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Soltó un jadeo cansado cuando por fin llegaron al aeropuerto o al menos eso era lo que podía escuchar, ya que el ruido comenzaba a ser bastante más fuerte que antes, el bullicio de la gente siendo su guía.

―Jungkook, por la mierda, quédate quieto o haré que Taehyungie te cambie de bolsillo―gruñó Yoongi mientras se acomodaba en su lugar, ambos seres manteniéndose en el bolsillo de Taehyung.

―Taehyungie es mi novio, por lo que quien tendría que cambiarse de bolsillo eres tú, hyung―dijo el elfo mientras fruncía el ceño con indignación, manteniéndose aferrado a la tela de la camiseta del mayor―Me moví porque quería rascarme mi brazo, no seas exagerado.

En ese momento se encontraban en el aeropuerto, por lo que los únicos que se mantenían caminando con normalidad eran Jimin y Taehyung. Los otros dos se encontraban dentro del bolsillo del pelinegro, transportándose en un tamaño pequeño, cortesía de Yoongi.

Claramente los seres mágicos no podían subirse a un avión como lo harían Taehyung y Jimin, ya que no tienen los papeles necesarios para nada, por lo que tendrían que viajar en pequeño, para que no hubiera problemas que no pudieran remendar.

―Entiendo que quieras rascarte, pero casi me das una patada en la cara y mi bonito rostro se vería estropeado por un tono morado gracias a tus piesotes―gruñó con molestia, acomodándose sobre el que era alguna parte del pecho de Taehyung, sintiendo el movimiento de la caminata―Me duelen mis alas.

Jungkook lo vio con las cejas alzadas, pensando que su mayor había sido mimado demasiado, ya que antes no se quejaba tanto, de hecho a penas y abría la boca antes de conocer a los humanos.

―Pues estíralas, nadie podrá verte y las alas son más pequeñas―el hada hizo una mueca, cruzándose de brazos―Creo que voy a dormirme, así no escucharé más tus quejas, hyung.

El hada bufó y vio a su menor con reproche, quien realmente cerró los ojos para tomar una siesta.

―Elfo estúpido―dijo en un susurro―Entraré a tu tonto sueño para tomarte de los tobillos y arrastrarte por el suelo.

Jungkook chasqueó la lengua mientras se encogía de hombros, demostrándole que le daba igual.

Yoongi estaba cansado, Jimin le había dicho que cuando pudieran acercarse a los baños irían para que se estiraran un poco, más que todo Yoongi, quien no podía estirar sus alas con temor de asustar o dañar a Taehyung.

Porque si el medio humano se asustaba y colocaba una mano sobre el bolsillo por instinto, solamente llegarían dos tortitas de hada y elfo al destino de vacaciones. No era muy buena idea.

Intentó levantarse sobre la tela de la camiseta, tambaleando un poco ante la inestabilidad de esta y se aferró al borde del bolsillo, para poder colocarse de puntas y ver lo que estaba pasado afuera, esperando que nadie más que Taehyung y Jimin fueran capaces de verlo.

El pelinegro sintió el movimiento en su bolsillo y miró hacia abajo, sonriendo cuando vio la cabecita de Yoongi asomarse por el bolsillo, observando todo con ojos redondos.

―No te preocupes, hyung. En este momento vamos hacia los baños―dijo, haciendo que Jimin lo viera curioso ante la repentina conversación, notando que su novio estaba asomando la cabeza por el bolsillo.

―Oh, hola Yoonie ¿Van cómodos por ahí? ―preguntó el castaño con una sonrisa de mejillas redondas, asegurándose de que nadie lo viera hablar con el bolsillo de su mejor amigo, porque eso era un poco raro.

―Me duelen mis alas, necesito estirarlas―dijo con angustia, solo siendo escuchado por Taehyung, quien logró visualizar los mencionados a la poca distancia.

―Dice que le duelen sus alas, pero no te preocupes, hyung. Ahí están los baños.

El hada vio a su novio, quien lo seguía viendo y le lanzó un beso antes de meterse nuevamente en el bolsillo del pelinegro, haciendo que el castaño soltara una risita nerviosa, con un pequeño sonrojo en sus mejillas.

Entraron al baño y vieron por cada cubículo si había alguien, verificando que estaban solos.

―Yo realmente necesito ir al baño, por lo que ustedes hagan lo que tengan que hacer―dijo Jimin mientras le daba su maleta a Taehyung, quien asintió―No confío con que se transformen fuera, mejor entren a un cubículo, por si alguien entra.

―Está bien, haz lo que tengas que hacer, tú también―le dijo el pelinegro con gracia, haciendo que Jimin rodara los ojos mientras entraba al baño a toda prisa, dejando a los otros afuera.

Taehyung rodó las maletas dentro del cubículo, el cual no era tan pequeño, pero tampoco era lo más espacioso de la vida. Cerró la puerta y metió su mano en el bolsillo de su camiseta, para que los seres pudieran subirse.

―Hey, despierta―dijo el hada mientras le daba un empujón al elfo, quien se despertó con brusquedad.

― ¿Eh? ¿Ya llegamos a la playa? ―preguntó aturdido el menor, levantándose para poder subirse en la mano de su pareja.

―No, Jungkookie. Solo pasamos para que pudieran estirarse un poco, porque será un viaje un poco largo―el elfo asintió adormilado, aferrándose al dedo de su pareja mientras este los elevaba lentamente.

Taehyung se agachó y los dejó en el suelo, dando espacio para que pudieran cambiar de tamaño. Yoongi logrando que eso pasara. Ambos comenzaron a crecer y lo primero que hizo Yoongi al tener su tamaño humano fue sacar sus alas, colocándose de puntitas para estirarse.

Jungkook sonrió adormilado mientras le daba un abrazo a su pareja, recibiendo un beso en su mejilla.

―Joder, de verdad me dolía―jadeó Yoongi mientras intentaba acariciarse la espalda con ambas manos, pero no llegando realmente a donde sus alas estaban―Quiero un pequeño masaje antes de abordar.

Taehyung se soltó un poco del agarre de Jungkook, ayudándolo a acomodarse el cabello, para ocultar las orejas puntiagudas.

―Podemos salir y pueden mojarse el rostro un poco, le diré a Jiminie que venga a darte el dichoso masaje. Pero no salgas―el hada asintió, de acuerdo, por lo que se acercó al inodoro, para que la pareja pudiera salir.

Taehyung abrió la puerta y empujó las maletas con rueditas, saliendo del cubículo con Jungkook. Sin embargo, cuando levantó la mirada, se percató de que un hombre desconocido se estaba lavando las manos, el cual abrió los ojos al verlos salir del cubículo.

El pelinegro sintió sus mejillas sonrojarse ante la asombrada mirada del hombre, ya que sabía que probablemente estaba pensando cosas que no son.

―Taehyung, trae a Jiminie, quiero que me haga el masaje―dijo Yoongi mientras se asomaba por el cubículo, sus alas no siendo visibles para el hombre que ahora se encontraba más asqueado que antes, al ver a tres hombres en el mismo cubículo, haciendo a saber qué cosa.

En ese momento Jimin salió del baño, deteniéndose al ver tan incómoda escena.

―Uy...―Jungkook se acercó al lavabo sin importarle realmente la situación, ya que no entendía por qué tanto revuelo.

El hombre se sobresaltó al ver al chico acercarse, tomando rápidamente papel para secarse.

El elfo se extrañó ante la mirada del hombre desconocido, sintiéndose amenazado.

― ¿Qué? ¿Por qué nos mira? ―el hombre negó rápidamente y salió del baño casi corriendo, pensando en que era mejor el no decir nada a ganarse un puñetazo de ese tipo, el cual probablemente tenía brazos más gruesos que su propia cabeza―Qué raro.

Jimin y Taehyung suspiraron, soltando unas carcajadas después.

―Oigan, me siguen doliendo mis alas―dijo Yoongi mientras agitaba una de sus manos, para capturar la atención de su novio―Solo un masaje pequeño, por favor, novio bonito.

Jimin sonrió mientras asentía, acercándose al lavabo para poder lavarse las manos y después darle en masaje a su novio.

―Claro que sí, mi novio hermoso.

Pocos segundos después salieron del baño, solamente que en ese momento Yoongi y Jungkook no se encontraban en el bolsillo, ambos teniendo que volar para poder llegar hasta la zona de la entrada.

Yoongi le ofreció su tobillo a Jungkook para comenzar a volar, ambos siendo más pequeños que antes para que nadie pudiera verlos más que como pequeñas moscas. No se habían ido en el bolsillo de Taehyung por cualquier cosa, ya que era algo peligroso el que alguien viera el bolsillo de Taehyung y se encontraran con un mini hada y un mini elfo.

―Hyung, por lo que más quieras, no me dejes caer nuevamente―le gritó Jungkook en medio del vuelo, ambos pasando por lo más alto, para que ninguna persona intentara matarlos al verlo como moscas―Si no quieres hacerlo por mí, hazlo por Taehyungie.

El hada rodó los ojos, manteniendo su firme vuelo.

―No seas tonto, a veces me estresas y me dan ganas de tomar tu enorme cuello y estrangularlo un poco, pero no te quiero muerto―dijo mientras veía hacia abajo, asegurándose que el elfo estuviera bien agarrado.

Se pondría a llorar como un bebé si algo le pasaba a Jungkook, pero no se lo diría porque se pondría todo presumido.

Yoongi mantenía su vista sobre su novio, avanzando cuando ellos avanzaban.

―Jin hyung me ha hablado sobre la playa, pero jamás he visto una ¿Crees que sea bonita? ―le preguntó Yoongi a su menor, quien levantó la vista mientras pensaba, un poco más ilusionado por llegar a la playa.

―No lo sé, pero según las fotos que vi por Internet es muy bonito. Primero vi varias playas, pero Jiminie me dijo que no todas eran iguales, por lo que me enseñó la playa a la que vamos y es muy bonita―dijo mientras bajaba la vista nuevamente, viendo a sus novios entregarles algo a una mujer―Antes no tenía tantas ganas, pero cuando vi las fotos me emocioné más.

Yoongi comenzó a descender lentamente cuando los menores entraron por un pasillo, siguiéndolos de cerca

―Yo quiero sentir la arena, Jiminie me dijo que picaba en el cuerpo, pero quiero sentir―ambos seres volaban sobre la cabeza de los menores, quienes estaban cerca de abordar el avión―No es como que quiera picazón en mi cuerpo, pero tengo curiosidad ¿Me entiendes?

―Sí, yo también quiero sentir.

Jimin vio hacia arriba, viendo a los chicos volando sobre ellos, eso lo hizo sonreír.

Siguieron con el vuelo hasta que los menores se sentaron en sus asientos, ambos descendiendo para caer sobre los muslos de Jimin.

Taehyung estiró su mano para que Jungkook se subiera, alzándolo con cuidado para meterlo en su bolsillo y que pudiera seguir durmiendo.

Jimin se colocó una sudadera, la cual tenía un bolsillo en el lado derecho sobre su pecho, en el cual colocó a Yoongi.

―Creo que lo mejor es que se duerman―dijo Jimin, sabiendo que ambos seres podrían escucharlo―Para que no sientan tanto el que están dentro de nuestros bolsillos, los despertaremos cuando hayamos aterrizado.

El elfo no esperó nada más y se acomodó para dormir, en cambio Yoongi se sentó y miró hacia arriba, haciendo contacto visual con su pareja.

―Uh, yo tengo un poco de hambre―dijo el hada, haciendo que Jimin sonriera pequeño.

―Te daré un poco de galleta, cuando nos traigan la comida te daré un poco―dijo mientras tomaba una galleta de su pequeña maleta, rompiendo un trozo para dársela al hada, quien la tomó con gusto.

―Gracias, novio.

Los humanos esperaban que el viaje pasara rápido, para que sus novios no se sintieran demasiado incómodos por tanto tiempos.

Jimin gruñó cuando pudo estirarse finalmente, ambos manteniéndose en la zona de las cabañas de la playa, en donde solamente tendrían que buscar la que les tocaría, siendo la número veinte.

La cabaña que Jackson les había prestado tenía dos habitaciones, por lo que ambas parejas podrían dividirse y dormir juntos, por lo que no vieron la necesidad de tomar dos cabañas. Jungkook y Yoongi no se habían despertado aún, porque los más humanos del grupo no lo vieron necesario y les dio penita.

El movimiento hizo que Yoongi comenzara a despertarse, estirándose lo más que podía dentro del bolsillo de su novio, sintiendo el olor salado en el aire. Aquello lo hizo abrir los ojos rápidamente, ya que ese era un olor similar al que Jin mantenía siempre, por lo que pudo imaginar que ya estaban en la playa.

― ¡Novio! ―llamó al castaño, quien se sorprendió ante la voz de su pareja, viendo hacia abajo― ¿Ya llegamos a la playa?

Jimin sonrió, manteniendo la vista en el camino, sino podría chocarse con cualquier cosa. No había muchas personas en ese momento, ya que estaban en temporada laboral y era difícil que alguien en ese momento se pasara de vacaciones.

―Sí, ya llegamos. Estamos cerca de la cabaña, cuando entremos podrás salir a estirar tus alitas―le dijo el menor, siendo él quien en esa ocasión le lanzó un beso al hada, quien sonrió en grande, mostrando sus rosadas encías.

Jimin pensó en ese momento que su novio tenía una perfecta vista de su papada, pero no se avergonzó, al menos no demasiado.

Llegaron a la cabaña poco tiempo después, dejando sus maletas en la entrada. Taehyung y Jimin dejaron a los seres en el suelo, quienes retomaron su tamaño humano poco tiempo después.

― ¡Me duele el culo! ―chilló Jungkook mientras se estiraba, gruñendo demasiado fuerte, haciendo que el hada rodara los ojos.

Yoongi le dio una patada al culo del elfo.

―Listo, resuelto―el menor se cruzó de brazos mientras lo veía con los ojos entrecerrados, solamente dejándolo de fulminar con la mirada cuando Taehyung le dijo que debían ir a la habitación que les tocaría.

Jimin igualmente tomó la mano del hada, ambos dirigiéndose a la otra habitación.

Las cabañas eran bastantes bonitas, estaban frente al mar y podían verlo por sus ventanas, el aire entraba fresco y el sonido de las olas se escuchaba de forma relajante en las habitaciones, haciendo que todos se animaran a darse un baño en el mar por unos momentos.

En esa playa también había piscinas, en las que podían nadar si lo quisieran, pero realmente no querían toparse con demasiadas personas, así que solamente la usarían si no estaba demasiado llena.

Yoongi y Jungkook definitivamente querían ir a las piscinas, en especial a la que tenía un gran tobogán. Les había gustado aquel castillo con el tobogán rojo, el cual daba a una piscina de pelotas. Aquella daba a una piscina con agua, lo que sería más divertido, en opinión de los seres.

― ¿Ya podemos ir al mar? ―preguntó Yoongi mientras se asomaba por la ventana de la habitación, no siendo consciente de que estaba dejando a Jimin con todo el trabajo de sacar la ropa de las maletas, para dejarlas en el mueble que estaba al lado de la cama.

―Podremos hacerlo cuando terminemos de sacar las cosas, además tenemos que cambiarnos, con ropa para bañarse―dijo Jimin mientras levantaba sus propios shorts, haciendo que el hada se despegara de la ventana y se acercara para ayudar.

―Jin hyung nos ha contado sobre cómo es la playa, pero dice que no le gusta mucho acercarse a la orilla. Primero porque los humanos son unos asquerosos que dejan su mierda en el agua y también porque pueden llegar a verle, por lo que prefiere mantenerse en las profundidades―dijo mientras desempacaba, sintiendo pena por la gente sucia que contaminaba el hogar de los tritones y otros animales.

―Lo sé, hay muchos humanos asquerosos, es una lástima.

Yoongi fue el que terminó más rápido con su tarea, por lo que se le quedó viendo a su menor, quien se encontraba haciendo pucheros para recibir algo de ayuda, pero el hada estaba dispuesto a realizar un trueque o algo así.

Había escuchado la palabra en televisión, pero no sabía si la había usado correctamente.

―Te ayudo a guardar tus cosas si me das caricias en la panza antes de dormir―le dijo el hada mientras lo veía con ambas cejas levantadas, palpando sobre la mencionada―También quiero un beso, sí.

Jimin jadeó con indignación, cruzándose de brazos.

― ¿Qué eres? ¿Un perro? ―le preguntó con una sonrisa de lado, haciendo que ahora el hada se indignara o al menos eso era lo que quería demostrar―No es cierto, amor. Te acaricio la pancita todo lo que quieras.

Yoongi sonrió con orgullo cuando logró su cometido, estirando los labios para que un enfurruñado Jimin los besara. Cuando se separaron, el hada comenzó a ayudarle a guardar.

Jimin tomó su cambio de ropa y lo vio con algo de duda, viendo que la puerta de la habitación estaba cerrada.

Consideraba que en su relación con Yoongi había suficiente confianza como para cambiarse frente al otro, después de todo, el hada jamás diría un comentario fuera de lugar y tampoco haría algo que lo incomodara. Su hadita preciosa era un amor.

―Hyung ¿Te molesta si me cambio aquí? ―preguntó mientras abrazaba sus prendas, el hada viéndole con curiosidad.

― ¿Por qué me molestaría? Lo que importa es que tú te sientas cómodo con eso, novio―dijo como si fuera lo más obvio del mundo, haciendo que Jimin sonriera―Si quieres que me de vuelta puedo hacerlo.

Jimin negó rápidamente, dejando las prendas en la cama para poder desvestirse.

―No es necesario, confío plenamente en ti―dijo mientras se quitaba la camiseta, dejándola a un lado, procediendo con sus pantalones―Es solo que te sentiste muy apenado cuando tuviste que desvestirme, entonces no sabía si esto te incomodaría un poco.

El hada negó mientras se quitaba igualmente la camiseta, bastante confundido por la conclusión del menor.

―Son cosas diferentes, novio. Aquel día no tuve tu permiso para ver, no estabas consciente de eso, por eso es que me apené y dudé mucho―dijo con seriedad mientras se colocaba la otra camiseta para bañarse, comenzando a quitarse los pantalones―Ahora es algo que tú elegiste, así que no es algo que considere malo o me de vergüenza ¿Me explico?

El más humano de la pareja sonrió, contento con la respuesta del mayor. Le gustaba mucho que, a pesar de que Yoongi no tenía idea sobre cómo era tener una relación y todo lo que implicaba, siempre era coherente con sus palabras y pensamientos, siendo respetuoso y siempre conociendo los límites de cada uno, lo que estaba permitido y lo que no.

Por lo que, aunque sus palabras son algo que se debe esperar como mínimo en una relación, sabía que muchas personas no lo tomaban en cuenta y para ser alguien que jamás había estado en una relación o que siquiera supiera de su existencia, le parecía muy lindo.

―Claro que te explicas―dijo mientras se colocaba sus chanclas de goma, acercándose al hada para darle un abrazo, sin importarle realmente que el hada tenía su short a medio poner, manteniéndose aferrado en los pálidos muslos.

―Novio, amo mucho tus abrazos, pero no me he puesto el short y tengo los calzones al aire―le dijo con algo de vergüenza, haciendo que Jimin mirara hacia abajo y soltara una carcajada, las mejillas de Yoongi coloreándose de rosa.

―Lo siento, lo siento. Puedes terminar de cambiarte.

Cuando todos estuvieron listos se encontraron en el salón de la cabaña, Jungkook llevando consigo los juguetes de plástico que usarían para jugar con la arena, ya que cuando había ido al centro comercial con Yoongi los habían visto y obviamente que los iban a usar en la arena.

Habían leído que podían hacer castillos y ellos querían probar.

― ¡Jungkookie, espera! ―chilló Taehyung, ya que su novio parecía más un niño que un adulto. Aunque eso tampoco era algo nuevo―Amarra las cintas del short, sino se bajará y tu culo quedará al aire―le dijo mientras apuntaba, haciendo que el elfo se viera y dejara los juguetes a un lado, viendo.

Yoongi vio las cintas de su propio short, notando que también estaban desatadas.

―Mira Jimin, tu novio también las tiene sueltas ¿Por qué no se las atas tú? ―le preguntó el pelinegro con ambas cejas levantadas, haciendo que Jimin le diera un manotazo y Yoongi le viera confundido.

―No es necesario, yo puedo solito.

Jimin le miró mientras levantaba y bajaba sus cejas rápidamente, haciendo que Taehyung rodara los ojos con una sonrisa.

Salieron de la cabaña para poder ir a la orilla del mar, en donde comenzaba la parte de la arena. Jimin y Taehyung dejaron que ambos seres experimentaran por su cuenta, ambos sacando sus celulares para poder grabar.

―Quítense las chancletas de goma, así podrán sentir la arena en sus pies―dijo Jimin mientras grababa, tanto Yoongi como Jungkook manteniendo sus vistas en la arena.

Hicieron caso y las tomaron entre sus manos, aún manteniéndose curiosos ante cómo podría sentirse la arena.

El hada levantó su pie y lentamente comenzó a bajarlo, colocando sus dedos mientras hacía una pequeña mueca, ante la sensación de los granos de arena tocando su piel.

En cambio, Jungkook saltó de golpe sobre la arena, riendo cuando sintió las cosquillas en sus plantas, corriendo rápidamente a la orilla del mar.

Taehyung rio y siguió a su novio corriendo, manteniendo la grabación.

Yoongi hizo una mueca ante la sensación de la arena en sus pies, finalmente colocando ambos en la mencionada.

―Se siente raro―dijo mientras veía a su pareja, quien grababa de cerca sus muecas, haciendo que se sintiera un poco avergonzado― ¿Me puedo poner mis chanclas de goma nuevamente? ―preguntó mientras se mantenía quieto, haciendo que Jimin riera.

―Primero tenemos que limpiar tus pies, sino será más incómodo al tener las plantas llenas de arena y colocarte después las chanclas de goma―dijo mientras le tendía la mano, para que ambos pudieran avanzar―Vamos.

Caminaron con algo de lentitud, ya que Yoongi veía que no hubiera piedras en el camino que pudieran dañar sus pies, finalmente llegando a la toalla que Taehyung había colocado sobre la arena, con algunas de sus cosas.

El hada lavó sus pies y se colocó nuevamente las chanclas de goma, yendo donde Jungkook estaba para poder jugar con los moldes de plástico. Se dejó caer sobre la arena de pompas, comenzando a tomar piezas.

―Hyung, hagamos un concurso. Quien haga un castillo más bonito, gana―dijo el menor con voz retadora, haciendo que el hada levantara una ceja, aceptando el reto.

―Jiminie, ayúdame a patearle el culo a Jungkook―llamó a su novio el hada, quien levantó la vista con curiosidad, acercándose mientras asentía.

El elfo le vio con indignación, para después ver a su pareja.

―Taehyungie ¿Me ayudas también? ―el pelinegro, quien se encontraba acostado sobre la toalla para poder broncearse un poco, le vio con un puchero.

―Estoy más blanco que el papel, Jungkookie. Quiero tomar un poquito de color―le dijo a su menor, ya que se había quitado la camisa para broncearse lo mejor posible.

El elfo levantó ambas cejas en su mente, pensando que debía usar el truco que sus redondos ojos le permitían realizar.

―Bueno, no hay problema―dijo mientras se encogía de hombros, sus ojos redondos pasando la vista de su novio a la arena que había acumulado, haciendo un puchero―Lo haré yo solo, gracias igualmente.

El hada rodó los ojos mientras tomaba un puñado de arena, lanzándoselo al elfo, quien se quejó en un chillido.

―Deja de ser un manipulador, que ya conocemos tu lado malvado―Jimin vio a Jungkook, revisando silenciosamente si la arena no había entrado a sus ojos, porque eso sí sería un problema. Pero nada había pasado.

―Eish, como si tú no hicieras lo mismo―dijo el elfo mientras tomaba igualmente arena, lanzándoselo al hada.

Lo que fue diferente es que Yoongi se controló para no lanzarle demasiado al elfo, siendo cuidadoso. Sin embargo, Jungkook no tuvo ni tiempo para pensar en lo que iba a hacer y no controló su fuerza, haciendo que mucha arena saltara sobre el hada y Jimin, pero siendo el rubio el más afectado.

― ¡Ah, imbécil! ―gritó mientras se cubría el cuerpo con los brazos, aunque había sido demasiado tarde.

―Yo me voy, no quiero terminar con más arena en el cuerpo―dijo Jimin mientras gateaba rápidamente sobre la arena, huyendo de la situación.

― ¡Eres un tonto, esto pica! ―gritó Yoongi mientras tomaba un puñado de arena, lanzándoselo al elfo con brusquedad, quien gritó por la sorpresa.

― ¡Ay! ¡Ahora sí, hyung!

Jimin se arrastró hasta su amigo con un puchero, su cabello y parte de su rostro llenos de arena, arrepentido de haberse acercado a la escena.

―Yo por eso me quedé aquí, tranquilito. Esos dos son demasiado competitivos y sabía que algo malo iba a pasar―dijo el pelinegro mientras se encogía de hombros, sacando de su maleta un paquete con toallitas para bebé, para ayudar a su amigo a limpiarse―Con los niños no se juega o sales lleno de arena.

Yoongi y Jungkook seguían lanzándose arena como si de nieve se tratara, ambos negándose a que el otro ganara la pelea, demasiado orgullosos como para ser el primero en rendirse.

― ¡Tú comenzaste, yo solo quería que mi novio me ayudara! ―dijo Yoongi mientras agarraba un puñado de arena, restregándolo contra la mejilla de Jungkook― ¡Eres envidioso!

― ¡Me dijiste manipulador! ―dijo el elfo mientras empujaba a Yoongi, siendo él quien recibía la arena en su rostro― ¡Mentiroso!

Mientras tanto, Jimin terminaba de limpiarse el rostro con la toallita para bebés y Taehyung sacaba una camiseta de la maleta, haciendo que Jimin lo viera con curiosidad.

― ¿Y esa camiseta? Es muy grande para ti o para cualquiera de nosotros―dijo Jimin, notando que la camiseta tenía algo escrito al medio, leyendo con curiosidad.

"Camiseta de reconciliación"

Decía la prenda.

―Últimamente se pelean demasiado y como el hombre inteligente que soy, sabía que hoy no sería la excepción, por lo que compré esta gran camiseta para que ambos la usen al mismo tiempo y se vean obligados a estar pegados―el pelinegro la extendió, haciendo que Jimin soltara una risita con tan solo imaginarlos con eso puesto―Tú y yo nos vamos a divertir en el mar y ellos tendrán su camiseta de reconciliación. Si se niegan a usarla, no iremos al tobogán mañana.

Jimin rio ante la idea de su amigo, siendo un poco malvado, pero no iba a detenerlo en absoluto.

Taehyung se levantó y se acercó a los seres, quienes seguían peleando con la arena.

―Si tan solo un grano de arena cae sobre mí por su culpa, olviden por completo el deslizarse por el tobogán―dijo el pelinegro mientras se cruzaba de brazos con la camiseta en mano, haciendo que ambos seres se detuvieran.

Jimin se acercó y colocó la misma pose que su amigo, solamente manteniendo arena en su cuerpo, pero ya no en su rostro.

―Usarán esta camiseta, la cual es la camiseta de la reconciliación―les dijo mientras la extendía, haciendo que ambos lo vieran con curiosidad y preocupación―Están peleando demasiado y esta vez metieron a Jiminie en su pelea―dijo mientras apuntaba al mencionado, quien los vio con reproche.

― ¡Pero fue culpa de Jung...! ―soltó Yoongi, pero fue callado por un soplido de Taehyung.

―No me interesa quién comenzó, usarán la camiseta hasta que se calmen y prometan que no pelearán más―Taehyung se acercó y aprovechó que ambos seres estaban juntos, comenzando colocarles la camiseta.

Un brazo de cada uno salía por cada orificio, siendo que el brazo izquierdo de Yoongi estaba libre y el derecho de Jungkook. Los seres los vieron con molestia.

―Ahora Jiminie y yo iremos a nadar un poco, ustedes se quedarán aquí o mañana no iremos al tobogán―habló serio, tomando la mano de su mejor amigo, para ambos poder entrar un poco en el mar.

Jungkook y Yoongi vieron a sus novios alejarse, la camiseta manteniéndolos muy pegados.

―Eish, esto es tu culpa―jadeó Yoongi con molestia, moviéndose con brusquedad, porque el elfo estaba demasiado cerca.

― ¡No, es culpa tuya porque...! ―el elfo se cayó de golpe cuando ambos chicos lo vieron desde la distancia, con las cejas alzadas―Ugh.

No saben cuántos minutos se mantuvieron con la camiseta de reconciliación, pero ya se estaban cansando. Jimin y Taehyung jugaban en el agua mientras soltaban carcajadas y ellos estaban atrapados en esa horrible camiseta.

―Ya, lo siento. No debí lanzarte arena, debí controlar mi fuerza―dijo Jungkook con voz resignada, haciendo que el hada bufara.

―Yo no lamento el haberme defendido, solo te lancé un poquito y tú media playa―dijo mientras intentaba cruzarse de brazos, pero no lográndolo al recordar la situación en la que se encontraba.

―Eres una mierda para las disculpas―dijo el elfo con sinceridad, sabiendo que no podrían salir de ahí pronto si el hada seguía así.

―Ya, lo siento. Yo tampoco debí atacar, sé que eres un gorila que no controla su fuerza, no debí tomarlo personal―dijo mientras rodaba un poco los ojos, sin embargo, sus disculpas eran sinceras.

― ¡Taehyungie! ―gritó el elfo, haciendo que los más humanos del grupo miraran hacia ellos― ¡Ya nos disculpamos! ¿Nos podemos quitar esto?

Jimin hizo una seña con su dedo para que se acercaran, ambos seres intentando levantarse por su cuenta, cayendo de pompas cuando la camiseta los juntó de golpe.

― ¡Ay, tienes que dejarme levantarme primero! ―dijo el elfo, siendo él quien era más grande físicamente.

―No grites o pensarán que estamos peleando de nuevo y nos harán quedarnos con esto, idiota―le regañó el hada, levantándose cuando el elfo ya estaba de rodillas, así ambos pudieron levantarse al mismo tiempo― ¿No te da gracia? Ser el rey de los elfos y que tu novio te castigue con una camiseta de reconciliación.

El elfo se aguantó las ganas de rodar los ojos, para que su novio no lo vea.

― ¿No te jode ser el hada más poderosa de tu bosque y que tu novio te haga usar una camiseta de reconciliación?

Yoongi bufó bajito, manteniendo su sonrisa para no alertar a sus novios.

―Cabrón.

Taehyung y Jimin salieron del agua, viendo a sus chicos con los brazos cruzados.

― ¿Ya no van a pelear? ―los seres negaron―Ahora deben disculparse con Jiminie, tenía arena hasta en las pompas y eso es muy irritante.

Jimin lo vio con los ojos bien abiertos, dándole un golpe a su amigo en su hombro.

―Lo lamento, Jiminie. No debí lanzarte arena―dijo el elfo, haciendo que Taehyung sonriera y lo liberara de la camiseta del demonio, quedando la enorme prenda sorbe Yoongi.

―Novio, una disculpa. No debí seguirle el juego al idio...―Taehyung carraspeó con las cejas alzadas, cortando el insulto que Yoongi estaba a punto de soltar. Jungkook se rio de él mientras abrazaba a su novio por su espalda, haciéndole muecas―No debí seguirle el juego a nuestro increíble elfo, Jungkook―dijo con sarcasmo, pero igualmente se dio por válido.

Se limpiaron el cuerpo para eliminar un poco de la arena, para después poder continuar con su fallida competencia, en donde Yoongi se burló por la decoración con algas que Taehyung había agregado a su castillo, ya que se veía gracioso.

―Nuestro castillo necesita un habitante―dijo Yoongi mientras se asomaba más cerca de la arena, entre las rocas.

Había algunos cangrejos en el lugar, por lo que pensó que sería buena idea tenerlos en su increíble castillo.

―Señor cangrejo ¿Quiere subir a mi castillo? ―le preguntó al crustáceo que se encontraba cerca, quien se subió a su mano pocos segundos después.

Yoongi llevó al cangrejo a su castillo y lo dejó en la cima, el cangrejo cerrando y abriendo sus tenazas mientras se movía de lado a lado.

― ¡Nuestro castillo es el ganador porque tiene un cangrejo como habitante! ―gritó Jimin mientras tomaba rápidamente su celular, para tomar una buena foto.

Jungkook hizo una mueca mientras se levantaba de la arena para buscar algo mejor que un cangrejo, caminando por la orilla para encontrar más grande.

Suspiró cuando vio algo que podría servirle, sacándolo del agua con curiosidad, viendo que era un animal largo.

― ¡Jungkookie, deja eso! ―chilló asustado Taehyung, viendo la anguila muerta que el elfo tenía en su mano.

―Parece una corbata―dijo con gracia, colocándosela sobre su pecho y dando media vuelta sobre su lugar, para que los demás lo vieran―Miren, tengo una corbata.

El elfo corrió de vuelta a su castillo y dejó caer la anguila sobre este, viendo su creación con satisfacción.

―Nuestro castillo ganó, porque tiene esa cosa larga que parece corbata.

El equipo cangrejo se dio por vencido, no podían luchar contra eso.

Hermoso edit hecho por🥺❤: Jeon-NamGi

¡Hola! 👀❤

Les prometo que quería subir el capítulo más temprano, pero antes mi siesta imprevista tuve que comenzar a escribir más tarde JAJAJA pero igualmente les traigo capítulo❤

Espero que el capítulo de hoy les haya gustado, un poco simple, pero bonito🌹

Cuídense mucho y no sean peleonerxs o les pondré una camiseta de la reconciliación👀

¡Nos leemos prontooooo!✨