🌻19🌻

La imagen en el multimedia es un Orco.

🍀

Yoongi observaba con concentración la pequeña semilla que comenzaba a quedar enterrada bajo la húmeda tierra, sonriendo en satisfacción al saber que sería una buena cosecha.

Las cosas en el departamento habían estado mucho mejor después de los humildes regalos, siendo la broma pesada completamente olvidada por los humanos. Pero lo que estos no podían olvidar, es que habían tocado el tema sobre alguien sabiendo sobre la estancia del hada en un hogar de humanos, lo que claramente podría llevarles problemas a todos.

Yoongi no estaba tranquilo del todo, algo le decía que la reacción de la hada mayor había sido demasiado tranquila, como si dejara las cosas para después. El elfo estaba de igual forma o hasta más nervioso, ya que su cabeza rodaría inmediatamente se denotara su traición hacia el bosque.

Luego de la entrega de los regalos hace dos días atrás, ambos seres se sentaron a hablar sobre lo que había pasado en realidad, omitiendo claramente la charla que habían tenido sobre sus sentimientos hacia los mortales. Compartiendo a su vez sus inseguridades.

Ambos humanos estuvieron de acuerdo en tomar ciertas medidas de precaución, las cuales iban en las visitas que los seres realizaban al departamento.

Jungkook se encargaría de llevar toda la información por las mañanas, ya que es el momento en el que puede librarse más fácilmente de los demás elfos o hadas. Sin embargo, pidió que fueran más precavidos con las visitas que Jin hacía al departamento, ya que un tritón no era como una hada, la cual puede volverse muy pequeña y pasar desapercibida.

Por lo que todos estaban pensando en una idea para que pudieran visitar a Jin y Suran, sin que ponga en peligro la vida de alguien.

―Quiero que vayamos a ver a Jin, me comentó que hoy beberá la pócima para tener sus piernas y creo que sería lindo que todos estuviéramos con él―dijo Jungkook mientras afilaba las puntas de sus flechas en el sofá, observando atentamente el cómo Jimin se removía desde su lugar.

―No creo que sea buena idea que vayamos al bosque, no cuando alguien está sospechando sobre la relación que tiene Yoongi con humanos―el hada se levantó del suelo y caminó hasta la alfombra, la cual estaba al medio de los muebles, sentándose a su lado.

―Debemos ir a una hora prudente, normalmente en las noches no hay hadas fuera de sus casas―comentó Yoongi mientras se acomodaba la gargantilla de Jimin, la cual no había sido devuelta. ―Incluso podemos entrar por el atajo largo, para evitarnos cualquier incidente con la hada entrometida.

El elfo asintió y guardó la última flecha en su estuche, prestando atención en sus amigos, quienes se veían un poco cohibidos de estar juntos. Por un momento se sintió como la tercera luciérnaga en el apareamiento.

La mejor analogía que pudo hacer, tomando en cuenta sus conocimientos.

―Uh, creo que iré a ver a Taehyung―dijo mientras se levantaba del mueble, notando la mirada agradecida del hada.

―Pero Taehyung está en la universidad―habló Jimin con el ceño ligeramente fruncido, no siendo completamente consciente de la estrategia del elfo.

Yoongi agitó sus alas con molestia y vio de forma suplicante al elfo, quien comenzó a pensar en qué podría hacer.

― ¿Dónde queda eso? ―el pelinegro sonrió y vio al elfo con una ceja alzada, colocando nervioso al menor.

― ¿Irás por mi Taehyungie? Puedo decirte cómo llegar, pero no me gustaría que te perdieras―su orgullo de elfo fue lastimado, tomando en cuenta que su orientación era sumamente buena.

―Solo dime, yo sabré cómo llegar―el humano se encogió de hombros y tomó su celular nuevo entre sus manos, buscando una foto de la entrada del campus de Taehyung, para que elfo tuviera una mejor referencia visual.

Mientras tanto, Yoongi se levantó sigiloso y caminó hacia la habitación, sacando de su maleta de hojas un pequeño collar que había fabricado en su trayecto a la cuidad.

Sabía que ese collar no tenía ningún significado para Jimin, al menos no uno tan fuerte como lo posee la gargantilla que portaba en su cuello. Sin embargo quería darle algo en agradecimiento por brindarle un objeto que mantuviera un fuerte significado para él, aunque el hada no lo conociera.

Los nervios invadieron su cuerpo cuando pensó en la posible reacción de Jimin, por lo que sus manos comenzaron a temblar. Ese sentimiento de no saber lo que pasaría y temer de ello, era algo nuevo para Yoongi, por lo que no sabía controlarlo del todo.

― ¡Nos vemos más tarde, hyung! ―se escuchó el grito de Jungkook, logrando que el rubio se sobresaltara en su lugar y casi dejara caer el collar.

― ¡E-está bien! ―respondió, tratando de respirar hondo para no arruinar las cosas.

Dio media vuelta y logró verse reflejado en el espejo de la habitación, notando que su rostro estaba mucho más pálido de lo habitual, sintiéndose avergonzado de que Jimin le viera en ese momento.

Un poco más pálido y me camuflo con la pared.

Pensó con una sonrisa nerviosa, caminando rápidamente al baño para poder mojar su rostro y mantenerse un poco más tranquilo.

Cuando llegó al lavabo, dejó el collar sobre el tanque del inodoro, colocando sus manos por debajo del chorro para poder mojarse el rostro con rapidez.

― ¿Yoongi hyung? ―preguntó el humano en un llamado suave, siendo lo suficiente como para que Yoongi se sintiera más nervioso aún.― ¿Hyung?

―E-estoy en el baño, salgo en un momento―Jimin se extrañó al escucharle, ya que la voz temblorosa y entrecortada no era algo común en el hada.

Yoongi se secó las manos con la pequeña toalla que colgaba en la pared, secándose rápidamente. Cuando comprobó que sus manos estaban completamente secas, tomó nuevamente el collar con la pequeña joya Zafiro de color amarillo, sonriendo pequeño ante el pequeño objeto.

―Hyung, Jungkook se fue hace un rato ¡En verdad irá a recoger a Taehyung! ―dijo un emocionado Jimin desde la puerta del baño, haciendo que el hada se asustara y soltara el collar. El objeto entrando en el desagüe del lavabo.

― ¡No! ―el mayor vio con pánico cómo la cadena desaparecía dentro de la oscuridad del desagüe, pensando en que probablemente se había perdido para siempre.

Jimin se preocupó ante el grito y se acercó al hada, quien mantenía sus dedos enredados en su cabello mientras observaba con los ojos bien abiertos el lavamanos.

―Hyung ¿Por qué gritas? ―el hada suspiró e intentó verse tranquilo, una sonrisa recta adornando su pálido rostro.

―L-lo siento, es solo que me asustaste.

El hada se maldecía en mil idiomas diferentes por ser tan torpe, ahora la joya que había encontrado para Jimin estaba perdida en ese objeto humano que Yoongi no conocía, por lo que no tenía idea si podría hacer algo para recuperarlo.

―Oh, lo lamento. Es solo que vi la puerta abierta y pensé que estabas lavándote las manos―el rubio sonrió y observó cómo Jimin atrapaba su temblorosa y fría mano entre las suyas, intentando calmarle. ―Hey, estás temblando ¿En verdad está todo en orden?

Yoongi no se rendiría, iba a meterse en ese agujero negro para poder buscar la joya que tanto había arreglado para Jimin. Solo esperaba que ese oscuro lugar no lo absorbiera o algo similar.

―Sí, creo que tomaré una pequeña ducha. Luego podemos comer un poco de ramen con una cosa amarilla deliciosa que Taehyung compró―Jimin sonrió ante la mención del reciente conocimiento de Yoongi, la cerveza.

Si bien ya la habían consumido una vez frente a él, en ese momento no tenían la confianza suficiente para pedirle una probada, por lo que el hada era primerizo en el mundo del alcohol. Al contrario de lo que Jimin pensó, la cerveza no hizo efecto alguno sobre el hada, lo cual le sorprendió. Ni el elfo Jungkook tuvo alguna reacción sobre la bebida.

Se propuso a ofrecerle alguna bebida diferente y más fuerte, algo que lo hiciera que lograra ver a una hada borracha, sería divertido.

―Me parece bien ¿Quieres que te ponga el agua tibia o recuerdas cómo? ―Yoongi negó con una pequeña sonrisa, acercándose al menor para dejarle un beso en la frente, la cual se encontraba ligeramente descubierta.

―Recuerdo cómo se hace, gracias por la ayuda―Jimin sintió sus mejillas sonrojarse y asintió, dejando un pequeño apretón en la mano del hada para darle el espacio.

Yoongi respiró hondo cuando vio que Jimin cerró la puerta el baño, dando media vuelta para observar el lavabo con el ceño fruncido. Se armó de valentía ante lo desconocido y comenzó a disminuir de tamaño, volando hacia el desagüe, calculando desde lo alto si su tamaño actual era lo suficientemente pequeño como para entrar. Cuando supo que era un buen tamaño, comenzó a bajar.

Yoongi mantenía una ventaja que todas las hadas poseían, el poder tener una buena visión en la oscuridad. Muchas veces le había servido para cotillear durante la noche por el bosque, conocer a especies nocturnas y dar alguna vuelta sin la presencia de hadas molestas y criticonas.

De hecho, durante una de sus vueltas nocturnas había conocido al elfo Jungkook, quien hacía guardia cerca de su casa esa noche. Al principio fue bastante recio ante relacionarse con el menor, ya que era un elfo importante y él una hada juzgada, por lo que intentó alejarse. Sin embargo, a pesar de su notable timidez el pequeño elfo logró ganar su amistad, siendo bastante notorio a su vez, su enamoramiento por el hada.

Yoongi agradecía que Jungkook ya no sintiera nada por él, porque le dolería perder su amistad, aunque no lo dijera en voz alta.

Entre más bajaba más asco le daba el objeto en el que estaba metido, el olor a humedad y hongos por esta misma invadieron su nariz. A lo lejos logró ver un objeto brillante, sonriendo en grande cuando vio el collar de Jimin colgando de un relieve del tubo metálico en el que estaba metido. Esperaba que no se hubiera ensuciado.

Tomó la joya entre sus manos y comenzó a volar de vuelta hacia la luz, sintiendo un ligero sentimiento de claustrofobia, pero ignorándolo.

Cuando logró salir, dejó la joya sobre el tanque del inodoro y volvió a su tamaño humano. La joya estaba bien, con mínima suciedad. Pero el hada no había corrido con la misma suerte, su cabello y ropa estando húmeda y con un olor fétido, lo que le hizo fruncir la nariz.

―Mierda, al menos la joya está bien―dijo en un suspiro aliviado.

Al ser un ser mágico creía firmemente en la mala y buena suerte, por lo que dejó en la maleta el collar nuevamente. Ese día había tenido mala suerte, por lo que era una señal del destino para entregárselo en otro momento.

Taehyung mordía su labio con desesperación cuando los estudiantes comenzaron a ser llamados uno por uno por el maestro. Ese día era la entrega final de uno de sus portafolios en la materia que más importancia tenía en la nota final del semestre, por lo que pasar con la mayor nota posible era indispensable para él.

Había estado trabajando en él durante todo el semestre, pero su insistente inseguridad siempre le decía que podía estar mejor o que le faltaba algo y aquello le haría tener una mala calificación. No podía permitírselo, su media beca estaba en juego en esos momentos.

―Kim Taehyung, su portafolio―El pelirrojo vio con pánico a su amigo, quien había entregado el portafolio antes que él.

―Minjae, siento que me voy a desmayar―dijo mientras se levantaba del asiento, haciendo ruido con la silla para que el maestro supiera que iba hacia allá y no lo saltara de la lista.

―Vamos, dáselo con confianza―el pelinegro le dio una sonrisa para intentar animarle, sonriendo cuando el pelirrojo caminó rápidamente hacia el escritorio.

Todos denominaban aquella materia como la "Rompe-culos" porque era muy difícil el complacer al maestro y siempre tenía observaciones negativas para entregar.

Taehyung sintió que su alma volvía lentamente a su cuerpo cuando había entregado su portafolio, solamente esperando que el mundo fuera bueno con él y que el maestro estuviera de los mejores ánimos cuando revisara su trabajo.

―Ves, no fue tan malo, hyung. Ahora solo debemos esperar que suban las últimas notas y luego nos vamos de fiesta―el mayor de los dos sonrió y tomó su mochila, ambos comenzando a salir del salón.

―Ese señor es un hijo de puta, nunca es suficiente―Minjae asintió, sabiendo que su mayor tenía razón en eso.

―Bueno, ahora que tu alma ha regresado a tu cuerpo ¿Qué te parece si te invito a comer? ―peguntó el pelinegro mientras presionaba el botón del ascensor del edificio, comenzando a bajar.

―No lo sé, tengo que terminar otro trabajo que se entrega en dos días. Tengo todo listo, pero me gustaría darle una revisada más―el pelinegro torció los labios y suspiró, dejando que su mayor saliera primero del ascensor cuando las puertas se abrieron.

―Vamos, no es bueno que te sobre esfuerces, seguramente tu trabajo es perfecto, igual de perfecto que...―Taehyung frunció el ceño y dio tres pasos hacia adelante con velocidad, dejando a su amigo atrás y con las palabras en la boca.

El pelirrojo no comprendía por qué el elfo estaba ahí, en su universidad, en su facultad. Estaba vestido con ropa humana, su cabello siendo sostenido en una coleta, manteniendo sus puntiagudas orejas escondidas.

― ¿Todo bien? ―preguntó Minjae al notar que su amigo miraba atentamente a un chico desconocido en la entrada.

―De verdad lamento el no poder ir, quedemos para otro día ¿Sí? ―preguntó con notoria prisa el pelirrojo, logrando que la atención del menor cayera sobre el chico de la entrada.

―Bien, sabes que estaré disponible para ti cuando puedas―Taehyung no prestó mucha atención y se despidió con una sonrisa, caminando rápidamente hacia el elfo, quien llamaba la atención de muchas personas.

Taehyung estaba consciente que Jungkook no pasaría como una persona cualquiera, sus facciones eran sumamente definidas y hermosas, demasiado como para ser reales. Su cuerpo estaba bien formado y expedía un aura de imponencia. Por lo que no, cualquiera con dos ojos notaría que ese chico no era común.

―Jungkook―le llamó mientras se acercaba, logrando que el menor despegara la vista de su nuevo celular, el cual apenas sabía utilizar.

―Oh, Taehyung hyung. Pensé que me quedaría plantado aquí por más horas―el pelirrojo levantó una ceja, colocándose frente al elfo.

― ¿Qué haces aquí? ¿Cómo supiste siquiera que yo estaba aquí? ―el elfo carraspeó cuando detecto las miradas de algunas chicas detrás de Taehyung, poniéndose nervioso por la atención de humanas sobre él.

―Jimin hyung me dijo cómo llegar, él y Yoongi necesitaban algo de privacidad así que tenía que pensar en algo para salir del departamento sin ser demasiado obvio―Taehyung se sintió ligeramente desilusionado, pero no lo demostró.

Ante la mirada incómoda del elfo, el pelirrojo miró hacia atrás, notando las tres chicas que cuchicheaban en una de las bancas mientras miraban al elfo.

―Es mejor que nos vayamos, llamas mucho la atención―el pelirrojo tomó de la muñeca al elfo y ambos comenzaron a caminar para salir de la universidad, logrando que los colores invadieran las mejillas del menor.

El adolescente respiró hondo y controló su emoción, no quería quedar en ridículo frente a Taehyung.

―E-esta noche iremos al bosque, para visitar a Jin hyung y presenciar su cambio por la poción―Taehyung levantó ambas cejas, ya que él no se sentía cómodo yendo al bosque. ―No te preocupes, a esa hora no hay hadas cerca.

El pelirrojo asintió mientras retomaba la vista al camino, no siendo realmente consciente sobre su agarre a la muñeca del elfo.

Cuando iban pasando cerca de una plaza, Taehyung pudo ver una tienda de comida, la cual tenía variedad de platillos. Su estómago rugió con fuerza y comenzó a salivar, llamando la atención del elfo.

― ¿Tienes hambre? ―el pelirrojo asintió, mirando con atención el restaurante desde afuera. ―Si quieres podemos comer en ese lugar, aún tengo de ese papel que usan ustedes para intercambiar bienes.

―Oh, no me gustaría que gastes tu dinero. No como precisamente poco―dijo con una pequeña sonrisa el humano, logrando contagiarla al elfo.

―Estos papeles no me sirven, así que no importa―Taehyung iba a negarse nuevamente, pero su estómago rugió con fuerza y los grandes ojos del elfo le convencieron.

―Está bien, vamos.

Jungkook disfrutó aquel sentimiento que burbujeaba en su interior, el sentirse ligeramente correspondido por primera vez. Ahora solo debía disfrutar el sentimiento de no ser rechazado por la persona que le hace perderse por completo, al menos antes de que tuvieran que regresar con los demás.

Jimin se mantenía completamente concentrado viendo la televisión, siendo Peter Pan la película que se reproducía en el aparato. Mientras tanto, Yoongi se mantenía con Suga sobre su regazo, el hada demasiado confundido sobre las cosas que veía en esa película.

La noche había caído, sin embargo, ni el elfo ni Taehyung se habían aparecido en más de una hora, por lo que Jimin pensó que sería buena idea poner alguna película y comer fresas antes de partir hacia le bosque.

―Esa hada es ridícula―dijo con molestia cuando vio a la hada tomarse la medicina con la que el capitán Garfio intentó envenenar a Peter. ―Además de que es débil, no tiene poder alguno.

Jimin rodó los ojos y tomó una fresa en sus manos, metiéndola en la boca de Yoongi.

―Es una película, hyung. Los humanos no sabemos cómo son los seres realmente o si existen siquiera―el hada se encogió de hombros, logrando que la cabeza de Jimin se elevara ligeramente y volviera a bajar, al estar apoyado en su hombro.

―Aun así es ridícula.

Desde que había comenzado la película, a Jimin le había picado la curiosidad sobre una de las cosas que salían en la película, pero le daba vergüenza preguntar si eso podría pasar en realidad.

―Hyung...―el hada masticaba mientras miraba al menor, quien estaba muy cerca de su rostro, gracias a la posición en la que se encontraban. ― ¿Puedes hacerme volar como Peter hizo con Wendy?

Yoongi sonrió pequeño y asintió. Sinceramente jamás había hecho volar a otro ser, pero estaba consciente que podía hacerlo. Jimin se despegó rápidamente y se sentó frente a Yoongi, tapándole la vista al televisor.

― ¿Podemos intentarlo?

Al ver la emoción en los redondos ojitos de Jimin, Yoongi no pudo resistirse.

―Bien, pero si te caes de cara, no será mi culpa―bromeó el mayor, ganándose una mirada indignada y un pequeño golpe en el hombro. Ambos rieron mientras se incorporaban sobre la cama.

―Bien, quédate aquí―Jimin se mantenía parado sobre la cama, al contrario de Yoongi, quien se bajó.

El hada agitó sus alas ligeramente, soltando un poco de polvo que fue depositado en una de sus manos. Para asegurarse de que Jimin no cayera de culo, tomó dos montañas de polvo de hadas, por si acaso.

Agitó sus alas para emprender un suave vuelo, elevándose lo suficiente para quedar a la altura de Jimin y poder expandir el polvo por todo el cuerpo del menor.

―Estira los brazos hacia arriba―pidió el rubio, siendo obedecido rápidamente.

El polvo amarillento comenzó a caer sobre el cuerpo de Jimin, quien estornudó cuando un poco de este había entrado por su nariz . El hada sonrió con ternura y se preparó para tomar al menor ante el vuelo, ya que al ser principiante podía elevarse de golpe y chocarse con el techo.

― ¡Ay! ―chilló Jimin cuando sus pies comenzaron a despegarse de la cama, comenzando a agitar sus brazos como un pájaro bebé que aprendía a emprender vuelo.

―Hey, tranquilo―el hada pasó su brazo derecho por la cintura del menor, logrando que este se aferrara a su torso y no temiera en perder el equilibrio.

Jimin sonrió y fijó su vista en el rostro de Yoongi, quien le miraba con los ojos brillantes. En ese momento la timidez le invadió, pero sus extremidades no fueron capaces de separarse del hada, quien le miraba como si fuera lo más hermoso en el mundo.

"Tú eres lo más valioso que tengo."

El recuerdo de aquellas palabras le hizo elevarse un poco más, asustándole. Yoongi apretó el agarre y soltó una carcajada.

―Vamos, no te lancé montañas de polvo para que nos quedemos aquí―Jimin asintió con una enorme sonrisa y se soltó lentamente de los hombros ajenos, tomando las manos.

Yoongi comenzó a retroceder y Jimin avanzaba, ambos dirigiéndose hacia la sala. El hada no quería soltar aun a Jimin porque no quería que chocara con el techo o las paredes, al tener poco espacio, era mejor asegurarse.

― ¿P-puedo intentar solo? ―Yoongi acarició los nudillos de Jimin y asintió, soltando sus manos mientras le empujaba suavemente, haciendo que el pelinegro volara hacia atrás. ― ¿C-cómo lo controlo?

―Tienes que relajarte y guiar tu cuerpo al lado que quieras ir―Yoongi le demostró, impulsando ligeramente su cuerpo hacia arriba, llegando hacia el techo.

Jimin comenzó a agitar sus manos como si fuera un pájaro, impulsándose hacia arriba.

―No es necesario que muevas los brazos, pero de igual forma te ves muy lindo así―el hada habló con una sonrisa, notando que poco a poco Jimin captaba.

― ¡Dios, estoy volando! ―gritó muy emocionado, comenzando a volar hacia los lados, viendo desde abajo a Suga maullar.

Yoongi se acercó un poco cuando vio a Jimin tan emocionado, algo así podría hacerle descontrolarse y caer.

― ¡Estoy vo-AH! ―Jimin se impulsó demasiado fuerte por la emoción hacia adelante, lo que lo hizo salir disparado hacia la pared.

Por suerte, el hada estuvo al pendiente de que algo así podría pasar, por lo que rápidamente tomó la mano de Jimin y lo atrajo a su pecho, ambos quedando muy pegados.

―Te dije que tuvieras cuidado, no hay mucho espacio para volar aquí―ambos observaban con intensidad los orbes ajenos, notando el brillo increíble que resplandecía por el simple hecho de estar así de juntos. ―Algún día te llevaré a las afueras, para que podamos volar todo lo que quieras.

Jimin jadeó bajito y enredó sus brazos por el cuello del hada, quedando sus narices a pocos centímetros de distancia. Yoongi apretó el agarre en la cintura contraria, sin despegar en ningún momento el contacto visual.

―Quiero volar contigo...―en un hilo de voz Jimin expresó un deseo más profundo de lo que se escuchaba a primeras, esperando que Yoongi captara lo que quería decirle, pero no era capaz.

―Yo quiero estar siempre contigo. Quiero que conozcas las maravillas de este mundo, porque definitivamente tú perteneces a ellas―Jimin respiró entrecortado mientras asentía levemente, sus narices acariciándose perezosamente. ―Porque tú me diste una razón para seguir, una que no me haga pensar que solo soy una hada inútil.

Jimin se sentía en las nubes o más allá de ellas, se sentía perdido en la galaxia que era la mirada de Yoongi. No podía hablar con coherencia sin temblar, tenía tantas cosas que decir, pero era incapaz de hacerlo.

El hada tomó entre sus manos la camiseta de Jimin, estrujando la tela entre sus dedos. Juntó sus frentes cuando sus emociones se conectaron con las del menor, comprendiendo que el pelinegro era un completo manojo de nervios, al igual que él.

―Te siento, Jimin. Sé lo que sientes y quiero que sepas que yo...

La puerta del departamento se abrió, lo que causó que Jimin se separara de golpe y volara hacia abajo con brusquedad, ganándose un buen golpe en el trasero.

Taehyung y Jungkook veían todo con los ojos bien abiertos, el elfo carraspeando con una risa burlona.

―Ay, lo siento.

Se disculpó el pelirrojo con una pequeña sonrisa, viendo el puchero de su mejor amigo, quien se encontraba palpando su adolorido trasero.

Cuando Yoongi descendió y se aseguró que Jimin estaba bien, intentaron hacer como si nada de lo que vieron había pasado, sin embargo, las emociones encontradas de ambos eran palpables en el aire.

Y claro que Jungkook y Taehyung no perdieron el tiempo el molestar a sus amigos, claramente por separado.

― ¡Estaban a nada de besarse! ―chilló Taehyung mientras se colocaba la ropa hecha de hojas para ir al bosque, viendo a Jimin, quien estaba boca abajo sobre la cama.

Para poder ir al bosque, Yoongi les había confeccionado trajes de hojas, para que se mantuvieran con ellos toda su estancia en el lugar. Así evitando problemas.

― ¡Yah, déjalo! ―el pelirrojo se carcajeó, escuchando a lo lejos la risa de Jungkook, sabiendo que el elfo estaba encargado de molestar a Yoongi.

―Lamento tanto el haber entrado, ojalá nos hubiéramos tardado más en el restaurante―Jimin levantó la cara de la cama y levantó una ceja.

― ¿Fueron a comer juntos? ―Taehyung asintió con un poco de vergüenza.

―Me invitó a comer y fue una linda salida. Si hubiera sabido de que Yoongi y tú estaban en su sesión amorosa de vuelo, nos hubiéramos comido un postre o algo así―Jimin bufó y le lanzó una almohada a su mejor amigo, quien la esquivó perfectamente. ―Tan lindos.

Después de ello, todos se concentraron en alistarse para poder ir al bosque. No sería mucho, ya que volverían la misma noche al departamento. No era seguro que los humanos estuvieran mucho tiempo en el bosque y ante cualquier peligro de la cuidad, el hada y elfo estaban preparados para todo.

― ¿Creen que la poción funcione? ―preguntaba Taehyung mientras caminaban hacia el bosque, teniendo que tomar un camino diferente para entrar cerca de la casa de Namjoon. ―Digo, espero que sí, pero no sé qué tan fácil es hacer una de esas.

―Namjoon ha trabajado en ello por años y jamás le daría algo a Jin que supiera que no funcionará. Hubo un incidente antes por eso y desde ese entonces todo lo prueba en otros seres.

Ambos humanos comprendieron, esperando que esa no fuera una desilusión más para el simpático tritón.

―Una vez Jin tenga piernas ¿Podrá quedarse en el bosque? ―la pregunta hizo que ambos seres pensaran, realmente no habían tomado en cuenta ese detalle.

―Sinceramente no lo sabemos, pero Namjoon debe haber pensado en eso.

Cuando llegaron a la parte del bosque, ambos humanos sintieron escalofríos por lo oscuro y frío que estaba el lugar. Jungkook tomó su celular y colocó la linterna para los dos.

―Yoongi hyung y yo podemos ver en la oscuridad, es para ustedes―ambos asintieron y se mantuvieron cerca de los seres mágicos.

Jimin se sobresaltó cuando escuchó un ruido cerca, estremeciéndose de los nervios. Tomó rápidamente la mano de Yoongi y entrelazó sus dedos, intentando que el miedo se disipara de esa forma.

Caminaron más profundo dentro del bosque, pero ese ruido se mantenía presente. Taehyung se sobresaltó y se pegó al torso del elfo cuando escuchó un ruido más fuerte, como si alguien les estuviera siguiendo.

En ese momento, tanto el elfo como el hada se pusieron alertas, porque escuchaban el sonido y era algo de lo que tener cuidado.

Una luz comenzó a acercarse a ellos, logrando que los humanos temblaran de miedo.

Un monstruo de dos metros, músculos enormemente marcados, cuerpo verde y cabello negro largo se acercaba a ellos. Su nariz estaba expandida y dejaba salir humo por el contraste de temperaturas, generando un grave gruñido mientras se acercaba con un trozo enorme de madera en llamas.

―Mierda, es un Orco―Bufó Jungkook y empujó a Taehyung detrás de un gran árbol, Yoongi imitándole con Jimin. ―Quédense aquí y no salgan, los Orcos pueden ver en la oscuridad también.

Los Orcos son como una especie deformada de los elfos, siendo completamente distinto a estos en sus fines. Los Orcos son malos, solo piensan en matar y alimentarse, incluso comiéndose entre ellos sin problema alguno. Son máquinas asesinas fuertes, que son fuertemente temidos por los seres bajos y medios.

Jungkook apuntó su flecha hacia el Orco, quien gruñó fuertemente.

―Recuerda hyung, él solo ataca, no tiene técnica―susurró el elfo con su arma lista, esperando a cualquier movimiento del Orco.

Jimin y Taehyung miraban por un espacio del tronco, completamente aterrados. El Orco fijó su vista en ambos chicos, relamiéndose los labios y dientes mientras soltaba aire por la nariz.

De su traje, el Orco sacó una enorme hacha, haciendo que ambos seres mágicos comenzaran a atacar.

Jungkook lanzó una flecha hacia su cabeza, siendo esquivaba por el Orco, quien apuntó hacia el elfo con su enorme arma. El menor logró escapar, comenzando a disparar cuando el hacha se quedó atascada en la tierra.

Yoongi comenzó a dispararle hacia el pecho, pero sabía que esa especie era dura de matar, por lo que debía concentrarse únicamente en el pecho.

Un gruñido estridente resonó, el Orco corriendo hacia el árbol en donde los humanos estaban escondidos.

El rubio voló rápidamente y se colocó frente al Orco, lanzando un gran rayo de luz hacia la bestia, la cual voló hacia atrás, chocando contra un árbol.

La debilidad más grande de los Orcos era la luz, por lo que ellos no salían por las mañanas. Sin embargo, jamás se imaginaron que uno de esos rondara por ese bosque, lo cual hizo que Jungkook se preocupara, ya que eso no significaba nada bueno.

El elfo sacó su espada y corrió ágilmente hacia el Orco, enterrándola con profundidad en el pecho de la bestia, la cual gruñó con fuerza, comenzando a sangrar.

Yoongi aprovechó ese momento de vulnerabilidad para lanzarle otro rayo, uno que comenzó a quemarle la piel. Tanto el elfo como el hada se mantenían en ataque, todo hasta que el cuerpo del Orco fue quemado por completo.

Asegurándose de que no estuviera vivo, Yoongi colocó su mano sobre el cuerpo hediondo, no sintiendo aura alguna. Jungkook apagó el fuego que la bestia había provocado.

―Jodida mierda, putos Orcos―se quejó el elfo mientras guardaba sus armas.

Los elfos estaban acostumbrados a pelear con esas bestias, ya que eran enemigos naturales.

― ¿Jimin, Taehyung? ―ambos seres corrieron hacia el árbol, notando los cuerpos temblorosos, los cuales se abrazaban para buscar consuelo.

Yoongi tomó a Jimin por debajo de las axilas y lo alzó, abrazándole por la cintura para confortarle. Sabía que el elfo estaba ayudando a Taehyung, así que se concentró en el pelinegro, quien lloraba por el miedo.

―Tranquilo, ya está muerto―Jimin enredó con fuerza sus brazos por el cuello del hada, sintiéndose demasiado tembloroso como para sostenerse.

― ¿H-hay más de esos aquí? ―preguntó con terror, aliviándose cuando sintió al hada negar.

―Nunca habíamos visto uno de esos por aquí, siempre están en bosques más grandes―Yoongi dejó varios besos sobre la coronilla de Jimin, mientras acariciaba su espalda. ―Vamos, estamos muy cerca de la casa de Jin y Nam, cuando lleguemos podrás recostarte un rato ¿Sí?

Jimin asintió y se separó del mayor, limpiando sus lágrimas con las manos temblorosas.

―Yah, no llores―Yoongi secó las lágrimas con sus labios, logrando que Jimin relajara su respiración.

― ¿Vamos? ―preguntó Jungkook con Taehyung aferrado a su brazo, el hada asintió.

El camino a la casa de los mayores fue realmente corto, por lo que llegaron en pocos minutos. Mientras iban acercándose, pudieron ver que ambos seres estaban en el lago, Jin tomando entre sus manos la poción, con notable emoción.

― ¡Chicos! ―gritó con emoción, agitando su cola por debajo del agua.

Al ver el estado de ambos humanos, el hechicero y el tritón se acercaron preocupados.

― ¿Qué les pasó? ―preguntó Jin con la mirada entristecida, dejando la poción a un lado.

―Nos encontramos con un Orco en el camino y quería comérselos―Namjoon chasqueó la lengua.

―Esas cosas son una mierda, hace años que no veo uno―ambos seres asintieron, intentando llevar a los humanos a la casa de Jin y Namjoon.

―Puedo tomarme la poción mañana, ahora deben descansar―dijo Jin mientras tomaba las manos de sus amigos humanos, quienes se habían hincado junto al lago para saludarle con un abrazo. ―Puedo esperar, es mejor que descansen del susto.

―H-hyung, no es necesario...―Jin negó sin dejarles continuar.

―Ya lo he dicho, mañana muy temprano podemos hacerlo y así pueden regresar a tiempo a su departamento para ir al lugar de estudios―todos estuvieron de acuerdo con la idea, por lo que Namjoon les arregló el lugar para que pudieran dormir cómodamente.

Sin embargo, Jimin no quería dormir solo y sabía que Taehyung estaba igual de asustado que él, por lo que no serían tan reconfortantes para el otro.

―Y-Yoongi hyung―habló bajito, llamando rápidamente la atención del hada. ― ¿Puedes dormir conmigo?

Yoongi sonrió pequeño y asintió, dejando un beso en su frente.

Desearon buena noche a los demás y el hada y el pelinegro se fueron a una de las habitaciones de la casa del hechicero, todo en silencio.

Sin compartir una palabra, ambos se acurrucaron en la cama. Yoongi podía sentir perfectamente a Jimin, por lo que intentaba ser una fuente de apoyo y tranquilidad para él.

Cuando el humano se durmió, el hada acarició sus facciones con anhelo.

Esperaba que la vida le permitiera el poder permanecer junto a ese humano, quien había llenado su vida de luz, sin siquiera saberlo.

Estos hermosos dibujos fueron hechos por❤: panda_salchipapa

¡Hola!

Sé que muchos se preguntan el por qué desaparecí por más de un mes, pero si se preguntan eso es porque no me siguen y no vieron mi anuncio (◡‿◡✿) me tomé un hiatus por la universidad, ya que estaba en las últimas semanas, esas matan. ☹

En compensación les traigo otro capítulo largo, de esos que les gustan❤ He visto que el apoyo ha crecido mucho y estoy agradecida por eso (●'ω`●) estaba muy inspirada para este capítulo.

Recuerden que vamos lentito pero seguro con la relación, no se impacienten💙

Espero que el capítulo les haya gustado y recuerden que si quieren mandarme sus dibujos sobre este Fic, pueden hacerlo por mi Instagram, en el cual estoy igual que mi nombre de usuario aquí en Wattpad✨

¡Nos leemos prontooooo!✨

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