Capítulo 10.
Regis se alejo de Hadarah y miró detrás de ella, su hija estaba al otro lado con otra persona, eso hirvio su sangre.
—¿Duque? - el peli plateado se alejo de ahí y salió, la joven mordió su labio ligeramente y lo siguió.
Trato de tomar su brazo cuando vio a Jubelian y al joven juntos pero fue tarde, el ya había hablado.
—¿Qué crees que estás haciendo?
—P-Padre - Hadarah se disculpo con la mirada.
Regis estaba junto a la entrada, mirándolos con una mirada asesina en sus ojos.
—Pediré los detalles más tarde. Vámonos por ahora, lo siento Lady Angenas.
Hadarah asintió en modo de respuesta
—Te lastimaste el pie -habló Max sosteniendo a Jubelian aun, Hadarah lo miró y nego.
—Estoy bien
Pero en ese momento, Regisapartó la mano de Max mientras sonreía cortésmente.
—No es asunto tuyo, así que no te preocupes. - Regis tomó en sus brazos a Jubelian —Porque ella es mi hija. Empezaré a acudir a ti a partir de ahora, así que no vengas a nuestra casa, adiós Hadarah - salió sin decir más.
—Eso debió doler -dijo Hadarah viendo a Max.
—Te dejo tirada también -ella alzó los hombros.
—Vine con mi hermano, no con el.
—Tienes una vibra rara con el ¿Te gusta?
—¿A ti te gusta Jubelian? - Max la miro mal y se levantó.
—Me retiro -ella soltó a reír y lo vio irse.
Cuando el duque y su hija salieron del salón de baile, los que solían desaprobar a Jubelian empezaron a manifestar su disgusto.
—¿Qué tipo de molestia es esa, perturbar la fiesta de otra persona?
—No entiendo cómo alguien que estaba bien hace unos momentos se enferma de repente de esa manera.
Hadarah rodó los ojos al escucharlos y se acerco a su hermano y a Amelia.
—Esta gente es molesta, vamonos hermano.
—Nos vemos Lady Angenas -hablo Amelia.
—Dime Hadarah, Amelia -ella sonrió —Nos vemos luego -tomo la mano de Calisto y se acercó para despedirse de la festejada.
—No crees que ella estaba haciendo eso deliberadamente porque quería atención, ¿verdad?
—Parece que todos no recuerdan que Lady Ploen ha estado enferma.
Cuando sonó la voz de Rose, el personaje principal de la fiesta de hoy, el silencio cayó sobre el gran salón.
Solo había estado mirando a los que chismorreaban sobre Jubelian, pero ya no podía permanecer callada.
—Como viste, parece que aún no se ha recuperado por completo de su enfermedad, pero aun así hizo un esfuerzo por asistir a mi fiesta de cumpleaños ... creo que es realmente asombroso.
Mucha gente comenzó a simpatizar con las palabras de Rose.
—Así es, llevaba bastante rato sentada con el rostro pálido antes de levantarse para salir a la terraza.
—Por supuesto. Yo también vi eso.
Rose, con los ojos llenos de lágrimas, habló de nuevo.
—No ha pasado mucho tiempo desde que comencé a acercarme más a Lady
ploen, pero mientras intercambiaba cartas, sentí que ella es una persona muy bondadosa.
Varios nobles expresaron su acuerdo.
—Ella está en lo correcto. Cuando recibí una respuesta, no esperaba mucho, pero después de darme cuenta de que fue Lady Ploen quien la escribió ella misma, la he estado viendo desde una perspectiva diferente
Entre ellos se encontraba el hijo del Conde Rowain, Edmund Rowain, que no había podido asociarse con ella.
—En mi caso, le envié a Lady Ploen una solicitud de socio por accidente, pero ella fue amable y perdonó mi error. La imagen de ella en ese momento era tan angelical ...
Ignorando sus palabras que parecían llevar solo interés propio, Rose continuó.
—Como personaje principal de la fiesta de hoy, estoy muy agradecido con Lady Plorn. Por lo tanto…
Cuando Rose se sintió demasiado abrumada por la emoción para hablar, el Conde Arlo sostuvo a su hija por los hombros y se dirigió a la multitud.
—Mis distinguidos invitados. Todos tenemos el mismo estatus políticamente, ¿no deberíamos unirnos todos? Sin mencionar que si el duque se enterara de que hoy estamos cotilleando sobre su hija ... estoy seguro de que todos los presentes lo lamentarán.
Los que habían estado cotilleando sobre Jubelian tragaron saliva de nerviosismo.
No importa cuántas veces la gente maldiga incluso al emperador a sus espaldas, la atmósfera justo antes los hizo sudar a todos.
Además, la visión del duque que se iba con su hija abrazada ciertamente difería del rumor que afirmaba que era indiferente hacia ella.
Cuando el silencio cayó sobre el salón de baile, el Conde Arlo dejó escapar una sonrisa amistosa.
—Parece que el estado de ánimo se ha vuelto un poco sombrío. Quizás sea porque la música se detuvo. Maestro, vuelva a empezar la música.
Hadarah suspiro, todos eran chismosos y tontos, siempre hablaban sin saber y juzgaban al inocente, era agotador vivir todo eso.
—Rose -hablo Hadarah para llamar su atención —Nosotros nos retiramos, tuve un accidente hace poco y aun sigo débil.
—¿Pero esta bien Lady Hadarah?
—Lo estoy, una vez más feliz cumpleaños Rose -le dio un corto abrazo y sin mirar a nadie más salió.
Al siguiente los periódicos de todo el país hablaban sobre la fiesta de cumpleaños de Lady Arlo, en la portada Hadarah y Regis, rumores encabezaban los titulares y artículos dedicados a ambos salían en cada página.
—Lograste algo grande ayer -dijo Irina desde la cama. —Lady Angenas y el duque Ploen en una relación -leyó —Lady Hadarah del ducado Angenas y el duque Ploen con planes de casarse - Hadarah miró mal a Irina —Y el mejor, ¿No es Lady Angenas de la edad de Jubelian Ploen? ¿Acaso esto no afectara la relación entre amigas.
Hadarah hundio su cara entre su almohada y pego un grito, le daja vergüenza bajar y ver a sus padres y hermanos, eran chismosos desde siempre, le harían miles de preguntas.
—¡Dara! - era Adonis, la puerta fue tocada múltiples veces —Hermanita, Dara.
—Tragame tierra.
—Yo abriré - Irina ignoro los quejidos de Hadarah y abrió las puertas antes de desaparecer, la cama se hundió a su lado y golpes con una almohada llegaron a su cuerpo.
Así dio inicio al interrogatorio.
Se que he tardado mucho, y me disculpo, pero me he concentrado en terminar la kitsune.
Estoy buscando castin para Regis, Max y Jubelian (prefiero a Asiáticos, pero acepto de cualquiera que tenga material)
Mis redes en donde subiré edits de esta historia.
Edit del capítulo
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