-Entonces le añades el chimichurri a las albóndigas y luego las pones al sol. Eso les otorga un delicioso sabor salado que muy pocas personas pueden identificar-

-Piu!-

Era de noche en Fuyuki, con frescas brisas y un poco de frío, pero nada que el enorme chaleco de Ghahu pueda arreglar. Tanto el pelinaranja como el pájaro caminaban tranquilamente mientras Ghahu le contaba como realizaba las diferentes recetas que aprendía diariamente gracias a su propia mano.

En realidad buscaban algún Master o Servant con el cual pelear, pero lo único que encontraron en sus dos horas de búsqueda fue un grupo de vagabundos que hacían break dance en un callejón. Habían pensado ir al Monte Ryuudou, pero tenía el presentimiento de que no era su turno ir allí.

Mientras caminaban, escucharon algo parecido a un gemido, pero doloroso y con la mínima fuerza en este, como si fuera cachorro al borde de la inconsciencia. Caminando hacia un callejón oscuro, encontraron un gran charco de sangre, el cual poco a poco se secaba debido a que había pasado bastante tiempo desde que el líquido había salido del cuerpo. En medio del callejón reposaba un cuerpo, una mujer con cabello ehhh... vino, pensó Ghahu, la cual estaba pálida y le faltaba su brazo izquierdo, de donde salía la sangre a borbotones.

Rápidamente Smiing convirtió parte de su cuerpo en un botiquín de primeros auxilios, el cual Ghahu agarró y empezó a tratar a la mujer. Al cabo de unos minutos, y completamente vendada, la mujer fue depositada cuidadosamente en la espalda de Smiing, la cual se había convertido en lo que parecía ser una cápsula que la mantendría segura hasta llegar a la casa del pelinaranja.

-Lo siento, pero no puedo permitir eso, aunque no quiera-

Ghahu rápidamente volteó, solo para recibir un poderoso golpe que lo terminó lanzando afuera del callejón y estrellarse con un auto, sintiendo sus huesos crujir por el impacto y la sangre empezar a derramarse por su espalda.

Smiing convirtió sus plumas en espadas para empezar a bloquear los golpes que Lancer empezó a lanzar, tratando de minimizar el movimiento para no lastimar a la mujer en su espalda. Mirando de reojo la salida del callejón, observó a su Master levantándose con dificultad, pero aún así, levantándose.

-H-hombre, eso dolió...-Ghahu vomitó una pequeña cantidad de sangre, para luego reincorporarse y voltear a ver como Smiing esquivaba difícilmente el ataque de Lancer, el cual se estrelló contra el suelo creando una onda expansiva por el impacto. Smiing creó un mandoble que se estrelló con fuerza contra la lanza, pero el Servant enemigo la desvió inofensivamente y contraatacó, dañando ligeramente al pájaro.

-(Rayos... ni siquiera se magia para ayudar a mi Servant)- Ghahu se limpió la sangre que escurría por su boca, pero en ese momento pudo observar líneas rojas, las cuales estaban recorriendo toda su mano como si de un tatuaje se trataran. Arremangándose la chaqueta, descubrió que todo su brazo estaba cubierto de esas líneas rojas, las cuales se volvían amarillas mientras más se acercaran a su hombro. Pensando rápidamente, apuntó su extremidad hacia la pelea que se desarrollaba unos metros adelante suyo, mientras las líneas rojas empezaban a volverse amarillas.

-¡Lysene av!- un pequeño, pero increíblemente denso proyectil, salió rápidamente disparado hacia el dúo de Servants. Smiing rápidamente esquivó un ataque de Lancer, para luego salir volando hacia el cielo, mientras el peliazul volteaba su mirada hacia el pequeño proyectil que se acercaba rápidamente.

-(Mm? Bueno, no creo que sea tan dolo-)-

KRAKABOOM

Ghahu salió volando por la onda expansiva, pero sin despegar su mirada de la enorme bola de luz que cubría todo el callejón y los edificios cercanos, que afortunadamente se encontraban vacíos. Al cabo de unos minutos de resplandor de gran tamaño, la luz desapareció de golpe, dejando ver un enorme boquete donde anteriormente era un callejón. Y ningún rastro de Lancer.

Soltando un suspiro que no sabía que contenía, se levantó y se acercó a su Servant, el cual lo miraba de forma interrogativa.

-Qué? Eso?- Smiing asintió -no tengo la menor idea- Smiing solo se rascó la cabeza con una de sus plumas y con un encogimiento de hombros, el pájaro agarró los hombros de su Master para luego irse volando a su casa.

En otra parte, momentos antes de la explosión...

Shirou se preguntaba porque su suerte era tan mala.

Momentos después de enfrentarse a Caster, Archer decidió meterle un navajazo por la espalda, provocando que terminara desangrándose y tratando de salir del templo Ryuudou, mientras Archer tranquilamente caminaba hacia el listo para acabar con su sufrimiento.

Pero antes de que eso sucedería, se escuchó una explosión y luego una enorme luz que brillaba al otro lado de la ciudad, distrayendo a Archer durante un momento y permitiendo que Rin apareciera y controlara al peliblanco. Con ayuda de Saber, la cual se había enfrentado contra Assassin, fue levantado, abandonando el recinto, observando a la lejanía la luz, la cual desapareció después de unos minutos.

Shirou cayó desmayado después de eso.

En la mañana siguiente...

-Eso fue interesante, no crees Lancer?-

-Cállate-

Después de sobrevivir milagrosamente a la enorme explosión, Lancer terminó en un estado deplorable, curándose lentamente debido a la extraña anomalía que poseía esa luz, unos extraños reflejos que lo hicieron ver momentos de su vida, tanto a su hijo como maestra.

Además de perder las dos piernas y un brazo en el proceso.

-Hum, ese curioso Master y su Servant aparecieron de la nada, además de no pertenecer a las clases principales, por lo que puedo entender que el chico rompió las reglas del grial- dijo Kotomine, observando a Lancer el cual solo podía mirar el techo. Le daba asco mirar los ojos de su "Master" -bueno, eso significa que podemos hacer una cacería usando a los demás Masters y Servants para poder atraparlo y hacer que la Guerra sea normal nuevamente- Kirei solo sonrió ligeramente, pero se entendía el punto.

Esta Guerra se ponía interesante cada momento. No solo Caster tenía control del Monte Ryuudou, sino que también había invocado a Assassin como Servant. Tanto los Masters de Saber como Archer eran aliados, y ahora Lancer estaba en cama debido a una habilidad proveniente del Master que había invocado al Servant extra.

Muy interesante.

En casa de Ghahu...

-Mira Smiing, no puedes apostar esa cantidad de dinero, es estúpida-.

-Piu!- el pájaro solo reprochó mientras metía quince mil millones de dólares en una máquina tragaperra que se encontraba en el sótano de la casa, solo para mover la palanca y terminar en un triple Lucky 7.

-Por las alas de Yharim... ¿como lo hiciste?- Ghahu solo observaba como la máquina expulsaba tokens como cascadas.

-Piu... piu! piu! piu- Smiing contestó en su idioma.

-La máquina tiene un patrón? Que curioso, según mi padre la máquina generaba patrones aleatorios después de las doce de la medianoche-.

-Piu- el pájaro solo asintió y empezó a meter su botín en su dimensión de bolsillo.

Ghahu sonrío, observando a su Servant, para luego voltear su mirada y ver a su nueva invitada respirando tranquilamente en una cama. La misteriosa mujer ahora poseía una prótesis creada por Smiing, pero aún así era doloroso ver como una persona perdió una extremidad por cualquier motivo.

Relajándose en la silla donde estaba sentado, cerró los ojos para echarse una siesta...

... solo para que alguien tocara el timbre de la casa.

Abriendo los ojos y levantándose de golpe, fue a la puerta principal, abriéndola.

-Buenas mañanas, quién es?-

-Hola- dijo una voz tierna e inocente.

Ghahu volteó a ver a la pequeña niña enfrente suyo, la cual tenía su misma altura. La misma chica de hace dos noches, ojos rojos como rubíes, cabello blanco como la nieve, y una piel ligeramente pálida. Portaba un vestido morado y un gorro de esos que su padre le traía de Rusia cuando volvía de ese país.

-Oh, eres la niña de hace dos noches... eres muy linda-

-Oh, muchas gracias... eh...-

-Ghahu, Ghahu Regjeringstid Galaktisk, un gusto- dijo Ghahu con una pequeña inclinación.

-Mucho gusto Ghahu, yo soy Illyasviel von Einzbern... y atrás mio está mi Servant, Berserker- atrás de la pequeña niña se hizo presente una enorme silueta, de dos y medio metros de alto, músculos en cada aparte de su cuerpo, un cabello negro desordenado y un par de ojos rojo y dorado. El gigante invocó una enorme hacha de piedra, la cual era tan grande como Ghahu.

El pelinaranja nunca despegó su mirada de los ojos rojos de la niña, ni con la imponente figura detrás suyo. En un parpadeo, Smiing ya se encontraba atrás de Ghahu, levantándose como un terápodo, y posicionando sus alas como garras, convirtiendo sus plumas en espadas, dándole un aspecto prehistórico, alcanzando la misma altura que Berserker.

-Supongo que no vienes a tomar el té, verdad Illya?- dijo Ghahu tranquilamente.

-Nop, vengo por tu cabeza, y de paso acabar con tu Servant- Berserker soltó un pequeño rugido, seguido de un chillido anormal de Smiing.

-Jejeje, lo siento Illya, pero mi madre cree en la igualdad de género, y mi padre me dijo una vez "En una pelea, da el primer golpe, y que sea con todas tus fuerzas"-

Illya recibió un puñetazo en su mejilla que la tiró al suelo.

Tyrannstempler (Rango: DX) (Anti-Unidad) (Anti-Mundo) (Anti-Tiranos) (Anti-Raíz): ???