II - Trato
«Algunas personas piensan que su mundo se cae abajo, comparado con mi mundo... eso no es nada. Yo tengo que vivir con una eterna culpa»
×La policía no ha querido dar declaraciones al respecto, pero se rumora que la ejecución del empresario fue porque se resistió a un asalto. Es lamentable la situación que se está sufriendo en nuestro país, el mes de Marzo definitivamente esta manchado por sangre.×
—Raffael ¿Estás bien? Te has quedado pálido, pues ¿Quién te ha escrito?
—Bruno, Bruno esta... muerto, él... lo mato —respondió Raffael en estado de shock—, ¿Entiendes lo que acaba de suceder Tony?
—Gabriel lo hizo por ti, por Dios ¿Qué esta pasando con él? No entiendo que esta pasando, tienes que ir a verlo. Realmente lamento haberte metido en esto, yo no sabía que esto ocurriría.
Raffael decidió acatar el consejo de Tony y fue en busca de Gabriel para que le explicara lo que estaba sucediendo.
«La lluvia me estaba atormentando, era como si el cielo me recriminara mis acciones pero ¿Qué se puede hacer en estas situaciones? Yo no pedí esto, solo quería que mi amigo estuviera bien, no quería que alguien muriera».
Raffael llego hasta la guarida de la Mafia y solicito hablar con Gabriel, ninguno de los miembros dudo en obstruirle el paso ya que su Jefe les había dado órdenes estrictas acerca del profesor.
El joven profesor llego ante el Mafioso y con todo el valor que pudo juntar finalmente hablo.
—Puedes explicarme ¡¿Qué diablos te sucede?! No necesito que me protejas de nadie ¡Yo puedo cuidarme sólo!
—También ¿Contra los explosivos? Me importa un carajo la vida de los estudiantes, tampoco me interesan los profesores. Me interesa lo que sucede contigo, te necesito con vida para poder manejar ese Instituto, te recuerdo que hicimos un trato.
—Explosivos... ¿A qué te refieres con eso?
Raffael esperaba ansioso la respuesta de Gabriel, el Mafioso simplemente apreciaba con atención esos ojos grises, en ellos había preocupación, fácilmente eran como una ventana transparente a su alma.
—Ibas a morir calcinado, por que Rizzo ordenó que te mataran a ti y a tu amigo, vas a vivir más tiempo gracias a mí, pero si sigues portándote como un imbécil yo mismo me encargare de matarte. Tengo problemas gracias a ti, entramos en Guerra con la Familia Rizzo, van tras tu cabeza ahora cuídate sólo.
—No puedes dejarme por mi cuenta ¿Ahora qué voy a hacer? Y sobre todo ¿Qué pasara con Tony también? Lo que dices suena realmente grave —respondió Raffael con ansiedad mientras tomaba la camisa de Gabriel—, no tengo idea del por que esta ocurriendo todo esto.
—Lo mando a Inglaterra para que este a salvo, si es que tanto te preocupa, pero tú te quedas conmigo, prometo que no te faltara nada y sobre todo tendrás seguridad.
Solo que seguirás a cargo del Instituto, necesito ese lugar para mis negocios ¿Trato?
El Mafioso tenía acorralado al joven de ojos grises, Gabriel se aseguró de postrar una de sus manos en la pared y vigilar los movimientos del menor. Raffael estaba nervioso por la cercanía del mayor, sin embargo se apresuró a quitar todo mal pensamiento de su mente.
—Acepto tus condiciones, aunque no puedo creer que crea en las palabras de un mafioso, realmente hay algo mal conmigo.
—Piensa más bien en como vas a pagarme todo lo que me debes cariño, por que nada es gratis —dijo con una sonrisa—, y no te dejaré escapar hasta que saldes tu cuenta conmigo.
Raffael trataba de entender lo que acababa de pasar.
Y la peor parte es que ahora se encontraba sólo, ya que Gabriel tenía asuntos que resolver.
Quizás debía de ir a casa, pero uno de los guardias lo detuvo.
—Sr. De la Vega, no puede salir de aquí, tengo órdenes estrictas de no dejarlo salir. Tenga por seguro que le proporcionare todo lo que desee.
—Pero ¡¿Por qué?! Tengo que dar clases en el Instituto, así que no puedo seguir aquí. No quiero perder mi trabajo, lo necesito para sobrevivir.
—El Instituto estará cerrado un tiempo debido a que la policía esta ''investigando'' el asesinato de Rizzo, es solo una cortina de humo para evitar los reproches de la prensa, usted no puede rondar por esos sitios, si no se verá implicado como el primer sospechoso.
«Tal vez ahora no entienda el nivel de riesgo que corre, pero es necesario que por el momento quede resguardado por su propio bien.
Justo ahora estamos como si jugáramos una partida de domino, elaboras una estrategia... esperando que resulte ¿La suerte está de mi lado? O es sencillamente un poco de ingenio»
Llegó un punto en el que Raffael no se sentía cómodo estando ahí.
Los guardias estaban cuidándolo a todo momento, no podía ni siquiera hacer ninguna especie de ruido, por que de inmediato había un montón de gente a su alrededor. La ventaja es que al menos Gabriel le había dejado ropa a su disposición.
Los días pasaban y las cosas no parecían mejorar, Gabriel parecía que lo había abandonado, nadie podía darle información acerca de él.
Hasta que de pronto un día inesperado volvió a verlo.
—Quisiera saber ¿Cuándo voy a poder salir de aquí?
De pronto los guardias entraron con unas maletas, Raffael inmediatamente las reconoció, aquellas eran las maletas que tenía en su departamento. Las abrió para ver su contenido y vio que tenían todas sus pertenencias, entonces realmente se asustó.
Gabriel no lo dejaría ir tan fácil, ganaría el mayor tiempo posible.
Le había costado mucho dinero tener a Raffael como para perderlo tan pronto.
Hace unas horas el Mafioso fue al departamento de Tony por las cosas de Raffael, y le obsequio unos boletos de viaje para que se marchara del país.
—Hiciste bien tu trabajo Tony, sabes que soy un hombre generoso, por lo tanto aquí esta lo que te corresponde —suscitó Gabriel mientras abría un maletín lleno de dinero—, gracias por tus servicios.
—Raffael tiene su carácter, pero en el fondo es muy susceptible... no le costara mucho tenerlo quieto, por lo tanto no hay de que preocuparse.
«Todo ser es fácil de domar, solo hay que encontrarle el modo»
Un maldito traidor que vendería su alma si pudiera, eso lo sabía a la perfección el capo de los Lombardi.
Aún le tenía guardado el tema de Rizzo, pero solamente por Raffael era que todavía no lo mataba.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top