-De vuelta al jûęgø-

Habíamos pasado más de la mitad del día hablando entre las tres. Lo típico que se hace entre amigas; les conté cómo me iba, y ellas me contaron sobre sus vidas. Hablamos un poco sobre nuestras relaciones con compañeros de estudio, nuevos amigos, y unas cuantas cosas más.
Decidimos, al final, salir un rato. Pero hacia un infierno de calor así que no sucedió.
La razón por la que estábamos todas aquí, es que esperábamos juntarnos todos.
Había uno que otro que no podía. Pero la mayoría si, así que habían decidido unirse a nuestra decisión.

El punto de reunión, era un centro comercial de la ciudad, al día siguiente. En la tarde.

Revisé la hora. Ya eran casi las 11 de la noche. Nos habíamos pasado todo el día tonteando. Mi madre ni siquiera vino.
Las chicas se despidieron y fueron. Y yo solo me despedí de los hermanos y de Toriel y Asgore. Me devolví a la que sería mi habitación por un rato, estirándome. Iba a entrar cuando escuche algo. Me volví en mis pasos, para observar por la ventana del pasillo. Afuera estaba todo obscuro. No había luna llena, así que con dificultad se veía algo. Pero sé que alcance a notar algo.

A lo lejos, algo cambio.

No podría decir que. Por alguna razón, una parte de mi decía que siempre fue así. Pero yo creía- no. Yo sabía que no era así. Esa pequeña parte estaba diferente en algo.  Suspiré, y me fui a encerrar y a dormir a la habitación.

-//-/-//-/-//-/-//-/-

-¡Toriel!- llame. Pero no hubo respuesta. -¡Asgore! ¡Papyrus!- no había una sola respuesta. De ninguno. Gruñí. -¡Sans!- y a pesar de los gritos, nadie respondió. Llegue hasta la cocina. Busque por todos lados, en busca de alguna nota o algo, pero no encontré nada. Tome una hoja y una pluma, y anoté;

"Para quien llegue esta nota;
Estuve media hora esperando en casa pero nadie llegó, así que decidí salir. Voy a ir a visitar a Flowey. Ya saben, como en los viejos tiempos. Cualquier cosa, mi teléfono tiene pila.
Cuídense mucho
-Andy"

Deje la pluma al lado y deje la nota en la mesa. Fui a la habitación para agarrar algunas cosas, algo frustrada. Me cambie, agarrando un poco de ropa más adecuada para caminar mucho, y una bolsa cruzada. Como las adoro. No agarre nada de la habitación, más que un cuaderno pequeño de notas, un borrador y un lapicero con varias puntillas. Dentro de la bolsa ya llevaba el monedero, cargador del celular y el mismo, los audífonos, curitas, una botella de agua, dulces, y una que otra cosa.
Y con algo de determinación, salí de casa, encaminándome al, afortunadamente no tan lejano, monte que ahora llamamos Ebott.

Al final termine pidiendo un "taxi".
Estaba muy lejos para ir a pie, y como no tengo carro, no pensaba ir así como así.

De camino me quede pensando..

¿De donde había salido el nombre del monte? Estoy segura que antes de que salieran los monstruos, nunca tuvo nombre. De hecho, esa área contaba como área privada del gobierno. ¿Como entramos ahí? No recuerdo ningún seguro o bloqueo a esa área cuando llegamos. En ese entonces todo era normal. Pero ahora que lo pienso bien... ¿como sucedió todo? Íbamos a ir a un restaurant ese día. Y terminamos arriba...

Bueno.
De hecho terminamos abajo. MUY abajo.

-Un poco más..-.

Suspiré. Ya habíamos llegado. Pagué a quien me había traído, y baje. Me pregunto si estaba segura de dejarme en MEDIO del desierto, y yo solo dije que si y seguí mi camino.
No recordaba del todo como subir, pero después de un rato, ya estaba en frente de la salida del Underground. Con cuidado, empecé a adentrarme.

-Justo donde te necesito-

-¡Ya cállate!, ¿¡Quieres?!-... no hubo respuesta. Solo bufé y seguí mi camino. El Underground se veía más apagado que antes...
Había uno que otro monstruo que seguía ahí, pero no eran muchos. Y la mayoría de ellos, solo esperaba reunir dinero suficiente para salir a la superficie.

Me asuste cuando, en medio de las ruinas, mi teléfono sonó.

-¿Bueno?- pregunté al momento de contestar la llamada.

"-¿Kid? ¿Dónde estás?-" pregunto la voz de Sans al otro lado de la línea.

-Fuera de casa-.

"-Si, eso ya lo sé. ¿En que parte del Underground estás ahora mismo?-".

-Se llama, "no te importa". Bonito lugar, ¿eh?-.

"-espera, ¿Estás molesta?-".

-No, Sans. Me dejaron sola en la casa, sin siquiera avisar a dónde rayos iban, pero estoy feliz. Mira, deja te envió corazones-.

"-Lo siento mucho por eso. Undyne y Alphys llegaron y llamaron. Fuimos a recogerles. No queríamos despertarte por qué pensamos que sería una gran sorpresa-".

Suspiré. -Si, yo también llevaré una sorpresa, por eso no te puedo decir. Debo irme en cuanto vaya de vuelta llamaré a Toriel-.

"-Niña, esper--" y colgué en ese momento.

No me mal entiendan. No estoy super enojada, o algo así. Pero soy muy vengativa, y quería darle un poco de su propia cucharada a ese esqueleto.

Seguí caminando hasta que llegue al inicio. A la cama de flores.

Y había alguien ahí, esperando.

-Hola, Flowey-.

La flor se sorprendió y volteo, asustada.

-¿T-tú?-.

Sonreí y me acerqué a ella, sentándome a su lado.

-Mucho tiempo, ¿eh? Lamento no haber venido. Me fui a estudiar-.

-No... no debes estar aquí.-.

Le vi con rareza. -¿Qué? ¿No me quieres aquí? Se que me odias un poco pero--.

-¡No es eso, idiota!- interrumpió -Aquí es donde él puede entrar sin dificultad. Este es su portal. Debes irte-.

Fruncí el ceño. -¿Él? Asriel, a quien te refieres?-.

La flor, aterrada, noto a alguien tras de mí. -¡Lo siento, Andy!- y se escondió en la tierra.

-Creo que se refería a mi-.

Una voz extraña, cortada, y con diferentes tonos se escucho aterradoramente cerca de mi. Voltee con velocidad, pero lo único que pude ver fueron hilos azules y una sonrisa perturbadora en la cara de un ser totalmente negro.

Sentí algo arrastrarme desde el cuello, brazos y piernas, y un vacío bajo de mi. Un área blanca infinita.
Y todo se volvió negro.

Guardando...
Partida g͎͚̥͎͔͕ͥ̿u̟͎̲͕̼̳͉̲ͮͫͭ̋ͭ͛ͣ̈a̘̫͈̭͌͛͌̇̇̍r̼̯̤̈ͭ̃ͨ̆d̥̝̮͙͈͂̐̇ͮ̏̔̀̚ͅa̘̫͈̭͌͛͌̇̇̍d̥̝̮͙͈͂̐̇ͮ̏̔̀̚ͅa̘̫͈̭͌͛͌̇̇̍.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top