- Palette, ire al campamento otra vez, te quedas a cargo de la casa -dijo Rurik acomodandose las mangas, desde que habia obtenido un rango mas alto tenia que irse mas seguido. Pocas palabras, dejar a Palette solo-

Una respuesta no fue dada, era normal que Palette le respondiera un simple "ok" uno lleno de energia y ganas, como si ya tuviera planeado que hacer durante el rato que  Rurik no estaba.
Pero nada, ni un solo movimiento de la madera.

-Palette! PAL! -El de gorro verde suspiro para subir las escaleras, el chirrido que ya lo tenia mas que acostumbrado le hizo cuestionarse por que no oia los pasos de su hermano- Palette?

Y entonces lo vio, en el baño y con la mano saliendo de su boca, manchada de tinta y de la comida de la mañana.

-.... -volteo a su hermano- ... h...heh... e estoy en problemas verdad?

Rurik no supo so preocuparse o enojarse...
Ya que desde hace semanas, a el tambien le parecia sentir la comida como arena humeda y sin sabor.

Dando paso a una etapa de bulimia tal, que por algo seguían hasta los huesos, impidiéndoles a ambos poder manipular su magia.
Sip, no solo Palette estaba en problemas.