xxviii.

luke despertó y no pudo siquiera moverse cuando michael afianzó su agarre gruñendo en su oído. seguro soñaba con su novia.

"mikey, déjame ir." se movió.

"lukey, duerme otro ratito." sacó su labio hacia afuera mientras aún mantenía sus ojos cerrados.

"por favor."

"quiero abrazarte más." balbuceó.

"pero quiero ir al baño." se quejó luke.

"al menos deja que se baje tu erección matutina para que no ensucies nada."

"¿y tú cómo sabes que-"

"crees que tu animada entrepierna no roza con mi cuerpo, ¿verdad?"

"lo siento." dijo con su cara encendida en un rojo intenso.

"tranquilo, bebé." michael sonrió.

"no me llames bebé, así llamas a deara." dijo con fastidio.

"¿celoso?" michael levantó una ceja con diversión.

"sí, es decir, antes de ella yo era tu todo."

"sigues siendo mi todo."

"a otro perro con ese hueso." hizo puchero el rubio mientras cruzaba sus brazos.

"luke." llamó michael. "luke, mírame." pidió. "siempre vas a ser mi todo, sin importar los errores o cuánto te descuide me importas más que nada."

y luke se sintió importante.

-

amén.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top

Tags: