N. Yo

Al llegar a aquel instituto se pudo ver a la distancia a un muñeco que resaltaba entre todos los demás, llevaba un traje completo negro con una pañoleta verde, botones dorados y cabellos castaños cómo corteza de árbol, sus ojos verdes brillaban con el sol.

Su rostro mostraba seriedad y concentración, al lado suyo se encontraban dos robots monitores do a cada muñeco y sus pasos, si por suerte no le han visto podía  salir de allí.

—¡Alto modelo no identificado! —Hablo uno de ellos.

—Yo, solo vine a en fin ya debo irme—Ríe nervioso mientras se dirige a la puerta de perfección.

—¿No sabes el significado de "alto"?— Escuchó detrás de él una voz masculina muy elegante y distinguida—  Vaya, ¿Qué atuendo es ese pequeñín?.

—Mi ropaje normal—Miro su cuerpecito cubierto con prendas viejas y gastadas.

—¿Cómo es qué nunca te habíamos visto?, la computadora ni siquiera te reconoce como modelo—Dice mientras da vueltas al rededor del menor.

—Yo, no lo sé, simplemente desperté mientras caía a V...a mi hogar—Sigue con su cabeza al castaño.

—¿Y tú nombre?.

—Ah, Louis.

—Muy bien Louis y- —este fue interrumpido por un grupo de chicas que gritaban su nombre con emoción y amor— ve a mi oficina en 39 minutos ¿quieres?, será más privado así.

Dicho esto el de ojos esmeraldas desapareció entre la ola de muñecos que vagaba por ahí, muchos se acercaban a ver a Lou, se mostraban confundidos y muy curiosos, el rubio no era un color muy común entre ellos, era casi inexistente. Pero les intriga a más su rostro, este tenía manchitas cafés que jamás habían visto.

Louis se sentía algo atosigado por tantas miradas y murmullos, que si era vagabundo por las ropas que llevaba, que si era un defecto, un error, bla, bla bla.
Sólo una chica se acercó amablemente hacia él, una muñequita de ojos color ámbar y cabellos rojos como el fuego, su corte era algo inusual también pues estaba un poco por debajo de sus pequeños hombros.

—Hey, nunca había visto ese color tan bonito en el cabello, ¿Cómo te llamas pequeño?—Sonrió muy dulce la chica.

—Louis, y esperaba poder encontrar respuestas sobre mi, aquí—Señala el recinto algo apenado.

—Que tal Louis, mi nombre es Meredith pero puedes llamarme Mere o Dith, ven, déjame llevarte por ropas más apropiadas y un pequeño Tour por Perfección— Tono suavemente la mano de Lou haciendo a este sonrojar un poco.

Nuestra carismática pelirroja llevó a Lou hacia una casita vacía, en ella se escribió en nombre "Louis" en dorado automáticamente.

—Vaya que raro, generalmente se escriben en plateado— Miro sonriente a Lou— quizás seas especial.

—¿Especial? —El pobre rubio seguía sin entender.

Una vez dentro la decoración y amueblado empezaron a aparecer, tonalidades azules, blancas y algunas cafés, muebles modernos y muy caros al parecer. Alfombras que combinaban con el piso y las paredes, cuadros de Lou en un traje negro y otros blancos pero algo borrosos de ver, eso dejó muy confundió al menor quien estaba si de por sí asustado por la decoración inmediata, ahora más.

Meredith sacó del cuarto un ropaje como el de los demás muñecos varones, una camisa de manga corta blanca, chaleco de vestir negro con botones dorados, pantalones a cuadros azules sutilmente llamativo, calcetas blancas, corbata azul y zapatitos negros nuevos.

—Con esto lícitas perfecto—Dijo emocionada.

—Yo, no pienso quedarme aquí solo quiero repuestas— Dijo sin mucha alegría el heterocromático.

—¿Y a dónde más vas a ir?, Louis tú perteneces aquí, incluso las letras doradas de tú casa lo muestran, eres algo o alguien especial, sólo que aún no lo sabemos, instálate, vístete y después vamos con Nolan—Se dirige a la salida.

—¿Quién es Nolan? —Preguntó curioso.

—Él, es el prototipo a cargo de todos nosotros, esta fábrica lleva apenas 5 años en mercado, es prácticamente nueva, ¡te veré más tarde!—Dijo dando brinquitos de alegría, pues ya había vuelto.

—Bien, a prepararse—Mira el ropaje fino y caro en la cama.

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Nuevo episodio listo!.
Esperen más 😉❤️