Fantasía N° 4 "¿Encerrémonos?"
Idiota.
Según la opinión del más sabio de los mortales sobre la tierra, Oh Nalgas Supremas Sehun, esa palabra de tres sílabas y seis letras definía perfectamente a su gigantesco amigo de piernas torcidas y neuronas insuficientes.
Aún sentía ganas de golpear a Chanyeol contra la superficie plana más cercana, desde que el más alto interrumpió su noche de películas con Minseok hyung por la simple razón de no poder aguantar hasta el lunes para contarles todo lo que hizo en su tan esperada cita. No pudieron negarse, muy a su pesar.
Así que la empalagosa pareja escuchó lo que según su amigo fue la cita más perfecta en la historia de las citas perfectas, alardeando sobre lo lindo que se veía Baekhyun y lo encantador y amable que fue con él a pesar de sus actos torpes y estúpidos, la pareja se la pasó soltando grandes carcajadas cada dos segundos porque el gigante siempre fue tan necio en cuanto a romance se refiere, y les causaba gracia que Chanyeol contara con tanta emoción cada uno de los desastres ocurridos en el restaurante, el cine, el parque y la calle, ocasionados principalmente por culpa suya.
Pero terminaron sermoneándolo y golpeándolo con todos los cojines existentes en la casa de Sehun, cuando les contó la experiencia del beso.
¡Diablos! Aún le parece estúpido e inconcebible que no haya hecho nada cuando el bajito lo besó. Según él, se quedo en estado de shock y fue tan rápido que apenas tuvo tiempo para procesarlo. Según Sehun, el gigante fue tan cobarde como para no empotrarlo contra la pared más cercana y devorarle la boca como si sus labios estuvieran hechos de chocolate, además piensa que el más alto debió acercarse primero y besarlo, no al revés. Osea, ¡¿dónde quedó la dignidad de los semes activos machos pecho peludo?! ¡¿Dónde?!
Claro que Chanyeol no escuchó nada de lo que dijeron y siguió sonriendo como idiota rodando en su sofá, aún siendo bombardeado por cojines con bordados extravagantes, mientras gritaba ¡Me besó! cada cinco segundos. Le alegraba el estado de felicidad de su amigo pero él no estaba para soportar este tipo de espectáculos cuando debería estar abrazando a Minseok hyung mientras hacen pequeñas cositas de adultos. #ChanyeolRIP
Por ello, ni bien terminó de rodar y se calmó, lo botó a patadas de su casa y le tiró su celular en la cara diciendo ¡A la próxima solo llama, imbécil!
Así que tenía dos fuertes razones para querer golpear al más alto.
¡¿Qué ya no existe la consideración hacia los maknaes?! #Indignación
Además también estaba afectado porque su adorable y tierno Minseok hyung prefirió ir a la firma de autógrafos de un tal Kim Shongdé esa tarde en vez de acompañarlo a cuidar a sus sobrinas revoltosas. No sabe quien diablos es ese tal Shongdé pero ya lo proclama su enemigo número 1 en la lucha por el amor de Minseok hyung. Debió haber escuchado quien era cuando Minseok le hablaba de él y su grupo favorito, lástima que lo único que recuerda es algo acerca de ultimate bias, o algo así.
Lo que colmó su paciencia aquel horrible domingo fue la llamada que recibió de un Minseok más emocionado de lo normal - los celos se apoderaron de él, porque ni en sus citas se le oía tan emocionado - diciéndole que más tarde podrían tener su habitual noche de películas, películas que al final no vieron porque toda la noche hasta la llegada de Chanyeol, Minseok estuvo alardeando acerca de Shongdé y como el tipo conversó animadamente con él mientras firmaba sus 20 discos originales. Así como destacaba su sonrisa gatuna tan bonita, sus ojos tan tiernos y chispeantes y su alegría tan contagiosa. Sehun pensaba que su sonrisa era mucho más bonita que la de ese camellosaurio, ni hablar de sus perfectos e inexpresivamente profundos ojos y pues, lo de la alegría si podía ser cuestionado.
En parte agradecía a Chanyeol haber interrumpido el monólogo de Minseok sobre lo que sintió al tocar las manos de Shongdé y su emoción incontenible.
Pero no se lo iba a decir. ¡Oh, claro que no! ¿Dónde quedaría su honor, si no?
Aún tenía un par de cosas que aclarar con el más alto, cosas implicadas con las palabras besos y confesiones.
Su hyung era muy estúpido y como el buen dongsaeng que era tenía que ayudarlo y tal vez solo tal vez darle más empujoncitos.
El lunes se encargó de conversar seriamente con su gigantesco amigo y poner los puntos sobre las íes.
- Tienes que besarlo. - soltó.
^^
«Tienes que besarlo»
Esas tres simples palabras estuvieron atormentando la mente de Park Chanyeol en lo que quedaba del día.
16 letras que encerraban todo un hecho que cambiarían las cosas drásticamente. Que podrían cambiar todo.
«Sí o no, he allí el dilema»
Lo cierto es que Chanyeol no quería arruinar las cosas con Baekhyun. Prefería ir despacio, lento, al ritmo en el que el castaño se sintiera cómodo.
"Si sigues así no llegaras a ninguna parte, Yeol"
Era consciente de eso, pero ¿por qué arriesgar la luna, cuando ya tienes parte de las estrellas?
No quería que Baekhyun lo volviera a rechazar, no por el miedo a abrir una grieta más en su ya dañado corazón, sino porque uno de sus mayores miedos desde hace dos años era el perder a Baekhyun aún sin haberlo tenido antes, pues el castaño era una de las pocas personas que podía asegurar, lo hacían plenamente feliz a parte de su familia, con sonrisas pequeñas, rubores constantes y vergüenzas eternas, Baekhyun siempre fue aquello que Chanyeol estuvo buscando, la persona indicada para él a pesar de haberlo rechazado tanto, y Chanyeol no quería perderlo ni arriesgar todo aquello que había logrado, no quería que Baekhyun huyera de él ni se alejara por repulsión, quería tenerlo cerca, abrazarlo en busca de latidos rápidos, hacerle ver las estrellas con cada beso, tocar el cielo con cada palabra llena de amor, y sacarlo de su burbuja a base de sentimientos reales y no fantasiosos.
Quería ser real para Baekhyun, tan real como el latido de su acelerado corazón, tan real como el sol alumbrando esa mañana, tan real como sus sentimientos.
Ser más que una fantasía.
Y muy, muy en el fondo de su mente, sabía que si no hacía nada, tal vez nunca lo lograría.
¿Para qué explorar el espacio en busca de una supernova, si al final quedaras a la deriva y sin ninguna de las estrellas?
^^
- ¡Tú!
Baekhyun sabe que en ocasiones - casi siempre - es impulsivo, lo demostró ese fin de semana, a veces pierde lo poco que le queda de cordura y muchas veces eso le ha jugado en contra, pero también es consciente de que ciertas cosas tienen un límite y él no quería perder oportunidades que tenían un gran índice de probabilidades de éxito rotundo.
Tal vez por eso dejo de lado su vergüenza, y decidió hablarle al gigante aquel miércoles por la mañana.
O más bien tratar de hablar con él.
- ¡Ni se te ocurra correr, gigante!
Mientras huía.
Para suerte suya y desgracia del gigante, el azabache era muy torpe como para no tropezarse cada dos por tres con cualquier cosa, fue así que logró jalarlo de las patas y arrastrarlo a lo que sería un trágico final o un mejor futuro.
^^
El sol brillaba, las aves cantaban, la brisa era fresca y los estudiantes sonreían ante la probabilidad de un día perfecto libre de obligaciones.
Una persona normal elegiría este día para salir a pasear, relajarse y disfrutar de los pocos días donde la tarea era escasa y la presión por entregar trabajos era mínima. Días donde los padres no estaban y podías cumplir con los deberes hogareños a última hora. Tal vez tener una cita o simplemente salir a tontear con los amigos en busca de diversión "sana no tan sana". Quedarse en casa y disfrutar de buena televisión, películas interesantes, espectáculos espontáneos o terminar de leer aquel libro que nunca pudiste concluir, también era una buena opción.
Una persona normal haría eso.
Pero claramente, Byun Baekhyun no era una persona normal
- B-Baekhyun, ¿e-estás s-seguro de esto?
- Como nunca lo he estado en mi vida, ahora métete rápido, que nos cachan y somos historia, Yeol.
¿En qué clase de mundo una persona normal se encerraba en el armario del conserje después de clase?
El más alto estaba por tener un ataque epiléptico - a pesar de no padecer de esa enfermedad - y huir despavorido mientras se iba a confesar a la iglesia más cercana y cumplía con su penitencia por los incontables errores que cometió en estos meses producto de su enamoramiento por el más bajo.
Claro que no se arrepentía de ninguno pero el punto no es ese.
El punto es que el hecho de que ambos ingresen a un espacio de unos 2 metros cuadrados lleno de escobas, baldes, trapeadores, plumeros, trapos y productos químicos de limpieza, le aterraba un poquito. #JelMePlis~
El bajito, haciendo caso omiso de las quejas del más alto acerca de que esto sería un gran error y lo más preferible era huir antes de que alguien los vea en los pasillos culminadas ya las clases, lo empujó adentro del cuartucho y cerró la puerta tras sí, mientras chillaba de alegría, porque para él todo esto era muy emocionante.
Podía sentir el olor a lavanda francesa, seguramente proveniente de uno de los muchos productos de limpieza, le dio un vistazo a las manchas de humedad en el techo y a las estanterías con plumeros y trapos de diferentes colores.
Pero si le preguntaran, lo mejor que vio en ese pequeño espacio fue el perfil de Chanyeol.
La poquísima luz que los alumbraba provenía de las rendijas de la puerta, algunos huecos pequeños en la misma, y Baekhyun agradecía inmensamente al personal de limpieza por no exterminar a las polillas y que estas siguieran haciendo esos diminutos huecos en la puerta pintada de azul.
La luz daba de lleno en los pómulos tan finos y perfectos del más alto, sus mejillas eran hermosas, podía ver pequeñísimas pecas, casi imperceptibles en el exterior pero muy claras ahora en medio de la escasa pero oportuna iluminación, podía compararlas con las estrella del cielo, tan ínfimas y tan bellas, sus mejillas se veían más grandes ahora, tanto que le daba ganas de estirarlas y ver que tan grandes eran a pesar de su apariencia algo delgaducha, comprobar si competían con esos casi 7 centímetros de los cachetes de Minseok, cuando obviamente los de su regordete amigo ganarían, pero eso podía pasar a segundo plano, había algo mucho más interesante que ver.
Sus ojos. A Baekhyun siempre le gustaron, tan expresivos y gigantes, tan negros y brillantes. Aquellos universos negros brillaban aún más ahora, su iris siendo iluminada por la luz amarilla y sus pestañas se meneaban coquetas ante cada parpadeo. Baekhyun se maldecía enormemente por no haber traído su celular y con él poder tomarle una fotografía a aquella hermosa figura alumbrada por el sol y opacada por la oscuridad del espacio.
Tan perfecto, tan especial, tan efímero.
- B-Baehyunee, ¿tengo algo en el rostro?
Baekhyun podría escuchar esa voz haciendo eco en el diminuto espacio, todo el tiempo que pudiese.
- ¿Por qué lo dices, Yeol?
- Me has estado observando desde hace rato, supuse que seguro tenía algo en mi cara y por eso no quitabas tus ojos de mí.
Créeme no es por eso...
- Sí, tienes algo en tu mejilla, déjame quitarlo.
Una pequeña mentirita no le hace mal a nadie.
- E-Está b-bien.
Baekhyun acarició su mejilla, suave, lento, casi eterno. Sus dedos picaron por querer tocar más. Su cutis debería ser descrita como perfecta, su piel tan tersa y pura como imaginó, a pesar de haberla tocado antes, sintió como si fuera la primera vez que lo hacía. Quería acunar su rostro, observar cada detalle de él, dibujarlo en su mente y guardarlo bajo siete llaves para que nadie más que él lo pudiera ver.
Quería...
- Listo, Yeolee. Tenías una mancha de polvo, debes ser más cuidadoso, que pasa si tu madre te ve sucio y luego piensa que te he hecho cosas malas. Eso no puede pasar, Yeollie.
Pero tal vez ya las hubiera hecho.
Sin ser consciente, sin estar enamorado. Tal vez en pleno proceso.
Tal vez ilusionado...
- C-Claro que n-no. Dime, Baekhyunnie ¿qué hacemos aquí?
Exactamente eso ¿qué hacían aquí? No pensó en una excusa lo suficientemente creíble.
Boqueo buscando una respuesta.
No tenía una razón específica, solo actuó sin pensar cuando Luhan le contó acerca de dos estudiantes que estuvieron besándose en uno de los tantos armarios del conserje, que los descubrieron y la oficina del director fue testigo de su relato falto de sentido acerca del por qué se escondieron ahí, haciendo memoria, recordó que leyó una historia parecida y eso le pareció extremadamente fascinante.
Simplemente deseó ser ellos, sentir la adrenalina y la euforia correr por sus venas mientras lo prohibido por normas estudiantiles se llevaba a cabo en aquel pequeño espacio.
Aunque sonara ridículo.
Así que no tenía una respuesta coherente. Pero buscaría una.
- Es parte del plan, Yeollie.
Inventó lo demás, algo acerca de su cuarta fantasía y ficción poco convincente y algo barata, relató exactamente lo mismo que le contó Luhan, mientras se perdía en medio de su mirada tan interesada y seductora.
¡Oh, Baekhyun podría vivir de ella!
El gigante no lo sabía, pero en el interior de ese cuartucho, Baekhyun sentía que el espacio era muy grande, que debía ser más pequeño, para así tal vez generar más contacto, tener una excusa para pasear sus dedos por sus brazos, para mirarlo mucho más de cerca, para respirar su aliento y comprobar si el aroma emanado por su cuerpo era natural o simple fragancia de una muy buena colonia.
Pero, bueno, Chanyeol no sabía nada.
El gigante se sintió gelatina cuando Baekhyun le contó acerca de aquel acto que debía ejecutar para cumplir con su fantasía, e hizo caso omiso a la voz en su cabeza que gritaba Bésalo con la voz de Sehun.
- ¿Q-Quieres d-decir q-que quieres que te b-bese? - preguntó estúpidamente.
Oh dios, claro que sí...
- Solo por el plan, Yeollie. No lo olvides.
O tal vez por algo más que eso...
- P-Pero...
- ¿Pero? ¿Acaso no quieres besarme, Chanyeol?
Oh dios. Baekhyun no sabía cuantas ganas tenía Chanyeol por probar aquellos labios color cereza, tan dulces a simple vista y tan suaves a imaginación suya.
Probarlos sería como soñar despierto, volar a través de las nubes y tocar las estrellas.
Como si un mar de mariposas se situaran estratégicamente en su estómago y cosquillearan en su interior.
- N-No e-es eso, s-solo q-que n-no quiero f-forzarte a n-nada que t-tú no quieras, B-Baek.
- Cállate y bésame...
- N-No p-puedo...
«Tienes que besarlo»
- ¿P-Por qué no? ¿Te doy asco, Yeollie?
«Si sigues así no llegarás a ninguna parte, Yeol»
- C-Claro que no, e-es solo que...
«Bésalo»
- No me quieres besar, ¿no es cierto?
«Ahora»
- ¡No! ¡No es eso! ¡Diablos!
«¿Qué hacemos aquí? »
- ¿Entonces qué?
«Es parte del plan, Yeollie»
- Y-Yo n-no quiero que s-suceda así, ¿entiendes?
«No así, tan falso y fantasioso»
- ¡Pero solo es parte del plan, Yeol!
«Una pequeña mentirita no hace mal a nadie»
- ¿S-Solo parte del plan?
«¿Solo parte del plan?»
- Sí, pero si tu no quieres, nada pued-
Fuegos artificiales.
Baekhyun desde niño los veía. Aún recuerda cuando tenía 7 años y los veía con su abuela, sus ojos chispeantes de alegría reflejando las explosiones, su corazón latiendo acelerado por la euforia, sus dedos picando por las ansias de querer tocar las chispitas de colores en el cielo y su interior sintiéndose cálido ante la gran muestra de luz y fuego, juntos.
Fuegos artificiales.
Baekhyun siente fuegos artificiales, ahora, cuando los labios de Yeol tocan los suyos.
Sus dientes chocan y las manos no saben donde ponerse para mayor comodidad del otro, los dedos pican por tocar zonas no descubiertas de sus anatomías y las mariposas y demás insectos empezaron a bailar en sus estómagos.
Sí, exactamente como fuegos artificiales.
No sabe cuando sus labios entraron en sincronía, cuando Yeol se colocó encima de él y sus manos llegaron a sus caderas, cuando rodeó su cuello y empezó a enterrar los dedos en su cabello mientras enrollaba mechones pequeños, cuando los pulgares del más alto empezaron a dibujar figuras abstractas en su piel.
Cuando dejó de pensar coherentemente y su cabeza se lleno de Chanyeol, Chanyeol y Chanyeol.
Lo que sabe es que ahí, con la lengua de Chanyeol pidiendo permiso para entrar a su cavidad bucal y sus corazones martilleando al mismo compás, es donde quiere estar en ese preciso instante.
Rodeados de trapeadores, escobas y baldes, inundados por el olor a lavanda francesa y al aroma que segrega el contrario.
Porque el lugar correcto de su lengua es alrededor de la de Chanyeol, el lugar correcto de sus dedos es entre sus mechones y el lugar correcto de sus labios es sobre los Chanyeol.
Así como el lugar adecuado de su corazón es junto al del gigante.
Sus lenguas se conocieron en medio de suspiros y pensamientos combinados, danzando, luchando y recorriéndose la una a la otra simultáneamente.
En medio de todo, Baekhyun puede escuchar al picorte rompiéndose y yendo a parar al suelo en un ruidoso estruendo, y sabe que ahora están encerrados realmente y eso no podría interesarle menos.
No cuando está viviendo uno de los mejores momentos de su vida, carajo.
Las fosas nasales de Baekhyun se llenaron con el olor a pino combinado con menta de Chanyeol, así como las de Chanyeol se llenaron de los frutos rojos provenientes del aroma de Baek.
Estaba seguro que sus labios están rojos, muy, muy rojos y brillantes.
Sabe que el gigante pesa mucho más que él, pero en medio de manos curiosas y nebulosas confusas, casi no lo siente.
Sabe que el tiempo pasa y seguramente alguien esté preocupado, pero eso ya no importa.
Lo que parecieron segundos se convirtieron en minutos, los minutos pasaron a ser horas y las horas se volvieron infinitas.
Porque ahí con Chanyeol mordiendo sus labios y recorriendo sus dientes con su lengua, el tiempo parecía infinito.
Porque ahí con sus manos posesivamente halándolo de la camiseta, tratando de acercarlo más, la distancia no existía.
Porque ahí, con ambos besándose y convirtiéndose en uno sin hacer nada más que conociéndose con la boca, todo le parecía irreal.
Fantasioso, demasiado perfecto como para ser solo ficción.
Porque esto era más que ficción intentando convertirse en algo real.
Era como sueños tangibles. Reales, tan reales como aquellos besos compartidos y aquellos ojos cerrados escapando de la realidad.
Pero a veces eso se necesita, realidad, para poder escapar de lo imaginario y centrarse en lo que hay a tu alrededor y ser más que solo mera ficción e imaginaciones elocuentes.
Pero la realidad golpeó a Baekhyun de lleno.
Porque las palabras Es solo parte del plan, Yeollie vinieron a él en forma de cuchillas filosas, abriéndose paso por sobre los latidos acelerados y el sudor producto del calor intenso que sienten ahí dentro.
Porque fue allí cuando sus palabras hicieron eco en lo profundo de su alma.
Porque ahora sabe que estaba demasiado ensimismado en aquel mágico contacto para darse cuenta que aquel contacto no era real.
Nada lo era.
Porque Chanyeol se lo dijo aquel fin de semana, que lo admiraba y le parecía extraordinario. Pero eso tal vez no implicaba sentimientos.
Porque existían personas que confundían la admiración con amor y tal vez eso era lo que pasaba ahora.
Porque Baekhyun también admiraba a Chanyeol.
Admiraba su perseverancia, su contante alegría y su gran sentido de protección.
Pero no hay que confundir la admiración con el amor.
Porque el enamorarse es un camino sin retorno, en él que tienes que hacer frente a los peores monstruos para sobrevivir y no morir en el intento.
Como una montaña rusa, con subidas y bajadas, pero a veces estas pueden ser mortales, cuando no están bien fabricadas.
Y así sucede cuando el amor no está bien construido ni elaborado, solo una construcción débil sobre cimientos inexistentes. Eso sucede cuando confundes el amor con la admiración.
Y Baekhyun no quería eso.
Así como tampoco sabía que Chanyeol pensaba exactamente lo mismo.
Pero él tenía algo claro. Que eso que el empezaba a sentir por Chanyeol era más que admiración.
Tal vez eso que los humanos llaman amor sin saber exactamente que es. Tal vez era más que un sentimiento de afecto y dependencia. Tal vez era indefinible.
Porque su corazón no se aceleraba a tal ritmo cuando veía a su grupo favorito, porque sus mejillas no se sonrojaban tanto como cuando uno de sus ídolos soltaba Te amo colectivos, porque su sonrisa no era tan grande cuando su cantante favorito soltaba algún comentario ingenioso o lo miraba especialmente.
Porque sabe que Chanyeol es más que solo alguien a quien admira.
Porque es la persona que le gusta.
Porque es Chanyeol quien lo sostiene ahora, quien lo besa en este instante y quien empieza a sonreír en medio del contacto.
Pero Baekhyun no deja de pensar que tal vez sea admiración, y sonará estúpido, patético y de poco sentido común pero Baekhyun sabe que puede ser así.
Y duele, duele saber que tal vez caiga en lo que aquello que muchos llaman amor unilateral.
Pero como se dijo, no hay marcha atrás. Y espera que sus sentimientos y los del gigante estén a la par.
- Te quiero, Baek.
Baekhyun quería dejar de ser egoísta y tratar de hacer las cosas bien. Pero todos sabemos que tal vez nunca las cosas le salgan como el desea.
Y ensimismado en sus pensamientos masoquistas no escuchó la confesión de Chanyeol, decidiendo empujarlo y alejarlo de sí. Para así poder concentrarse en la realidad.
La cruel y vívida realidad.
Escucha un golpe y una caída.
Chanyeol se golpeó contra el estante de los plumeros y todos les cayeron encima, por la confusión el gigante retrocedió e hizo que las escobas también tambalearan y se derrumbaran sobre ellos, terminado en Baekhyun rodeado de plumeros y paños de colores y Chanyeol con un balde en la cabeza y una escoba entre sus piernas.
No pudo evitar carcajearse antes de que la puerta se abriera.
La consejera escolar acababa de abrir la puerta, cosa sorprendente para Baekhyun teniendo en cuneta que el picaporte estaba roto.
- ¿Qué pasó aquí?
Está de más decir que los sacó de allí y luego los llevó a la enfermería para que sanaran sus heridas y golpes, musitando unos pobrecitos y muchos descuidados a cada paso que daban.
Luego de que la enfermera les aplicara ungüento para sus moratones, la señorita les pidió que vallan a casa y que esto quede como una advertencia, mencionando también lo obvios que estaban siendo al tener sus labios extremadamente rojos.
Ambos se ruborizaron.
Baekhyun podría gritarle que merecían algo peor y que arruinaba su fantasía pero decidió dejar las cosas por la paz y caminar en silencio con Chanyeol a su lado.
Podía verlo sonreír a la nada, sobándose las heridas y tarareando alguna canción pegadiza.
Ambos en silencio, era de todo menos incómodo, porque era cuando Baekhyun podía observar detenidamente a Chanyeol y Chanyeol podría recordarse las mil y un razones por las que gustaba del bajito.
En algún momento, el alto lo tomó de la mano y entrelazó sus dedos.
Generando mariposas y nervios palpables.
Baekhyun se sintió protegido.
Pero la sensación duró poco.
- Gracias por ayudarme con el plan. Eres un gran amigo, Yeollie.
Pudo ver a Chanyeol sonreír una vez más, antes de que sus ojos adquirieran aquel brillo melancólico y él soltara su mano y saliera corriendo.
Baekhyun se sintió vacío, pero comprendió que seguro estaba avergonzado.
Avergonzado, sí, solo eso.
No herido, porque para resultar herido, se requerían sentimientos y más allá de la confusa admiración, Baekhyun no veía nada.
O estaba muy ciego para verlo.
Esa tarde Baekhyun lloró con su madre y Luhan, y rodeados de pañuelos y comida grasosa alta en colesterol fue cuando dijo aquello que se guardó toda la tarde.
- Él me gusta, mamá. Pero él solo me admira.
No podía estar más equivocado.
^^
- Dime qué hago, Sehun.
El rubio suspiró - Solo te queda seguro viviendo en una fantasía, Yeol.
No podían estar más de acuerdo.
- ¿Y si vuelvo a creer que es real?
- Solo te queda sufrir en silencio, Yeol. Así como hacen todos.
Esa noche Chanyeol lloró en brazos de su mejor amigo, mientras las palabras de Baek se tatuaban en su corazón.
«Es solo parte del plan, Yeol»
^^
*inserte música de suspenso. Chan, chan, chan~*
¡Hola! Soy tan mala que las dejo con la intriga. #SoyUnMounstruo
La verdad este capítulo a mi opinión es más corto de lo que supuse, pero estoy conforme con la extensión de palabras...
Sinceramente yo misma me quiero asesinar por haber escrito todo eso, pero al final se entenderá por qué...
Además este capítulo está basado en hechos reales no tan reales, o bueno al menos real en la parte de admiración.
Espero que les haya gustado y si no, dejen sus comentarios aquí.
Sé que carece de algo de gracia como es común ver por acá pero quería que sea algo más emotivo. (?)
Además estoy feliz porque ayer recogí mis SFY y me vinieron las cards de Baek y Chen. #EstoyBendecida okno ¿Alguna tiene un SFY? ¿O un álbum? #MeIgnoraranLoSé
#TeEncontraréSara~
¡Gracias por leer! Besos.
Si esta semana no les doy capítulo, la siguiente actualización tendrá que tener mínimo 9k de palabras o ser doble. Fin.
Psdta: Para que vean que soy caguai (?) Xiumin es Chen biased. Suficiente ChenMin en esta humilde obra (?)
!Las amo!
Bye.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top