10.-
Cualquier persona que haya tenido resaca alguna vez, sabe que sólo hay tres frases posible que decir nada más levantarse. Primera: ''¡Apaga la luz!''. Segunda: ''¿Qué coño hice ayer?''. Y tercera y más típica: ''No vuelvo a beber''.
Esta última es una de las mentiras más grandes que dirás en tus años de adolescencia, junto con ''Sí, mamá, vamos a hacer un trabajo en su casa''.
La cosa es que cuando me desperté hoy las tres frases pasaron por mi cabeza a la vez. La primera porque se me había olvidado bajar la persiana y el Sol me daba en toda la cara. Y las otras dos... bueno, no hace falta explicarlas, ¿o sí?
Lo último que recuerdo ayer es haber bebido con Kate esa maldita botella de vodka. Espero que no nos la bebiesemos entera.
Bajé a la cocina con los ojos cerrados. Tenía legañas en ellos y las pestañas se me enredaban por no haberme quitado el rímel.
Miré el reloj que colgaba de la pared y abrí los ojos como platos. ¿Las tres de la tarde? Si ayer pensaba que era una universitaria típica, ahora mismo lo soy más.
Intenté recordar: la fiesta, el jardín, Nash, Hayes con la chica rubia, Cam desaparecido, cerveza, chico de la cocina, Kate, vodka... ¿Qué vino después del vodka?
Probablemente más vodka.
Busqué en los armaritos de la cocina hasta que encontré el boquitín. Saqué un ibuprofeno de él y me lo tomé con un vaso de agua. No pendaba ni en comer ya que me daban arcadas. Cada vez que intentaba recordar algo una punzada se hacía presente en mi sien izquierda.
Nada, un agujero negro.
Cogí el móvil y busqué el número de Kate. Le mandé un mensaje preguntándole si se acordaba de algo, pero su última conexión era de ayer. Probablemente seguiría durmiendo. Quizás debería hacer lo mismo.
Arrastré mi cuerpo de vuelta a la habitación y me tiré en mi cama dispuesta a dormir hasta la noche.
¿Por qué sentía como si me hubiesen tirado un cubo de agua por encima? Abrí los ojos y vi a Cameron con una botella de agua vacía en la mano y una sonrisilla nerviosa. Sí, me había echado agua.
Cameron Dallas es todo un amor.
Tener amigos para esto.
—¿Por qué? —pregunté sin entender. Simplemente no entendía en qué contexto me despierta así.
—Porque yo también tengo resaca y no quiero hacer ruido. —murmuró riéndose. Imbécil no, lo siguiente.
—¿Quién te ha dicho que yo tenga resaca? —me quejé enterrando la cabeza en la almohada.
—La caja de ibuprofenos de la mesa de la cocina. —se rió, pero luego hizo una mueca. ¡Karma!
Jódete Dallas.
Me estiré en la cama ignorando que estaba mojada y volví a apoyar la cabeza en la almohada. Casi era agradable teniendo en cuenta el calor que hacía.
La verdad era que mi dolor de cabeza estaba mejor, no sabría decir si por el medicamento o por haber dormido más, realmente me daba igual con tal de que no me doliese. Como si era por lamerle la zarpa a un tigre.
—Ni se te ocurra planear algo para hoy. —advertí a Cam con el dedo.
—Tranquila, ni ganas que tengo. —se tumbó en mi cama y me miró. Luego empezó a reírse.
—No quiero saber lo que pasó ayer, Dallas.
Volvió a reír, esta vez más fuerte.
—No estoy tan seguro. Hiciste... —antes de que pudiese seguir hablando le puse la mano en la boca y se calló.
—No. Quiero. Saberlo. —no por él al menos. Prefería que me lo contase Kate, ella no sería tan bruta como él.
Mi móvil sonó avisando de que tenía un mensaje. Supuse que sería la rubia, así que lo cogí en seguida. Pero no, era Cody.
Cody: Hola enana, ¿qué tal por ahí? ¿Te estás pegando la vida buena de la universitaria?
Yo: Resaca. Mucha. Vodka.
Cody: JAJAJAJA
O sea que sí.
Yo: No volveré a beber en años.
Cody: Probablemente beberás antes del próximo sábado.
Yo: Cállate. No.
¿Qué tal por ahí?
Cody: Papá está de los nervios. Sigo sosteniendo la teoría de que eres su favorita.
Yo: Por favor, te he quitado el puesto de oveja negra de la familia, asúmelo.
Cam dice hola.
Cody: Hola Cam :) A ver cuando se te ve el pelo por aquí.
Bueno, a lo que iba. Mamá y papá están desquiciados. Y Lauren está muy toca pelotas.
—Eso no es novedad. —dijo Cam y solté una sonora carcajada.
Yo: ¿Les habéis dicho que estoy en Florida?
Cody: Todavía no, pero no creo que falte mucho para que Zoe lo diga.
Yo: No pasa nada, no me van a encontrar allí
Cody: Cuídate mucho enana 💕
Yo: Lo haré, adiós 😘
Cody: Adiós 😉
—¿No piensas hablar con ellos? ¿Decirles que estás bien, por lo menos? —preguntó Cam y negué con la cabeza convencida.— Brook...
—Ellos se lo han buscado, Cam. —me levanté de la cama y salí de la habitación dejándole solo.
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