Capítulo 2: Crisis.

No recuerdo cuánto tiempo había pasado, quizás fue una hora.

Mi mente estaba tranquila por un momento, el avión al que había abordado ya había comenzado a despegar. En el momento en que descanse mi cuerpo sobre el asiento del avión pude sentir una tranquilidad que hace tiempo mi cuerpo no había disfrutado en meses. Por un instante miré a la ventanilla a un lado de mi asiento en el avión, el sol brillante sobre el cielo había cubierto todo lo que mis ojos alcanzaban a ver. Era... tranquilizante.

Pero, por un momento me sentí fuera de lugar, sentí que algo faltaba, algo no estaba bien.

¿Dónde estaban Yuzu y Karin? Y tampoco veía a Papá cerca.

Extrañado, me levanté de mi asiento e intenté buscar con la mirada algún rastro de mi familia dentro del avión, esto era raro, demasiado extraño, no podía visualizar a nadie de mi familia cerca. Esto me hizo desesperarme un poco. ¿Será que habrían cambiado de clase? No conozco realmente cómo se compone la estructura y sistema de un avión, acaso eso era posible?

Intente usar mi teléfono que saqué del bolsillo de mi pantalón. No tardé en marcarle a mi padre, me sentí ansioso, confundido.

Su llamada no ha podido ser interceptada.

La contestadora de mi teléfono sonó abruptamente. "Qué diablos está pasando?" Me pregunté a mi mismo mientras buscaba nuevamente marcarle a Papá en busca de su paradero.

Llamada rechazada.

Esto era el colmo, si él no contestaba entonces alguien tenía que hacerlo. Mi mirada buscó el número de Yuzu e intenté contactarla.

Llamada rechazada.

Mi hermana Karin...

Llamada rechazada.

Esto era desesperante, demasiado. ¿Qué está sucediendo ahora? ¿Será que el avión está interfiriendo con la señal?. Maldición, sentí el sudor caer sobre mi sien, el frío se apoderó de mi cuerpo por un momento. Demonios, dónde estaban Yuzu y Karin?

"Disculpe muchacho, le pido que tome asiento y apague su teléfono, no podemos tomar el riesgo de que su dispositivo interfiera con los sistemas del avión" detrás de mí escuché una voz femenina, eso hizo voltear mi mirada para encontrarme con una azafata. Era cierto entonces, los rumores de tener que mantener apagados los teléfonos para no causar disturbios en un avión estaban en lo correcto. Que más había que hacer para joderme ahora?

"Estimados pasajeros, favor de abrocharse los cinturones, nuestro despegue con destino a Budapest-Rumania ha comenzado" la voz del capitán resonó en todo el pasillo. ¿Budapest? ¿En Rumania? Algo estaba mal, yo no tenía planeado ir hacia Rumania.

Sentí como mi estómago se hundía en el momento en que escuché las palabras del capitán del avión. Si yo no estaba yendo a Inglaterra, entonces. ¿Dónde estaban mis hermanas y mi padre?

"Y-yo, creo que hay una confusión señorita, mi vuelo iba a Inglaterra, yo no debería de estar en este vuelo" intente justificar mi presencia en este vuelo, no sabía que estaba pasando, estaba confundido, el sudor en mi frente se hizo más evidente al notar la desesperación rodeando mi mente.

El rostro de la azafata obtuvo una mirada de confusión, la incredulidad lleno su cara al ver las palabras que había pronunciado. "Inglaterra? No creo que haya habido una confusión chico, pero, si me permite ver su boleto" pidió de forma amable mientras extendía la mano. No me negué a su petición, estaba impaciente para ese momento.

Ella solo miró la información de mi boleto de avión, y me dió una mirada que dictaba confusión, intenté esperar pacientemente su respuesta, pero solo recibí un suspiro de su parte. "Mire, no sé si esto es una mala broma chico pero le pido que tome asiento y abroche su cinturón" sus palabras me tomaron desprevenido, la forma en la que me respondió denotaba cansancio.

"Que? Pero este no es mi vuelo señorita. ¡Yo realmente no debería de estar aquí!" Objeté a las palabras dichas por la azafata.

Mi desesperación ya era visible, simplemente quise explicar lo que estaba pasando, pero mis palabras desaparecieron de mi boca luego de ver el boleto que la azafata tenía en su mano.

En ese pequeño trozo de papel dictaminó que yo tenía mi vuelo listo para ir a Rumania... Esto estaba mal, esto estaba muy mal.

La azafata solo me devolvió el boleto un poco arrugado. Noté como ella simplemente se alejó mientras las pisadas en sus tacones se hacían escuchar por el pasillo. Yo simplemente me recosté en el asiento el cual me había sentado hace un rato, mi mente se volvió un caos dentro de mi cabeza. No podía armar un revuelo, no podía acceder a mi estado Shinigami y dejar mi cuerpo así como si nada.

Estaba completamente atrapado y no sabía qué hacer.

"Disculpe señor, aquí está su asiento y lo siento mucho por los inconvenientes" escuché otra voz femenina acercándose hacia mi. Simplemente ignore su presencia al intentar en mi tonto afán de inocencia el pensar como salir de esta situación.

Alguien se había sentado junto a mí, aunque me sentí curioso, decidí mejor no mirar.

"Veo que te encuentras muy mal Ichigo" la voz del hombre se dirigió a mi. Espera... esa voz... "Creo que requieres un poco de ayuda no es así?" respondió el hombre

Alcé mi mirada para ver quién diablos estaba sentado a mi lado. El típico haori de color verde junto con una gran bata que había visto en tonalidades blancas en aquellos días que visite la Sociedad de Almas, solo que está vez todo era verde, el cabello rubio y desordenado y el típico sombrero verde de rayas blancas. No había duda.

"Urahara? Tu, ¿qué diablos haces aquí?" Pregunté de forma tosca y abrupta, me encontré confundido ante la presencia de Kisuke Urahara.

"Eh?! ¿Por qué no saludas de forma más normal a un viejo amigo, Ichigo?" La voz calmada y juguetona de Urahara hizo desordenar más mi cabeza. "Es de muy mala educación no saludar a alguien." Intentó darme una lección de modales.

"Eso ya lo sé! Pero eso no explica qué es lo que haces tú aquí." Refute las palabras de Urahara. "No deberías estar en Ciudad Karakura cuidando de tu dulcería o algo así? ¿Qué haces en este vuelo saliendo del país, y en realidad, qué haces yendo a Rumania?" Mis palabras fueron abruptas, me encontraba más confundido que desesperado en realidad. No comprendía qué estaba pasando, en realidad, no sabía ya ni porque estaba alzando la voz.

"¡Shh! No hables tan fuerte Ichigo, puedes molestar a los demás" con las señas de silencio intentando apaciguar mi confusión simplemente sonrió manteniendo su regular personalidad tranquila.

"Eso no viene al caso. Si estás aquí, debes saber dónde están Yuzu y Karin" en mi desesperación intenté buscar respuestas, si había una persona que sabría respuestas sobre mi familia absolutamente sería él.

"Sobre eso... solo debes saber que están bien!" Con solamente su abanico guardado, Urahara hizo una señal de paz como muestra de su intento de calmar mi mente.

"Entonces si tienes que ver con esto" Respondí mientras sentía que un sentimiento de ira comenzaba a surgir.

"Oh... ups, supongo que no debí decir eso" intentó excusarse mientras su clásica sonrisa siguió presente. "Pero no debes de ponerte tan serio Ichigo, si te calmas yo te podría explicar todo" dijo mientras una pequeña gota de sudor caía sobre la sien de Urahara.

Me había levantado de mi asiento, intenté buscar más respuestas. Pero por alguna razón sentí como mi cuerpo se entumeció sin explicación, pero todo cobró sentido al mirar de debajo de mi pecho y notar que la punta del bastón de Urahara estaba haciendo contacto. Es probable que haya modificado algo en su bastón... no lo sabía realmente, simplemente sentí como caí en mi asiento hasta perder la conciencia.

°•°•~_--_--_--_--_~•°•°

Habían pasado algunas horas desde que el avión había partido desde Japón a Rumania. El avión se encontraba muy tranquilo, tan pacífico como los pasillos de una biblioteca.

Urahara estaba sentado, su actitud serena estando presente en todo momento mientras leía alguna revista de su interés que le había proveído alguna azafata en lo que pasaba el rato.

Y junto a él se encontraba un Ichigo Kurosaki durmiendo de forma tan pacífica. Parecía tan tranquilo que interrumpir su sueño le hacía pensar que podría provocar un caos. Pero todos esos pensamientos fueron descartados al notar como Ichigo comenzaba a despertarse sin muchas complicaciones.

"Veo que despertaste Ichigo" La voz serena de Urahara habló de forma deliberada mientras veía al chico de cabellos naranjas agarrarse la cabeza, dándole a entender que le dolía un poco. "¿Cómo te encuentras? ¿Más tranquilo?" Siguió leyendo su revista sin desviar la mirada.

"Si... ya me siento mucho mejor" respondió ante las preguntas del sombrerero loco mientras aún sostenía su cabeza. "Ugh... mi cabeza está hecha un desastre" se dijo a sí mismo al momento que sentía como el dolor en su cabeza se calmaba de forma progresiva. "Cuánto tiempo me quedé inconsciente?"

El hombre rubio contestó sin vacilar: "alrededor de unas 4 horas, dormiste un buen rato" la sonrisa de Urahara volvió a dibujarse en su rostro. "Pero eso creo que ya no te es relevante ahora, ¿no es así?" Repentinamente la voz de Urahara se tornó en un tono más... misterioso a pesar de aún mantener esa sonrisa serena.

"Antes de que hables, quiero que contestes mi pregunta. ¿Dónde está mi familia?" Preguntó abruptamente, dejando ver cuáles eran las prioridades del Shinigami sustituto.

"No deberías preocuparte, están completamente sanos y en camino a Londres, tal y como el Gotei 13 se los había prometido"

"Si es así, ¿no debería estar yo con ellos también?" Un poco de confusión adquirió la voz de Ichigo. "Que yo sepa, el Gotei 13 les prometió unas vacaciones a la familia Kurosaki... y creo que yo también soy parte de esa familia." El sarcasmo fue palpable en el tono de Ichigo, esto solo hizo que Urahara se riera un poco de forma un tanto forzada.

"Si, con respecto a eso. Hay una cosa de la que debo hablar contigo" su actitud se tornó seria, de forma inesperada la actitud tranquila y serena del antiguo capitán de la Duodécima división se había convertido en una voz que marcaba angustia. "Me gustaría ser breve pero este tema no es algo que podamos tomarlo a la ligera"

Ichigo prestó atención a las palabras de Urahara al notar el cambio de actitud del hombre rubio, el dolor en su cabeza repentinamente se calmó. "¿Qué es lo que sucede entonces?"

Urahara se quedó callado por un momento, pensando en cómo explicarle la situación al shinigami sustituto.

"...Hace unos días se detectó una gran concentración de Reishi en una parte de Europa, más específicamente en una pequeña ciudad ubicada en Rumania. Esto es muy complejo de explicar, pero he sospechado que ahí es en dónde se ubica un artefacto llamado el Santo Grial" Urahara cerró la revista que estaba leyendo hace un momento. Con una mirada intranquila el agarro de una pequeña maleta que había traído consigo un libro forrado en cuero que daba aires de ser antiguo pero valioso. Simplemente abrió el libro en busca de la página correcta la cual él tenía sus notas.

"El Santo Grial?" Ichigo quedó un poco confundido ante las declaraciones de Urahara. "No es esa la copa en la que se dice que bebió Jesucristo en la última cena?" curioso, decidió indagar un poco más con el tema.

"Estas en lo correcto Ichigo, pero este Santo Grial no es la misma copa en la que se dice que bebió este mítico personaje" su voz se aclaró un poco para seguir hablando. "Hace más de 200 años en una pequeña ciudad de Japón llamada Fuyuki en la que se dice que se reunieron tres familias de Magus importantes conocidas como las tres familias fundadoras. Ellos realizaron un ritual místico para crear un objeto que pudiera cumplir cualquier deseo" Explico con una voz tranquila pero severa en el momento que Urahara comenzaba a buscar entre sus notas información importante.

"¿Cualquier deseo? espera, ¿qué diablos son los magus? ¿Familias fundadoras?" Frunciendo el ceño, ichigo solamente pensó en el dolor de cabeza que estaba a punto de llegar.

"Se que quieres explicaciones, pero primero te voy a explicar la razón por la que estás aquí" la sonrisa de Urahara había vuelto, por alguna extraña razón sintió un pequeño entusiasmo por compartir esta información. "El santo grial tiene como propósito cumplir los deseos de un magus, pero para que este ritual haga efecto se requiere enfrentarse en una batalla campal entre siete servants invocados por estos magus que se les llama master. Los servants son figuras históricas que fueron marcadas como héroes a lo largo de la historia, mitos o leyendas, todos ellos ganándose un lugar fuera del ciclo de almas, ascendiendo a un lugar llamado el trono de heroes" Urahara explico con relativa facilidad, parte de esta explicación le emocionaba puesto que era muy interesante indagar con el tema. "el artefacto elige a sus participantes para hacerlos luchar y el ganador puede cumplir su deseo junto a su Servant para así ganar estatus o reputación dentro de su asociación"

"Entiendo..." Ichigo comprendió la situación, pero su mente se había inundado de dudas por la información que le había dado Kisuke en ese momento. "si esta guerra del grial fue capaz de alterar el ciclo de almas para traer figuras históricas como luchadores, porque el Seireitei no se ha entrometido en eso?" confundido, sintió como si una pequeña jaqueca se comenzaba a desarrollar dentro de su cabeza. Pensando en qué otro tipo de sorpresas le diría Urahara.

"Oh, no me malentiendas, el Gotei 13 y la orden de los 46 guardias de la corte están más que enterados de esta situación. Llevamos sabiendo de su existencia desde la primera guerra hasta la actual. La cuál en este momento sería la cuarta guerra, que está a punto de comenzar. Todas y cada una con una diferencia de 60 años entre una y otra" los ojos de Ichigo se abrieron como platos, anonadado, las dudas no cesaron.

"Eso significa que hubo otras tres guerras antes de la actual? Y porque no lo han detenido desde la primera guerra?" Ichigo espetó intentando buscarle lógica a la explicación de su viejo amigo.

"Desde los inicios de esta guerra hemos intentado desmantelar su sistema. Pero todas esas veces se nos arrebató la oportunidad." Sin rodeos, Urahara simplemente respondió acompañado con un suspiro. "La primera vez que detectamos los acontecimientos de la primera guerra del grial, todos los escuadrones nos vimos envueltos en una situación peligrosa que nos hizo movilizar a los capitanes y tenientes en busca de cazar a una entidad que en su demografía, se les ha apoyado como un Apóstol Muerto, siendo este el más poderoso que pudimos enfrentar y cazar. Pero cuando intentamos dirigirnos al lugar de los hechos... la guerra simplemente desembocó en una destrucción de la cual nosotros no pudimos detener" recostó su espalda en su asiento, por un momento Urahara se quitó su sombrero mientras recordaba más sucesos.

Urahara dirigió su mirada al Shinigami Sustituto. Entendió la confusión que tenía sobre la breve explicación.

"En pocas palabras. Nos vimos obligados a luchar contra un vampiro. Y si, los vampiros si existen, y a comparación de las historias de ciencia ficción o el cine, ellos son mucho más letales y peligrosos" con su sombrero en mano vio como Ichigo tenía una cara de incredulidad. "Si... un vampiro hizo que todo el Seireitei fuera en busca de su cabeza. Incluyendo al Fallecido Capitán-comandante Genryusai Yamamoto, quien fue este último en acabar con el." El suspiro de Urahara fue leve, recordar aquel día le hizo sentir misteriosamente fatigado.

Al Ichigo ya no tener dudas sobre esa primera parte. El rubio procedió a seguir explicando.

"La segunda guerra fue igual, no podemos movilizarnos a tiempo, y por esa misma razón llegamos tarde, y las bajas en el mundo humano en esa pequeña ciudad fueron varias" por un momento Urahara se sintió cansado al recordar toda la destrucción que se había dado en aquel lugar. "Pero no fue hasta la tercera guerra que Yourichi y yo logramos presenciar de primera mano cómo sucedían todos estos acontecimientos y destrucción" suspiro levemente. "Después de ser exiliados de la Sociedad de Almas, me dí la tarea de investigar más a fondo en qué consistía este raro sistema. Pero nos encontramos con la ingrata sorpresa de que está compleja guerra se había extendido hasta las filas de los Nazis en lo que ustedes llamarían la Segunda Guerra mundial"

Ichigo se quedó sin aliento al escuchar tal revelación. Saber que está pequeña disputa entre individuos se había extendido a tal punto de que uno de los países que provocó la matanza de millones de personas en el planeta se había involucrado en esto... sintió como un pequeño escalofrío recorrió su columna.

"Aunque no éramos los únicos" agregó Kisuke a su explicación. "En el apogeo de la guerra nos percatamos que los ex capitanes Gin Ichimaru y Kaname Tosen también habían estado investigando la guerra con tal de extraer la información necesaria para que Aizen pudiera presenciar y decidir si el Santo Grial era útil o no. Afortunadamente él no lo volvió a considerar para su plan, sin embargo, eso provocó que los Nazis pudieran escapar hacia una ubicación desconocida" Urahara recordaba de forma vivida ese día. Viendo como una Yoruichi Shihōin fue lastimada de su orgullo por haber dejado escapar a un ejército con un artefacto muy peligroso. Eso solo hizo esbozar una sonrisa tranquila a Urahara ante aquel fugaz recuerdo.

"Demonios... esto si que es difícil de comprender y digerir" Acompañando a Kisuke, Ichigo suspiró de forma más pesada, intentando asimilar toda esta información que lo había golpeado como un balde de agua fría. "Ahora que me he percatado. ¿Dijiste que su ubicación era desconocida?" Una pequeña duda surgió en Ichigo.

"Así es, la ubicación del grial era desconocida, pero no fue hasta hace unos días que gracias a la información proveída por el escuadrón 2 pudimos encontrar su paradero" su sonrisa se extendió un poco intentando mostrar su credibilidad e interés por el tema.

Ichigo se notó curioso en el tema, sabía que en este tipo de situaciones contar información solo significaba una cosa para él.

Su suspiro fue más pesado está vez. "Yo-" Ichigo fue interrumpido abruptamente.

"Escucha Ichigo, normalmente a mí me gusta ayudarte, nunca me he interpuesto entre tus prioridades, pero si mi información es correcta, está cuarta guerra podria desembocar un peligro que podria destruir el ciclo de almas" por un instante el pelinaranja sintió un nudo en la garganta, la noticia inesperada lo dejo callado, haciéndole ver que esto podría equipararse a lo que alguna vez fue el plan del líder de los quincy. "Es por eso que vengo a pedirte tu ayuda. Pero si tú decisión es no, entonces no insistiré" el rostro de Urahara cambió a una emoción de inquietud, esto muy pocas veces Ichigo pudo verlo, ese rostro de preocupación plasmada en un hombre tan tranquilo. Esto era peligroso entonces.

Ichigo frunció el ceño, comprendió la situación y la magnitud de peligro que conlleva esta información. En el pasado Urahara lo ayudó muchas veces, desde su entrenamiento para conseguir que su Zanpaku-tō fuera liberada e ir a salvar a su amiga Rukia, hasta abrirles el camino para ir a salvar a su amiga Orihime. Y aún así fue uno de los mayores exponentes que fueron clave para vencer al rey Quincy. Sin más opciones Ichigo había tomado su decisión.

"Sabes, creo que solo debías de pedirlo simplemente en vez de secuestrarme" Bufó entre dientes mientras se rascaba la cabeza. Esto hizo que Urahara recuperara su naturaleza tranquila y serena. Su sonrisa se plasmó en su rostro nuevamente mientras se volvía a poner su sombrero.

"Digamos que fue una pequeña broma de bienvenida..." tiro unas leves carcajadas al recordar el meticuloso plan que había ideado para que Ichigo fuera al vuelo equivocado. Afortunadamente sus planes habían funcionado, todo se había realizado al pie de la letra. A pesar de que se encontró con un inconveniente en aquel aeropuerto...

"¡Bien! Ahora, supongo que quieres más respuestas, y el viaje de Japón a Rumania apenas lleva 4 horas de las 14 horas habituales que se toma un vuelo de este estilo, así que voy a tomarme el tiempo de informarte de todo lo que debas saber para estar preparados" Urahara volvió a tomar ese pequeño libro que había guardado. Con una emoción palpable, Ichigo sonrió de forma tranquila, estaba curioso, no hambriento de conocimiento, pero le interesaba estar más informado está vez.

Al menos sus preocupaciones se disiparon con las explicaciones, tomar clases para expandir sus conocimientos y comprender la situación le hizo saber que al menos el vuelo no sería tan aburrido.

.

.

.

.

.

.

Habían pasado unas horas desde que el vuelo había llegado a su destino. Sin turbulencias ni incidentes Urahara e Ichigo llegaron al aeropuerto de Budapest.

Por alguna extraña razón, Ichigo había descubierto que Urahara tenía una residencia comprada con los ahorros de su humilde negocio de dulces establecido en su ciudad natal.

Aunque su residencia quedaba a lo lejos de la ciudad de Budapest, Ichigo se imaginó muchas formas de cómo sería está residencia "pequeña y humilde" como lo mencionó Urahara.

"Bien, ya hemos llegado, ¿qué te parece Ichigo?" El hombre del sombrero simplemente sacó de su haori unas llaves que abrían las puertas de la residencia.

Ichigo suspiró de alivio al ver cómo aquella humilde y pequeña morada de la que hablo Urahara no cumplió sus expectativas, ciertamente se sorprendió al ver que realmente se trataba de una pequeña cabaña. Sin diseños extravagantes, sin volúmenes exagerados, fue simple y minimalista, realmente se veía como un lugar muy acogedor.

"¿Es bonita no?" su sonrisa era evidente, no tardó mucho en abrir la cerradura de la puerta para entrar en su morada.

"Si, realmente me gusta" su mirada se dedicó a apreciar la forma de la pequeña cabaña a la luz de la Luna, las estrellas vibrantes aparcando el gran cielo nocturno.

Esta noche fue muy hermosa en realidad.

No tardó mucho tiempo para que el dúo de Segadores se instalarán en la pequeña cabaña, sinceramente había pasado un tiempo desde que sentía mucha más paz en otros lugares donde no fuera su hogar en Ciudad Karakura. Este sentimiento fue extrañamente disfrutable para el pelinaranja quien solo se dedicó a escuchar las instrucciones de Urahara y visitar su habitación.

Al visualizar el lugar donde se encargaría de descansar notó que tenía un aspecto simple, una cama, un escritorio y una silla. Una vista muy minimalista que realmente contrastaba de una manera realmente diferente a las actitudes explosivas que Ichigo expresó en casi toda su vida, aunque esas expresiones disminuyeron con el paso del tiempo, el aún no perdía su esencia, y al menos se encargaría de plasmar esa habitación con un poco de personalidad como si fuese un lienzo en blanco. Pero quizá eso lo haga mañana. Hoy solo por esta vez descansaría un poco.

Ichigo dejó su maleta en el escritorio de madera que estaba a un lado de la cama. La vista a la ventana y por ende al paisaje verdoso fue muy tranquilizante en cierto aspecto. Esperaba dormir está vez.

Perdiendo la concentración, por un momento Ichigo fue cerrando sus ojos, su respiración fue más regulada, el sueño estaba inundando su mente.

"...!!!!!!!"

Presión... peso, aplastamiento, la fuerza que ahogaba a las almas.

Una sensación de peligro recorrió su mente por un momento. Cómo un balde de agua fría, Ichigo sintió como si le hubieran dado un golpe en el estómago al sentir como si su cuerpo fuera aplastado por miles de cosas. Está sensación le era familiar pero su esencia era diferente.

Su mente no comprendió sus sensaciones, su alma estaba reaccionando a esa energía totalmente inusual.

Ichigo salió de su cama sin pensarlo. Se dirigió a su maleta y la abrió con rapidez. Su interior consistía sólo de prendas, prendas que él simplemente arrojó en busca de un artefacto que consideró necesario para este caso.

Y ahí lo encontró. Un artefacto con la capacidad de separar el alma del cuerpo de un Shinigami Sustituto. Un pase de combate, un regalo que se le fue entregado a Ichigo por el difunto capitán de la Decimotercera División Jūshirō Ukitake.

La causa de la verdadera disputa entre Kūgo Ginjō e Ichigo Kurosaki cuando se le fueron arrebatados sus poderes fullbringers. Una insignia con la capacidad de monitorear, analizar y absorber el Reiatsu de su usuario para mantenerlo bajo vigilancia. La razón por la que Ichigo pudo convertirse en fullbringer.

Ichigo sostuvo la insignia por un momento. En sus adentros una emoción de fastidio le hizo perder la concentración por unos instantes. Pero se recuperó al notar como el choque de su cuerpo con la insignia le hizo separar un alma de su cuerpo.

Un poder rebosante sellado en un solo hombre. La apariencia de Ichigo alterada por completo, de su antigua vestimenta moderna a un tradicional Shihakusho que recorrió todo su cuerpo, sus sandalias puestas en sus pies protegidas por unos calcetines y una gigantesca espada de un solo filo que se asimilaba a un cuchillo afilado en toda su hoja recubierta en una venda blanca de material misterioso. Ichigo intentó salir a toda velocidad de su habitación.

La sensación de peligro no disminuyó, sus instintos le gritaban que fuera a la ubicación.

"¡¡¡¡¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!!!!!"

Gritos y augurios llegaron a sus oídos, su sangre se helo al escuchar unas voces de sufrimiento de forma tan cercana, sintió como esos gritos y súplicas provenían en aquel lugar donde la energía desconocida había sido detectada. Un escalofrío recorrió sus vértebras. Esto fue preocupante.

Con fuerza y rapidez salió de la habitación, preocupado se encontró frente a Urahara, su rostro denotaba la misma preocupación de Ichigo, pero a comparación de él, Kisuke mantuvo la calma, parecía como si estuviera acostumbrado a esto. cruzaron miradas, notando que la mirada del hombre rubio era determinada, entendió todo en el momento, sabía que tenían que salir esta noche.

Sus pies ejercieron la fuerza para realizar la técnica de la velocidad. Desapareciendo todo rastro de presencia en aquel lugar alejado de la ciudad de Budapest.

.

.

.

.

.

Ichigo había visto muchos escenarios que le hubiesen revuelto el estómago en su momento, quizá hasta vomitar, pero su mentalidad dura y reacia a rendirse le dio la capacidad de aguantar esos síntomas, pero esta vez fue diferente.

Múltiples cuerpos desmembrados fue lo único que encontraron en aquel escenario. la sangre chorreando sobre el suelo y manchando las paredes de los callejones, hombres y mujeres, todos sin vida colgando en algunas paredes y otras recostadas en el piso, no comprendió que estaba sucediendo, solo podía ver algunos rostros sin forma, pero sabía que el sufrimiento estaba ahí, plasmado en esas caras de desesperación sin forma. Ichigo vio muchas cosas desde que se volvió segador de almas, pero esto no se comparaba en nada con lo que sus ojos veían en ese momento.

"Llegamos tarde..." En su voz, Urahara resaltó preocupación, su mirada analizó el sádico escenario que se comparaba más con una carnicería en realidad.

"No estás obligado a ver esto Ichigo, si quieres, puedes regresar a casa" caminó un poco entre los cuerpos mutilados, en sus pensamientos, Urahara intentó formular en su mente una explicación de quién o qué pudo haber realizado tal atrocidad en aquella fría noche.

"N-no.." detuvo sus palabras abruptamente. "Puedo soportarlo" Respondió manteniendo la compostura. Ichigo había pasado por innumerables batallas, incluso había matado por el bien de los demás, pero esto... Esto fue muy diferente de lo habitual. ver esto fue muy crudo, una imagen que ni en sus misiones tratando con hollows jamas habia presenciado de forma tan gráfica.

Urahara no tardó en ver el estado de Ichigo, por lo que este simplemente le pidió un favor: "¿Que tal si intentas verificar si hay alguien en los alrededores? quizá y encontremos una pista." Ichigo simplemente asintió en su sugerencia, no sabían si el enemigo estaba frente a ellos o quizás se había alejado, una idea que Ichigo podría seguir mientras Urahara seguía investigando.

Posterior al momento en que ichigo se retiró del callejón, Urahara se acercó a uno de los cuerpos asesinados, muchas especulaciones se formularon en su mente, intentando descifrar el origen de esto. una pista, un detalle que le hizo sentir escalofríos al ver bien a las personas asesinadas. Pareció minucioso, pero sus dudas deben ser disipadas. otro cuerpo... y otro cuerpo... no tardó en darse cuenta que había algo más macabro detrás de estos asesinatos.

Urahara se dio cuenta que a todas estas personas les hacía falta su corazón.

El shock en su rostro fue evidente. se sentía consternado por un momento, no comprendió que pudo haber hecho esto. sin embargo, el sonido de los arrullos de un ave lo sacó de aquel trance, su mirada se alzó rumbo a los cielos, mirando específicamente en el techo de un edificio, el origen de los arrullos había salido de una pequeña paloma que lo miraba fijamente, esto le hizo pensar un poco. Lo que le hizo armar el pequeño rompecabezas.

Urahara supo enseguida en que se estaba metiendo, siguiendo la mirada de esa paloma, simplemente bajó la cabeza, era hora de retirarse, dejando nada más que la brisa del viento revoloteando en el lugar, desapareciendo sin dejar rastro.

Alejado de ese lugar. En algún lugar de la pequeña ciudad, una mujer de apariencia extravagante se encontraba viendo los sucesos acontecidos en aquel callejón, pudiendo visualizar todo por un portal que le dejaba apreciar todo lo que sucedía en el momento. Con una sonrisa de curiosidad ladeo su cabeza para mirar a un hombre de cabello canoso y piel de tez morena vestido como si fuera algún tipo de sacerdote.

"Estas personas son muy interesantes. ¿no lo crees, Master?" La delicadeza en su voz denotaba realeza y superioridad, un sentimiento de autoridad que le hizo llamar la atención al joven sacerdote.

"Reina de Asiria... Le pido si me ofrece la capacidad de que puedas vigilar a esas personas misteriosas" La mujer pudo escuchar el tinte de preocupación en su voz, lo que le hizo suspirar ante la forma tan respetuosa en la que se expresa el joven sacerdote.

"se escaparon, pero mis palomas ya lo están buscando" La simpleza de su respuesta no pudo calmar al joven canoso.

El sacerdote sintió como el estrés y la preocupación inundaban su cuerpo, estaba confundido, anonadado y consternado, ¿por qué? ¿por qué de todas las personas ellos se encontraban aquí? ellos... ellos podían frustrar sus planes, pero aun faltaban muchas cosas para completarlo, sin la capacidad de hacer algo, solo se limitaría a vigilarlos.

El sacerdote no pudo dormir esa noche.