Capítulo 8

𝓔𝓵 𝓼𝓲𝓰𝓾𝓲𝓮𝓷𝓽𝓮 𝓬𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 𝓬𝓸𝓷𝓽𝓲𝓮𝓷𝓮 𝓬𝓸𝓷𝓽𝓮𝓷𝓲𝓭𝓸 𝓯𝓾𝓮𝓻𝓽𝓮.




Hadarah observó su reflejo en el espejo antes de salir, al ver que se miraba para nada extravagante salió rumbo hacia el mercado, ahí se reuniría con Jubelian.

—¿Esta segura que no quiere que me quede? -dijo Moon ayudándola a bajar, Hadarah soltó una sonrisa.

—No, comprare un regalo con Jubelian y luego iré a su casa a comer - Moon asintió algo descontento y luego se fue junto al chófer, Hadarah se en camino hacia el punto de encuentro y su amiga ya estaba ahí como una enorme sonrisa.

—Dara -dijo la joven, Hadarah la abrazo como si fueran antiguas conocidas y miro a sus acompañantes.

—Es bueno verte hoy -le sonrió —¿Tienes en mente algo ya? - Jubelian asintió.

—¿Tú?

—Aún sigo pensando en ello. -Jubelian asintió y comenzaron a caminar.










Las horas pasaron y ambas jóvenes ya tenían casi listo todo, en un momento Hadarah perdió al grupo de guardias y a la joven Princesa, era tanta la gente que había en ese entonces que no logro encontrarlos.

—¿Irina? -susurro viendo a todos lados, la gente la empezó a empujar de un lado a otro debido a que se había quedado en media parada quieta, pronto el día estaba acabando y el terror la invadió. —¿Jubelian? ¿Geraldine? -miro a todos lados—¿En donde están?

—Pero vean que tenemos aquí  - sin si quiera poder reaccionar había sido llevada a un callejón, las personas siguieron pasando ignorando lo que le ocurría a la joven dama. —Luego de jugar con ella podemos venderla.

—Nos darán mucho dinero -dijo otro de los bandidos, Hadarah comenzó a soltar lágrimas sin parar — Trae ropas finas y mira esa piel - aquel hombre se acercó a oler su cuello pero Hadarah le rasguño el rostro.

Ambos hombres la tiraron al suelo y comenzaron a desgarrar sus ropas entre golpes y gritos Hadarah sintió aquel sería su último día de vida.

—¿De nuevo moriré así Irina? ¡Dime! ¿Acaso lo merezco?.

Todos sus pensamientos se fueron directo a todas sus vidas pasadas, había vivido tanto y lo había echo de forma inocente y tonta, no había matado a nadie, golpeado o insultado, había tratado de ser una persona justa y correcta. Y justo en aquel momento seria abusada y vendida, incluso podía morir y nadie reconocería su cuerpo.

—¿Lo merezco a caso? -sus lágrimas siguieron saliendo y sintió las manos de aquellos hombre en su cuerpo, cuando pensó que todo se iba a poner peor no sintió nada, aquellas asquerosas manos ya no las sentía en su cuerpo y solo las lágrimas cayendo como cascadas sin parar se sentían.

—Por favor dime que estas bien -solo escucho aquella voz y se dejó llevar por la inconsciencia, el hombre gruñó nervioso, los bandidos habían sido neutralizado y serían llevados para ser juzgados mientras que la joven iba en brazos del héroe del imperio.






Hadarah abrió sus ojos al sentir el movimiento, la cara de Regis fue lo primero que vio, este la tenía abrazada con fuerza y parecía no querer soltarla.

—Todo estará bien -dijo el hombre — no la tocaron más allá  -dijo nuevamente, unos llanto apenas audibles se escuchaban, era Jubelian la cual sollozaba con culpa. — Debes de ser fuerte  por ella.

—Es mi culpa -sollozo.

—No lo es -susurro Hadarah y ambos la vieron —Me separe sin querer -las lágrimas no tardaron en salir.

Aveces odiaba ser así de débil y llorona pero era inevitable, lloraba cada que podía y jamás lo negaba, los brazos de Regis la sentaron y dejó que Jubelian se lanzara a sus brazos.

—Lo siento -soltó Hadarah en un sollozo —Les he traído problemas de nuevo.

—No te preocupes, no fue tu culpa -dijo Regis —No lo fue.

Hadarah lo miro y negó, Regis solo poso su mano en su cabeza a modo de consuelo, Hadarah dejó caer más lagrimas y volvió a dormirse.















Aquella sensación de miles de manos tocando su cuerpo fue lo que la hizo levantarse, para su sorpresa una figura de gran tamaño estaba a su lado, al aclararse su vista lo vio a él ahi, jamás pensó que aquello fuera posible.

Regis estaba dormido en una silla al lado de su cama, una de sus manos estaba tomando la suya y dormía plácidamente, aunque Hadarah sabía que estaba ahí a petición de Jubelian quiso creer que era por ella.

—Despertaste -dijo el acomodando su postura —¿Cómo sigues? Tus padres están por venir.

—Creo que estoy bien...

—¿Crees? -ella asintió con una falsa sonrisa, el negó en reproche.

—Tuviste pesadillas en estas horas de sueño -declaró — no dejabas de llorar y de pedir que no te tocaran - ella suspiro y acepto el agua que el le dio — Siento mucho que esto sucediera estando bajo mi protección.

—No es su culpa... es mía, yo me aleje -susurra —Les he traído problemas, tal vez no debería de ser amiga de su hija, le haré daño.

—No digas eso, Jubelian te aprecia mucho, si te alejas la harás sufrir -ella lo miro —Solo tendremos más cuidado a la próxima.

—Si -asintió y él le paso una bandeja.

—Come, iré a recibir a tus padres, Jubelian vendrá luego -Hadarah asintió, sabía que lo ocurrido traería problemas y tenía sus sospechas de quien le había hecho aquello.




Irina había llegado lejos con aquel truco, podía haber salido lastimada por sus estúpidos juegos y no había considerado el trauma que le traería aquello.

—No fui yo - declaró la diosa —Si te tire a la fuente -la miro — Pero esto jamás, esto es algo que no se le desea a nadie Hadarah.

—¿Entonces quien fue? ¿Quién fue capaz Irina? -espeto enfadada, Irina soltó el aire que retenía y la miro.

—Recuerda que hay dioses que quieren que te vayas directamente al olvido, así que averiguare quien fue y le daré su castigo, esta vez se pasaron con esto.

—¿Me lo harán siempre acaso? ¿Entonces por que te permitieron traerme de regreso?


—No lo se Hadarah, no se que planean ahora, iré a arreglar esto con el consejo ahora, evita salir o cruzarte con gente indebida, estarás en peligro mientras esto no esté arreglado.

—Son una molestia  -suspiro la joven— y yo fui una molestia para ellos.

—Te aman y aceptaron ayudarte, así que solo recuperate por favor -sin decir más la diosa salió y Hadarah quedó con miles de cosas que decirle.

Al final no todos los dioses de ese mundo habían sido buenos con ella.















































Actualice más antes que nunca jeje

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