Tras la conversación, se podía ver a un Xingqiu molesto. Escribía mientras apretaba los dientes y fruncía el entrecejo. Al final tomaba la agenda, la apretaba en su mano y la terminaba lanzando contra la puerta justo cuando alguien más entraba. Una pobre mujer que tan solo le llevaba un té era asustada debido a la acción anterior. En lugar de salir del lugar, recogía el libro arrojado y lo colocaba en el escritorio. Xingqiu se disculpaba y suspiraba. Al final no hablaron del tema ya que él así lo quiso.

Por otro lado Chongyung entrenaba en el dojo pegando a un saco de arena mientras algunos hombres pasaban. Un rumor llegaba en ese momento a sus oídos el cual no le gustó demasiado escuchar. Por un momento pensó en lanzar todo por la borda, pero recapacitó y se calmó. No debía dejarse llevar por aquello y menos sin saber si era real.

- Chicos... no deberíais estar perdiendo el tiempo... - Decía Preservadora de las Nubes, la cual tras la puesta en marcha de aquellos dos, se acercó a Chongyung.

- ¿ Es cierto ? - Su expresión lo decía todo.

- Son solo... -

- Cuando el río suena, agua lleva... - Continuaba golpeando aquel saco, la otra no contestaba. - Ya veo. - Tras aquello fue a por la toalla y se la colocó sobre la cabeza. Se retiró del lugar y se marchó a su habitación. No quería ver a nadie en aquel momento. Tomó una ducha y se acostó sobre la cama con un brazo sobre sus ojos. Se encontraba mentalmente agotado.

Unos minutos habían pasado desde la escena del dojo. Preservadora preguntaba a las dos personas de dónde habían sacado la información, y ahora se presentaba ante el culpable.

- Deberías cortar la lengua de algunos. Algún día se volverá contra ti si no lo haces. - El otro reía.

- Veo que las noticias vuelan. Ha sido rápido. -

- Si, pero nunca imaginé que obligarías a ese niño a hacer algo como eso... -

- Y no tenía la intención de hacerlo, pero he cambiado de opinión. - Al decir esto parecía tranquilo, algo no le cuadraba a la otra pero decidió no intervenir de más.

- Cómo decidas, pero conociéndote estoy segura de que no le has contado tus planes a ninguno. - Suspiraba. - Viejo mañoso. - Y con esto la mujer salía de su despacho.

Volviendo a la habitación de Chongyung, mientras este se hundía en su miseria, alguien llamaba a su puerta., por un lado no quería levantarse de la cama, por otra parte, parecía que aquella persona insistía. Al abrir la puerta, no creía lo que veía. Era Xingqiu, quien no parecía venir a hablar.

- ... - Antes de que pudiera decir una palabra, Xingqiu cerraba la puerta con seguro, y se lanzaba a los labios del otro. Tras un profundo beso que para algunos había durado mucho, y para ellos apenas un momento, Xingqiu se separaba.

- ¿ Podemos... ? - Mostraba una cara de necesidad a la que Chongyung no podía resistirse. Era demasiado tentadora, tanto que su mente estaba en blanco.

Inmediatamente se acercó de forma lenta y colocó sus manos en la cintura de Xingqiu. Tras morderse el labio inferior acercó su cara a la del otro y terminó besándolo de forma intensa pero lenta. El de cabello azulado subió una de sus manos hasta el cuello contrario y con la otra empujaba a Chongyung hacia la cama. Antes de que ambos cayeran tumbados sobre la misma, Chongyung paraba la escena. Se separaba mirando a los ojos del contrario y tragaba saliva. Puede que se arrepintiera de aquella decisión, pero pensó que sería lo mejor.

- Deberíamos parar aquí. -

- Yo... -

- No me malinterpretes, no es que no quiera, pero... - Era todo lo contrario, pero aquel lugar no era el mejor, y en breve no hizo falta decir mucho. Alguien llamaba a la puerta.

- Shengyung, necesito hablar contigo sobre algunos asuntos. - Chongyung miró a Xingqiu y suspiró.

- Dame un minuto, no estoy vestido. - Tomó a Xingqiu y lo metió al baño. Tras eso abrió la puerta. - Perdón, pero acabo de salir de la ducha y tenía que cambiarme, dime. -

- Oh, siento eso. Tan solo comentarte que a partir de mañana usarás otro conjunto y tendrás que ... - tras lo cual le dejaba algunos papeles... Volvió a cerrar con seguro y se dirigió hacia la puerta del baño del cual salía Xingqiu.

- Siento esto, pero me imaginaba que podía ocurrir. - Xingqiu suspiraba y comenzaba a reir. Los nervios se fueron tal y como habían venido. Tras aquello tan solo salía de aquella habitación y se marchaba a la suya. Una vez dentro se tumbó en la cama y recordaba lo ocurrido. Si no hubiera sido por un tercero, hubiera deborado al otro. Sonreía, por el hecho de que no le era indiferente al otro. Le estaba gustando cada vez más y no quería que se alejara o se lo quitaran como ya pasó anteriormente con su primer amor. No sería lo mismo, pero ya se había resignado a perder a aquella persona. Mientras estuviera sano y salvo, para él estaba bien. Chongyung jamás podría vivir en aquel mundo a su parecer. Tenía un corazón gentil y un caracter demasiado noble para aquella vida. No podía ponerlo en peligro.

En aquel momento, se sentía culpable ya que pensaba que con sus acciones en cierto modo le estaba traicionando. Lo amaba tanto y tuvo que renunciar a él. - Ojalá sea feliz... - Pensaba a la par que cerraba sus ojos y conciliaba el sueño.

Esa noche soñaba con la época en la que era adolescente. Hablaba con su amado Chongyung y le pedía perdón. Detrás de si mismo aparecía Shengyung y lo besaba. En cuanto intentaba mirar de nuevo a Chongyung, él ya no estaba. Por su parte el otro agarraba su cara con ambas manos y le exigía atención. Le decía que solo lo mirara a él y lo besaba. Al día siguiente despertaba con algunos remordimientos pero nada grave. Las cosas debían dejarse en el pasado, ya era hora.