ciento dos

El fin de semana siguiente, Ron y Hermione fueron con los otros estudiantes de sexto año que tenían o habían cumplido diecisiete años antes del examen a Hogsmeade para practicar más. Harry y Faith se quedaron atrás y volvieron a visitar el pasillo del séptimo piso.

Esta vez sabían que Malfoy estaba allí porque Gregory Goyle estaba de guardia, disfrazado de niña pequeña otra vez. Lo asustaron lejos de debajo de la capa de invisibilidad y luego procedieron a intentar entrar en la Sala de los Menesteres, pero sin suerte. Faith incluso trató de convertir la habitación en un pequeño espacio de almohadas como la última vez, pero no funcionó.

Las semanas que siguieron no les dieron más pistas sobre lo que estaba haciendo Malfoy y Harry tampoco logró quitarle la memoria a Slughorn. El cielo se estaba aclarando, anunciando la llegada del verano, así que la mayoría de las veces los cuatro Gryffindors se sentaban afuera bajo el árbol junto al lago.

—Te lo digo por última vez: olvídate de Malfoy —le dijo Hermione a Harry cuando se sentaron afuera una vez más. Hermione y Ron tomarán su prueba de aparición esa tarde, por lo que ambos estaban ocupados leyendo folletos del Ministerio sobre errores comunes al aparecer.

Ron se apresuró a esconderse detrás de Hermione cuando una chica se les acercó.

—No es Lavender — suspiró Hermione.

—¡Uf, menos mal! —dijo Ron aliviado.

—¿Harry Potter? —preguntó la chica. —Me pidieron que te diera esto—, le entregó un pergamino que él tomó con el ceño fruncido.

—Gracias...— Murmuró, esperando que la chica estuviera fuera del alcance del oído. —¡Dumbledore dijo que no tendríamos más lecciones hasta que obtuviera la memoria!

—¿Quizás quiere ver cómo estás?— Faith se encogió de hombros mientras se inclinaba sobre su hombro para leer el pequeño trozo de pergamino. La letra claramente no era de Dumbledore, estaba descuidada y en algunos puntos, la tinta se había agotado debido a gotas muy grandes de agua, probablemente lágrimas.

Queridos Harry, Ron, Hermione y Faith, Aragog murió anoche. Harry y Ron, lo conocieron y saben lo especial que era. Hermione y Faith, sé que les hubiera gustado. Significaría mucho para mí si vinieras para el entierro más tarde esta noche. Planeo hacerlo al anochecer, ese era su momento favorito del día. Sé que se supone que no debes salir tan tarde, pero puedes usar la capa. No preguntaría, pero no puedo enfrentarlo solo.

Hagrid.

—¿No es Aragog esa gran criatura araña que trató de comerse a ustedes dos?— preguntó Faith con el ceño fruncido.

—¡Está loco!— exclamó Ron. —¡Esa cosa les dijo a sus compañeros que nos comieran a Harry ya mí! ¡Les dijo que se sirvieran solos! ¡Y ahora Hagrid espera que bajemos y lloremos sobre su horrible cuerpo peludo!

—No es sólo eso —dijo Hermione. —Nos está pidiendo que abandonemos el castillo por la noche, y sabe que la seguridad es un millón de veces más estricta y sabe cuántos problemas tendríamos si nos atraparan.

—Hemos bajado a verlo la noche anterior—Harry se encogió de hombros.

—Sí, ¿pero por algo como esto?—A Hermione no le apetecía ir en absoluto. —Nos hemos arriesgado mucho para ayudar a Hagrid, pero después de todo, Aragog está muerto. Si se tratara de salvarlo...

—Si se tratara de salvarlo, te aseguro que yo no iría — dijo Ron—. Tú no lo conociste, Hermione.Créeme, lo mejor que podía hacer ese monstruo era morirse.

Faith notó cómo Harry miraba la nota. Hagrid claramente había estado llorando mucho cuando lo escribió y Harry no pudo evitar sentir mucha simpatía por él, a pesar de que detestaba a la criatura Aragog.

—Estás considerando ir, ¿no?— le preguntó Faith. —Yo también.

Harry miró hacia arriba con una pequeña sonrisa.

—Harry, no puedes estar pensando en ir—dijo Hermione. —Es algo tan inútil por lo que recibir una detención.

—Pero, Hermione, Hagrid realmente apreciaría que fuéramos, ¡mira lo triste que está!— Faith respondió, señalando la nota.

—¡Es peligroso, especialmente para ustedes dos!— dijo Hermione con severidad. —Harry, piénsalo, no querrás ver a Faith atrapada por un grupo de mortífagos, ¿verdad?

—Ahora, no vayas a usar eso en su contra— Faith entrecerró los ojos.

—Supongo que Hagrid tendrá que enterrar a Aragog sin nosotros— suspiró Harry.

—¿Qué...?

—Sí, lo hará—asintió Hermione mientras Harry pellizcaba a Faith en su costado. —Mira, Pociones estará casi vacío esta tarde, con todos nosotros haciendo nuestras pruebas... ¡entonces trata convencer a Slughorn!

—Sí, a la cincuenta y siete va la vencida, ¿no? ¿Por qué iba a tener suerte esta vez? —Harry dijo con tristeza.

—¿Suerte? —repitió Ron con ojos grandes—. ¡Ya lo tengo, Harry! ¡Suerte!

—¿Qué quieres decir?

—¡Utiliza tu poción de la suerte!

—¡Ron,...eso es!— Hermione dijo gratamente sorprendida. —¡Por supuesto! ¿Por qué no lo pensé?

—¿El Felix Felicis? —dudó Harry mientras miraba a sus amigos—. No sé... Pensaba guardármelopara...

—¿Para qué? —preguntó Ron.

—¿Qué hay más importante que ese recuerdo, Harry? —preguntó Hermione.

La mente de Harry se desvió hacia un día perfecto en el que podría estar con Faith constantemente, sin ser interrumpido por nadie y sin el hilo de que Voldemort se enterara de Faith colgando sobre sus cabezas. Un día que aún no existía pero que él deseaba desesperadamente.

—¿Harry?— La voz de Faith lo sacó de golpe. —¿Estás todavía con nosotros?— Harry inconscientemente la había estado mirando, haciendo que Faith sonriera.

—¿Qué...? Sí, por supuesto—dijo Harry mientras sacudía la cabeza para salir de eso. —Bueno... está bien. Si no puedo hacer que Slughorn hable esta tarde, tomaré un poco de Felix y lo intentaré de nuevo esta noche.

—Eso está decidido, entonces— Hermione asintió mientras se ponía de pie. —Destino... determinación... deliberación...— Eran los tres pasos para Aparecer.

—Basta, por favor — Ron gimió. —Ya me siento bastante enfermo...¡rápido, escóndeme!

—Todavía no es Lavender, Ron— dijo Faith mientras tomaba la mano de Harry y seguía a Hermione y Ron de regreso al castillo.

—Genial—suspiró Ron aliviado.

▬▬▬▬▬ஜ۩۞۩ஜ▬▬▬▬▬

Esa tarde, la clase de Pociones estaba prácticamente vacía. Sólo cuatro estudiantes estaban allí; Harry, Faith, Draco Malfoy y Ernie Macmillen. Se sentaron en una mesa diferente, a excepción de Harry y Faith, quienes estaban tomados de la mano debajo de las suyas.

—¿Demasiado jovenes para Aparecerse?— preguntó Slughorn. —¿Aún no han cumplido los diecisiete?

Los cuatro negaron con la cabeza.

—Ah, bueno— sonrió Slughorn, —como somos muy pocos, haremos algo divertido. ¡Quiero que todos me preparen algo divertido!

—Eso suena bien, señor—dijo Ernie asintiendo. Malfoy no parecía muy feliz por eso.

—¿Qué quiere decir con algo 'divertido'?—Malfoy preguntó, sonando muy molesto por tener que estar allí.

—Oh, sorpréndeme—Slughorn se encogió de hombros.

Harry y Faith decidieron trabajar juntos en la poción ya que ambos sabían que Faith solo arruinaría la suya y posiblemente podría poner a Slughorn de mal humor. Decidieron seguir las instrucciones del Príncipe sobre el Elixir para inducir la euforia, ya que pensaron que podría hacerlo lo suficientemente feliz como para entregarle el recuerdo.

—Caramba, esto tiene una pinta estupenda — dijo Slughorn asombrado cuando examinó sus pociones media hora más tarde y miró el caldero de Harry y Faith. —Es Euforia, ¿verdad? ¿Y qué es ese olor?Hum... Has añadido una ramita de menta, ¿no? Poco ortodoxo, pero qué inspiración, muchacho. Claro,eso contrarrestará los posibles efectos secundarios: tendencia exagerada a cantar y picor en la nariz. Deverdad, no sé de dónde sacas estas ideas luminosas, hijo mío, a menos...

Harry empujó su libro más abajo en su bolso.

—Quesean los genes heredados de tu madre.

—Sí, quizá sea eso —Harry asintió rápidamente.

Ernie y Malfoy no se veían felices; Ernie había intentado inventar su propia poción, pero fracasó miserablemente, y Slughorn declaró que la solución para el hipo de Malfoy era "aceptable". Faith había dejado que Harry hiciera la mayor parte del trabajo porque le costaba leer la letra muy cursiva del Príncipe y porque le gustaba verlo trabajar con las mangas arremangadas.

Cuando sonó la campana, Ernie, Malfoy y Faith salieron corriendo del salón de clases, Faith guiñándole un ojo a Harry como señal de buena suerte.

—Señor —comenzó Harry. Slughorn miró alrededor del salón de clases y notó que solo estaban él y Harry, así que salió lo más rápido que pudo. —. Profesor... Profesor, ¿no quiere probar mi po...?

Rápidamente se unió a Faith en el vestíbulo de entrada donde ella lo estaba esperando y regresaron a la sala común tomados de la mano. Como Ron y los otros chicos estaban tomando la prueba de Aparición, el dormitorio de los chicos estaba desierto y era seguro decir que Harry y Faith lo aprovecharon al máximo. Una vez que decidieron que era suficiente, los dos volvieron a bajar a la sala común y se relajaron en el sofá, envueltos en un abrazo.

—¡Harry! ¡Faith!—llamó Hermione cuando trepó por el agujero del retrato. —¡Pasé!

—¡Bien hecho!

—¡Felicidades, Hermione!"

Rápidamente se pusieron de pie, enderezando sus ropas.

—¿Qué pasa con Ron?— preguntó Harry.

—Él... simplemente fracasó— dijo Hermione en voz baja mientras Ron se encorvaba detrás de ella. —Fue realmente desafortunado, una cosa pequeña, el examinador solo notó que se había dejado media ceja atrás... ¿cómo te fue con Slughorn?

—No ha habido manera — suspiró Harry mientras palmeaba la espalda de Ron. —Mala suerte, amigo, pero pasarás la próxima vez, puedes tomarlo con Faith y conmigo.

—Sí, supongo— se quejó Ron. —¡Pero media ceja! ¡Como si eso importara!

—Ya, ya —dijo Hermione con compasión—, han sido muy duros contigo.

Durante la cena, pasaron tiempo molestando del examinador de Apariciones y parecía que eso hizo que Ron se sintiera un poco mejor. Una vez que regresaron a la sala común, el tema de la conversación volvió a la memoria de Slughorn.

—Entonces, Harry, ¿vas a usar el Felix Felicis o qué?— le preguntó Faith.

—Sí, supongo que será mejor—Harry se encogió de hombros.—No creo que lo necesite todo, no el equivalente a doce horas, no puede durar toda la noche. Y me dejará algo para...

Faith entendió lo que quería decir. Hablaron sobre eso esa tarde, sobre cómo quería llevarla a una cita adecuada, tal vez durante el verano, cómo quería estar a solas con ella durante un par de horas como si estuvieran solos en los dormitorios de los chicos.

—Solo tomaré un trago. Dos o tres horas deberían ser suficientes— continuó Harry rápidamente.

—Es una gran sensación cuando lo tomas— suspiró Ron felizmente—. Es como si supieras que nopuedes equivocarte en nada

—Pero ¿Qué dices? —Hermione se rió—. ¡Si tú nunca lo has tomado!

—Ya, pero creí que sí, ¿verdad? —Ron le recordó—. En realidad es lomismo.

Esperaron hasta que el sol se puso sobre el Bosque Prohibido antes de colarse en los dormitorios de los chicos. Cuando salieron del Gran Comedor, Slughorn acababa de entrar, así que pensaron que se tomaría un tiempo antes de volver a su oficina. Harry tomó la pequeña botella del fondo de su baúl, la abrió y la sostuvo en alto como un brindis.

—Bueno, aquí va—dijo antes de tomar un pequeño trago.

—¿Qué se siente? —preguntó Hermione en voz baja.

Los tres observaron cómo Harry hizo una pausa, sin responder, antes de que una gran sonrisa apareciera lentamente en su rostro. Si no supieran que se había tomado el Felix Felicis, pensarían que estaba borracho.

—¿Harry? ¿Cómo estás...?— Faith no pudo terminar la oración cuando Harry agarró su rostro y empujó sus labios sobre los de ella. Fue muy repentino, por lo que tomó a Faith por sorpresa, no supo qué hacer consigo misma por un momento, pero en el momento en que cerró los ojos, Harry la soltó de nuevo y la miró a los ojos con un brillo centelleante en sus ojos.

—¿En serio, Harry?— Ron suspiró.

—Me siento excelente— dijo Harry alegremente. —Realmente excelente. Cierto... voy a ir a casa de Hagrid.

—¿Qué?— Ron, Hermione y Faith exclamaron, aunque Faith se retrasó un poco ya que todavía estaba gratamente sorprendida por el beso de Harry.

—No, Harry, tienes que ir a ver a Slughorn, ¿recuerdas?—Hermione le recordó.

—Nada de eso. Me voy a la cabaña de Hagrid, tengo una corazonada.

—¿Vas al funeral de una araña gigante por una corazonada? — preguntó Ron asombrado.

—Sí — Harry asintió mientras sacaba su Capa de Invisibilidad de su baúl. . Creo que es allí donde tengo que estar esta noche, ¿entienden lo que quiero decir?

—No —dijeron de nuevo Ron, Hermione y Faith.

—¿Seguro que te has tomado el Felix Felicis? —dijo Hermione ansiosamente, no sintiéndose muy bien por dejar que Harry saliera del castillo a esa hora. —.¿Seguro que no tienes otra botella de... no sé...?

—¿Esencia de locura? —sugirió Ron, haciendo que Harry se riera a carcajadas.

—Confíen en mí— dijo Harry con una sonrisa emocionada. —Sé lo que estoy haciendo... o al menos...— Caminó hacia la puerta con pasos grandes y confiados, —Felix lo sabe— agarró la mano de Faith y la atrajo hacia él para darle otro beso apasionado antes de tirar de la otra. Capa de invisibilidad sobre su cabeza y bajando las escaleras.

▬▬▬▬▬ஜ۩۞۩ஜ▬▬▬▬▬

Harry volvió tarde esa noche. Ron y Hermione no se habían molestado en esperar, pero Faith lo intentó y fracasó. Se quedó dormida en el sofá de dos plazas junto al fuego, pero se despertó en el sofá con Harry.

Durante Encantamientos, su primera clase del lunes, les contó lo que había sucedido en casa de Hagrid, cómo obtuvo el recuerdo y cuál era el recuerdo. Cuando terminó de contarles lo que Dumbledore le dijo al respecto, el profesor Flitwick pasó para ver su progreso en convertir el vinagre en vino.

—¡Uau! — suspiró Ron, sonando una mezcla entre impresionado y ansioso. Se movía descuidadamente con su varita pero sin prestar atención a lo que en realidad estaba haciendo—. ¡Uau! Vas a ir con Dumbledore... para destruir... ¡Uau!

—Ron, estás provocando que nieve — dijo Hermione en voz baja.

Harry ni siquiera se había dado cuenta mientras esperaba pacientemente la reacción de Faith. Cuando le contó sobre la profecía después de la Batalla en el Departamento de Misterios, había visto las lágrimas en sus ojos, ya molesta porque tenía que cumplir con una tarea tan difícil (matar a Voldemort), y ahora tenía que ir de cacería para Horrocruxes también. Sabía que ella estaba tan preocupada por él con esto como él lo estaba cuando jugaba Quidditch.

—Solo...— Faith no sabía cómo expresar sus sentimientos en palabras. —Simplemente no te mueras, por favor— le pidió ella, su voz un poco más baja, indicando que claramente no estaba contenta con el hecho de que Voldemort marcara a Harry como su igual (bueno, ¿Quién lo estaba?).

Harry no podía responderle, no podía prometerle que viviría, como ella nunca podría prometerle que tendría cuidado durante el Quidditch, así que solo le sonrió. Y por su reacción, se dio cuenta de que probablemente ella lo sabía.

—Oh, sí— dijo Ron, ni él ni Hermione siguieron la pequeña interacción de Harry y Faith mientras se sacudían la nieve. Lavender, que vio esto desde el otro lado de la habitación, se echó a llorar. Ron parecía un poco culpable. —Nos separamos— le dijo a Harry. —Anoche, cuando me vio salir del dormitorio con Hermione y Faith. Obviamente no podía verte, así que pensó que solo éramos nosotros tres.

—Ah— Harry se obligó a sí mismo a apartar los ojos de Faith, en lugar de eso, simplemente agarró su mano.—Bueno, no te importa que haya terminado, ¿verdad?

—No—Ron se encogió de hombros—. Fue muy desagradable cuando se puso a chillarme, pero al menos no tuve

—Cobarde —llamó Hermione, aunque con una sonrisa divertida y engreída. —Sus gritos hicieron surgir el rumor de que tú y Faith rompieron, aunque eso solo duró esa noche, ya que literalmente todos los encontraron acurrucados en el sofá esta mañana.

—Nunca podemos tener un momento en privado, ¿verdad?— Harry le sonrió a Faith y ella le devolvió la sonrisa tímidamente, todavía abrumada.

—Bueno, fue una mala noche para el romance en general. Ginny y Dean también terminaron— le dijo Faith, tratando de sonar solemne, pero no pudo ocultar su entusiasmo por cierta Ravenclaw de quinto año.

—¿Cómo?— preguntó Harry.

—Fue algo tonto al principio, ella dijo que él ya estaba tratando de ayudarla a pasar por el agujero del retrato, como si ella no pudiera trepar por sí misma, pero también estaba molesto con ella por haber ido a la fiesta de Slughorn con Luna en lugar de él, así que han sido rocosos durante mucho tiempo.

Los cuatro amigos miraron a Dean Thomas, que estaba sentado a un par de asientos de ellos. Ciertamente no se veía feliz.

—Por supuesto, esto ahora pone al equipo en un dilema—continuó Faith. —Si Dean y Ginny no se hablan, ¿cómo van a...?

—Flitwick— interrumpió Ron en advertencia cuando vio que el pequeño profesor se les acercaba de nuevo.

Hermione seguía siendo la única de ellas que convirtió con éxito su vaso de vinagre en un vaso de vino. Los otros tres no habían tenido mucha suerte todavía.

—Ahora, ahora, niños y niñas—chilló el profesor Flitwick. —Un poco menos de conversación, un poco más de acción... déjenme ver cómo lo intentas...

Harry, Ron y Faith levantaron sus varitas hacia sus vasos, dijeron el hechizo no verbal en sus cabezas y observaron el resultado; El vinagre de Faith se volvió de un tono azul brillante, el vinagre de Harry se convirtió en hielo y el vaso de Ron explotó.

—Sí...sigan practicando...— El profesor Flitwick salió de detrás del escritorio ya que se agachaba cuando los fragmentos volaban en todas direcciones, —Practiquen.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top