Dos familias pertenecientes a la mafia coreana eran la potencia entre la sociedad, las familias más peligrosas y poderosas de todo el país, quienes tenían más que una amistad, negocios grandes de contrabandos qué hasta la propia policía estaba amenazada por ellos, incluyendo políticos y hasta el propio presidente.

Pero algo pasó en una de ellas, la cabeza comenzó a malgastar dinero, haciendo apuestas y rompiendo la ley de todo expendedor:

"Nunca consumas lo que vendes".

Lee Jong Suk se volvió un adicto a las sustancias, un drogadicto de primera qué lo hizo quedar enterrado en el hueco.

Las deudas alcanzaron un nivel máximo, las amenazas de muertes comenzaron y por ciertas actitudes, su amigo más fiel, el señor Moon, no quiso relacionarse más con él.

Todo se vino abajo en cuestión de días, ya no ganaba dinero para pagarlo, sino para seguir consumiendo ese mal que destruyó a su familia.

Su esposa intentó detenerlo en un momento de desesperación, la mujer ya no quería vivir ese infierno, al menos buscaba huir con su pequeño hijo... Pero poco le importó a Lee qué su hijo estuviera frente a sus ojos y tiró desde el segundo piso por las escaleras a su esposa de años, dejándole la cabeza reventada y el suelo bañado de sangre.

El pequeño se refugió entre los escombros qué ya habitaban su casa, tan solo tenía 12 años no había mucho que hacer por su cuenta, pasó días escondido de su padre, sin agua, sin dar ni un bocado y cuando creyó que moriría entre aquellas cuatro paredes... Escuchó el estruendo qué creó la puerta al ser tirada con fuerza, los pasos rápidos de hombres tirando todo, hasta que abrieron el armario donde se escondía y lo jalaron.

-¡Sueltenme! -pidió con gritos, con los ojos temblorosos y las manos frías del terror.

-¡Cállate, niño! -lo jalaron tal cual ganado, sacándolo de su casa, mirando por última vez a su padre, de rodillas en la entrada, frente a un poderoso hombre.

-¡Papá! -lo levantaron en el aire para agilizar todo -¡Papá!

El hombre ni siquiera levantó la mirada, ni le importó que amordazaran a su hijo y lo metieran en el maletero de un automóvil.

Y como le iba a importar, si había cambiado la vida de su hijo por la suya...

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¿Qué es? Ni idea, pero llevo un buen rato queriendo hacer algo con esta temática.

Espero un día comenzarla bien y que les guste.

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