Capítulo 2
Ansiosa, volví a mirar el reloj, y más me exasperé, ya que Joey debía de haber llegado y aún no llegaba.
Pensé en llamarle, pero cambié rápido de opinión.
<< Quizás, debe de estar con los tramites en la aduana y todo eso. >>
<< Mi amor. >>
<< Solo quiero verte. >>
Estaba tan emocionada y feliz, que sentía, que si lo veía, sería como mi sueño hecho realidad, tal como cuando era una de sus fans, que lo iba a esperar al aeropuerto y después lo iba a ver al hotel. Cada vez que lo visitaba me sentía inmensamente feliz y realizada. Ahora me ocurría exactamente lo mismo.
Sonreí con anhelos y recordé el pastel que le había preparado. Solo me faltaba decorarlo y estaría listo.
Fui a mirarlo al horno y el corazón se me agitó de alegría.
<< Oh, mi Joey. >>
<< Espero que te guste. >>
Para calmarme, tomé el suéter, que le estaba tejiendo, como regalo de cumpleaños, y seguí tejiéndolo, con mucho cariño y amor.
Era de su color preferido, azul. Había escogido la tela y el color pensando en él.
Sentada en el sofá, junto a la ventana, tejía sus botones e imaginé su sonrisa, cuando lo viera terminado. Me derretí al ver aquella tierna sonrisa suya y me volví loca.
<< Amor mío. >>
Agotado, sacó las llaves de nuestra casa y entró...
Caminó por nuestro largo jardín, el que ya había vuelto a florecer y sonrió enamorado.
<< Por fin he regresado, mi vida. >>
<< Mi amada y hermosa, Stephanie. >>
El corazón se le disparó de dicha. Había olvidado el incidente en el avión y deseó con fervor el verme cuanto antes.
Entró a nuestra casa y vio que el living y el sofá estaban vacios y sonrió con ternura.
_ Estás en nuestro dormitorio...
Subió los peldaños de la escalera y se dirigió a nuestro dormitorio...
Concentrada en los botones de su suéter, lo tenía casi terminado, y de pronto, él entró y me miró perdidamente enamorado.
El corazón me brincó de felicidad y de emoción. Lo miré embelesada, y a la vez sorprendida. Mi Joey por fin había regresado conmigo y estaba de pie, frente a mí, más solo quise correr a sus brazos, pero las piernas no me respondían.
Él me sonrió con destellos.
_ Hola, mi amor.
_ Mi Joey...
Solo alcancé a decirle, y no pude más, y me desmayé ante él. Joey alcanzó a sostenerme y me cargó con cariño en sus brazos.
_ Oh, Dios, niña mía – me miró intenso en sus brazos y me llevó a nuestra cama.
Me recostó con suavidad y yo aún desmayada, él me miró perdidamente enamorado y acarició mi rostro para despertarme.
Estaba tan feliz y agradecido de haber vuelto a mi lado.
_ Cariño, Stephanie. Vamos, mi vida, despierta.
_...
_ Mi vida – tomó mi mano. – Stephanie, no me hagas esto. Solo soy yo, mi vida.
Nervioso al yo no reaccionar, suspiró en mis labios, y sin contenerse más, comenzó a besarme, como tanto lo había deseado.
Sentí su apasionado beso y le correspondí con idilio.
_ Mi Joey. – le susurré y él acarició mi mejilla y me sonrió.
_ Si mi vida. Aquí estoy. Por fin he regresado. – me emocioné.
_ Mi Joey. – lo abrasé con toda la fuerza del mundo. - Te extrañé tanto, demasiado.
Acarició mi cabello.
_ Yo también te extrañé, mi hermosa. No sabes cuánto – lo miré con lágrimas en los ojos.
_ Mi Joey. – secó mis lágrimas y me sonrió.
_ Tenía tantas ganas de volver y tenerte entre mis brazos. Solo besarte y amarte. – le sonreí y acaricié con afán su mejilla.
_ Mi amado, Joey. Feliz cumpleaños. – sonrió dichoso, pues había olvidado que era su cumpleaños, lo que lo llenó todavía más de felicidad.
Volví a abrazarlo fuerte y él se volvió loco. Amó que yo lo abrazará y me rodeó con afán y ternura en sus brazos. Apoyó su cabeza junto a la mía y colocó sus manos en mi cintura.
_ Gracias mi vida. Me haces inmensamente feliz. Te amo tanto.
_ Y yo te amo a ti, mi Joey. Siempre.
Nos miramos con complicidad, y anhelos, y nos besamos largamente.
Él sin soltarme, me volvió a recostar, sin dejar de besarme.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top