— ¡Es la B! — gritó Bang — La hoja de la maestra dice que es la B, pon la B Lixie.

Lee reprimió una risa decidiendo hacerle caso a Bang y rellenar el círculo que tenía la B.

Hoy era su examen de biología, y bueno, el chico no había estudiado por tener un maratón de películas con su amigo.

Había sido de los mejores días de su sencilla existencia, había reído, llorado y bromeado, y por primera vez en mucho tiempo, no se había sentido solo. Las carcajadas, los terribles intentos de consolar de Bang lo habían abrazado tan cálidamente que olvidó por completo todo, centrándose solamente en ellos.

— Oh, esa es la C, corre Lixie, ya casi termina —alentaba su amigo

Varias respuestas sopladas después, Lee salía del aula con una gran sonrisa traviesa.

— ¿Acabo de hacer trampa en un examen? — se preguntó a sí mismo, mientras caminaba por los pasillos —. Oh por dios, ¡He hecho trampa en un examen, por primera vez!

— Cállate Lixie, no hiciste trampa, porque nadie te paso las respuestas, solo era yo gritándote las respuestas.

— ¿En serio? — Lee miro incrédulo a Bang, el chico asintió repetidas veces — ¡Eso es hacer trampa!

Lee no se percató de un tercero que lo miraba como si estuviera loco, le estaba hablando prácticamente a la nada.

— Alguien te está mirando muy raro — dijo Bang — creo que piensa que estás loco.

Las mejillas de Lee se sonrojaron en demasía, a veces olvidaba que los demás no podían ver a Bang.

— ¡Lixie! — gritó alguien a sus espaldas, no fue necesario voltear, Lee y Bang sabían quién era

— Pff, ya llegó el chaparro ese que se cree tu amigo — musitó Bang, aunque fue escuchado por Lee.

Lee estaba dispuesto a contradecir a su amigo imaginario, pero Seo se acercó antes de que pudiera si quiera abrir la boca. Seo paso uno de sus brazos por los hombros de Lee y Bang simplemente lo miro mal, a los dos, para después desaparecer.

Eso era lo que Bang hacía cuando Lee y Seo se juntaban, una vez Felix le preguntó la razón a Bang pero este solo había dicho que era porque no quería incomodar.

— Tú sabes bien que tu presencia no me incomoda en lo absoluto.

— No se trata de eso Lix, se trata que es muy raro como solo puedes concentrarte en uno a la vez.

— Eso no es cierto, puedo escuchar a los dos — puchereó.

En fin. Se había acostumbrado a estar con Seo sin tener a Bang cerca.

— ¿Cómo has estado Lix? — ambos caminaban abrazados directo a la cafetería, por un poco de almuerzo — Hace días que no te veo.

— He estado bien hyung, ¿Qué tal usted? el año está por terminar, y es su último ciclo escolar

— Ni que lo digas — bufó —, los profesores se han puesto en el plan más pesado, con todos sus trabajos y proyectos para entregar

Lee no le dio una respuesta concreta, solo asintió dándole la razón.

El rato que pasó Felix con Changbin se extendió por todo el tiempo de receso, platicaron de hasta porque el cielo era azul.

Bang los observaba desde una distancia prudente, Felix no lo sabía pero Bang no era capaz de estar sin él. Mientras observaba Bang tenía ese tipo de sentimiento de estar siendo desplazado. Aunque era lo correcto, ya no le quedaba mucho tiempo y tenía que acostumbrarse a eso.

Mientras Bang velaba el sueño de Felix, el susodicho hacía muecas entre sueños. Algo que hacía mucho y si le preguntaban a Bang, creía que era muy tierno ver a Felix hacer muecas mientras dormía, parecía un lindo gatito.

Ver a Felix dormir le transmitía cierta tranquilidad. Sin embargo, de un segundo a otro Felix empezó a llorar, mientras se movía inquietamente.

— Hey, Lixie — las manos de Bang se posaron en las mejillas del contrario, tratando de hacerlo despertar

Lee solo musitaba jadeos.

— Felix, despierta.

Al enésimo intento de hacer despertar a Felix, este lo hizo. A penas sus ojos enfocaron a Bang, lo abrazó con fuerza.

— Chris... — la voz del chico sonaba tan rota

— Estoy aquí Lix, estoy aquí.

— Quédate conmigo, por favor — pidió entre sollozos lastimeros.

— Me quedaré todo el tiempo que me necesites, Lix, estaré contigo.

— Siempre, por favor, siempre — pidió.

Siempre era mucho tiempo, y este para él solo era una cuenta regresiva.

Luego de arrullar el cuerpo de Felix por varios minutos, Lee quedó completamente dormido nuevamente.

Bang se sentía tan mal, a pesar de que poco a poco Felix mostraba mejoría, había algunas veces donde tenía pequeños episodios de ansiedad.

— Chan.

— Shin — respondió el 'saludo' de la contraria.

— Sé que pediste más tiempo, pero los superiores se han percató de lo que has estado haciendo y están furiosos — la chica odiaba ser mensajera de terribles noticias —, lo lamento pero tienes que venir conmigo.

El chico miró al cuerpo durmiente, todo esto siempre había sido por él. Acercándose a su lado dejó un beso en la mejilla derecha.

— Volveré, duerme bien — aún cuando Lee dormía, sonrió al escuchar la voz de Bang.

Los cuatro personas frente a él nunca se habían visto tan intimidantes hasta ahora.

— Sujeto 00128 — Song KiByun era el líder de todos los quiméricos existentes en el país — Hemos sido informados de tu falta, ¿Algo qué decir?

— Señor, me disculpo por la gran falta que he cometido, pero le solicitó más tiempo.

— Sujeto 00128, usted ha roto la regla más importante que le hemos puesto, ¿Y solicita más tiempo? — preguntó incrédulo — En todos los siglos que se nos ha permitido ser, nunca ninguno había cometido tal falta de respeto

Bang no podía simplemente decirles su principal causa. Pues si lo decía, la vida de Felix tendría que ser borrada, ningún ser humano, mayor a 10 años podía saber la existencia de su especie, no sabía la razón pero sonaba estúpida.

— Sé nos ha informado que ha estado teniendo contacto con un humano — hablo otro de los superiores —, nuevamente, sujeto 00128.

— Espero que conozca las consecuencias de sus faltas, sujeto 00128.

— Las conozco señor, sin embargo, solicito permiso de hacer más tiempo, después de eso estaré dispuesto a recibir las consecuencias.

— Tiempo — Song repitió la palabra, como si pudiera saborear el significado — ¿Sabe usted qué es el tiempo, sujeto 00128?

Lo sabía, pero no podía decirlo.

— Lo desconozco, señor.

— El tiempo es algo que cambia, algo que es inpredecible, algo que avanza sin poder ser detenido, y usted en cambio, viene frente nosotros y nos solicita tener más tiempo, pero — Song hizo una breve pausa — ¿Por qué sujeto 00128? ¿Es por aquel ser humano que usted está cuidando?

Bang quedó completamente sorprendido, ellos sabían exactamente la razón del porque había roto las reglas, sabían lo que él estaba haciendo, sabían sobre Felix.

— Nuestra principal misión desde que aparecemos en la vida de nuestros creadores, es hacerles felices y estar con ellos, sin embargo, mi creador ha sido capaz de verme de nuevo, por lo tanto el necesita de mi — tomo un poco de aire para seguir su habla.

— Aún creo que él no está listo para mi desaparición, es por esa la razón por la que estoy solicitando más tiempo, señor.

Por unos segundos, la sala quedó en completo silencio.

— Nos ha dejado totalmente sorprendidos sujeto 00128 — la mirada que recibió de Song, le dio el sentimiento que se saldría con la suya — Pero, sujeto 00128, ¿Si nosotros le damos el tiempo, ¿será usted capaz de atenerse a las consecuencias?

Conocía las consecuencias, y no era lo que quería, sin embargo si las evadía sería peor, para él y para Felix.

— Lo haré, tiene mi palabra.

Esbozó una sonrisa incómoda.

— No me mires así — dijo sin mirarlo directamente.

— ¿Así? — se hizo el desentendido — ¿Cómo es eso?

— Justo cómo lo estás haciendo, como si fuera algo digno de admirar.

Bang soltó una risa entre dientes.

— Para mí, eres digno de admirar.

— No lo digas así — se removió en su asiento — es incómodo.

Con un rápido movimiento, Bang volteó la silla de Led, quedando frente a frente, mirándose directamente.

— Escucha bien Lee Felix — su tono era verdaderamente serio —, sé que las personas te han tratado de una manera desagradable, te han hecho dudar, te han lastimado demasiado — no quería decirlo, pero debía de hacerlo —. Sé que te has sentido solo, pero escucha, no lo estás ¿De acuerdo? Jamás has estado solo, tus padres, la señora Kang, jamás te han dejado solo. Jamás te hemos abandonado. Los humanos llegan a sentirse solos, pero ciertamente nunca lo han estado.

Si antes se miraban fijamente, ahora solo era Lee evadiendo la mirada del contrario, y Bang mirándolo fijamente.

— Te amo tal como eres, para mí eres, perfecto, y eso debería ser suficiente.

A pesar de que ya lo había confesado, Felix no se acostumbraba al sentimiento que esas palabras le provocaban, era como si un calor agradable se estableciera en su pecho.

— Me cuesta creerlo — confesó —, me cuesta creer que alguien pueda amarme, ni siquiera yo puedo amarme, no puedo creer que alguien sea capaz de amar a un gordo, a un cerdo como yo.

— Entonces tienes una idea de amor errónea — su mano levantó el mentón del chico, encontrando sus miradas —. Te lo dije antes, el amor es encontrar esos defectos y amarlos, te lo digo ahora, yo no te amo por tu apariencia física, te amo por lo que eres, tú y solo tú.

Para ese punto Felix soltaba lágrimas, no sabía si eran de tristeza o qué.

— Si yo puedo amarte, cualquiera puede hacerlo, incluso tú puedes amarte a tí — con sus pulgares secaba las lágrimas del chico — Sólo, por favor, cree en ti, cree en que puedes hacerlo y deja de escuchar las voces externas y solo escucha la tuya, escucha todas aquellas voces que te digan lo maravilloso que eres, no aquellas que están empeñadas a destruirte más.

— Chan... — soltó su nombre en un sollozo.

— No eres del tipo que se rinde fácil — Bang lo miró de la manera más tranquila que pudo, transmitiendo confianza —. Voy a estar contigo Felix, siempre, no importa cómo, estaré contigo.