Cuando Faith se despertó de su sueño por las quejas y los gritos del retrato de la Sra. Black, supo que Tonks había vuelto.

Faith se había sentido vacía todo el verano. Como si ya no hubiera nada en su vida. Sin emociones, solo entumecimiento. Así que cuando escuchó la furia del retrato de la Sra. Black, que por lo general significaba que Tonks había llegado, Faith se quedó un poco perpleja por la sensación de alivio y satisfacción que sentía, sabiendo que Harry estaba en algún lugar abajo.

Tonks y el resto de la tripulación que estaban recogiendo a Harry Potter de manos de su tío y su tía y su hijo malvado. Aunque Faith se quedó en su habitación la mayor parte del tiempo, recibió noticias sobre los Dementores en Little Whinging. Hermione golpeó su puerta para salir, gritando la noticia. Faith estuvo muy tentada de irrumpir en la habitación y maldecir a quienquiera que enviara a esos Dementores, pero tenía poca o ninguna energía para hacerlo.

Faith no había visto a Harry en cuatro semanas, la última noche en el Memorial de Cedric en Hogwarts. Se separaron con la promesa de enviarse cartas el uno al otro, pero Dumbledore le hizo jurar que no le daría a Harry ninguna información sobre lo que había estado sucediendo. No es que tuviera mucha información. La Orden del Fénix claramente no quería que los niños supieran lo que estaba pasando con Voldemort. Eso hizo que Faith se enojara bastante. ¿Cómo no iban a decirle nada sobre el asesino de su hermano?

Mientras tanto, abajo estaban todos preparándose para la cena. Harry fue presentado a las personas que aún no conocía y recibió a las que conocía. Se sentó con Sirius y empezaron a hablar.

—¿Has visitado a tu amiga ya? —Sirius le preguntó a Harry cuando finalmente todos estuvieron sentados y ocupados comiendo y charlando. Lupin y la Sra. Weasley estaban escuchando su conversación. —La hermana de Diggory, la niña amable—, especificó Sirius cuando vio que Harry no tenía idea de quién estaba hablando.

—¿Faith está aquí? —Preguntó sorprendido. Ron y Hermione no le informaron sobre eso.

—Sí, sus padres se fueron de vacaciones para distraerse de todo lo que estaba pasando. Sin embargo, Faith se negó a ir. Nadie sabe realmente por qué. Sus padres nos la trajeron y nosotros la trajimos aquí, —dijo la Sra. Weasley le dijo a Harry.

—Creo que es porque irse de vacaciones la hace sentir culpable por Cedric—, dijo Lupin.

—¿Por qué eso la haría sentir culpable? —Preguntó Harry.

—Bueno, se divertirá en la playa mientras Cedric ... ya sabes ... esta muerto—, se explicó Lupin y Harry suspiró de preocupación.

—Ella bajó las escaleras dos veces desde que estuvo aquí, creo,— continuó Sirius. —Una vez para buscar algunas hierbas para su poción para dormir y la otra vez para maldecir el retrato de mi madre.

—¿Poción para dormir?

—Ella bebe eso para poder dormir más tiempo, creo que solo está despierta por las noches,— dijo Lupin. —Para escapar de la realidad.

—Pobre niña, Harry, tal vez puedas hablar con ella porque ... ya sabes ... estabas allí, —sugirió la Sra. Weasley esperanzada. —¡Pero solo si estás dispuesto a hacerlo, por supuesto! —Añadió rápidamente. —Es solo que ... estamos realmente preocupados por ella, —asintió Harry. Él también estaba empezando a preocuparse mucho por ella. No la había visto en cuatro semanas, pero, oh, la extrañaba. Tenía esta extraña sensación de estar cerca de ella, la ha tenido todo el verano. Y tampoco tenía una explicación racional para ello. Solo podía pensar en ese lindo abrazo que tuvieron la mañana después de la muerte de Cedric. Cuando se desmayó de dolor. Y ahora que estaba más cerca de ella, el impulso se hizo mayor.

—Cuando está despierta lee muchos libros, —le dijo Sirius a Harry. —Ella me pidió que la ayudara a realizar el Hechizo Living Comfort en el osito de peluche que tenía, leyó sobre eso en uno de los libros de la oficina.

—¿Qué hace eso? —Preguntó Harry con curiosidad.

—Bueno, cuando se lanza a la perfección, puede dar vida a objetos inanimados, pero no muchos magos pueden hacerlo. En unos días, el oso podrá moverse un poco con la intención de consolar.

—Creo que también la vi escribir en un libro propio, —dijo Lupin y Harry asintió, sabiendo lo que era.

—El año pasado empezó a escribir un libro sobre piedras preciosas, —les dijo Harry y la señora Weasley sonrió con orgullo.

—Arthur y yo le dimos ese libro, me alegro de que lo use.

El resto de la cena fue bastante tranquilo. Las conversaciones breves eran los únicos sonidos que llenaban el espacio. Después de la cena, Harry rápidamente se disculpó y subió las escaleras, a la habitación de Faith a pesar de que no sabía dónde estaba. Pasó por delante de algunas puertas hasta que se detuvo frente a una puerta negra. Detrás, escuchó música clásica suave, como la música del Baile de Navidad. ¿Podría ser esta su habitación?

Harry levantó la mano y llamó a la puerta. La música se detuvo. Harry escuchó atentamente. No escuchó otro sonido.

—¿Faith? —Él llamó. Ninguna respuesta. —Faith, soy yo, Harry, —seguía sin respuesta. —¿Faith?— Lo intentó una vez más, pero ella permaneció en silencio.

—¿Ella tampoco te abre la puerta? —Harry escuchó a Ron decir detrás de él. Se dio la vuelta y vio a Ron, Hermione, Ginny y los Gemelos. Harry negó con la cabeza.

—¿Alguno de ustedes ha hablado con ella? —Les preguntó, pero ellos negaron con la cabeza. Excepto por Ginny.

—Tuvo una pesadilla una vez, muy temprano en la mañana. La ayudé a calmarse. Estaba llorando y gritando cosas como '¡no lo maten!'. Fue muy aterrador, —les dijo Ginny con el corazón apesadumbrado. Harry recordó lo que Dudley le dijo cuando se estaba burlando de Harry, acusándolo de tener miedo de su propia almohada. Dudley le dijo que él también estaba gritando cosas.

—Es bastante tarde, tal vez podamos intentarlo de nuevo mañana, —sugirió Hermione. Todos estuvieron de acuerdo y se fueron a sus habitaciones, Ron esperó a que Harry también viniera, pero Harry vaciló.

—Ella saldrá, no te preocupes, —le dijo Ron. Harry asintió, no muy convencido, pero siguió a Ron a su habitación donde ambos se cambiaron y se quedaron dormidos después de un rato.

Ese era el momento de Faith de salir de su habitación. Cuando no había nadie alrededor. Ella leyó todos los libros que le prestó en la oficina un piso más alto e iba a comprar libros nuevos ahora. Tuvo mucho cuidado de no hacer ningún ruido mientras subía el segundo tramo de escaleras y entraba en la primera puerta a su izquierda. Vio a Sirius ya sentado allí. Sabía que ella siempre iba allí de noche. Él fue muy amable con ella y la entendió a pesar de que tenían historias completamente diferentes.

—¿Tienes más recomendaciones de libros? —Faith cuestionó y Sirius señaló la pila de libros en la esquina del escritorio. —Gracias.

—Nos estamos quedando sin libros que no sean sobre traidores de sangre y familias de sangre pura.

Faith resopló.

—Tus antepasados ​​deben estar dando vueltas en sus tumbas si supieran acerca de todo lo que sucede aquí, —asintió Sirius mientras Faith agarraba los libros del escritorio.

—¿Te sientes un poco mejor? —Sirius preguntó mientras examinaba su apariencia para ver si tenía más control sobre sus habilidades. El gris era un tono más claro pero sus ojos todavía parecían bastante sin vida en comparación con la última vez que la vio. Se veía mejor que la última vez que Harry la vio en el Memorial a pesar de que se esforzaba tanto en lucir como solía hacerlo.

—Creo que sí, pero todavía es difícil recuperar el control de mis habilidades,— respondió Faith, apretando los libros contra su pecho.

—Tonks dijo que eso podría tomar un tiempo,— confirmó Sirius. —Pero lo harás,— luego sonrió y Faith le devolvió la sonrisa con cuidado y estaba lista para volver a su cama, pero Sirius la llamó. —¿Faith?

—¿Si?

—Deja que Harry hable contigo, por favor, —Faith frunció el ceño. —Él sabe exactamente lo que pasó, te dará un cierre, —Faith no sabía realmente qué decir. No estaba segura de estar lista para las respuestas a sus preguntas. Faith asintió suavemente y luego regresó a su habitación.

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Los días siguientes, Faith se quedó en su habitación, disfrutando de los últimos libros de esta casa que no eran de odio a los muggles. Faith escuchó a los vecinos de la casa limpiando el lugar a fondo. Cada mañana y noche antes de acostarse, Faith escuchaba a Harry llamar a su puerta preguntándole si podía entrar o si ella podía salir, pero Faith todavía sentía que no podía tener la conversación.

Después de cinco días de tocar la puerta, se detuvo por un día, pero al día siguiente se sintió muy frustrado. Harry se había golpeado la cabeza con una estantería y durmió mal la noche anterior, por lo que estaba particularmente malhumorado ese día. También quería ver a Faith y saber que no estaba muerta allí.

Comenzó a golpear la puerta y a gritar.

—Faith, ¿podrías por favor abrir la puerta? ¡Necesito verte! ¡No puedes esconderte ahí para siempre! —No escuchó ninguna reacción desde el interior por lo que golpeó más fuerte. —¡Faith, por favor! —Continuó un rato hasta que sintió una mano en su hombro.

—Harry, estoy aquí,— se volvió y vio a Faith parada detrás de él, con un libro bajo el brazo. Casi tenía su color de cabello castaño oscuro de nuevo, el cabello en una trenza, algunos mechones se caían, era mucho menos gris que la última vez que Harry la vio. Su piel recuperó la mayor parte de su color y sus ojos parecían vivos de nuevo. Harry se quedó sin palabras, esperó tanto tiempo para volver a verla, pero ahora no sabía qué decir.

—Eh - Faith - yo... —Harry tartamudeó, le dio a Faith una pequeña sonrisa.

—Entra, —abrió la puerta y entró. Se sentó en su cama, esperando a que Harry entrara. —A menos que quieras gritar a través de la puerta.

Harry sintió que su rostro se enrojecía así que rápidamente entró y se sentó en la silla junto al escritorio. Miró alrededor de la habitación y vio que estaba sorprendentemente limpia, viendo el estado del resto de la casa. La cortina de la amplia ventana no estaba tan rota como las demás y el suelo no estaba cubierto de polvo.

—Me aburrí y arreglé toda esta habitación hace dos semanas,— le dijo Faith a Harry cuando lo vio mirándolo. Harry sintió un empujón contra su muslo y cuando miró hacia abajo vio un pequeño osito de peluche marrón claro, sonriéndole. Harry lo recogió y vio a Faith sonriéndole. Los movimientos del oso eran bastante lentos pero muy lindos. Se sentía suave en sus manos a pesar de que se veía tan desgastado.

—Cedric recibió eso para su primer cumpleaños. Le encantó. Todavía estaba en su habitación cuando nosotros ... —Harry asintió rápidamente para que ella no tuviera que continuar. Parecía que estaba a punto de llorar de nuevo. —Dime, Harry, —comenzó Faith mientras se inclinaba hacia adelante, con los codos apoyados en las rodillas. —¿Estaba feliz? Antes de que sucediera. ¿Estaba feliz? —Harry sonrió levemente como consuelo.

—Cuando los dos llegamos a la Copa, en el laberinto, me ofreció tocarlo primero porque yo ... eh ... lo salvé antes del embrujado Krum y luego de una gran araña que me lastimó la pierna,— Faith sonrió suavemente, emocionada. —Dije que debería tomarla y nosotros - eh - discutimos sobre eso, ambos nos negamos a tomar la Copa hasta que le sugerí que deberíamos tocarla a la vez, y luego, bueno, ya sabes lo que pasó.

Faith sonreía a través de las lágrimas que brotaban de sus ojos. Harry se levantó rápidamente y fue a sentarse con ella en su cama, envolviendo un brazo alrededor de su hombro mientras ella descansaba su cabeza contra la de él. Se quedaron así, disfrutando de la compañía del otro. Se sentía bien después de haber estado separados durante tanto tiempo. Ambos no pudieron evitar admitir que se extrañaban el uno al otro.

Harry notó un nuevo anillo en su mano derecha. Era dorado con una piedra violeta en el medio.

—¿Qué hace esa piedra? —Harry señaló el anillo en su dedo. Faith lo acercó más a sus caras con una sonrisa.

—Es una Alejandrita, trae alegría. No ha estado ayudando, de verdad, —Harry también levantó la mano para acariciar la bonita, pero aparentemente inútil, piedra. Sus pieles calientes entraron en contacto y sintieron que la temperatura descendía hasta convertirse en una sensación helada. Se miraron el uno al otro, frunciendo el ceño. ¿Otra vez este sentimiento? Ella se extendió por sus venas hasta que llegó a todas las partes de sus cuerpos y luego se volvió abrasador. Congelados en su lugar, no sabían qué hacer. Luego, escucharon el estallido como escucharon cuando practicaron para el Baile de Navidad y lo siguiente que supieron fue que se alejaron el uno del otro.

Harry cayó hacia la pared en la cabecera de la cama y al lado de la puerta y Faith se cayó de la cama, justo frente a la ventana al otro lado de la habitación. Oyeron pasos apresurados subiendo las escaleras hacia la habitación y vieron a la Sra. Weasley, Ron, Hermione, Fred y George, y Sirius asomándose por la puerta que se abría.

—¿Qué diablos les pasó a ustedes dos? —La Sra. Weasley exclamó preocupada cuando Harry y Faith se levantaron, Harry se frotó la cabeza cuando se lastimó y Faith le dio la espalda.

—Realmente no lo sé,— dijo Faith honestamente mientras miraba de Harry a Ron y Hermione. Fue lo mismo que sucedió el año pasado, antes del Baile de Navidad.

—¿Simplemente - como que nos separamos un poco? —Harry dijo, no muy seguro de sí mismo.

—Oh - bueno, —dijo la Sra. Weasley. —¿Necesitas algo para tu cabeza, querido? ¿Y tu espalda?— Ambos adolescentes negaron con la cabeza.— Está bien, bueno, tengan cuidado, —y con eso se alejó, seguida por los Gemelos que Desaparecieron y Sirius que se fue con un guiño.

—¿Fue como la otra vez? —Preguntó Hermione cuando se quedaron fuera del alcance del oído. Harry y Faith asintieron. —Wow, ¿Qué significa eso? —Preguntó paseando por la habitación mientras Ron cerraba la puerta detrás de él.

—Tal vez sea una reacción alérgica el uno al otro, —dijo Ron con una sonrisa, pero Hermione le dio una mirada. —Quizás no, —se sentó en la silla del escritorio y Harry y Faith se volvieron a sentar en la cama.

—Harry, ¿Cuándo es tu audiencia en el Ministerio?— Faith preguntó entonces, recordando algo.

—El doce de Agosto, ¿por qué?

—Mis padres volverán de sus vacaciones mañana, mi madre volverá al trabajo el día 12. Dirige muchas audiencias, si no, es asistente-líder o juez. Probablemente también estará en la tuya.

Harry sonrió, esa será al menos una persona que le creerá.

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¡Así que aquí está el primer capítulo de la orden del fénix! No estaba realmente satisfecho con el comienzo, pero ahora creo que está bien. Y no podía esperar para publicarlo porque estoy emocionado de ver las reacciones de todos.

También quería dar algo de información sobre la madre de Faith porque no lo hice al final del último capítulo. Se me ocurrió su nombre, trabajo y antecedentes y todo eso porque hay poca información sobre ella.

La llamé Edith Diggory-Eller. Conoció a su esposo en el Ministerio donde ambos trabajan. Es juez y miembro del Wizengamot (también jueces). También dirige audiencias y las asiste. Ella estuvo presente en la audiencia de Karkaroff como Harry vio en el pensativo el año anterior. Ella estuvo allí durante el juicio de Barty Crouch JR, que es como reconoció a Faith en su primera lección en Hogwarts. Edith estaba muy involucrada en el caso en su contra, por lo que se conocían bien. Ella fue muy amable con él a pesar de todas las cosas horribles que ha hecho. En ese momento, ella y Amos no estaban casados, pero estaban comprometidos después de tener dos hijos, por lo que Barty JR la conocía como Edith Eller.

Eso es todo sobre lo que quería mencionar sobre la madre de Faith. Más sobre ella lo descubrirás en este libro jeje.

¡Espero que hayas disfrutado este capítulo! Acabo de escribir uno muy emocionante, pero tendrás que esperar como 15 capítulos para ese, jeje.

De todos modos, ¡déjame saber lo que piensas!

—nota traducida.