El empresario Wu estaría celebrando dentro de pocos días su cumpleaños número 32, aún no tenía planes en especial para ese día, pero imaginaba que saldría a cenar con sus amigos más cercanos, después tendría un tiempo a solas con su pareja y finalmente obtendría un regalo muy especial por parte de su novio.

Era, en esencia, lo que más le apetecía.

Pero no sabía que en la ingeniosa mentecilla de su novio, se estaría maquilando un plan totalmente diferente a lo que ya tenía pensado.

Y todo empezó un par de días antes de la fecha del cumpleañero.

Era temprano en la mañana, el director Wu estaba sentado en la mesa central de la cocina, bebía café mientras leía los encabezados más importantes de los sitios web de noticias.

—Buenos días— anunció una vocecilla entrando a la cocina.

—Buenos días, Lu— habló YiFan dejando de lado su iPad para poder saludar debidamente a su único hijo —¿Y eso?

El señor Wu observó como el menor jalaba consigo una maleta, vestido en el uniforme escolar.

—Buenos días— un tercero saludó a destiempo, llevando en una espátula una torre de pancakes para servirlos en un plato limpio y ya servido en la mesa.

El pequeño Lu Han de apenas 8 años, rodó los ojos, vio al chico que había servido pancakes para él y habló —Iré con mamá.

—¿Ya es esa fecha? — preguntó YiFan confundido, revisando de inmediato en su reloj inteligente el calendario.

—No— negó Lu Han dejando la maleta en la entrada de la cocina y tomando asiento en el lugar libre —Pero me gustaría pasar un par de días con mamá, dijo que te llamaría porque piensa que Navidad debería pasarla contigo.

—¿Qué? — se sorprendió YiFan, revisando ahora sus mensajes en caso de que su ex pareja hubiera avisado algo al respecto.

—Oh— pronunció la tercer persona entonces, tomando asiento en medio de padre e hijo —Entonces será mucho más divertida esta Navidad ¿Deberíamos tener alguna actividad en especial?

Lu Han observó de nuevo al chico a su lado, antes de meterse un gran bocado de pancakes a la boca —¿Puedo invitar a mis amigos?

—Mhh— el chico de castaños cabellos dirigió la atención hasta YiFan, colocó una de sus manos sobre el brazo del mayor y dio un cariñoso apretón —¿Qué piensas, cariño?

—Uh— YiFan entonces elevó la mirada y observó al joven —No lo sé, Baek, este año pensaba ofrecer una cena para la empresa.

Lu Han abultó los labios ligeramente y lanzó una miradita irritada hasta BaekHyun.

El castaño abrió los ojos con sorpresa y apretó un poco más el brazo de su pareja —Cariño.

—O... tal vez podamos pensar en algo más divertido— contó YiFan, dedicándole entonces una sonrisa a Lu Han frente a él.

El niño sonrió de vuelta y empezó a comer su desayuno.

—¿Quieres un poco más de maple, Lu? — BaekHyun entonces acercó el recipiente de la jalea y la acercó discretamente al menor.

El chico negó con la cabeza mientras devoraba los pancakes —Gracias, siempre encuentras el balance perfecto entre la mantequilla y el maple.

BaekHyun sonrió orgulloso de sí mismo y siguió comiendo de su propio plato.

La dinámica en aquella mesa en medio de la cocina era bastante peculiar.

Wu YiFan era el director ejecutivo de una importante empresa que se encargaba de desarrollar nuevas tecnologías aplicadas a la educación, era un mercado mucho más proliferativo de lo que se pensaba, y los beneficios económicos eran bastante buenos, en algún momento de su joven vida, YiFan estableció una relación más o menos formal con una chica de una familia acomodada, estaba en sus planes contraer matrimonio, pero tuvieron que casarse antes de tiempo, de hecho, pues la chica de prestigiosa familia se había embarazado de YiFan por lo que pactaron un matrimonio rápido.

La relación no duró mucho, cuando el hijo, Lu Han, cumplió tres años, la pareja decidió separar sus caminos.

Y desde entonces las relaciones románticas de YiFan habían sido tórpidas y vergonzosamente decepcionantes, se repetía a sí mismo que no tenía el tiempo para invertir en una relación, que debía hacerse cargo de la empresa y de su único hijo, ahora ya de 7 años.

Pero tras un par de consejos, más bien, burlonas advertencias sobre su soltería por parte de sus colegas en la empresa, decidió echar un vistazo en uno de esos sitios de citas por cobrar. No creía que tuviera tiempo para intentar engatusar a alguna persona, quería simplemente distraerse y salir por ahí.

Fue de esa manera que conoció a Byun BaekHyun, un estudiante de fotografía, de tan solo 23 años, quién estableció firmemente sus condiciones al momento de salir, él quería el dinero directo en su tarjeta, nada de efectivo, todos los gastos que las citas generaran debían correr por parte de la otra parte, no iba a haber contacto físico nunca, a menos que él sintiera la confianza y que, obviamente, una gran cantidad de dinero cayera en su cuenta bancaria.

A YiFan le pareció justo, podía gastar el dinero que quisiera y el chico parecía simpático, cuando lo eligió pensó que era una chica de hecho, y es que BaekHyun había colocado una foto suya con peluca y un uniforme escolar.

YiFan siempre había estado abierto a las posibilidades así que cuando se dio cuenta de que BaekHyun era chico, realmente no le tomó importancia.

Y cuando BaekHyun vio a YiFan por primera vez, se sorprendió de lo increíblemente atractivo que era, por un momento se le cruzo por la mente, la idea de abolir su ley de cero contacto físico, pero necesitaba el dinero para pagar la carrera universitaria y costear su supervivencia en la ciudad. Así que pensó con la cabeza fría y continuó con el plan establecido.

Así que las citas eran solo salidas a comer o a cenar, en restaurantes no tan elegantes como BaekHyun hubiera querido, pero YiFan tampoco quería despilfarrar el dinero como si no hubiera un mañana.

Para BaekHyun, YiFan no era la única persona que financiaba su día a día, existían un par más de hombres adinerados y un qué otra mujer que pagaban por su compañía, YiFan lo sabía y lo entendía, pero existían veces en las que solicitaba su compañía para eventos importantes de la empresa y BaekHyun estaba ocupado en otros asuntos.

Lentamente y sin darse cuenta, BaekHyun fue rechazando las ofertar que llegaban a su bandeja de entrada en la aplicación, hasta que finalmente quedó únicamente YiFan. No se atrevía a decirlo pero el tipo realmente le gustaba, era divertido, egocéntrico y ambicioso, además de que tenía un corazón noble y cariñoso, BaekHyun sabía de la existencia de Lu Han y le pareció tierno que se preocupara tanto por el menor.

Y todo fue formalmente cuestión de trabajo hasta que por fin, YiFan pidió permiso para poder besarlo. BaekHyun aceptó sin dudarlo y la sensación de tener los labios de YiFan sobre los suyos, lo habían hecho volar por las nubes, era una sensación mágica.

Se dio cuenta ahí, que definitivamente estaba enamorado del director Wu.

BaekkHyun quería establecer una relación de verdad con él pero pensaba que YiFan seguía viéndolo solo como un chico al que le pagaba por estar con él, hasta que una inesperada noche de tragos, las cosas subieron de tono y terminaron intimando en una lujosa habitación de hotel. YiFan le depositó una exagerada cantidad de dinero a la mañana siguiente y BaekHyun pensó que YiFan en verdad solo lo veía como algo por lo que podía pagar, así que devolvió el dinero, dolido.

Ese día dijo que no trabajaría más para él, pues él no se sentía cómodo recibiendo dinero de la persona que él quería si la otra persona no tenía el mismo interés. Fue tal su sorpresa cuando YiFan le confesó que todo ese tiempo él creyó que BaekHyun solo lo veía como una mina de oro interminable.

Así que formalmente, comenzaron a salir.

Su relación no tardó en volverse estrecha, en cuestión de meses, BaekHyun ya se había mudado a la casa de YiFan y había recibido como regalo una camioneta de última generación y su propia tarjeta de crédito.

BaekHyun aún se sentía intimidado por los ostentosos regalos, pero YiFan le repetía que simplemente se dejara consentir, que era lo menos que se merecía.

Y habían tenido una bonita relación desde entonces, BaekHyun incluso se llevaba bastante bien con Lu Han, al principio le resultaba extraño tener que tratar a un chico de ocho años como si de su hijo se tratase pero entendió que era parte de la vida de YiFan y por ende también de la suya y la incomodad de Lu Han tampoco se quedaba atrás.

Pero finalmente pudieron resolver sus diferencias y prejuicios.

—Nadie, se mete con mi hijo— había amenazado el castaño a la salida de la escuela, cuando una de las madres lo retó por un chisme de riña entre Lu Han y otro chico —Lu Han no sería capaz de hacer semejante cosa, su padre lo ha criado excelentemente y yo he hecho lo mejor que he podido.

El problema era que Lu Han supuestamente había tomado la mochila de uno de sus compañeros y la había lanzado por el cerca de la escuela. Al final, el caso se resolvió y resultó que Lu Han había sido quien encontró la mochila en el patio central. Se disculparon con él y pudieron regresar a casa.

—Antes...— habló Lu Han en voz baja —Me llamaste tu hijo... — desde el asiento trasero de la camioneta jugaba con sus dedos de manera nerviosa.

BaekHyun abrió los ojos con sorpresa —¿Lo hice?

—Si...

—Oh...— BaekHyun rio con nerviosismo —Supongo, que es así, quiero decir... también eres como un hijo para mí— el chico estacionó la camioneta para poder charlar mejor con el menor —Si me importas, Lu Han.

—¿Si? — preguntó incrédulo.

—¡Claro que sí! — dijo BaekHyun —Escucha, sé que podrá ser raro todo esto, pero tu papá y yo tal vez... y digo tal vez... algún día terminemos por casarnos.

—¡¿QUÉ?! — se alarmó el joven desde su asiento.

—¡Dije tal vez! — se apresuró a decir BaekHyun —En realidad espero que sea así... yo amo mucho a tu papá. Y también a ti te quiero un montón, así que no dudes que me importas ¿De acuerdo?

Lu Han no dijo nada al respecto.

—Además... de nuestra parte puedes esperar que siempre vas a ser el único hijo de tu padre.

Lu Han soltó una risita tímida.

—Y...— BaekHyun se levantó de hombros —Si algún día, necesitas algún consejo o advertencia, puedes acudir a mí para tips modernos y no los tips del siglo pasado que te daría tu padre.

—Él no es tan viejo— dijo el chico con una sonrisa —También me agradas.

BaekHyun sonrió con alegría —Entonces ya está— el castaño volvió a arrancar la camioneta y se pusieron en marcha —Por cierto.

—¿Qué cosa?

—No le digas a tu padre que te dije que me quiero casar con él.

Lu Han soltó una divertida risotada —Él también me dijo lo mismo.

BaekHyun soltó un gritito de emoción en su asiento y avanzó por la calle hasta su casa.

Y tras varios meses, ahí estaban los tres, desayunando como cualquier otra mañana, YiFan llevaría a Lu Han a la escuela, BaekHyun saldría un par de horas después rumbo a la universidad, BaekHyun pasaría por Lu Han y comerían solos y esperarían por YiFan a la hora de la cena.

En realidad, YiFan estaba agradecido con BaekHyun, por actuar como una figura paternal para su hijo, no esperaba esa clase de trato y le encantó el hecho de que ni siquiera tuvo que pedirlo, parecía que se había sacado la lotería con Byun.

Al terminar de desayunar, los platos fueron dejados en la tarja, estaban reunidos en el marco de la entrada principal, BaekHyun arreglaba el nudo de la corbata de YiFan y veía la puerta con nerviosismo mientras Lu Han esperaba por el auto que pasaría por él.

—Llegó— habló Lu Han, viendo como un auto se estacionaba frente a su casa —Nos veremos en un par de semanas.

—¡¿Semanas?! Creí que serían solo un par de días— YiFan se alarmó y abrió la puerta de la casa, listo para enfrentar a su ex esposa, se suponía que la custodia de Lu Han ese mes era de él y los fines de semana serían de ella.

—Está bien, papá— Lu Han trató de detenerlo.

—Cariño, está bien, pasará todo diciembre aquí— insistió BaekHyun.

—Ni siquiera estarás en mi cumpleaños...

—Oh, cierto— Lu Han sonrió —¡Feliz cumpleaños! — le dio un rápido abrazo y salió de la casa con la maleta a rastras.

Los dos más grandes lo vieron marcharse mientras se despedía por la ventana del coche.

—Me dio la sensación...— dijo YiFan —De que no quería estar aquí...

—Ow...— musitó BaekHyun apoyando su mentón sobre uno de los brazos de YiFan —Claro que no, es solo que ha pasado las últimas navidades con su madre y quiere estar contigo esta vez.

—No lo sé...— YiFan soltó un suave suspiro y se dio la vuelta para ver a BaekHyun —Tengo que irme o llegaré tarde.

BaekHyun sonrió enormemente y tomó las manos de su novio —En realidad...— el castaño llevó una de sus manos a su espalda y de su bolsillo trasero sacó un par de boletos de avión, mostrándoselos a su pareja —Empaca tus maletas.

—¿Qué? — el mayor tomó los boletos y leyó el paradisiaco destino.

—¡Sorpresa!— sonrió BaekHyun aún más —Hablé a la oficina desde hace meses para avisarles que no ibas a ir a trabajar los próximos días por tu cumpleaños. ¡Te he regalado unas vacaciones todo incluido en Okinawa!

YiFan sonrió en respuesta, abrazó a BaekHyun con fuerza y besó sus labios rápidamente —Es increíble, amor, será perfecto tenerte ahí conmigo.

—Lo sé, cariño— BaekHyun besó de vuelta los labios de su pareja —No fue nada barato, pero cualquier suma de dinero la vales tú.

—Ajajaja si, por supuesto— YiFan besó la frente del más joven y tomando su mano fueron juntos hasta la habitación para hacer las maletas ya que el vuelo salía esa misma tarde.

Los preparativos para dejar la casa estuvieron listos y muy pronto estaban ya trepados en el taxi rumbo al aeropuerto. No dejaban de hacer bromas y fantasear de lo divertido que sería estar los dos solos en una paradisiaca isla en Japón.

Bajaron las maletas y caminaron al interior del aeropuerto hasta que sorpresivamente se encontraron con un grupo de personas que YiFan no esperaba ver hasta dentro de varios días.

—¡Feliz cumpleaños! — lo recibieron en coro en cuanto se encontraron de frente afuera de la puerta para abordar la sala de espera de su vuelo.

—Chicos...— sonrió YiFan con incomodidad —¿Qué hacen aquí?

—¡Sorpresa! — cantó BaekHyun soltando su mano para explicar el movimiento —Le dije a tus amigos de la oficina que debían acompañarnos para que tuvieras las mejores vacaciones al lado de tus amigos.

—Wow— YiFan habló con una fingida sorpresa —Eso es genial, Baekkie. Pero... ¿Realmente tenía que venir él?

Había señalado entonces a Kim JongIn, amigo inseparable de BaekHyun, compañero en la universidad.

—Necesitaba a alguien que hablara mi idioma— BaekHyun se levantó de hombros.

—¿Puedes pagar un viaje a Okinawa? — preguntó YiFan a JongIn.

—¡Claro que no! — sonrió el chico de piel dorada —BaekHyun fue la persona más noble y pagó el viaje y hospedaje de todos.

—¿No es genial? — preguntó BaekHyun a YiFan con una enorme sonrisa.

—¿El de todos? — preguntó YiFan con temor de ver ahí mismo a más de tres personas.

—El de todas— sonrió KyungSoo de manera irónica, tomado de la mano del director de marketing de la empresa.

YiFan entrecerró los ojos y lo fulminó con la mirada.

El resto de los invitados a la fiesta paradisiaca de YiFan entraron a la sala de espera y tomaron asientos en los lugares disponibles mientras esperaban a que su vuelo saliera, aún faltaban al menos una hora y media por lo que tenían bastante tiempo para hablar de los planes a realizarse.

—¿Si ustedes están aquí?.... ¿Quién se está haciendo cargo de la empresa? — preguntó YiFan con preocupación.

—Estará bien, Wu, no te mortifiques— el director Park, del departamento de marketing se colocó las gafas de sol y cruzó sus brazos detrás de su cabeza —Todo valdrá la pena por festejar tu cumpleaños.

—Valdrá la pena— sonrió KyungSoo, director de operaciones de la empresa de YiFan.

—Oh, espera— ChanYeol sacó su teléfono del bolsillo en cuanto comenzó a sonar y atendió la llamada —Aquí Park.

—¡Necesito tu ayuda! A-HO-RA— se escuchó por el alta voz.

YiFan entrecerró los ojos al reconocer de inmediato la voz aquella.

—¿Llegaron? Iré enseguida— ChanYeol colgó la llamada y se levantó de su asiento —SeHun necesita una mano, ya regreso.

—¿SeHun? — preguntó YiFan cuando pensó de inmediato en el jefe de ventas de la empresa.

—Y JunMyeon— la sonrisa de KyungSoo no hacía más que engrandecer.

—¿Te divierte? — preguntó YiFan irritado.

—Mucho— sonrió mientras bajaba sus gafas oscuras y continuaba leyendo el libro que llevaba consigo.

—Amor— YiFan llamó a BaekHyun tocando uno de sus hombros con discreción, el chico se quitó los auriculares y dejó de hojear la revista de espectáculos en sus manos —¿De verdad era necesario que todos estuvieran aquí?

—¡Claro! — mencionó BaekHyun en voz alta —Mereces divertirte con todos tus amigos, FanFan.

—¿Y también era necesario que hubieras pagado lo de todos? — cuestionó Wu con preocupación.

—Por supuesto, si fue mi idea— BaekHyun negó con la cabeza, poniendo los ojos en blanco.

—¿E irán todos en primera clase también? — quiso saber aún más mortificado por las tarifas de los vuelos.

BaekHyun mostró una suave sonrisa y besó con delicadeza la punta de la nariz de su novio —Claro que no tontito, ¿Crees que estoy hecho de dinero? — volvió a colocarse los audífonos y siguió revisando la revista de espectáculos.

YiFan resopló en su lugar y vio como a lo lejos, JongIn, el amigo de BaekHyun se secreteaba con YiXing, el director de finanzas.

Mientras tanto, ChanYeol iba al rescate de sus amigos.

—Hola pequeño— el director Park saludó al joven Lu Han revolviendo sus cabellos con cariño.

—No soy un perro— se quejó el chico alejando la mano del más alto.

—No, no lo eres, pero realmente luces como uno— comentó ChanYeol apretando sus mejillas —Uno muy adorable.

—Le diré a mi padre que me tocaste— amenazó Lu Han.

SeHun soltó una carcajada ante lo recién dicho —Por favor ayúdanos con las maletas, JunMyeon trajo toda la casa.

—Necesito estás cosas, SeHun— JunMyeon salió en su defensa mientras jalaba un par de maletas.

—Lo que digas— el director Oh rodó los ojos —Estoy tan emocionado por este viaje— habló después.

—Y que lo digas, todos ahí, un paraíso... será divertido— asintió ChanYeol.

—Es la primera vez que voy a Okinawa— musitó SeHun con alegría —Lo sé, lo sé, es sorprendente de saber cuándo me la paso hablando de las playas de Ishigaki, pero la gente dice que yo nací para estar un ambiente como Okinawa.

ChanYeol escuchaba atento con una sonrisa de por medio, mientras que JunMyeon frunció el entrecejo al escuchar aquello último.

—¿Quién dice eso?

—Personas— respondió SeHun con simpleza.

—¿Qué personas? — insistió JunMyeon, él nunca hubiera pensando que la imagen de su novio fuera a encajar específicamente con una prefectura en Japón.

—Personas, no las conoces— SeHun trató de desviar el tema de conversación jalando las maletas más lejos hacia la entrada del aeropuerto.

El director de recursos humanos, Kim JunMyeon, buscó en su mochila de mano la billetera para pagar el taxi y dar propina al chofer, pero por más que rebuscó en su interior y en sus bolsillos no encontró la cartera —Maldita sea, olvidé mi cartera.

—Descuida, yo traigo efectivo— habló SeHun, sacando su propia billetera.

—No, no es el dinero, ahí están mis credenciales, necesito una ID para abordar el avión, gracias SeHun.

—Ok— el mencionado frunció el entrecejo con molestia —¿Cómo esto es mi culpa?

—Uuuh— musitó ChanYeol presenciando la pelea.

—¿Puedo ir con mi papá ahora? — preguntó Lu Han.

—Iremos en un segundo— sentenció SeHun con seriedad.

—Chicos, chicos...— ChanYeol intentó calmar los ánimos.

—¡Pues claro que voy a culparte! — rugió JunMyeon —Si no hubiera sido por ti, habría empacado todo perfectamente. No paré de decirte que debíamos empacar las maletas con cuidado.

SeHun guardó silencio y desvió la mirada con culpabilidad.

~HACE CUATRO HORAS~

—¡SeHun! — gritaba JunMyeon desde su habitación, mientras buscaba en las gavetas los conjuntos de ropa adecuados para el clima del destino —Cielos santo ¿Está sordo o qué? ¡SEHUN!

—¿Qué sucede? — el director Oh entró en la habitación con un matamoscas en la mano —¿Entró alguien?

JunMyeon se le quedó viendo durante varios segundos con expresión seria —Si hubiera entrado algún asesino ¿Qué ibas a hacerle con un matamoscas?

SeHun vio lo que estaba blandiendo y lo arrojó contra el sillón más cercano —Fue lo primero que encontré.

—Hay que hacer las maletas ¿Has hecho tus maletas ya?

—Hay tiempo para eso JunMyeon— sonrió SeHun yendo hasta el armario que estaba destinado para su ropa.

—No, no hay tiempo— respondió el mayor de los dos —Necesitamos salir antes, debemos pasar por Lu Han a la escuela, ese pobre niño ha llevado a rastras la maleta consigo.

—¿Por qué no la llevó BaekHyun después?

—¡Porque es una sorpresa!

—Claro— SeHun se acercó entonces a la mochila de mano de JunMyeon y comenzó a hurgar en el interior sacando cosas de la mochila al azar —¿Has visto mis gafas favoritas?

—¡No deshagas lo que ya hice! — sentenció JunMyeon —Y las dejaste en el baño.

—¿Por qué están en el baño?

—¡Eso deberías saberlo tú! — JunMyeon volvió a colocar las cosas en el interior de su mochila sin percatarse de que la billetera había caído sobre el sillón junto al matamoscas.

~PRESENTE ACTUAL~

—De todas maneras, debiste rectificar que todo estuviera en su lugar antes de salir— se defendió SeHun cruzando los brazos sobre su pecho.

—¡Te dije que me ayudaras a hacerlo!

—¡No es cierto! Sólo seguiste quejándote al respecto— Oh desvió la mirada.

—Tendré que regresar a casa...— dijo JunMyeon con irritación.

—¿Ahora? — preguntó SeHun, está vez preocupado.

—No puedo abordar si no tengo mi identificación— replicó JunMyeon.

—Hey, chicos— llamó ChanYeol uniéndolos en un abrazo —Está bien, puedo llevarte a casa.

—¿Podrías? — preguntaron al unísono.

—Sí, KyungSoo insistió en que viniéramos en auto, así que no tardaremos.

—De acuerdo— asintió JunMyeon —Está bien, iremos a casa y tomaré mi billetera.

—Ay chicos— musitó SeHun —Ojalá lo logren.

—¿Esperarás por mí? — preguntó JunMyeon a su novio antes de abandonar el lugar.

—Toda la vida— SeHun tomó la mano de su novio y besó su dorso con cariño.

—No, quiero decir, si el vuelo sale ¿Esperarás por mí?

SeHun soltó su mano y vio hacia los lados un poco incómodo.

—¿Es enserio?

—Chicos hay que darnos prisa— advirtió ChanYeol buscando las llaves en sus bolsillos.

—¡Es una oportunidad única! — se defendió SeHun, tomando la mano de Lu Han para adentrarse al aeropuerto.

—Suerte en eso— habló el niño tomando la mano del más alto a regañadientes.

—¡Vamos! — dijo ChanYeol bastante animado, salió corriendo junto a JunMyeon hasta su auto para tomar el camino más rápido hacia su casa y llegar a tiempo antes de que el vuelo saliera.

—¿Crees que lo logren? — preguntó Lu Han mientras caminaban por el aeropuerto jalando todas las maletas que llevaban consigo.

—No— respondió SeHun con sinceridad —Más espacio para nosotros.

Lu Han soltó una divertida risita.

Ambos llegaron hasta la sala de espera y se encontraron inmediatamente con el resto de los viajeros.

—¡Lu Han! — YiFan sonrió enormemente al ver a su hijo ahí —Creí que ibas a quedarte con tu madre.

—¡Sorpresa! — canturreó BaekHyun con alegría —Arreglé los permisos para que Lu Han pudiera pasar estas vacaciones al lado de su papá favorito. ¿No es genial?

YiFan asintió con la cabeza, eso sí lo encontraba verdaderamente genial.

—¡Incluso compartiremos habitación, papá! — sonrió Lu Han con gran alegría.

—¿Com...partiremos habitación? — YiFan giró la cabeza lentamente hasta BaekHyun en busca de explicaciones, al menos esperaba las noches a solas con él.

—Unas excelentes vacaciones padre - hijo— sonrió BaekHyun, con la risita burlona de KyungSoo de fondo.

—¿Dónde está ChanYeol? — preguntó de pronto, al no ver a su alta pareja presente.

—Se fue con JunMyeon— respondió SeHun tomando asiento al lado de Lu Han.

—¿Cómo que se fue con JunMyeon? — exigió saber el director Do.

—Olvidó su billetera en casa y ChanYeol se ofreció a llevarlo a casa para recuperarla— contestó el más alto, buscando en su propio bolso las gafas que había encontrado en la mañana.

—¡¿Me dejó aquí solo?! — KyungSoo se exaltó y con gran molestia cerró el libro que leía y dejó el lugar para estar a solas.

—Hm— BaekHyun sonrió y en voz baja dijo al oído de YiFan —Problemas en el paraíso.

YiFan le dedicó una mirada escéptica y negó con la cabeza ligeramente.

~HACE DOS HORAS~

ChanYeol se encontraba guardando las sobras de la comida en bolsas de plástico que iba a guardar en la nevera para congelarla, cuando de pronto en la cocina entró un ansioso KyungSoo.

—¿Estás bien, bebé? — preguntó ChanYeol notando el discreto tiritar del cuerpo de su adorable esposo.

—No— habló KyungSoo con preocupación —Muero de nervios, ChanYeol— musitó.

—Estaremos bien, Soo— ChanYeol dejó lo que estaba haciendo para poder tomar el rostro del contrario entre sus manos, rozó la punta de su nariz con la contraria —Todo estará bien.

—Pero...— KyungSoo colocó sus manos sobre las de su pareja y cerró los ojos —Me da miedo...

—Lo sé, bebé— ChanYeol se alejó de su esposo y volvió a hacer sus deberes.

—Necesito una taza de café— KyungSoo tomó la cafetera y una taza vacía.

—No, bebé, solo vas a ponerte más ansioso...

—Tienes razón...— KyungSoo dejó de lado el café y apoyó sus manos sobre la barra de la mesa de la cocina —En verdad, necesito que alguien tranquilice mis nervios cuando despeguemos.

—Hey— ChanYeol lo llamó —Yo te atrapo.

KyungSoo sonrió con ternura y se acercó a dejar un ligero beso sobre la mejilla del contrario —Te amo.

—No, literalmente, si el avión se estrella o algo, yo te atrapo— sonrió ChanYeol.

—Deja de hablar, por favor— la sonrisa de KyungSoo se desvaneció.

—Si pasa alguna catástrofe, harán una película de nosotros ¿no sería genial?

—¡Que guardes silencio! — KyungSoo salió de la cocina y fue hasta la sala de estar.

ChanYeol metió la comida en el congelador y fue hasta donde KyungSoo estaba para tratar de tranquilizarlo.

—¿Dónde está YiXing? — cuestionó KyungSoo buscando por todos lados, el amigo de los dos, el director de finanzas se había quedado a dormir con ellos pues temía quedarse dormido y no llegar a tiempo para abordar el vuelo.

—Debe seguir durmiendo...

—¿¡Durmiendo!? — KyungSoo se exaltó y subió las escaleras con gran molestia hasta la habitación de huéspedes donde YiXing se estaba quedando.

Abrió la puerta estrepitosamente y pegó el grito en el cielo —¡YIXING! — tomó una almohada cercana y la aventó al gerente de finanzas.

—¡¿Qué?! ¿Qué? — YiXing despertó desorientado.

—Levántate ya, YiXing, salimos en cinco minutos— advirtió KyungSoo cerrando la puerta.

—Ah...— el director Zhang suspiró con cansancio —Cielos...— se levantó de su lugar en la cama y justo en el momento en que KyungSoo volvió a cerrar la puerta de la habitación una persona a su lado también se incorporó.

—¿Qué sucede? ¿Quién hace tanto ruido?

YiXing abrió los ojos con gran sorpresa al ver a la chica a un lado de él —¿Qué haces aquí?

—¿Cómo que qué? — preguntó la mujer estirando los brazos con flojera —Me pediste que me quedara contigo.

—Demonios...— murmuró YiXing levantándose y colándose un par de calcetines y los sneakers cerca a él —Tienes que irte ya, estamos a punto de irnos de viaje y está ni siquiera es mi casa.

—Cielos, YiXing, debiste decírmelo ayer— la chica también se levantó de su lugar y se colocó el par de zapatillas deportivas que llevaba el día anterior.

—¡No! — detuvo YiXing cuando vio a su secretaria acercarse a la puerta para abrirla —Tienes que ser cuidadosa, los dueños están abajo, espera, iremos juntos.

El director Zhang tomó su mochila de mano, tomó su teléfono y abrió la puerta, antes de salir de la habitación se aseguró de ver a ambos lados del pasillo, dio la indicación con la cabeza de que salieran corriendo, bajaron las escaleras a toda velocidad y al ver la puerta libre de sospecha, la chica se adelantó a correr hacia la entrada, pero justo de uno de los pasillos salió uno de los dueños de la casa.

—YiXing— saludó ChanYeol jalando las maletas, ignorando la presencia de la chica que estaba a sus espaldas —Buenos días.

—Buenos días, Yeol. ¿Qué tal? — YiXing dio indicaciones con la cabeza para que la chica pudiera resguardarse en la sala de estar, así que su secretaria corrió en completo silencio hasta ocultarse detrás de uno de los muros divisores del pasillo principal y la sala de estar.

—Todo bien.

—¿Listo? — KyungSoo salió del pasillo que conducía a la cocina y colgó su mochila de mano a su espalda —Vámonos, es hora de la diversión.

—Estaré contigo, bebé— murmuró ChanYeol con una ligera sonrisa, depositó un suave beso sobre una de sus mejillas y abrió la puerta principal.

—Gracias— KyungSoo devolvió la sonrisa y salió de la casa arrastrando su maleta.

—Ah...— YiXing volteó en dirección a la sala de estar.

—¡YiXing date prisa! Llegaremos tarde— se quejó KyungSoo desde afuera.

—...— el director Zhang no tuvo otra opción más que salir de la casa a regañadientes.

El último en salir había sido ChanYeol quién se quedó un par de segundos colocando el código en el sistema de seguridad, salió de la casa y cerró la puerta.

Dejando a la chica al interior de la residencia.

~PRESENTE ACTUAL~

—ChanYeol...— habló JunMyeon tocando con nerviosismo su barbilla —¿Crees... crees que podrías ir un poco más rápido?

El mencionado giró la mirada al contrario durante breve segundos y dibujó en su rostro una traviesa sonrisa —Deja de preocuparte, lo lograremos.

—Sé que lo haremos, lo haremos Yeol, pero ¿Y si vamos más rápido? Además ¿Por qué tomaste esta ruta? Hay más tráfico que por la autopista....

—Lo tengo bajo control, Junnie Honey Bunny, descuida— habló ChanYeol dando un ligero golpecito en la pierna de su amigo.

—Bajo control tienes tu lentitud, esa abuelita nos acaba de rebasar— habló JunMyeon con irritación hundiéndose en el asiento del copiloto.

ChanYeol frunció el entrecejo con los labios abultados, y sin tomar en cuenta las advertencias de su colega, siguió a su propio ritmo.

Mientras tanto, en el aeropuerto, no se respiraba el aire relajante de unas maravillosas vacaciones venir.

—Lu ¿Ya comiste algo? — BaekHyun preguntó aquello mientras revisaba su teléfono, YiFan a su lado leía uno de los libros de negocios que tanto le parecían aburridos.

—Tomé algo en la escuela— asintió el chico.

—De acuerdo...— el castaño guardó su teléfono celular y giró la mirada a todo alrededor —¿Dónde se metió todo el mundo?

Y es que en una de las zonas de la sala de espera, YiXing y JongIn discutía sobre un chico de facciones bastante atractivas.

—¿No es realmente un sueño? — suspiró JongIn observando al joven de anteojos hojeando un grueso libro de pasta dura.

—No sabía que también estabas en los chicos— hablaba YiXing con curiosidad.

—Yo estoy con el amor, YiXing, con el amor— sonrió de manera picara.

De pronto el chico al que se mantenían observando elevó la mirada leves segundos y le dedicó una nerviosa sonrisa a JongIn.

—¿Viste eso? — murmuró el chico de piel dorada al extranjero directivo.

—¿Qué vas a hacer?

—Sólo observa y aprende— JongIn se levantó de su asiento y decidió rondar un poco más por el aeropuerto antes de hacer su jugada maestra.

Del otro lado de la zona, en el área de alimentos un niño jalaba la mano del director que lo había acompañado hasta ese lugar.

—¿Qué te gustaría comer, Lu Han? — preguntó SeHun soltando la mano del menor.

—Una hamburguesa— respondió el menor viendo el menú de brillantes letras sobre el mostrador.

—¿Estás seguro? ¿Tus padres te dejan comer está clase de comida?

—No tiene una dieta détox, Oh— KyungSoo, quien estaba pidiendo una malteada se dio la media vuelta para rescatar al de menor edad.

—¡Soosie! — habló con alegría SeHun —¿Qué ordenaste?

—Una malteada, necesito algo que me haga feliz en este momento— murmuró entre dientes.

—¿Entonces puedo pedir una hamburguesa? — quiso saber el hijo del director ejecutivo.

—Ve, anda— dijo SeHun para seguir charlando con KyungSoo —¿Por qué no eres feliz, Soosie?

—Hay muchas razones para no estarlo— dijo nada más, acercándose al mostrador para tomar su malteada luego de que escuchó su nombre en voz alta.

—Vamos... iremos a Japón, tendremos unas vacaciones pagadas por el caritativo novio del jefe— habló SeHun, vigilando desde lo lejos las acciones de Lu Han.

—Eso suena bien, es solo que...— KyungSoo no iba a atreverse a hablar sobre sus temores, no iba a permitir que su imagen de director fiero se viera ensombrecida por una fobia —A veces me mareo un poco cuando vuelo, es todo.

—¡Oww! — musitó SeHun con ternura —Es normal, KyungSoo, mientras no nos ataque ninguna turbulencia. Una vez, JunMyeon y yo volamos a Tokio y la turbulencia fue una locura— relataba SeHun con diversión —El avión se tambaleaba de un lado a otro sin cesar, incluso una niña comenzó a llorar jajaja— KyungSoo empalidecía cada vez más a cada palabra —Creí que el avión se desplomaría en cualquier momento.

—Listo, ya la pedí— Lu Han se acercó al par de empresarios y observó con curiosidad a los adultos —Olvidé pedir algo de tomar, iré de nuevo...

—Toma esto, Lu Han... de repente se me quitó el hambre— KyungSoo le entregó la malteada y sintiendo unas tremendas nauseas, se despidió del par de chicos —Los veré más tarde.

El director Do salió corriendo rumbo al baño antes de que su desayuno adornara el suelo del aeropuerto.

—Eeew— habló Lu Han después de dar un primer sorbo a la bebida —Es de chocolate.

SeHun lo vio extrañado —¿A qué niño no le gusta el chocolate?

Mientras tanto, BaekHyun seguía revisando otra de las revistas de farándula que había llevado consigo.

—¿Qué está haciendo? — preguntó YiFan viendo a lo lejos, a un JongIn dar vueltas sobre su propio eje.

—Oh, solo está practicando— murmuró BaekHyun uniéndose a contemplar a su amigo.

—¿Para qué? — quiso saber con curiosidad pero desagrado.

—...— BaekHyun cerró la revista de espectáculos y la dejó a un lado suyo, volteó en dirección a YiFan y sonrió ampliamente —¡Sorpresa!

YiFan giró el rostro hacia BaekHyun y con temor espero el resto de su "sorpresa"

—Los chicos harán un espectáculo de medio tiempo durante tu cena de cumpleaños ¿No es genial? Todos quieren amenizar la noche con sus innumerables talentos, será la noche perfecta— contó BaekHyun con alegría.

—Maravilloso— musitó YiFan con sarcasmo, había visto a sus compañeros mostrar sus "talentos" en una comida de negocios y en aquel entonces, consideró despedir a todos sus colegas.

JongIn siguió dando vueltas sobre su propio eje antes de poder detenerse maravillosamente sobre la punta de uno de sus pies, YiXing se acercó a él de manera sigilosa para seguir charlando sobre el chico que habían visto antes.

—¿Lo harás ahora? — quiso saber el director Zhang tomando su teléfono celular para leer el mensaje entrante —Oww, mira, es mi secretaria, dice que está atrapada— YiXing rio con diversión al creer que la chica le hablaba del trabajo en la oficina sin imaginar que sus palabras serían literales.

—Si tienes tanta urgencia de ver el arte de la conquista, está bien— asintió el menor —Vamos.

Ambos se dispusieron a pasear por el aeropuerto nuevamente hasta encontrar al chico que había dejado de leer su libro y ahora parecía hacer bosquejos en un cuaderno de imitación de piel.

—Es todo un sueño— susurró JongIn —Ahora, aprende— dijo a YiXing, y con gran confianza se acercó al joven, tomó asiento a un lado de él y con discreción observó lo que el contrario plasmaba en las hojas del cuaderno.

—Hola— saludó JongIn con una sonrisa coqueta de por medio.

—Uh— el contrario lo miró con desconfianza —Hola.

—¿Estás dibujando?

—Uhm— el otro asintió con la cabeza buscando con la mirada a alguna otra persona —Si, estoy dibujando.

—Vaya...— sonrió JongIn acercándose un poco más —Eso luce realmente genial ¿Qué es? ¿Un dinosaurio?

—S-si— el chico de anteojos se acomodó las gafas sobre el puente de su nariz y entrando en confianza por la amable expresión de JongIn siguió hablando —Es un dinosaurio, estoy dibujando una escena de un comic, se supone que yo soy el héroe.

—Wow, eso suena interesante.

—Lo es, lo pidieron para la clase de arte— el chico le mostró a JongIn el resto de dibujos que había hecho.

—¿Sabes? — JongIn vio con interés los dibujos poco pulidos del joven —Yo también tuvo una tarea de este estilo para la clase de arte cuando...iba... en... secundaria...— JongIn volteó a ver al chico a su lado que le mostraba con gran animo los dibujos.

—¡Si! Es para esa clase justamente— aceptó el menor de los dos.

—¿Sabes? Mi... compañero me está llamando, tengo que ir con él un momento...

JongIn señaló a un YiXing expectante que veía la escena con emoción pero al ver a JongIn regresar con una expresión de vergüenza espero por más detalles del plan que parecía fallido hasta ese momento.

—¿Qué sucedió? — preguntó YiXing con gran interés.

—¡Tiene 14, YiXing! ¡14!

El director Zhang no evitó soltar una carcajada ante lo dicho, JongIn le llevaba casi una década de diferencia y el haber insistido tanto en conquistarlo le parecía hilarante, ambos regresaron hasta la zona donde estaban esperando por su vuelo previamente sin dejar las burlas detrás.

Pero no todo era risa y diversión, y mucho menos en el automóvil del director de marketing.

—¡DIOS! ¿¡No puedes ir más lento?! — habló JunMyeon con el estrés inundado su cuerpo entero.

—Lo lamento... llegaremos a tiempo, te lo juro... uh... una llamada— ChanYeol maniobró con dificultad para sacar el celular de su bolsillo y atender a su pareja.

—¿Dónde demonios estás, ChanYeol?

—Estoy rumbo a la casa de SeHun y JunMyeon, vamos a recuperar la billetera de SuHo— contó ChanYeol sin prestar mucha atención al camino.

—¿En qué estás pensando? Te dije que te necesitaba aquí conmigo, pero me dejaste solo, gracias por nada— KyungSoo colgó la llamada de teléfono.

—P-pero...— no pudo decir nada más pues la llamada había finalizado —Rayos, me acabo de pasar la salida.

—¡DIOS! — volvió a decir JunMyeon con verdadero sufrimiento.

KyungSoo por su parte, sufría de igual manera, estaba al lado de BaekHyun y Lu Han, los había acompañado a tomar un par de panfletos turísticos de Japón.

—¿Sabes que sería divertido? — preguntó el niño a BaekHyun mientras hojeaba un folleto sobre scuba.

—¿Qué cosa?

KyungSoo escuchaba sin interés, simplemente quería despejar su mente.

—Que el avión fallara y se estrellara en una isla desierta como en Lost— habló Lu Han con una sonrisa mientras revisaba la cantidad de islas que Okinawa tenía para vacacionar.

La ansiedad de KyungSoo no hizo más sino crecer y huyó a la estación de bebidas más cercana.

Y finalmente, después de un eterno recorrido, JunMyeon y ChanYeol lograron llegar a casa, estacionaron el coche y rápidamente bajaron para recuperar la billetera.

—¿Recuerdas donde la dejaste?

—SeHun comenzó a hacer un desastre en el cuarto de la ropa, así que seguramente debe estar ahí— asintió JunMyeon esculcando sus bolsillos en busca de la llave de la casa, sin saber que justo antes de partir las había vuelto a dejar en la mochila que le había dado a SeHun que estaba en el aeropuerto.

—Perfecto, entonces, la tomas y corremos.

—¡No puede ser! ¡Olvidé las llaves también! — habló JunMyeon con irritación.

—No te desesperes, damiselo— canturreó ChanYeol —Tengo un par de trucos bajo la manga de cuando KyungSoo se enojaba conmigo y entraba a hurtadillas en su habitación cuando éramos novios.

JunMyeon lo vio de manera extraña, le parecía raro que se metiera a hurtadillas en la habitación de otra persona. Pero si aquello iba a salvarle el día, no iba a decir nada al respecto.

ChanYeol se acercó a la ventana más cercana y forzó el pestillo para poder abrir de par en par y entrar al interior, con su altura no había sido necesario cargar a JunMyeon sobre sus hombros, por lo que casi de inmediato los dos estaban al interior del hogar.

JunMyeon corrió por los pasillos hasta el cuarto donde la desgracia había ocurrido, tomó su billetera y dejó el matamoscas en su lugar. —Listo, vámonos— JunMyeon abrió la puerta y colocó el número de seguridad para que tuvieran tiempo suficiente para abandonar la residencia.

ChanYeol le echó un último vistazo a la residente Kim-Oh y anotó un par de detalles que le gustaría replicar en su propio hogar y salió de la casa con prisa, volvieron a treparse en el auto y condujeron a toda velocidad hasta el aeropuerto.

Por otro lado, Lu Han y BaekHyun seguían viendo los folletos de las atracciones en el puesto de informes a turistas. Cuando por el alta voz escucharon el nombre del menor.

"Wu Lu Han, favor de reportarse en la puerta 6"

Tanto Lu Han como BaekHyun voltearon a verse entre sí, y sin dejar pasar más tiempo, BaekHyun tomó la mano del menor y se dirigieron hasta el lugar solicitado, al llegar, un guardia aduanal los esperaba.

—¿Hay algún problema, oficial? — preguntó BaekHyun con preocupación.

—Sólo un par de preguntas de rutina.

—Oh— suspiró BaekHyun —Esto sucede siempre, no es ESE Wu LuHan— dijo BaekHyun —Es solo un niño ¿Qué no ve?

—Es protocolo— dijo el oficial mientras conducía al par hasta la oficina.

—Solo tengo ocho años ¿Cómo podría ser yo culpable de algo? — intervino Lu Han.

—Por favor, hagamos esto rápido y silencioso.

—Está bien, está bien, pero necesitamos llamar a su padre, primero.

—Por favor síganos— el oficial se acercó a BaekHyun para tomarlo del brazo y guiarlo hasta la oficina.

—¡HEY! ¡NO ME EMPUJE! — gritó BaekHyun jalando a Lu Han de la mano —¡YIFAN! ¡YIFAAAAN!

Pero el solicitado no iba a poder escucharlos pues había abandonado su lugar de espera después de que YiXing rompiera sus gafas de lectura, no iba a poder continuar con su preciado libro de negocios aunque quisiera.

En su lugar, había ido directo al bar para tomar un par de copas y despejar su mente de tanto ajetreo.

Tenía planes totalmente diferentes para su cumpleaños y ahora estaba metido en un aeropuerto con un montón de personas a las que no hubiera elegido como necesarias para disfrutar unas paradisiacas vacaciones al lado de su novio.

—Sírvalo doble, viajo con mis ruidosos subordinados— pidió al cantinero cuando le entregó el whiskey seco que había solicitado.

—Wow— una vocecilla a su lado llamó su atención —No sabía que éramos ruidosos subordinados.

YiFan rodó los ojos, dio un rápido sorbo a su bebida y habló —No, tú KyungSoo, eres todo, menos ruidoso.

—Pero tu subordinado— KyungSoo levantó su propio trago y bebió todo el contenido de una sola vez.

—Más despacio ahí, correcaminos— dijo YiFan viendo como el cantinero volvía a llenar su vaso con licor —¿Quieres que te impidan la entrada al avión?

—Quiero estar lo suficientemente inconsciente— asintió KyungSoo volviendo a beber todo su trago de un solo sorbo.

—¿Por qué? Te encanta viajar— YiFan dio un ligero sorbo a su whiskey, diciéndole al cantinero con señas que dejara de servir para KyungSoo.

—Por tierra— contó KyungSoo en un suspiro —Odio las alturas, Wu.

—Mh— el mencionado no pudo evitar soltar una risa divertida, le parecía graciosa la confesión teniendo en cuenta que su director de operaciones contrajo matrimonio con el director de marketing de una muy notoria prominente altura.

—Me da terror viajar en avión y el estúpido de ChanYeol prometió estar conmigo mientras la ansiedad subía y subía— habló el menor de los dos.

—Bueno...— YiFan se levantó de hombros —Llegara, no te preocupes, siempre logra cumplir sus promesas por descabelladas que parezcan— era una cualidad que el director Wu admiraba de ChanYeol y el departamento de marketing.

—¿Y por qué de pronto somos tan innecesarios para ti entonces? — quiso saber KyungSoo.

—No son innecesarios— se retractó YiFan —Es solo, que para este viaje, esperaba que BaekHyun y yo pudiéramos pasar tiempo a solas. Con la empresa, la universidad y Lu Han no hay mucho tiempo para que podamos estar juntos.

—Vives con él— dijo KyungSoo escéptico.

—¡Imagínatelo entonces! — replicó YiFan con nostalgia —Además... comienzo a creer que este viaje está planeado para que BaekHyun pueda evitarme todavía más ¿Perdí mi encanto, Do?

KyungSoo le dedicó una expresión de desagrado —Nunca lo has tenido, de hecho, no sé ni siquiera porque ese chico está contigo. ¡De hecho! Ni siquiera sé cómo lograste tener un hijo.

YiFan lo observó, con seriedad.

—Y por lo mismo...— KyungSoo se levantó de hombros —No puedo negar que ese tipo de verdad está totalmente enamorado de ti. ¿Por qué crees que quiere evitarte?

—Los invitó a todos, planeó actividades que parecen que no podremos tener tiempo para los dos... ¿Sabías que iremos a hacer excursionismo todas las mañanas?

—Traje mis zapatos especiales— asintió KyungSoo con una sonrisa.

—E incluso colocó a Lu Han en la misma habitación que los dos.

—Okay... eso es un poco incómodo— aceptó el más joven —Pero ¿No crees que lo hace para que pases tiempo con él? Últimamente estas metido en la oficina todo el día y básicamente estas últimas semanas BaekHyun ha estado a cargo de cuidar a LuHan...

—Tal vez...

KyungSoo le dio un ligero golpecito en los hombros —Deja de preocuparte, BaekHyun te ama con locura, después de todo... ¿Quién iba a gastar todo ese dinero solo para darte un buen cumpleaños al lado de las personas que quieres?

YiFan sonrió por fin, pero casi enseguida entrecerró los ojos y continuó hablando —En serio ¿De dónde diantres creen que BaekHyun saca su dinero? — se señaló a sí mismo y terminó de beber su trago.

Y aunque YiFan se sentía un poco más contento con la decisión de las vacaciones en Japón, JunMyeon todavía no podía lidiar con el estrés que le provocaba ChanYeol al volante.

—Por favor, ChanYeol, date prisa, el vuelo sale en media hora— anunció JunMyeon apretando sus manos contra el asiento.

—Lo hago, lo hago— hablaba el más alto —Oh, un mensaje— dijo cuándo su teléfono sonó desde un costado —¿podrías leerlo, por favor?

JunMyeon se limitó a tomar el teléfono de su compañero y leer sin mucha atención —Es solo... es solo tu compañía de seguridad, la alarma se activó, alguien entró en tu casa— dijo sin interés.

—¡¿Qué?! — se alarmó ChanYeol tratando de tomar el celular de las manos de JunMyeon pero este se lo impidió incitándolo a seguir manejando.

—¡Está bien! ¡La compañía se encarga! ¡Sigue manejando!

—...— ChanYeol frunció el entrecejo y abultó los labios ligeramente, sin dejar de conducir.

JunMyeon apretó los labios y soltó un suspiro —Ah... lo siento, Yeol.

—Está bien— musitó en voz baja.

Sabía que si alguien irrumpía en su casa, la compañía de seguridad se encargaría pero no podía evitar preocuparse, lo que no sabía que era la alarma había sido activada pues la secretaria del director Zhang había salido de su residencia esperando no ser atrapada y fichada como una ladrona.

—Es solo que... estoy un poco tenso.

—¿Es por la billetera?

—Y porque SeHun está mañana se comportó como un tarado— contó el de menor estatura.

Y JunMyeon no era la única persona que finalmente era abierto con sus sentimientos respecto a su pareja.

SeHun y KyungSoo estaban en el puesto de revistas, buscando algo que comprar, KyungSoo había comprado un bonche de gomitas de regaliz que despedazaba con los dientes para dejar fluir su frustración tras el fallido intento de embriagarse.

—Conozco un juego de aeropuerto que nos hará sentir que el tiempo va más rápido— dijo SeHun revisando los títulos de las revistas —Lo juego con JunMyeon todo el tiempo, vemos a una persona y le inventamos una historia lo más detallada posible para que luzca convincente.

KyungSoo rodó los ojos, no podía creer como aquel par encontraba las cosas más mundanas y aburridas para tenerlas como hobby.

—Yo empiezo— canturreó SeHun observando a los presentes más cercanos, señaló a un hombre con discreción y empezó a hablar —Okay.... Ese es Jung HyunSik y va rumbo a Osaka a ver su madre por acción de gracias, tiene un perro shiba inu cuyo nombre es....— SeHun pensó duramente al respecto —Uh... no lo sé, demasiado difícil, tu turno.

—Veo...— habló KyungSoo arrancando un trozo de regaliz con sus dientes —Veo un hombre casado, aterrado por tomar el avión después de que su esposo lo abandonó.

—Ih— musitó SeHun con sorpresa y comenzó a girar la cabeza en todas direcciones en busca de aquel personaje —Oh por Dios, ¿Dónde está? Dime ¿Dónde está?

—Aquí— se señaló con un dulce de regaliz y siguió mascando con furia —Soy yo, le temó a volar en avión.

—Oww— dijo SeHun nada más, enternecido por la confesión —Entiendo tu enojo, JunMyeon también está molesto conmigo porque olvidó su billetera por no haberlo ayudado a empacar esta mañana.

~EN EL COCHE RUMBO AL AEROPUERTO~

—Me dejó abajo— habló JunMyeon —Le pedí que hiciera algo y no lo hizo.

—Uhm— ChanYeol apretó los labios incrédulo —No suena a algo que SeHun haría ¿Realmente le pediste que te ayudara?

~EN EL PUESTO DE REVISTAS DEL AEROPUERTO~

—¡Él nunca me lo pidió! — habló SeHun con molestia —Lo único que hizo fue quejarse todo el tiempo diciendo "Necesitamos hacer las maletas a tiempo, SeHun" "Las maletas, SeHun" "¿Qué ibas a hacer con ese matamoscas, SeHun?"

KyungSoo escuchaba mientras seguía destrozando gomitas de regaliz —Eso para mí suena a que te estaba pidiendo ayuda.

~EN EL COCHE RUMBO AL AEROPUERTO~

—Eso para mí suena a que esperabas que te leyera la mente— sentenció ChanYeol.

~EN EL PUESTO DE REVISTAS DEL AEROPUERTO~

—¿Qué soy? ¿El profesor X?

—¡No! no sé trata de leer mentes— negó KyungSoo de inmediato —Sé trata de saber lo que tu pareja necesita.

~EN EL COCHE RUMBO AL AEROPUERTO~

—Tengo un idea— dijo ChanYeol —Simplemente di "Ayuda" ni siquiera tienes que decir ayúdame o algo, sólo... "Ayuda" y sabrá entonces que necesitas una mano en algo y así te evitarías estar enojado.

—No estoy enojado— negó JunMyeon con mucho más tranquilidad —Es solo que... es solo que a veces cuando pasas tiempo con alguien, esperas cierta compresión de su parte, esperarías que comprenda tus necesidades, y duele saber que no es así.

ChanYeol guardó silencio y meditó al respecto, lamentándose entonces haber bromeado sobre accidentes de avión con KyungSoo.

~EN EL PUESTO DE REVISTAS DEL AEROPUERTO~

—Sinceramente es frustrante— habló SeHun —Qué no sé de cuenta de mis buenas intenciones, yo haría cualquier cosa por JunMyeon y me duele saber que él piense que solo intentó sabotearlo.

—...— KyungSoo apretó los labios cuando sintió que haber llamado a su esposo para quejarse no había sido tan correcto.

Una charla llevada en lugares diferentes y con perspectivas tan contrastantes removió algo en las dos parejas, seguramente hablarían de ello cuando por fin pudieran encontrarse.

Y quien estaba teniendo una plática también, era el hijo del director de la empresa, que seguía siendo interrogado por las autoridades aduanales.

—No he viajado nunca a Japón— dijo el menor.

—Su record de viajes dice otra cosa— sentencio el oficial —¿No le suena la exposición de robótica en el museo nacional de ciencias e innovación de diciembre del 2012?

—¡Tenía ocho meses! — dijo el chico aturdido.

—Por favor, ¿Podríamos dejar esto? — Inquirió BaekHyun —Es solo un niño, él no sabe ocultar ni su desagrado, no podría ocultar frutas y verduras para traficarlas, es demasiado pequeño y además es alérgico a la piña.

El oficial entrecerró los ojos y observó a BaekHyun —Parece que sabe mucho sobre el tráfico de frutas.

—Pues claro— habló BaekHyun con obviedad —Mi padre es agricultor.

—¿Dónde estaba en diciembre del 2012? — preguntó el oficial con una fuerte mirada puesta sobre él.

BaekHyun abrió los ojos con sorpresa —Necesito que mi novio este aquí.

Y aunque en la oficina aduanal apenas comenzaba a cocinarse un embrollo, en la sala de espera donde estaban todos reunidos, se suscitaba una reconciliación.

ChanYeol y JunMyeon habían logrado llegar a tiempo y ahora se encontraban con sus respectivas parejas.

—¡ChanYeol! — gritó KyungSoo de emoción abalanzando su cuerpo contra el del mayor en un efusivo abrazo.

—Bebé, lamentó lo que dije en la mañana, estaba jugando, sabes que no hablaba en serio— ChanYeol rodeó la cintura de su pareja y dejó un par de besos sobre su mejilla más cercana.

—Lo sé, ChanYeol, sé que intentas hacer lo mejor— el bajito apretó sus brazos alrededor de su cuello hundiendo su rostro entre el hombro del mayor.

—JunMyeon lamentó mucho no haberte ayudado esta mañana— SeHun mantenía el cuerpo de su novio apresado contra el suyo en un apretado y cariñoso abrazo —La próxima vez pondré más atención en tus necesidades.

—Descuida, SeHun, debía haberte pedido ayuda desde un principio— asintió JunMyeon despegándose apenas para depositar un suave beso sobre sus labios —Me aseguraré de hacerte saber cuándo necesite tu ayuda.

Al ver la enternecedora reconciliación, YiFan no pudo evitar aplaudir de manera sarcástica.

—Muy lindo y todo, pero alguien ha visto donde demonios se metieron Lu Han y BaekHyun, el avión está a punto de salir.

Y tras haber dicho aquello, el altavoz habló.

"Wu YiFan, favor de reportarse en la oficina aduanal de la puerta 6"

Todos se vieron con sorpresa ante la petición, mientras YiXing corría a la sección donde los pasajeros ya se formaban listos para entrar en el avión, para pedir un par de minutos extra por el imprevisto que recién era informado.

YiFan por su parte se aseguró de correr a toda velocidad hasta la oficina solicitada.

—¿Qué es lo que está pasando? — quiso saber el hombre de imponente altura.

BaekHyun se sintió aliviado y Lu Han corrió a abrazarlo.

—Solo estoy interrogando a su familia, señor— habló el oficial de aduana.

YiFan sonrió ante el término utilizado, pero exigió saber lo que acontecía.

—Las fechas de regreso no coinciden, ¿Por qué iba a dejar que un niño viajara solo desde Japón?

—¿Qué? — preguntó YiFan confundido, volteando a ver a BaekHyun.

El chico fulminó con la mirada al oficial y acto seguido dirigió la mirada hasta YiFan —¡Sorpresa!

Al escuchar aquella palabra, el mayor no pudo evitar ponerse nervioso.

—Lu Han, regresará a Corea con el resto de los chicos, pasará un par de días con su madre.

—¿Y eso?

—Para que podamos tener tiempo a solas tú y yo— sonrió BaekHyun con picardía —No quiero tantos colegas tuyos inmiscuyéndose en nuestros asuntos, seremos solo nosotros dos.

YiFan sonrió aún más ante la noticia recién escuchada. Después de todo, BaekHyun no estaba tramando unas vacaciones para distanciarse de él.

Después de haber hecho entender al oficial de aduana que LuHan ni BaekHyun eran ningún tipo de traficantes de frutas, los dejaron ir para abordar el avión, justo a tiempo antes de que cerraran las puertas de abordaje.

Todos estaban felices de poder pasar un tiempo en compañía, y en un lugar tan esplendido como Okinawa.

Al principio todo se había sentido como si los paradisiacos planes fueran derrumbándose poco a poco, pero ahora las cosas marchaban mucho mejor.

Seguramente iban a haber un montón de anécdotas más en la isla japonesa. 

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Hace un par de meses comencé a ver Modern Family otra vez y recordé lo divertidisimo que es jajaja.

Un capítulo en especial me hizo reír un montón, y se me vino a la cabeza la misma situación aplicada a mis ships jajaja.

Y resultó en esto.

Hay un capítulo continuación de este, donde ya están en el resort y viven igual muchas divertidas desventuras, el otro tiene un enfoque más romántico del ChanSoo uwu

Si hay una respuesta agradable, consideraré escribir la continuación.

En realidad hay un montón de capítulos divertidos de Modern Family que me hacen pensar en como serían esas situaciones aplicadas a mis ships jajaja.  Sobre todo con el SeHo y el ChanSoo.

Espero que les haya gustado la lectura.

Cuídense uwu

Los amito♡

Ojalá nos leamos pronto por esta misma obra 👀 si no... Bueno, nos leemos.