Miraculous, les aventures de Ladybug et Chat Noir y sus personajes son propiedad de Thomas Astruc y Zag Entertainment.

Palabras: 924.

24.- Cielo

Besos. Los besos de Penny eran como tener un pedazo de cielo entre las manos. Le hacían sentir cómodo, feliz y a salvo, pero también disparaba su miedo a perderla en algún momento y no volver a sentirse amado nunca. Penny le completaba a muchos niveles diferentes.

—Penny —jadeó acariciando su pelo—, cuánto te quiero.

Ella no se detuvo hasta haber acabado, se irguió para alcanzar sus labios y poder besarle de nuevo. Oírle decir que la quería le aceleraba el pulso, aún le parecía irreal, como si de un momento a otro pudiera sonar el despertador para catapultarla al mundo real.

—Y yo a ti, Jagged.

—Eres extraordinaria.

Soltó una risita cómoda y feliz de estar allí en medio de aquel sueño tan perfecto.

—¿Mejor que el tabaco?

—Infinitamente mejor, no hay nada equiparable a ti. —Sus manos resbalaron por la piel desnuda de Penny y se detuvieron sobre su trasero—. Voy a hacerte el amor hasta que salga el sol, puede que hasta la hora del desayuno.

Sonaba increíblemente bien, le permitió intercambiar las posiciones dejándola bajo su peso.

—Te quiero, te deseo, lo eres todo para mí, Penny.

—Vas a hacerme llorar.

—Si es de felicidad no te cortes.

Recorrió toda su piel con los labios y la amó sin reservas durante horas.

º º º

Luka estaba tirado en la cama enviándose mensajes con Marinette. Juleka le admiraba por ser capaz de seguir allí para ella, era algo que no estaba segura de ser capaz de hacer en su lugar.

Se estiró a su lado y él bloqueó la pantalla para concentrar toda su atención en su hermana.

—Lo siento, lo he estropeado todo.

—¿Por qué dices eso?

—Si no hubiera colgado esa foto...

—Juls, no es tu culpa, no pasa nada —la consoló, le apartó el flequillo de la cara con cariño—. Es un mundo extraño para nosotros, no sabemos movernos en él ni calcular las consecuencias. Pero no tienes que sentirte mal.

Una parte de ella lo sabía, la otra le chillaba que era una estúpida que había destrozado la posibilidad de tener un padre que estuviera orgulloso de ella.

—Luka, ¿por qué estás tan distante con papá? ¿No estás contento? Siempre has querido saber quién era.

—Soy feliz, es la persona que siempre he deseado que fuera mi padre —contestó. Tenía dos opciones, decirle la verdad tal cual o darle una respuesta vaga que no la hiriese. Suspiró, era mejor ser sincero—. Me siento algo incómodo y apartado.

—¿Por qué?

—Desde que bajamos del avión he visto cómo te has ido abriendo, te has implicado en hacer que esté con Penny y, supongo, que en parte tengo la sensación de molestar.

Juleka se movió para abrazarle con fuerza, no se había dado cuenta de que se sentía así y aquella no era para nada su intención. A ambos les había parecido adecuado y divertido juntarlos, pero ahora le sabía mal haberle robado tiempo a su hermano.

—Lo siento mucho, no me había dado cuenta. Podrías habérmelo dicho.

—No pasa nada. Me gusta verte tan cómoda con él.

El móvil de Luka vibró a su lado, Juleka, vio el nombre de Marinette en la pantalla.

—Luka...

—Es mi amiga, aunque no haya salido bien. No le voy a dar la espalda.

—No tienes porque oírla hablar de Adrien.

Su hermano rió, recuperó el móvil y lo desbloqueó para que Juleka pudiera leer los últimos mensajes que mostraba el chat. Estaban hablando de Jagged. Se sintió aliviada al saber que no era tan idiota como para herirle con su cháchara sobre Adrien.

—Le estaba explicando cómo nos está yendo, y me da algunos consejos.

—Aún la quieres.

—¿Se puede dejar de querer a alguien en un mes?

Sabía que no, pero lo desearía para que Luka pudiera pasar página y nadie le pudiera herir nunca más.

—Estoy bien —continuó abandonando de nuevo el móvil—. Me conformo con que seamos amigos. Marinette es especial, quiero que sea feliz, si ella lo es yo también lo seré.

—Tendrías que ser más egoísta. Pensar más en ti.

Sin embargo, era plenamente consciente de que aquello nunca le saldría a su hermano, que siempre anteponía a los demás a sí mismo, así que tomó una decisión, ella le protegería y lo que quedaba de aquellos días le regalaría todo el protagonismo.

—Abandono el plan de juntarlos —declaró Juleka.

—¿Por qué?

—Creo que no está bien, si papá y Penny quieren estar juntos lo estarán sin nuestra ayuda.

Luka le revolvió el pelo despeinándola por completo.

—Antes la besó, a lo mejor ya están juntos.

—A lo mejor sí.

Otro mensaje de Marinette iluminó la pantalla.

—¿No vas a contestarle?

Lo desbloqueó, le deseó buenas noches y le aseguró que hablarían por la mañana. Devolvió la atención a su hermana.

—¿Estás preparada para la videollamada con mamá por la mañana?

—No. Me reñirá por ser tan descuidada, no quiero que me riña —confesó abatida—. Papá ha sido muy comprensivo, me ha dicho mil veces que no pasa nada. Pero maná...

—No creo que lo haga. Fue un error, lo entenderá.

—¿Y si Penny no ha conseguido parar la rueda? ¿Y si eso nos aplasta? No quiero vivir siempre pendiente de las cámaras.

—No lo sé, Juls. No sirve de nada preocuparse por ello, no está en nuestras manos.

Tenía razón. No estaba en sus manos pararlo, pero era responsable de aquel desastre. Un error estúpido iba a marcar el resto de sus vidas.

—Vamos a dormir, es tarde.

Continuará

Notas de la autora:
¡Hola! Un poquito corto, pero estaba decidida a no meter nada de lemon en este fic, así que no he podido estirarlo más.
Mañana más.