Capítulo 28
Una invitación para celebrar el compromiso de Beatrice y Mikhail llegó días después, con pesadez y molestia Hadarah se preparo, sabía que el emperador dejaría salir su malicia aquel día, no quería ni si quiera ver su horrible rostro.
—¿Estas lista? - Hadarah escucho a Jubelian desde la puerta, con una última mirada al reflejo en su espejo salió, ahí se encontró a una triste Jubelian.
—Deja de pensar en eso, Max te dijo que la protegería - Jubelian asintió y tomo su mano, a la salida la esperaban Regis y Max, una vez todos en el carruaje partieron hacía el palacio imperial.
Era una fiesta lujosa por donde se le viera, Hadarah camino hacia su lugar designado junto a su esposo, a su lado los nobles murmurando algunas cosas sobre ellos, pero decidió ignorarlos.
—Vamos a presentar nuestros respetos - Hadarah asintió y se acercó junto a su esposo y Jubelian a donde estaban el emperador y la emperatriz.
—Saludos al sol del imperio - la voz de los tres sonó al mismo tiempo, el emperador sonrió brevemente, aquella sonrisa le causó escalofríos a Hadarah.
—Que hermosa familia Duque - fue la emperatriz la que hablo — digna de un retrato.
—La emperatriz tiene razón, pero su difunta esposa era una muñeca realmente - Hadarah apretó las faldas de su vestido — No es por compararlas, pero Amelia Ploen era una mujer elegante y digna, entiendo muy bien porque al Duque le había gustado tanto, que envidia realmente, pero usted no se queda atrás Duquesa, es hermosa... un tanto más sencilla y menos elegante - Hadarah palidecio brevemente y bajo su cabeza, la estaban humillando y nadie decía nada.
—Oh su majestad, la Duquesa, mi hermana es realmente hermosa - la voz de Callisto sonó detrás de ella, sintió alivio — ¿No lo cree Duque?
—No tiene comparación majestad - dijo Regis, el emperador sonrió, había logrado su cometido, Jubelian tomó la mano de Hadarah y la llevó de regreso a su lugar, la sala no tardo en estallar con chismes.
—No le prestes atención hija - su madre le miró apenada, se notaba la molestia en los ojos de sus padres y hermanos.
—Lo se... - le dio una corta sonrisa y miró de reojo a Regis, ni si quiera le había tomado la mano para demostrar que estaba con ella — Lo se muy bien -susurro bajo.
—Realmente tiene razón su majestad... Lady Amelia era realmente hermosa, no era una niña, era muy madura para su edad.
—Hacia una pareja perfecta con el Duque - las voces se escuchaban fuerte, nadie guardaba las apariencias en aquel momento.
—La nueva Duquesa se ve que no tiene nada especial, ese cabello blanco opaco y esos ojos son simples, un morado nada especial - Hadarah suspiro despacio y se disculpo, necesitaba aire, pero más que eso necesitaba llorar a solas.
—Mi padre es un imbecil - aquella voz la hizo temblar — Eres más hermosa que una muerta.
—No diga eso príncipe... debería de respetar a los muertos - Eros soltó una breve risa.
—Esta muerta, no vendrá a regañarme -ella rodó los ojos —Yo siempre estaré aquí para usted, es hermosa e inteligente, el Duque vivira en ese pasado siempre, llorando a una muerta... tu estas viva y no mereces estar atada a un perdedor. - El tomo sus manos. —El Duque jamás olvidará a su esposa, no te amara nunca.
—Suelteme alteza - Hadarah trato de safarce, Eros forcejeo con ella y apretó sus manos.
—Oh Duquesa - Eros soltó sus manos rápidamente, Amelia había aparecido por arte de magia— la estuve buscando, su alteza -saludo de forma fría.
—Me retiro -dijo el alejándose, Hadarah se dejo caer a una pequeña banca en donde soltó todo el aire que retenía.
—¿Le hizo daño? - Hadarah negó — quería saludarla... aun somos amigas.
—Lo somos - le dio una falsa sonrisa —Me alegra verte, háblame como siempre.
—No te sientas mal por lo que dijo su majestad... para mi eres muy genial - Hadarah asintió, se sentía muy mal, pero solo sonrió para calmar el tema.
—No me afecta, solo necesitaba aire y apareció esa cosa - Amelia soltó a reír —¿Tú estás bien?
—Lo estoy, solo quería hablarte.
—Deberías de ir a verme... aveces me aburro sola, Jubelian tiene cosas que hacer siempre y no hay con quien hablar - Amelia asintió, aveces le daban escalofríos llamar a su amiga por su nombre, llevaba el nombre de la difunta esposa de su ahora esposo.
—Siempre -sonrió ella —Bien, ¿regresamos? - Hadarah se puso de pié y regreso junto a ella.
Una vez llegó al lado de su familia la mirada triste de Jubelian le recibió, Beatrice estaba oficialmente comprometida con Mikhail.
—¿Nos vamos? - dijo Regis, no tenía expresión alguna, ambas jóvenes asintieron y le siguieron en silencio, no se había despedido de su familia para no escuchar más sobre el tema de la madre de Jubelian.
—Sube - más que un pedido fue una orden, Hadarah subió en silencio y se sentó algo apartada de ambos, cuando recostó su cabeza en el marco de la ventana su mente quedó en blanco, se había dormido.
—Papá... - Jubelian llamo la atención del duque —Se durmió.
—No menciones nada de lo ocurrido hoy -la tomó entre sus brazos y bajo del carruaje, Jubelian asintió en silencio, incluso para ella todo había sido pesado y de mal gusto.
Días después.
Hadarah se removió bruscamente en la cama, sentía su respiración pesada y su pecho dolía, las pesadillas seguían cada vez peores.
Desde lo ocurrido con el emperador cada noche tenía una pesadilla diferente, desde morir nuevamente, hasta el bebé que perdió en su primera vida, todas ellas eran desgarradoras y desgastantes, sentía que poco a poco se consumía por aquellas simples palabras.
—No hay comparación con Amelia, Lady Amelia era hermosa, elegante y perfecta.
Odiaba negar que aquello le había molestado, no quería ser comparada nunca, tampoco quería robarle el lugar a nadie.
Aquella pesadilla era diferente, parecía más una visión, una en donde Regis estaba llevándole flores a la tumba de su esposa.
—Te extraño Amelia... cada día y cada noche - quiso gritar pero su garganta parecía haberse cerrado, quiso retroceder pero su cuerpo no respondía y simplemente se quedó observando tal escena.
Repentinamente la imagen cambio y su sueño quedo en blanco, finalmente sentía paz.
Pero aquello ¿Era un sueño?
Y comienza el quiebre emocional de Hadarah señoras.
Estuve leyendo en manwha para medio orientarme y darme ideas y leí por ahí que el manwha está cambiando varias cosas de la novela jejeje y aún que no la leí me dio curiosidad este dato, en fin, los últimos capítulos del manwha tendrán un peso duro para Hadarah en mi historia.
La imagen final la pueden encontrar en los gráficos de la segunda temporada, aprecien esa belleza jajaja.
Mis redes.
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