Oscuridad extensión de más de miles de kilómetros...

El bosque en silencio, ni una ardilla corriendo, ni hormigas caminando, nada en absoluto. Ni el viento soplando entre las hojas.

El tiempo se había detenido.

- ¿Por qué? - aquel chico dijo entre jadeos, tratando de parar la hemorragia, su torso cubierto de sangre, la pupila contraída, viendo la silueta frente a él.

- No eres de uno de nosotros... Jamás lo fuiste, pero tampoco perteneces a ellos.

- ¿qué tratas de decir? - el chico agonizaba.

- Lo siento, pero tengo cuentas por saldar - sus ojos fijos en el cuchillo acercándose a su cuello.

|*|

- ¡¿Tu?! - paredes blancas arruinadas por la sangre en ellas, él en un rincón con una camisa de fuerza de igual manera teñida por la sangre, su cabello enmarañado sin brillo.

- Es increíble que hasta ahora te des cuenta de la realidad.

- ¿Quién eres? ¿Por qué usas máscara?

- Era una parte de ti...

- ¿Eras? - sonrisa macabra en oscuridad total mostrando la daga de plata con la que una vez estuvo bajo su poder.