Parte 9
Todos en la sala rieron. El hombre miró a todos sintiendo de repente escalofríos. La risa cesó y Jimin miró al hombre con una ligera sonrisa que a medida que hablaba fue desapareciendo.
- El te dijo que era su hermano, dime entonces, ¿Por qué lo golpeaste?
- El jefe no tiene hermanos. -Sonrió orgulloso, ocultando su miedo.
- Claro que tiene, ¿sabes como se llama? -no lo deja contestar- claro que no, se llama Park Taehyung y es mi hermano.
- ¿Qué? -su rostro pierde color y mira detrás de Jimin al chico y luego de vuelta al pelinegro.
- No sabía que te conocía en persona, no me lo esperaba. -se burla Jimin sacando una carcajada a su hermano y al pelirosa.
- Yo... Tú... Él... No. No. No, no, no y ¡NO! -pronunció una y otra vez negando la realidad.
- Qué comportamiento más infantil. -se queja Jimin juntando sus cejas y alejándose de él- Ves Taetae, te dije que Namjoon se encargaría.
El castaño claro se ríe asintiendo con la cabeza.
- ¿Qué hacemos con el? -pregunta Namjoon.
- Mm... Pues todo lo que dijiste y asegúrate de que no le diga a nadie quien soy.
- Si.
- Pero antes... -se vuelve al hombre y le lanza un puñetazo en la nariz, se pudo escuchar en cada rincón el 'crush', señal de que se la había roto- Por mi hermano, ahora si, llévenselo.
Las dos personas que estaban adentro lo agarraron de cada brazo y lo levantaron, el hombre apenas se mantenía en pie y su nariz sangraba a chorros manchando su ya no tan blanca camisa.
- Aún no me creo que fingió conocerte en persona, bueno... Conocer al jefe. -habló Namjoon alejándose de la sala.
- Ventajas y desventajas de ser un jefe sin rostro, odio la atención y prefiero el anonimato. -pronunció Jimin tomando entre sus manos las de su hermano para ver sus nudillos rotos y ensangrentado- ¿Que tienen con estar lastimándose las mano? -murmura entre dientes recordando el episodio de Yoongi.
- Y dueño no lo olvides. -recalcó acercándose con una caja de primeros auxilios.
- Nam cállate, sabes que no me gusta nada de esto. -limpia la sangre- Simplemente tuve suerte de ser un poco más inteligente que los demás y que el anterior jefe me adoptó como a su propio hijo.
- ¡Au! ¡Au!
- Ya Taetae... Falta poco.
- ¡Duele Minnie! ¡Duele! -se queja tratando de sacar sus manos.
- Eres fuerte Alíen así que deja ya de lloriquear. -molesta el pelirosa.
- ¡No me llames alíen! -reclama dispuesto a empezar una pelea.
- Ya termine, ustedes dos dejen de discutir.
- Istidis dis dijin dí discitir. -molesta Namjoon.
- Y según tu, tu comportamiento no es infantil. -se burla el pelinegro sacándole una risotada a su hermano y cerrándole la boca al otro.
- ¿No vamos a casa? -preguntó Taehyung mirando a su hermano mayor, sus ojos brillaban.
- Tú te irás a casa y yo volveré al trabajo.
- No quiero. -estira su labio inferior y se cruza de brazos.
- Tienes que dejar que tu hermano se vaya a trabajar. -murmura el pelirosa guardando la caja.
- No quiero. ¡Yo quiero estar con él! No me iré sin él. -patea el suelo una y otra vez, haciendo un berrinche.
- Si te comportas y vas casa te daré un regalo. -Taehyung mira a su hermano curioso- Te daré una entrada para ese concierto al que querías ir.
- ¿¡ Al de Agust'D!? -gritó emocionado- pero si las entradas ya se agotaron... -murmura recordando.
- Tengo mis medios, pero solo irás si Nam te acompaña.
- ¿Rositas me tiene que acompañar? -preguntó mirando a Namjoon.
- Si, ¿Por qué tengo que acompañar al alíen? -pregunta malhumorado.
- Por que yo lo digo y punto. Ahora -mira a su hermano- tú a casa, y tu -mira a Namjoon- Llévame antes de que tú sabes quien, cometa una cagada.
- ¡Sí mi capitán! -contestan al unísono llevando su mano derecha sobre su frente, como un saludo de soldado. Jimin roda los ojos y sonríe.
Ambos, Namjoon y Jimin esperaron a que el castaño se fuera primero para subirse a la camioneta, pero antes Jimin tenía que hacer una parada.
- Dime que no lo hiciste. -exige Namjoon mirando como el pelinegro cruza de nuevo el cinturón sobre su pecho, sus mangas blancas ahora acompañadas de rojo.
- Ya sabes la respuesta. -contesta encogiéndose de hombros, con una sonrisa algo perversa.
- Ustedes los hermanos Park, son un problema andante.
- Solo si se meten con nosotros. Ahora me puedes decir, ¿Por qué salías en una foto con Min Yoongi?
- Yo... Eso... Te lo explicaría pero ya llegamos.
- ¿Qué? -mira por la ventana, el rubio intentaba sacar al castaño de su casa sin existo- Solo por hoy te dejo escapar. -sentenció bajándose de la camioneta, curioso de aquella expresión en el rostro de su amigo.
Yoongi empujaba al hombre que estaba frente suyo, el cual impedía que sacará a Jin de una vez por todas.
- Escúchame bien mierda, quiero a esta puta fuera de mi casa. -bramó empujando al chico.
- Lo siento señor, no acepto sus órdenes.
- Bebé, Yoongi, hablemos de esto adentro ¿si? -pidió el castaño escondido en la espalda del chico.
- Y una mierda, te dije que no me gustaba que me celaran, ordenarán y toda esa cursilería, ya follamos así que vete.
- Pero... Pero... No quiero.
- Pues que pena. -pronunció mirando como Jimin se acercaba rápidamente con paso elegante hasta llegar a su lado.
- ¿Sucede algo Yoongi? -miró al chico y después al castaño que estaba detrás de él- Ya te puedes ir.
El chico asiente con la cabeza y se va.
- ¿Tú dejaste aquí a ese imbécil? -reclama el rubio claramente molesto.
- No me iba a ir sin dejarte con alguna protección. -se encoge de hombros.
- ¿Dónde fuiste? ¿Por qué tienes sangre? ¿Mataste a alguien? -preguntó viendo la sangre en el traje del pelinegro, olvidándose del castaño que observaba con rabia a los dos.
- No maté a nadie Yoongi. -se ríe y Yoongi sin darse cuenta sonríe sin mostrar sus dientes, solo un simple estiramiento de labios que molestó al castaño y miro con odio al pelinegro- Mi hermano se metió en problemas, tuve que resolverlos.
- Qué ¿Acaso tu hermano es un matón al igual que tú? ¿O una puta barata? -atacó con sus palabras el castaño, interrumpiendo la animada conversación- ¿¡Porque volvió esta puta aquí!? -exigió saber al rubio quien suspiro frustrado, pensó que ya se había ido, lástima que no lo hizo.
Yoongi observó en cámara lenta como de un minuto a otro Jimin tenía contra el suelo al castaño y presionaba su agarre sobre el brazo sacándole gritos de dolor a Jin.
- Nunca en tu puta vida, vuelvas a insultar a alguien cercano a mí, mucho menos a mi hermano. -su oscura voz hizo tragar en seco al rubio y temblar de miedo al castaño.
- Jimin, ven. -habló Yoongi al ver que en vez de aflojar su agarre lo reforzaba, un poco más y podría romperle algún hueso- Por favor Jimin, ven.
Jimin volvió en sí y rápidamente soltó al castaño, ordeno su saco y se acercó al rubio.
- Lo siento. -pronunció mirando a Yoongi.
- Ya puedes irte. -le dijo al castaño mirando solo a Jimin.
Seokjin se levantó y se fue rápidamente, había tenido mucho por hoy. Los dos chicos entraron a la casa.
- ¿Qué pasó ahí? -preguntó Yoongi sentándose en el sofá.
- Nada importante. -comentó siguiendo de largo hasta las escaleras.
- ¿Y ahora a dónde vas? -frunció el ceño.
- A bañarme.
- Lo haces después, ven a hablar. -Jimin suspiro y bajó las escaleras hasta llegar al lado de Yoongi donde se sentó en el sofá individual.
- ¿Qué? -preguntó ante la penetrante mirada del rubio.
- ¿Por qué reaccionaste así cuando Jin insulto a tu hermano?
- ¿Por qué te pusiste así de mal cuando mencionaron a Suran? -contraatacó.
- A la defensiva... Ya veo.
- No es a la defensiva Yoongi -suspiró recargándose en el respaldo del sofá- no me gusta hablar de mí, así como a ti no te gusta hablar de ti.
- Yo si hablo de mí. -se quejó lamiendo la punta de sus dientes.
- Mientes.
- ¿Qué?
- Te conozco lo suficiente como para saber que te molesta hablar de ti y que otras personas se interesen en ti.
Yoongi observó a Jimin con atención, tenía razón pero no se lo iba a decir.
- ¿Recuerdas la pregunta que me prometiste?
- No la vas a usar ahora. -murmura despacio e indignado.
- Parece que sí. -sonríe burlón acomodándose en el sofá- Comienza.
Jimin lo mira mal por unos segundos y luego rodó los ojos. Era su palabra después de todo
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