Capítulo 105
- Está haciendo un poco de frío...debemos arroparnos- me dijo Ren.
Él se levantó con una sábana para cubrirse de la cintura para abajo, recogió mi ropa interior, y me la dio. Fue al armario, y sacó una playera.
- Puedes usarla- dijo y me la dio.
Traté de levantarme de la cama para vestirme, pero las piernas me temblaban. Me senté en la misma cama. Me revisé por debajo del edredón. Vi una mancha de sangre en la sábana que cubría el colchón. Noté que aún me salía sangre como menstruación, pero obviamente no estaba en mis días.
- Creo que debo limpiar ésto- dije apenada.
- ¿Qué es?- Preguntó Ren acercándose a ver el colchón - Oh...ya veo por qué cuando deseché el preservativo, tenía un poco de sangre. Creo que te lastimé. ¿Te sientes bien?
- Tranquilo. Es algo normal en mí. Así que no me lastimaste. Sabía que pasaría algo así. Pero ya dejé una gran mancha a tu colchón.
- Querrás decir que dejamos. No te preocupes...mañana pediré servicio a habitación para que vengan a limpiar. Ahora vamos a vestirnos y dormir un poco.
Nos pusimos las prendas y nos acostamos a dormir. Realmente estábamos exhaustos. Nuevamente dormí en los brazos de Ren.
**********
Al día siguiente, desperté y recordé lo que hicimos anoche. Sonreí. Ahora yo había despertado primero que Ren. Me levanté sigilosamente. Aún me dolía la parte inferior del abdomen, y las piernas, como si hubiera hecho mucho ejercicio. Me vestí con la ropa que traía ayer. Ren aún seguía dormido. Revisé mi celular. Tenía llamadas de Joss y un mensaje de ella:
Joss: ¿Moon? ¿Ya despertaste? Vino tu mamá a la habitación y preguntó por ti. Casi me cacha con JR. Pero afortunadamente JR salió antes de que llegara tu querida madre. Le dije que fuiste a correr.
Miré a Ren y seguía muy dormido. Lo cobije y me salí de la habitación. Corrí hasta llegar a mi habitación. Me abrió Joss.
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- ¿Ya se fue mi madre?- pregunté, entrando a la habitación.
- Ya, acaba de irse hace diez minutos. - respondió Joss.
- Bueno y tú... ¿Qué tal amaneciste? - pregunté pícara.
- Muy pero muy bien- respondió Joss muy contenta, estirando sus brazos - Dormí delicioso a lado de mi JR.
- Eres una pilla- me burlé.
- ¿Y tú? ¿Aprovechaste? Te noto distinta, tus ojos brillan más- dijo.
- ¡Sí...si aproveché!- dije contenta - Ren me hizo el amor y me siento nueva, más viva que antes- sonreí.
- Así mismo me siento- también sonrió.
- Bueno, me daré una ducha y me cambiaré. Tengo que ver a esa señora- me referí a mi madre.
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Salí de la habitación ya bañada y arreglada. Bajé al restaurante. Ahí encontré a mis padres.
- Madre, padre...- les hablé.
- Cariño, ¿Cómo estás? Seguro que bien.- me saludó mamá.
- Hola hija- saludó papá.
- ¿Y tu prometido? ¿Dónde está Gil?- preguntó mi madre.
- Ehh...sigue dormido, supongo. No dormimos juntos. Estamos en habitaciones separadas- respondí.
- ¿Qué? Pero hija, pensé que ya eran más íntimos- me dijo mi madre - No me enojaría saber que ya dormiste con Gil. Al contrario, me sentiría feliz de saber que se llevan muy bien antes del matrimonio.
- Tu madre tiene razón, hija. Bueno, yo prefiero no opinar en ese aspecto. Tu madre da mejores consejos. A mí me importa más que ustedes no se vayan a separar. Gil es de nuestro país de origen, y su familia es más adinerada. Es muy importante que estés con ese hombre. Además, personalmente, pienso que es un buen muchacho- opinó mi padre.
- Sí, papá. Sé cuan importante es. Gracias a la familia de Gil, tu empresa no se irá al caño- dije.
- También es tú empresa- dijo mi padre- nuestra empresa.
De pronto sentí una mano tomar mi hombro derecho. Voltee a ver y era Gil.
- ¡Hola suegros!- saludó Gil.
- Hola, hijo...justo estábamos esperándote- saludó mi madre, con una gran sonrisa.
- Hola, Gil. Siéntate. Sentémonos los cuatro a desayunar- dijo mi padre.
Nos sentamos.
- Le decía a Moon que ustedes dos deberían ser más íntimos...- dijo mi madre y casi escupo el jugo de naranja que estaba tomando, al escuchar eso.
- Mamá...¿No crees que eres muy imprudente al mencionar eso?- dije.
- Para nada, Moon. Me refiero a que, no me molestaría que ustedes durmieran juntos- habló mi madre.
Miré a Gil y él hizo lo mismo al mirarme.
- Ay, suegra querida. Es que, yo soy un hombre de principios y valores. No considero una buena idea que Moon y yo durmamos en la misma habitación y la misma cama. Ya sabe, la tradición es esperar hasta después del matrimonio.- habló Gil - Además, no vaya a ser que durmamos dos y amanezcan tres - bromeó Gil con mis padres. Todos nos reímos.
- ¿Y qué tiene de malo que amanezcan tres, hijo?- preguntó mi padre. Seríamos felices si un día de éstos nos enteramos que nuestra Moon está embarazada de ti. Sería un gran privilegio- sonrió mi padre. Mi madre hizo cara de aprobación.
Comencé a toser de lo nerviosa que estaba con lo que mis padres decían.
- Claro, comprendo- sonrió Gil - Para un verdadero hombre como yo, un hijo sería una bendición, pero Moon y yo tenemos otros planes, antes de procrear familia, ¿Verdad, cariño?- me miró sonriendo.
- Claro que sí, cariño- respondí.
- ¿Y qué planes tienen?- preguntó mi madre.
- Moon quiere dedicarse al diseño gráfico, y yo a la música, a cantar. Esa es mi verdadera pasión. Y claro que llevaría a mi Moon a mis giras- respondió Gil, dándome una palmada en la espalda.
- Que dulce eres - le dijo mi madre.
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Después del desayuno, fuimos a dar un paseo dentro del hotel. Gil y yo íbamos separados, cada quien por su lado, caminando.
- Gil...No veo que muestres algo de cariño al caminar con mi hija- dijo mi madre.
- Es que... están ustedes presentes y no quiero faltarles al respeto- respondió Gil.
- Ya te dije que incluso si te llevas a Moon a la cama no hay problema- dijo mi madre. La miré con ojos de "silencio, madre, ya cállate".
- Está bien...- dijo Gil.
Él se acercó a mí y me tomó de la mano. Entrelazamos nuestras manos.
- Hace falta algo...- decía mi madre, mirándonos fijamente.
- ¿Y ahora qué, madre?- pregunté.
- ¡Un beso!- respondió ella emocionada.
- Está bien...- dijo Gil.
Él y yo nos miramos y nos íbamos acercando poco a poco.
- Ya nos hemos besado antes... sólo hagámoslo así como las otras veces- me susurró.
Gil y yo nos dimos un beso. No me molestaba besar a Gil, ya que él besaba muy bien, pero me daba vergüenza frente a mis padres.
- ¡Bravo!- mis padres aplaudieron felices.
Me separé de Gil. Miré hacia el lado contrario al que estábamos. Jungkook y Jin nos observaban de lejos.
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Lalastar95
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