7.-

-Entonces, ¿cuándo quedamos con los Dolan? -dice Cam. Tiene la misma cara que un niño en Navidad. Ayer conseguí escaquearme alegando que él estaba con resaca, pero hoy no tengo excusa.

¿Realmente quiero conocer a los amigos de Cam? ¿O sólo dije que sí por la insistencia de mi amigo? No lo sé, y prefiero no saberlo. Como siempre él se ha salido con la suya. No me puedo creer que haya aceptado, si es que soy idiota...

-No lo sé, Cam... Ya sabes que no quiero que nadie me reconozca. -respondí seria.

-No lo harán, lo prometo. -hizo una pausa.- ¿Te parece que vengan hoy a casa?

Suspiré rendida. Tengo que aprender a decirle que no a Cameron Dallas.

Apenas había pasado una hora y los gemelos ya habían llamado al timbre. Estaba tan nerviosa que me sudaban las manos. La otra noche no fue una presentación oficial, pero ahora sí lo va a ser. Sólo tuve que mantener una pequeña conversación con ellos, pero ahora les voy a conocer.

Maldito Cam.

El timbre del piso suena y Cam va corriendo a abrir con una sonrisa de oreja a oreja. Saluda a los chicos, que me miran curiosos.

-Esto... Hola. -sonrío nerviosamente.- Bueno, soy Brook. Ya lo sabéis.

-Bienvenida. -uno de ellos me abraza.- Teníamos muchas ganas de conocerte. -le devuelvo el abrazo torpemente.

Esto sí que no me lo esperaba.

-Yo pensaba que no existías, pero Ethan estaba seguro de que sí. -dice el otro. Entonces el que me acaba de abrazar es Ethan. ¿Cómo se supone que voy a diferenciarlos?

Nos sentamos en los sofás y sonríen. ¿Qué se supone que debo hacer ahora? ¿Hablar? Vale, hablar. ¿Y de qué les hablo? Estos chicos son famosos, no creo que les interese mucho mi vida...

-¿Cuántos años tienes? -pregunta Ethan con una sonrisa. Creo que se ha dado cuenta de que estoy algo nerviosa.

-Em... Dieciocho. Cumplidos en Febrero. -digo y cierro los ojos por la chorrada que acabo de decir. ¿Qué más les dará a ellos cuándo cumplo?- Esto me resulta un poco raro. -explico. Lo más fácil será ser sincera.- No entraba en mis planes conocer a los amigos de Cam.

Ambos sonríen compresivos.

-Sí, nos hemos dado cuenta. Pero todos nosotros teníamos muchas ganas de conocerte. Eres algo así como una leyenda en nuestro grupo de amigos. -dijo Grayson y reí.

-Si lo que te preocupa es ser reconocida no te preocupes, muchos de nosotros tenemos amigas que no andan metidas en todo esto. -añadió Ethan y suspiré aliviada. Me entienden, y más chicas lo han conseguido. Entonces yo también.

Empezamos a hablar de cualquier cosa y la verdad es que Grayson y Ethan me cayeron genial. Son muy buenos chicos. Hemos hablado de un montón de cosas, les he contado anécdotas de Cam embarazosas que desconocían y ellos a mí de las que tampoco había oído hablar.

-Basta ya, ¿es un complot o algo así? -preguntó Cam riendo y con las manos en las mejillas. Nosotros tres reímos, ya que estaba rojo hasta las orejas.

-Es culpa tuya por emborracharte tan a menudo. -respondí. La verdad es que Cam es muy dado a beber. Ahora mismo lleva ya dos cervezas.

Seguimos hablando hasta que el móvil de Cam comenzó a sonar. Miró la pantalla y se puso blanco como si hubiese visto el fantasma de Michael Jackson. Bueno, no. Si hubiese visto el fantasma de Michael Jackson se hubiese puesto eufórico, en ese momento su expresión era de terror.

-Mierda. Brook, tus padres. -dijo asustado. Solté un grito ahogado y pegué un salto cayendo detrás del sofá.- Idiota, ¿qué haces?

-Yo que sé, me he asustado. No lo cojas.

-¿Cómo no lo voy a coger? Se van a dar cuenta de que sé algo. -exclamó susurrando como si nos pudiesen escuchar.

Este chico a veces es un poco tonto.

Dijo la que se escondió detrás del sofá.

-Cam, no sabes mentir. Se van a dar cuenta de que... -me callé al ver que iba a coger la llamada. De verdad que este chico no aprende.

-Hola señora Smith. -saludó alegre. Le hice un gesto para que pusiese el manos libres y me hizo caso.- ¿Cómo va todo? ¿Ha pasado algo?

-Hola, Cam. Por casualidad no sabrás dónde está nuestra hija, ¿no? -escuché la voz de mi madre. ¿Este sentimiento que siento por dentro qué es? ¿Nostalgia? No, no puedo sentir nostalgia. No echo de menos a mis padres, ellos han provocado esta situación.

-No he hablado con ella desde hace un par de días, ¿está todo bien? -por primera vez en la vida una mentira de Cameron Dallas sonó convincente. Desde que es actor...

-Se ha ido de casa, no sabemos a donde. Estamos muy preocupados.

Ya, ahora estáis preocupados. Pues no haberme hecho escoger. Sabían de sobra que no viviría una vida impuesta por ellos.

-¿Y no tenéis idea de dónde puede estar? -preguntó Cam lanzándome una mirada.

-No, no... Creo que Cody sabe algo, pero no quiere hablar. Además es muy difícil de pillarle en casa. -Cam soltó una risita pero le miré mal, a lo que se calló.- Bueno Cam, si sabes algo avísanos, por favor. Queremos hablar con ella.

Rodé los ojos y Ethan me miró curioso.

-Por supuesto. De todas maneras intentaré hablar con ella para saber si está bien.

-Te lo agradezco. Cuídate cielo.

¿Cuánto hacía que no me llamaba a mí cielo?

-Igualmente señora Smith. -y colgó. Se pasó una mano por la frente quitándose sudor imaginario.- No había previsto esto. Mentir a tu madre es muy difícil. ¿Crees que se lo ha tragado?

Me pensé bien la respuesta.

-Ella realmente no sabe cuánto hablamos, así que no sé. Pero descuida, que Lauren andará por el medio para tocar las narices.

Me volví a sentar en el sofá y suspiré aliviada. Los hermanos nos miraban extrañados.

-Estoy algo perdido. -comentó Grayson. Creo. Grayson era el de la camiseta azul, ¿no? Quizás fue Ethan- ¿Te has escapado de casa? -preguntó con los ojos como platos.

-Algo parecido. -hice una mueca.- Es difícil... -los dos hermanos me miraron instándome a que siguiese hablando.- Mis padres quieren que haga medicina para seguir con la tradición familiar, y me niego. No me gusta, a penas puedo ver una aguja. Les dije que no haría medicina. Aunque el plan era irme a Florida o Nueva York, conseguí una beca en Educación Infantil en Los Ángeles y Cam insistió en vivir juntos.

-¿Y por qué tenías que escaparte?

-Porque si me quedaba acabaría inscrita en la facultad de medicina más cercana para tenerme controlada.

Los Dolan asintieron.

-Es una luchadora. -Cam me revolvió el pelo y le aparté la mano de un manotazo mientras reía.

-No me toques el pelo, Dallas. -bufé y los tres chicos rieron.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top