido pasar en el hospital un mes entero a empujarte sin saberlo a que ese imbécil tomase ventaja de ti.

-... No quería verte herido.

- Y agradezco el gesto. Pero debiste pensar en ti y no en mí. Dejaste que se aprovechara de ti.

Aprovechar.

Felix tuvo que admitir que así fue, pero también se sinceró consigo mismo y aceptó que si permitió aquello fue porque él así lo quiso. Pudo negarse, claro. Impedir que Hyunjin peleara diciéndoselo a su hermano mayor, Minho, para que detuviera esa locura. Sin embargo, prefirió el camino más difícil: rogarle a Bang Chan de rodillas y a sabiendas de que el hombre pondría su polla en su boca.

¡Tan tonto!

-... Quizás no.

- ¿Disculpa?, ¿acaso estás enamorado de ese idiota?

Felix no respondió, pero su mero silencio fue ya una respuesta para Hyunjin.

- Estas loco -gruñó Hwang-. Ese hombre te quiere para follarte sobre la superficie más próxima sin importarle lo que tu sientas.

- Lo sé, ¡maldita sea, lo sé! Pero no puedo evitar sentir esto. No estoy enamorado de él. Quizás es sólo un capricho.

- Tu capricho va a costarte muy caro, Lix. Bang Chan no luce como un hombre que jugaría por el amor como por una victoria, y, de ser el caso, tú solo eres un trofeo que ubicará sobre una repisa hasta que te llenes de polvo.

- Voy a alejarme de él. Lo prometo.

- Que la promesa vaya para ti y asegúrate de cumplirla.

-... ¡Dios, Hyunjun! Ni siquiera merezco tu amistad. Ni siquiera pareces molesto y en lugar de gritarme e insultarme, me estás aconsejando.

- Eso hacen los amigos. A pesar de que no seamos ya novios, sigues siendo una persona importante para mí y no permitiré que te dañen.

- You're such a diamond.

Hyunjin sonrió orgulloso y contestó:

- Soy la gema más preciosa en este sucio mundo -bromeó y continuó, esta vez con un tinte más serio en la voz-. Si te enamoras de él, no se lo hagas ver o terminará acabando con todo lo que tienes, Lix. Y si eso sucede, esta vez no me impedirás golpearlo, aunque yo termine en el hospital.

- Te dije que me alejaría de él.

- Sí y aún albergo la esperanza de que así sea, pero conozco muy bien tus debilidades y Bang Chan las tiene todas, por lo que mi esperanza está seriamente opacada por la realidad. Se cuidadoso.

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Espero que les gusteee <3