Nunca en mi vida he leído un prólogo de un libro completo, aunque  he leído muchos libros. Siempre me han parecido innecesarios para comprender la historia. Pero ahora conozco que la función del prólogo consiste en transmitir al lector aquellas ideas que el autor no puede decir a los lectores explícitamente.  Yo aprovecharé este espacio para contar como fue que estos cuentos nacieron y agradecer a todos aquellos que me ayudaron en especial un amigo muy importante para mí y que fue el primero en leer el primero que escribí….
Todo comenzó un día como otro cualquiera en el medio de una clase de historia. Hacía algunos días que me había leído un libro llamado Carne de perro.  En el libro el autor realizó algunas descripciones sexuales que no me agradaron por ser demasiado obscenas  para mi gusto. Así que decidí realizar mi propia descripción sin utilizar esas palabras que me desagradaran. Fue así como nació mi primer cuento: Viajar en guagua. Recién acabado de hacer salí un momento del aula. Sentado en las escaleras se encontraba un amigo muy importante para mí. Me senté junto a él y apenas notó el papel pidió leerlo. Tras un poco de negación de mi parte y con algo de pena le di el cuento. Cuando acabo sus opiniones fueron tan buenas y tanto me alentó que no tuve más remedio que escribirle más, y más. Poco a poco el rumor de los cuentos se fueron regando por su aula, por la mía y finalmente por la escuela y muy pronto tuve un público muy atento a lo “último que trajo el barco”. Muchos de ellos me brindaron la base para crear el próximo cuento y  sin ellos muchos aún no estarían escritos.  Así uno llamó al otro y muy pronto todos estuvieron hechos. He de mencionar que fueron escritos mientras mi año, mejor conocido como la Era de la Gloria por nosotros  se preparaba para el ingreso, y los cuentos eran una manera digamos que olvidarse de lo que se avecinaba.  Los cuentos hicieron reír, calentaron a la mayoría e incluso destaparon pequeños debates. Lo que más me gustaba de esos días era la cara que ponían cuando los leían y de la sonrisa que tenían cuando me decían que les gustaban mis cuentos y que si no tenía o había hecho otro. También he de agradecerle a mi teacher  Yelián porque fue la primera persona adulta que leyó algunos y me brindó la perspectiva adulta que yo estaba buscando, además de alentarme pues si  a él le gustaban me hacía pensar que tenía posibilidades para realizar este sueño.
Quiero agradecer a toda la Generación de la Gloria por todos los momentos vividos, a los grupos 10mo4, 11no3, 11no6, 12mo1 (mi otro grupo) 12mo2, 12mo3 (mi grupo), 12mo4, 12mo5 y 12mo6 Baby,  Aimet,  Dayana, Sulia, Elianis, Yilena, Jorge, Amalia,Leandro,   la Peluca, Rosmeris, Noel, Alexander, Dariel, Alexei , Lola, Bandera, Bella, Yailí, Sulennis, Lisbet, y demás. . Pero en especial a Anabel, Ivetsy, Leina, Dailín, Milena, Lisbey, Jose, Bismar y fundamentalmente Daniel,  aniki, sin tu ayuda este libro no fuera realidad. Me hiciste crecer como escritor y como persona. Gracias por siempre estar ahí…
A mis amigos, mi verdadera inspiración: Aliana, Alberto, Beatríz,  Bismar, Daniel, Jose,  Frank, Yilena, Yoire Yoán, Nairel,L eina,  Lisbet,  Milena, Ailema, Eldis,  Raiza,  Baby, Lisbey, Yamili, Hugo, Julio Iliana, El Niche, La peluca  La vidal, David,  Anabel,  Ivetsy , Virgen,  Claudia, Elizabeth, Alain, Rosmeris,  Jenny Mary, Yaisleidis, Lisdey…

A Daniel Alejandro Carrazana Chávez, porque sin él este libro no existiría