ੈ ‧ 𝐅𝐀𝐋𝐋𝐄𝐍 | 𝟷𝙰
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००० ━━━ ❛ happy, happy birthday ❜

Febrero se deslizó como la arena entre los dedos, dejando a Marzo llega, lo que significaba que Remus cumpliría años muy pronto, el joven se levantó muy temprano, sus amigos siempre lo despertaban con bromas y regalos, pero él no quería que fuera así en aquella ocasión, mucho menos con lo tensas que estaban las cosas con Sirius para esas fechas.

Black se molestó muchísimo cuando se enteró de lo que había pasado entre Vega y Remus después del baile de San Valentín, así que él y Lupin tuvieron una discusión en donde el pelinegro dijo haberse sentido traicionado, pero el castaño argumentó que no podía sentirse así, si él fue quien sugirió sus sentimientos y los de la chica Grace primero y quien decidió salir de la fiesta con Deborah Lutz a quién sabe dónde.

Lupin terminaba de atarse los cordones de los zapatos, cuando James se levantó para fruncir el ceño al verlo ya despierto.

─ Lu-Lunático... ¿Qué haces despierto a estas horas?

─ ¿Prepararme para las clases? Lo de todos los días, Cornamenta.

─ ¡Pero es tu cumpleaños! ─ Argumentó el azabache ─ ¡FELIZ CUMPLEAÑOS, POR CIERTO!

Potter se levantó de su cama para acercarse y abrazar a Remus, así como darle el regalo que había comprado para él, Remus lo miró algo dudoso, sin embargo lo terminó abriendo y sus ojos brillaron al ver el contenido, había al menos cincuenta barras de su chocolate favorito y un suéter tejido, como los que tanto le gustaba usar.

─ C-Cornamenta... no era necesario, no....

─ Tonterías, claro que sí, Lunático, te mereces un gran regalo.

El ruido de James y Remus, hizo que Peter y Sirius también despertaran, ambos felicitaron al cumpleañero y después se dedicaron a prepararse para el día. Cuando todos habían terminado, Sirius le hizo un gesto a James para que los dejaran solos en la habitación y así lo hicieron.

─ Hey...

─ Sirius...

─ Te... te compre algo, no es la gran cosa, pero...

El pelinegro extendió una bolsa grande hacia Remus, el chico la abrió con cuidado, frunciendo el ceño un poco.

─ Creí que... ibas a necesitar un maletín para cuando seas profesor

─ Sirius...

─ Lo vas a conseguir, Lunático, de verdad que lo creo.

─ Sirius... gracias.

Ambos jóvenes se abrazaron por varios minutos, cuando se separaron, Sirius tomó a Remus de las mejillas e intentó besarlo, sin embargo, Lupin se quitó enseguida.

─ ¿Rem...?

─ Sirius, yo te agradezco mucho que creas en mí y por esto, pero... no estoy seguro de que tú... de que tú.

─ ¿No soy lo que quieres?

─ No... no estoy seguro sobre qué es lo que quiero ahora.

─ ¿La quieres... a ella?

─ ¿A Vega ─ Black asintió ─ No sé, pero tampoco sé si quiero seguir en esto de... ir y venir, llevamos poco más de un año así, Sirius.

─ Siento que estás terminándome y ni siquiera empezamos ─ Sirius río con tristeza ─ Lo siento.

─ No, no lo sientas, en todo caso...

Sirius puso su mano en el hombro de Remus ─ No, perdón porque ya arruiné la primera parte de tu cumpleaños ─ Dijo haciéndolo reír.

─ No lo arruinaste, no podrías.

─ Aun somos amigos, ¿No, Rem?

─ Siempre ─ El castaño sonrío en su dirección.

La jornada escolar comenzó con la clase de Defensa Contra las Artes Oscuras y por primera vez, Vega se presentó, varias miradas curiosas la siguieron hasta que llegó a su lugar y tomó asiento junto a Remus, pero ella ni se inmutó y continuó con la seguridad de siempre.

─ Hola tú...

─ Hola Vega.

─ Feliz cumpleaños, Rem ─ Se acercó para pasar los brazos por su cuello ─ Te tengo un regalo, pero te lo daré más al rato.

─ ¿Más al rato?

─ Sí, te veo a las diez en la torre de Astronomía ─ Vega susurró a Remus con su aliento cálido golpeando en el cuello del chico, haciendo que este se estremeciera.

─ Buenos días estudiantes, bueno, comenzaremos con la clase de hoy.

─ No tan rápido, profesor Williams ─ Lo detuvo la profesora McGonagall entrando al aula.

Un hombre de más o menos 27 o 28 años entró al salón, su cabello era castaño y algo ondulado, era bastante atractivo y tenía una mirada amable, les dirigió una sonrisa sincera a los alumnos y por el apellido y el parecido, los alumnos no tardaron en deducir que estaba relacionado con Athena Calcis, alumna de Hufflepuff.

─ A partir de hoy, el señor Calcis lo apoyará en su clase y solo para recordarle, no hay ningún tipo de permiso para que haya clases privadas con alumnos y que Egan estará con usted en todo momento.

La profesora estaba por irse cuando Lorian habló ─ Profesora, disculpe, ¿Este aviso es solo para mí o para todos los profesores?

─ Para los que se olvidan de las reglas y de que Hogwarts es un lugar seguro ─ La profesora sonrío con suficiencia ─ buen día.

El señor Williams dirigió su mirada a Vega y ella se la sostuvo, se encontraba aterrada, pero no estaba dispuesta a seguir intimidándose por él ─ Bien, abran sus libros, página 280.

Remus miró a Vega con una sonrisa y empuja ligeramente su hombro con el suyo ─ Me alegra que no te dejes intimidar, pero sabes que si necesitas cualquier cosa, aquí estoy para ti.

─ Gracias, Rem.

─ Lupin, Grace, ¿Van a abrir sus libros o quieren que lo haga por ustedes?

─ Profesor, sin la intención de desacreditarlo, creo que es normal que los jóvenes quieran compartir una o dos palabras antes de empezar la clase ─ Aportó Egan Calcis sonriendo hacia la pareja.

─ En fin, empecemos con la clase.

. . .

A la hora acordada, Remus llegó a la torre de Astronomía donde Vega ya lo esperaba con un cigarro entre los dedos, el cual le ofreció. Lupin lo tomó dándole una calda para devolvérselo.

─ Hola...

─ ¿Cómo te la pasaste?

─ Bien...

─ ¿Sí?

Lupin había decidido pasar un día tranquilo, solamente con sus amigos, riéndose de sus chistes locales y comiendo pastel de chocolate, eso hasta la noche, que se estuvo preparando para ver a Vega.

─ No sabía qué regalarte, pero recordé que había visto algo en casa y le pedí a mamá que lo enviara... ─ La chica sacó una caja pequeña en forma rectangular ─ toma.

En el interior, había una de las únicas ediciones de un libro avanzado de DCAO que Remus había querido desde que entró a Hogwarts, lamentablemente no lo vendían en las librerías y no estaba en la biblioteca de Hogwarts.

─ Lamento que haya sido algo usado, pero...

─ Vega, me encanta, muchas gracias.

Remus abrazó a Vega acunando su rostro entre sus manos ─ Pero ese no es el regalo que esperaba recibir de ti.

─ ¿No?

─ No.

─ Entonces andas muy exigente hoy, ¿No, Remus Lupin?

─ Puede que un poco, solo un día al año.

─ ¿Y qué querías de mí?

─ Algo simple.

─ ¿Ah sí?

─ Sí.

─ ¿Qué?

─ Un beso.

Vega sonrío y se puso de puntitas para atrapar los labios de Lupin en un beso, fue algo tierno y cuando se separaron, él se acercó para dejar un último beso fugaz.

─ Me gustó ese regalo.

─ A mí también me gustó que hayas decidido tener ese regalo.

Y la rubia sonrío para ponerse de puntitas y rodear el cuello de Remus con sus brazos.