e p í l o g o .

michael recordó el día en el cual descubrieron que deara y halsey eran pareja.

volvió a mirar a luke sorprendido y luke parpadeó un par de veces ante la escena que presenciaban de lejos. deara y halsey tomadas de la mano y hablándose entre susurros con sonrisas cómplices, estaba más que claro que esas dos eran pareja.

"nunca lo esperé." murmuró michael.

"yo tampoco, amor."

el rubor cubrió la cara del mayor cuando luke le besó la mejilla, joder, luke tenía tanto efecto en él.

"vamos a casa, lukey."

casi podía sentir que estaban en ese momento...

pero ya habían pasado cuatro años.

michael recién despertaba y el olor de los tradicionales panqueques que luke preparaba cada día lo embargó. sonrió ligeramente y se estiró en la cama, pudo oír pasos en el pasillo así que se acostó de nuevo y fingió estar dormido. luke abrió la puerta y sonrió cuando michael arrugó su nariz dos veces seguidas, eso hacía cuando fingía dormir.

sin mucho cuidado luke se lanzó sobre él riendo y besó su cuello con amor.

"¡despierta, gatito dormilón!" rió abrazando su cintura.

"¡estoy despierto, estoy despierto!" carcajeó fuertemente cuando los dedos de luke empezaron a moverse por su cintura.

"eres un tonto." besó sus labios brevemente.

"soy tu tonto."

el sonrojo cubrió el rostro de luke y las manitos de michael fueron a sus mejillas, acariciándolas con ternura, prolongando el rubor en ellas.

"vamos a desayunar, mi amor." le dijo luke.

y michael se sintió cayendo una vez más.

luego de haber desayunado vieron televisión un rato, michael aún no decidía qué hacer, se sentía nervioso. luke y él cumplían cuatro años juntos, él quería hacerlo, quería agradecerle todo.

luke estaba en su regazo recostado y geek charming se reproducía en la televisión.

"¿me crees hermosa?" citó luke susurrando.

"sí, ¿no lo cree todo el mundo?"

"a veces creo que nos vemos algo estúpidos citando esta película." admitió luke. "pero es algo nuestro, no es estúpido, es nuestro."

"quizás tú y yo somos estúpidos." michael susurró.

"pero estamos juntos."

"en el fondo."

"caídos. caímos juntos en el mismo suelo."

"nacimos enfermos, los oíste decirlo." recordó cuando sus padres le llamaron.

"nací enfermo, pero me encanta." admitió luke.

"recuerdo su absurda respuesta, seis meses después." rió con ironía. "irás al infierno."

"el único cielo al que seré enviado..."

"será cuando esté solo contigo." completó michael.

"luke, ¿crees en la palabra siempre?"

"sí." dijo suavemente. "¿crees tú?"

michael sonrió levantándose y corriendo a la habitación. con timidez puso entre los dedos de luke la carta cuando volvió al sofá y miró detalladamente al rubio leerla.

"hola, amor.

no sé qué punto tiene escribir esto, creo que son cosas que no sabría decir sin enredarte. creo en un siempre.

creo en un siempre junto a ti y no sé cuándo me volví tan cursi. creo en un siempre a tu lado y haciendo nuestra vida juntos. me puedo sentar y pensar en ti y toda una vida me envuelve y se apodera de mi mente.

esto será corto, no sabría alargar tanto esto.

te amo, joder, te amo.

amo dormir a tu lado y llenarme de tu olor, amo tus brazos en mi cintura apretándome a tu lado, amo tu ronca voz pronunciando mi nombre cada día, amo tus azules ojos mirándome fijamente. amo todo de ti, te amo.

y no me importa que mis padres estén decepcionados, que toda su iglesia y cada otra existente diga que iremos al infierno. el infierno está bien si estamos tú y yo. el infierno es el fondo, ya caímos al fondo. y no puedo decir que quiera estar en algún otro sitio, joder, tú eres mi vida entera.

caí por ti. y amo eso.

porque nací enfermo y me encanta. nací para ti, estamos enfermos y hemos oído a la iglesia decirlo. ¿a quién le importa?

a mí sólo me importa el suelo donde estamos, el infierno que compartimos.

sólo me importa estar contigo, amor.

te amo;

mikey."

la sonrisa en los labios de luke delataba su felicidad. luke estaba feliz, estaba enamorado y amaba a michael. el simple hecho de saber que michael se imaginaba un siempre con él era suficiente.

"te amo." oyó decir a michael, y vio como su labio inferior temblaba en nerviosismo. "y te amo mucho, y sé que cometeré muchos errores, y sé que quizás voy muy lejos imaginándome una vida contigo. pero finalmente he sido feliz estos últimos años y quiero seguir siéndolo porque jamás me sentí así. y-"

"ya basta, amor." rió suavemente. "cállate y bésame."

"pero-"

"¡cállate!" rió más fuerte.

luke se abalanzó hacia michael con una sonrisa pegada en su cara y besó sus mejillas, sus párpados, su barbilla, su frente, su nariz y finalmente sus labios.

"te amo, imbécil." luke carcajeó besando sus labios una vez más.

"y yo a ti, estúpido." respondió el mayor sonriendo. "te amo."

michael atrapó la mano de luke y entrelazó sus dedos mientras luke seguía haciéndole cariños.

y ahí enredados en el sofá sintieron algo muy fuerte, algo más fuerte que todo lo que han llegado a sentir.

se sintieron emocionados, nerviosos, asustados, felices, angustiados, ansiosos, en casa.

ahí, abrazándose, besándose descuidadamente. ahí, en el fondo de un abismo metafórico. ahí, en casa.

ahí, en ese momento exacto de tiempo si sintieron varados en medio de un siempre.

un siempre donde ellos se sentían enamorados.

porque ellos estaban enamorados.

-

hasta aquí llegamos.