—Buenos días, —dijo Seamus brevemente a Faith antes de pasar a su lado con una mirada bastante malhumorada. Parecía que acababa de escapar de su habitación. Dean lo siguió poco después.

—¿Has visto a Seamus? —Preguntó y Faith señaló a dónde fue Seamus, apenas levantando la vista de su libro. —Gracias, —se apresuró a seguir a Seamus, dejando a Faith en el sofá de la sala común, junto a la chimenea.

Se había despertado temprano esa mañana, de una pesadilla y el moretón en su espalda, así que decidió ponerle un poco más de ungüento . Ayudó instantáneamente, pero no pudo conciliar el sueño después de eso. La única solución era leer un libro increíblemente aburrido, así que eligió el libro para Historia de la magia. Si podía quedarse dormida durante las lecciones, el libro la ayudaría con seguridad, pero no fue así. Finalmente, Faith se rindió, se vistió y se llevó el libro a la sala común para calentarse junto al fuego. Bien podría leerlo un poco más para tener una excusa válida para quedarse dormida durante las clases del profesor Binn durante al menos tres semanas.

Faith finalmente cerró el libro cuando Harry y Ron bajaron la escalera de caracol.

—Buenos días, —la saludó Ron con un bostezo y vio a su lado. Harry tomó la silla. —¿Cuánto tiempo llevas aquí?

—Dos horas, —suspiró Faith, estirando la espalda y el cuello de mirar el libro durante tanto tiempo. —He intentado dormirme leyendo sobre Giant Wars, pero fue sorprendentemente interesante, así que no ayudó.

—¿Por qué te levantaste tan temprano? —Preguntó Harry. Él, como cualquier otro estudiante de la escuela, todavía estaba acostumbrado a levantarse tarde, por lo que no podía imaginar despertarse voluntariamente dos horas antes de lo necesario.

—Pesadilla y dolor de espalda—, respondió Faith señalando el ungüento en la mesa junto al libro. Harry exhaló, mirando el tubo. Todavía no tenía idea de cómo sucedió. Y por qué sucedió, tres veces. Faith tuvo que ir a la enfermería dos veces, no podía ser nada bueno.

—¿Qué te pasa en la espalda? —Preguntó Ron mientras tomaba el tubo y examinaba la etiqueta. —¿Fuiste a la enfermería?—Faith asintió, justo cuando Hermione se sentó junto a Ron en el sofá.

—¿A la enfermería? —Preguntó sorprendida, asustando a Ron.

—No puede ser...

—¿Qué estabas haciendo en la enfermería? ¿Y cuándo?

—Ayer, después del banquete de bienvenida—, dijo Faith, mirando a Harry y luego de nuevo a Hermione y Ron. —Harry y yo tuvimos ... eh ... otro episodio de alejamiento, —jadeó Hermione. —Aterricé en el borde de la mesa de Gryffindor y rodé sobre ella. No sé si Harry está bien considerando que también aterrizó bastante fuerte,— Ron siseó con cara de disgusto.

—Es la tercera vez que pasa esto, —notó Hermione alarmada. —¿Tienen alguna idea de por qué está pasando esto? ¡Nunca había leído nada como esto! —Tanto Harry como Faith negaron con la cabeza. —Tal vez haya algo en la biblioteca al respecto—, sugirió Hermione. I—nvestigaré un poco esta tarde—, por supuesto, podrían haber esperado eso. Ni siquiera habían tenido una lección, ni siquiera habían recibido sus horarios y ella ya necesitaba la biblioteca. Hermione clásica.

Los cuatro decidieron ir a desayunar ahora, sintiendo hambre. Harry y Ron les contaron a las dos chicas que Seamus y su madre no le creían a Harry y Dumbledore. Faith y Hermione dijeron a su vez que Lavender también había estado diciendo eso. Harry luego procedió a descargar su enojo con ellos, pero Hermione razonó que no lo hiciera, así que cuando llegaron al Gran Comedor, el aire parecía un poco tenso. Caminaron a lo largo de la mesa de Gryffindor para encontrar un asiento hasta que la familiar chica negra con largo cabello trenzado se acercó a ellos.

—Hola Angelina, —la saludó Harry.

—Hola—, dijo rápidamente como si tuviera prisa. —¿Buen verano? —Miró a Harry y Faith pero no esperó su respuesta. —Escuchen, me nombraron Capitana de Quidditch de Gryffindor—, les dijo.

—¡Bien, Angelina! —Faith dijo con una sonrisa. Eso significaba no más charlas de ánimo intensamente largas de Oliver Wood.

—Sí, bueno, necesitamos un nuevo Guardián ahora que Oliver se ha ido. Las pruebas son el viernes a las cinco en punto y quiero a todo el equipo allí, ¿de acuerdo? Entonces podremos ver cómo encajará la nueva persona .

—Está bien—, dijo Harry. Faith resistió la tentación de decir 'si capitana' así que solo asintió, Angelina les sonrió antes de irse.

—Había olvidado que Wood se había ido—, dijo Hermione cuando se sentó junto a Ron. —¿Supongo que eso marcará una gran diferencia para el equipo?

—Sí, era muy bueno, —Faith se encogió de hombros mientras Harry y ella se sentaban frente a Hermione y Ron.

—Aún así, no estará de más tener un poco de sangre nueva, ¿verdad? —Añadió Ron.

Oyeron un ruido sobre ellos y una tormenta de búhos llegó volando a través de las ventanas superiores, volando a través del Salón para encontrar a las personas a las que se suponía que estaba destinado su puesto. Faith vio un búho marrón oscuro con un sobre púrpura que se dirigía a su lugar. Dejó caer la carta, aterrizó justo en su plato, antes de escapar por la ventana nuevamente. Ahora, mirando de cerca, Faith notó que era un sobre utilizado por el Ministerio. Inmediatamente supo de quién era.

—¿Para qué te está enviando una carta el Ministerio? —Harry le preguntó mientras le daba un mordisco a su tostada. Se dio cuenta del sobre morado y supo de dónde era debido a las dos cartas que recibió durante el verano, una diciendo que fue expulsado de Hogwarts y otra para contarle sobre su Audiencia.

—No es del Ministerio,— le dijo Faith mientras sacaba la carta del sobre. —Es de uno de mis padres.

Querida Faith,

Soy yo, tu papá. Tu mamá me hizo escribir esto porque tiene tres audiencias hoy. Queríamos decirte que realmente te extrañamos y esperamos que este año en Hogwarts sea mejor. Nos enteramos de que Dolores Umbridge ocupó el lugar de la Profesora Defensa Contra las Artes Oscuras (tu madre casi escribió una queja a Dumbledore al respecto) y necesitamos que tengas cuidado con ella. Ella no cree nada de lo que Dumbledore y Harry Potter han dicho sobre Ced, así que trata de no meterla debajo de tu piel. Las mujeres de nuestra familia (tu madre, por ejemplo) se irritan fácilmente con esa mujer, así que te lo advertimos de antemano.

Trata de no meterte en demasiados problemas y tenga cuidado con cualquier peligro. Si te sientes insegura en cualquier lugar, en cualquier momento, te llevaremos a casa si lo deseas.

Con amor, papá (y mamá)

Faith sonrió ante la carta y la leyó una y otra vez. Es bueno saber que no es la única a la que le desagrada el nuevo profesor. La profesora McGonagall estaba repartiendo los horarios y Ron gimió en el segundo que puso sus ojos en ellos.

—¡Mira! Hoy tenemos, Historia de la magia, pociones dobles, adivinación y doble defensa contra las artes oscuras ... ¡Binns, Snape, Trelawney y esa mujer Umbridge todo en un día! —Exclamó Ron. Eso significó una hora de sueño, dos de muerte, una de risas y dos de intensa frustración. Estupendo.

—¿Saben lo que quieren hacer después de Hogwarts? —Harry preguntó a los tres de repente.

—En realidad no, —dijo lentamente Ron. —Excepto ... bueno ...

—¿Qué? —Harry cuestionó.

—Bueno, sería genial ser un Auror, —dijo Ron con una voz soñadora.

—¡Sí, me gustaría! —Harry estuvo de acuerdo. Eso era algo que Faith podía ver que ellos dos les gustaba.

—Pero son, como, la élite, —dijo Ron con tristeza. —Tienes que ser realmente bueno. ¿Qué hay de ti Hermione?

—No lo sé—, dijo. —Creo que me gustaría hacer algo que realmente valga la pena.

—¡Ser Auror vale la pena! —Harry defendió su sueño como si Hermione lo atacara.

—Sí, lo se, pero no es lo único que vale la pena—, le dijo Hermione. —Quiero decir, si pudiera llevar a el PEDDO más lejos ... —Los otros tres compartieron una mirada.

—Si realmente crees en eso, creo que podrías llegar allí—, alentó Faith a Hermione con una sonrisa.

—Sí, ¿Qué hay de ti, Faith? —Hermione le sonrió, ignorando las extrañas miradas de Ron y Harry hacia ellos dos.

—No estoy segura todavía, —dijo Faith, pensando detenidamente. —Ser Auror sería genial, pero no creo que sea lo suficientemente buena.

—Claro que lo eres—, dijo Ron. —Eres una metamorfomaga, eso te llevará allí,— Faith bufó con una sonrisa.

—El disfraz es solo una parte del entrenamiento Ron, hay mucho más, como Pociones, —Harry y Ron se quejaron ante eso. Significaba que si querían convertirse en Auror, tenían que tomar Pociones con Snape hasta el final de la carrera de Hogwarts. —No, creo que quiero escribir. Tal vez un autor o un periodista. Tal vez Quidditch si soy lo suficientemente buena.

—Siempre y cuando no te vuelvas como Rita Skeeter—, le dijo Harry con una sonrisa.

—Lo prometo,— con esas últimas palabras, los cuatro ingresaron al aula de Historia de la Magia. Todos los estudiantes en el aula, excepto Hermione, por supuesto, sufrieron de somnolencia extrema tan pronto como el profesor Binns abrió la boca. Harry y Ron jugaron al verdugo en la esquina de su pergamino durante los noventa minutos completos de la lección y Faith logró quedarse dormida debido a la falta de sueño de esa mañana. Se sintió como una siesta de cuatro horas cuando Ron la despertó para ir a la siguiente lección a pesar de que ni siquiera eran dos. Hermione no estaba muy contenta con los tres, especialmente con Harry y Ron.

—¿Qué pasaría, —dijo Hermione mientras salían del aula para el descanso, —si me negara a prestarte mis notas este año?

—Le preguntaríamos a Faith —dijo Ron, no realmente impresionado por la amenaza de Hermione.

—No tengo ninguna nota hasta ahora, así que olvídalo,— le dijo Faith mientras se frotaba los ojos. Faith sintió que ya era de noche. Este día fue tan largo.

—Entonces fallaríamos a nuestros TIMOS—, dijo Ron. —Si quieres eso en tu conciencia, Hermione ...

—Bueno, te lo mereces, —Hermione no lo estaba permitiendo. —Ni siquiera intentas escucharlo, ¿verdad?

—Lo intentamos. Simplemente no tenemos tu cerebro o tu memoria o tu concentración - tu eres  más inteligente que nosotros - ¿no es agradable frotarlo?

—Oh, no me vengas con esa basura, —Hermione puso los ojos en blanco. Ella parecía un poco más feliz después de eso. Encontraron un lugar para sentarse en el húmedo patio. Septiembre fue sorprendentemente frío este año cuando normalmente hacía calor. Los cuatro hablaron sobre cómo era más probable que Snape les diera algo extremadamente difícil de hacer en la primera lección: tomarlos con la guardia baja después de unas largas vacaciones. Faith ya sabía que iba a fallar en cualquier cosa que él arrojara en su plato. Tenía dificultad para concentrarse debido a su dolor y estaba extremadamente cansada.

Los cuatro fueron interrumpidos cuando cierto Ravenclaw de sexto año se les acercó. Estaba sola, una sorpresa para todos ya que siempre estaba rodeada de sus amigos.

—Hola, —la saludó Harry abruptamente. Se sintió nervioso.

—¿Te quitaste esa cosa, entonces? —Cho preguntó, refiriéndose a la savia de la planta de Neville en el Expreso de Hogwarts.

—Sí, —sonrió Harry, tratando de no pensar en lo vergonzoso que se sintió cuando ella entró en su compartimiento. Faith resopló a los dos con una sonrisa. Ambos estaban muy incómodos cuando hablaban. Sabía que era porque Harry estaba enamorado de ella, pero por lo que Faith sabía, Cho estaba saliendo con Cedric hasta que murió. Faith tenía sentimientos encontrados sobre esto. —Entonces, ¿tu ... eh ... tuviste un buen verano?

Harry inmediatamente se arrepintió de haber dicho eso, ya que sabía de la relación que ella tenía con Cedric cuando murió. Su verano debe haber sido tan horrible como lo fue para él o para Faith.

—Oh, estuvo bien, ya sabes ...

—¿Es una insignia de Tornados? —Ron preguntó de repente en voz alta mientras miraba la insignia azul celeste prendida en la túnica de Cho. —No los apoyas, ¿verdad?

—Sí, lo hago, —dijo Cho.

—¿Siempre los has apoyado, o simplemente desde que empezaron a ganar la liga? —Preguntó Ron. Faith cerró los ojos y suspiró. A veces podía ser tan estúpido.

—Los he apoyado desde que tenía seis años,— le dijo Cho, su voz repentinamente muy fría. —De todos modos ... nos vemos, Harry, —compartió una última mirada con Harry y Faith antes de alejarse. Hermione se mantuvo firme hasta que Cho estuvo fuera del alcance del oído.

—¡Tienes mucha  falta de tacto! —Ella exclamo.

—¿Qué? Solo le pregunté si ...

—¿No podrías entender que ella quería hablar con Harry por su cuenta?

—¿Y? Ella podría haberlo hecho, no me detenía...

—¿Por qué diablos la atacabas por su equipo de Quidditch?

—¿Atacando? No la estaba atacando, solo estaba ...

—¿A quién le importa si ella apoya a los Tornados?

—Oh, vamos, la mitad de las personas que ves con esas insignias solo las compraron la temporada pasada...

—¿Pero que importa?

—Significa que no son verdaderos fanáticos, solo se están subiendo al carro ... —Debido a sus fuertes discusiones, Hermione y Ron no escucharon el timbre, anunciando su próxima lección; Pociones. Faith se levantó de su asiento en el banco y esperó a que los otros tres la siguieran a ella y al resto de los estudiantes afuera, adentro.

—Esa es la campana,— le dijo Harry a Hermione y Ron antes de irse con Faith. Los otros dos los siguieron rápidamente pero no dejaron de discutir hasta que llegaron a las mazmorras de Snape. Les dieron dolor de cabeza a Harry y Faith, pero no les importó lo suficiente como para detenerlos.

Tendrían que renunciar eventualmente si no querían que Snape los regañara.

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MARATÓN: 3/4