Electricidad por todas partes, un cuarto lleno de energía negativa, hay viento como si estuviéramos en un lugar descubierto y otra vez no puedo controlarlo.

De esta no se salva. Estoy muy enfadada. No me voy a arrepentir.

—Cálmate, nos van a escuchar —insiste.

—Y yo te voy a destruir —Mis ojos se recubren de energía negativa.

—Vale, no me dejas otra opción.

Alza su mano y no veo bien que hace porque estoy cegada por el enojo, pero luego me tira con su telequinesis. Caigo al suelo aunque esta vez no reacciono, sigo enfadada, así que se tira sobre mí, entonces me olvido de mi furia cuando me agarra la vergüenza y mis ojos vuelven a la normalidad.

—Se... se te cayó —expreso sonrojada viendo la toalla a un costado.

—Oh vaya, no soy bueno atando nudos, pero al menos ya te calmaste —Sonríe.

—¡Salte de encima! —le grito.

—¿Y dejar que me mates? Ni hablar, cuando quites toda la energía negativa del techo hablamos —Se acerca a mi rostro —. Relájate.

—A... aléjate —expreso avergonzada.

—La lobita es tímida ¿Quién lo diría? ¿Dónde quedo toda tu confianza?

—Eres un pervertido —Frunzo el ceño.

—No estoy muy asociado con el término, pero de acuerdo.

—Vamos Enox, no te hagas el tonto, llevas bastante tiempo aquí, tu vocabulario debe estar extendido, no bromees y sal de sobre mí ahora.

—Eso lo dices porque mi hermano habla como un bebé, ya que acaba de llegar a la Tierra y crees que como yo estoy hace un largo periodo sé muchas más palabras que él, pero no estamos asociados a todas estas, así que no puedes culparme por no conocerlas.

—¡No me importa! —grito mientras forcejeo —¡Quítate o te sacaré yo!

Sonríe de lado.

—¿Y por qué no lo haces?

Mi cara se vuelve completamente roja. Tengo miedo de que al lanzarlo le toque... bueno, eso. Aunque no puedo decírselo. Sus manos están a los costados de mi cabeza, para sostenerse y mantener la distancia, me imagino si se tropieza y me muero de la vergüenza. Necesito sacarlo de una manera menos arriesgada.

—Estoy intentando ser civilizada, por favor.

Se acerca a mi rostro, entonces siento su respiración, cuando su nariz roza la mía.

—Lo sé —solo susurra.

—¿Qué estás haciendo?

—Transfiero un vínculo —responde despacio y recuerdo que Ithiry dijo algo parecido.

—¿Qué significa?

—Es algo de mi especie... es difícil de explicar en tu dialecto.

Ruedo los ojos ante su negativa, entonces vuelvo a lo que me compete.

—Como sea ¿Puedes salirte?

Alza la vista mirando que el techo ya no tiene energía negativa y luego vuelve a observarme con una sonrisa.

—Lo haría, pero todavía nos queda algo pendiente.

Mierda, la nave, pero igual no hace falta hablar de eso en esta posición. Lo que digo, es un aprovechado pervertido y no me importa que no conozca el término.