—Yo...soy tu pesadilla —contestó aquél ser sonriendo con desquicia.

De manera veloz y a la vez repentina mandó a volar a Vincent varios metros con un solo puñetazo, el hexahumano cayó al suelo rodando. Al terminar de rodar Vincent se tocó su frente con su mano derecha para limpiarse la sangre que le salía por el golpe que le había propinado el ser extraño, eso lo hizo enojar, normalmente no permitía que alguien lo hiciera sangrar, no era algo que pasaba seguido.

Aquél ser de piel azul se acercaba a Vincent lentamente, dispuesto a seguir dándole puñetazos, pero no pasó mucho tiempo para que Vincent se levantara inmediatamente y con su súper velocidad apareció en frente de su nuevo enemigo para darle múltiples puñetazos con gran rapidez.

Como era de esperarse el ser de piel azul no se dejaría vencer de su rival, con la parte posterior de sus antebrazos se protegía de los puñetazos de Vincent, se alejó un poco y nuevamente se acercó a Vincent mientras levitaba.

Sus puños chocaban por igual, pero ninguno parecía sentir dolor. Evidentemente Vincent era mucho más rápido, por eso aprovechó y comenzó a atacarlo con más rapidez que nunca.

El extraño ser no aguantó más, ya no podía defenderse de los rápidos y potentes golpes que recibía de Vincent, parecía que iba rendirse en cualquier momento.

Vincent lo tomó del cuello, pensaba matarlo en ese instante para que no molestara más.

—¡Mátame, esa es tu verdadera naturaleza, eres un asesino —exclamó el villano que apareció de la nada— Has matado a tanta gente y que mates a un ser de otro planeta cómo yo no cambiará nada.

El villano trataba de provocarlo.

—¡Ya cállate! —exclamó muy furioso Vincent e inmediatamente lo lanzó hacía el suelo pero al estar en el último piso con la gran fuerza de este, el villano que fue golpeado iba rompiendo fácilmente los pisos menores hasta llegar al primer piso.

Segundos después de su ultimo accionar Vincent comenzó a sentirse mareado y a escuchar voces en su cabeza.

—¡Detente! —gritaba una mujer que solo él podía escuchar— Ese no eres tú, detente— seguía escuchando voces en su cabeza.

La voz de la mujer le parecía muy familiar, hasta que recordó que era la misma voz de la mujer con la que había soñado.

—Sal...de...mi...cabeza —gritaba Vincent mientras se tocaba sus sienes con ambas manos en cada lado.

No podía aguantar las voces en su cabeza, quería dejar de escuchar esas voces de una vez por todas.

—¡Hey!, ¿qué te pasó? —dijo en forma de burla el ser de otro planeta quién acababa de regresar al sitio en dónde se encontraba Vincent y al ver cómo se encontraba decidió golpearlo.

Aprovechó para golpearlo muchas veces, Vincent trató de defenderse pero la voz de la mujer no lo dejaba concentrarse.

El ser de otro mundo le estaba dando una paliza. Le daba puñetazos y patadas que lo mandaban a volar por varios metros y en uno de esos golpes lo mandó afuera del edifico que se en minutos anteriores se estaba incendiando.

Vincent cayó encima de un carro, que aunque quedó destrozado por suerte no tenía a nadie dentro de él.

Las personas que estaban cerca del lugar quedaron asombradas al ver cómo su nuevo "héroe" estaba moribundo sobre el auto.

—¡Ríndete humano! —exclamó el extraterrestre que iba volando hacia Vincent.— No interferirás en mis planes.

Todos se asustaron al ver su apariencia y muchos comenzaron a correr, mientras que otros tomaban fotos.

Un helicóptero de las noticias grababa todo el evento.

—Eso es... témanme humanos —dijo muy feliz de ver cómo la gente corría despavorida—Ya he llegado a su planeta para dominarlo y nada me lo impedirá...ni siquiera aquél que ustedes llaman cómo su "héroe", aunque de héroe no tiene nada—. Decía de forma oratoria y alzaba sus manos al hacerlo.

Vincent a lo lejos podía escucharlo, pero no podía calmar la voz en su cabeza.

Cerró sus ojos.

—¡Déjame en paz! —gritó en su mente.

—Déjame matarlo... —gritó con furia nuevamente en su cabeza.

—No, no te dejaré en paz hasta que no te calmes, sí piensas en matarlo no te dejaré —contestó la voz femenina en su cabeza.

—Déjame matarlo... —gritó nuevamente pero esta vez su grito estaba mezclado con tristeza y desesperación.

—¡Por favor déjame...déjame matarlo! —pedía Vincent entre sollozos.

—¡No! Tu mente no está en calma, cuándo tú estés con calma te dejaré pelear —respondió la mujer lentamente.

Mientras tanto en la realidad los policías habían llegado inmediatamente y apuntaban con sus armas al extraterrestre.

—¿Me apuntan con sus inútiles artefacto, humanos? —preguntó el ser azul mirándome fijamente a cada uno de los doce policías.

—Eso no servirá contra mí... —dijo haciendo un leve silencio al finalizar—¡Eso es inútil! —gritó muy fuerte y por lo tanto provocó que todas las personas a sus alrededores se asustaran.

Una mujer que cargaba a su niño de 8 años cayó sentada y su hijo salió asustado, el extraterrestre se dio cuenta de eso y decido ir por él.

—Veamos... —fue lo que musitó antes de volar e ir por el pequeño.

Estaba cerca del niño, pero un hombre se interpuso en su camino para impedir que atrape al niño.

—¡Deja al niño en paz! —dijo el hombre con seriedad.

—Quítate estúpido humano —mencionó el extraterrestre antes de mandar a volar hacía un carro al hombre que lo enfrentó de un solo golpe.

Las demás personas se apartaron inmediatamente y los bomberos asistieron al hombre el cual quedó desmayado y con sangre en su cabeza.

Cuándo los demás se apartaron los policías pudieron aprovechar para dispararle.

—Eso es inútil...tontos humanos —gritó mientras los policías no dejaban de dispararle, pero las balas no hacían efecto alguno contra él.— ¿Qué no entienden?

Los policías dejaron de disparar al ver la triste realidad.

—¡Salven a mi hijo! No dejen que lo toque... ¡Por favor ayuda! —exclamaba la mujer con gran impotencia debido a que tampoco podía hacer nada contra el extraterrestre.

El ser azul se acercaba más y más al niño, que ya no tenía escapatoria simplemente lloraba muy fuerte.

—Tranquilo humano pequeño, no te haré nada malo...todo lo contrario, conmigo serás un mejor... —decía el alíen de tez azul mientras cada vez estaba mucho más cerca del niño, pero algo lo interrumpió.

—¡Hey "Azulejo feo" deja en paz al niño! —dijo Vincent quién había vuelto en sí y le había lanzado una piedra a la cabeza del temible villano.

Las personas que estaban ahí al ver al héroe nuevamente listo para pelear contra el villano se alegraron y comenzaron a aplaudir.

El niño rio al ver la expresión del villano cuándo fue impactado con la piedra.

—Sí vez, tú lo asustas y yo lo hago reír, esa es la diferencia entre tú y yo..."azulejo feo" —le dijo Vincent sonriendo cuándo el villano volteó a verlo.

—¡Oh! El súper humano más tonto o el héroe más pendejo —dijo el villano fulminando con su mirada a Vincent.— ¿Cómo quieres que te llame?

—Eso no importa ahora... lo que importa es que estoy de vuelta y totalmente dispuesto a acabar contigo —comunicó Vincent sonriendo al final y rápidamente le dio un fuerte puñetazo mandando a volar varios metros al extraterrestre.

Las personas nuevamente aplaudían y ovacionaban a Vincent porque sabían que él era el único que podía vencerlo, aun no estaba confirmado que él era un héroe al cien por cierto pero para vencer al alíen, él era su única esperanza.