🌻08🌻

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Agitó su cola cuando un pez travieso le había mordisqueado en broma, sintiendo el pequeño dolor en su aleta. El pez se soltó y dio una vuelta alrededor del chico, quien se encontraba sentado sobre una enorme roca, la cual sobresalía del agua.

―No deberías exponerte así, algún humano te verá y te pescará―le advirtió el pequeño pez Emperador, quien con su cuerpo escamoso de un brillante azul, intentaba alejar al tritón de la superficie del mar.

―Tranquilo, nadie puede verme―Jin sonrió cuando el pez volvió a mordisquearle la cola, decidiendo que sería bueno el hacerle caso y regresar a las profundidades del mar.

Se bajó de la enorme roca y comenzó a mover su cuerpo de forma ondulada, creando así mayor velocidad para nadar, su cola impulsándolo hacia abajo.

Jin estaba muy aburrido últimamente, quería conocer nuevas especies del mundo, una que no tenga que mantenerse bajo el agua para sobrevivir, sino, una que le explicara sobre cómo funcionan las cosas para ellos y que le haga conocer cosas nuevas.

Los humanos habían sido su primer golpe de curiosidad, pero después de ver cómo maltrataban a sus compañeros marinos, prefirió el alejarse de ellos y no entenderlos.

Luego, escuchó sobre los seres, mitológicos como él, que habitaban en un bosque algo lejano a su colonia, pero cuando sus padres le comentaron que había ciertas criaturas que era mejor no conocer, prefirió tomar cierta distancia de ahí también.

Pero vamos, a Jin le parecía ridículo que todas las especies que no fueran marítimas eran catalogadas como "peligrosas" por sus familiares y amigos. Por lo que comenzó a pensar que era pura paranoia.

El pez Emperador se fue por su lado y Jin sonrió cuando nadie podría vigilarle, comenzando a nadar a toda velocidad hacia esa costa que estaba cerca del bosque, de la cual sus amigos tanto hablaban y temían.

Le tomó varios minutos el llegar, tanto, que se sentía demasiado cansado y solo quería echarse a tomar una siesta por todo un día.

El borde estaba bastante separado del pasto, en donde se encontraba el bosque. Se apoyó en la orilla y vio cómo los árboles se mecían por el viento, sonriendo ante la sensación en su húmedo cuerpo.

Se sobresaltó cuando escuchó el golpe de algo caer, instintivamente hundiéndose en el agua, apretando los puños.

Cuando notó desde una considerable profundidad, que no había peligro, comenzó a elevarse lentamente mientras intentaba agudizar su audición, sacando el rostro a la superficie hasta su nariz.

Observó con asombró cómo trozos de algún material desconocido se elevaban por el aire.

Abrió la boca cuando vio que ese ser de cabello negro, quien en ese momento se encontraba de espaldas a él, elevaba con su mano aquellos materiales y formaba rápidamente lo que parecía ser una cueva...o algo así.

― ¡Wow! ¡¿Cómo haces eso?! ―preguntó el tritón con un grito, agitando su cola por la emoción de saber aquello, salpicando fuerte.

El pelinegro se sobresaltó por la aguda voz y lanzó uno de los bloques que anteriormente elevaba, hacia la criatura desconocida.

― ¡Ah! ―Jin esquivó el bloque y vio cómo este se hundía en el mar con rapidez. ― ¡Oye!

El chico miró con los ojos bien abiertos al tritón, dejando caer todos los materiales que anteriormente elevaba.

Jin se sumergió y tomó el material desconocido, el cual pesaba y comenzaba a ensuciar el agua. Salió a la superficie y lanzó con toda su fuerza el bloque de vuelta, notando que este pasó muy cerca del rostro de aquel chico que le miraba aún con mucho asombro.

― ¡No tires tus porquerías a mi hogar! ―se quejó y se cruzó de brazos. ― ¡Ahora vas a socializar conmigo y me dirás cómo haces que las cosas vuelen cuando quieres! ―Jin se sentía empoderado al reclamarle aquello a un desconocido, el cual le había atacado, pero realmente estaba temblando de miedo y esperaba que él no le atacara de nuevo.

― ¿E-eres un tritón? ―Jin frunció los labios cuando notó que el otro comenzaba a acercarse lentamente, aún bastante sorprendido.

―No, soy un calamar.

Namjoon no pudo evitar el reír ante las palabras del tritón, sintiéndose un poco más confiado en acercarse.

―Pues eres un calamar lindo, al menos―Jin sintió sus mejillas calentarse y bufó. ― ¿Cuál es tu nombre? ―se sentó en el pasto, junto al borde en donde Jin estaba apoyado y miró la cola del contrario, quien se sonrojó más y la ocultó bajo el agua.

―Primero dime cómo elevas las cosas y luego te diré lo que quieras―la curiosidad de Jin eran más grandes que sus ganas de hacer nuevos amigos, así que no pudo evitar el soltar esa pregunta, aunque sonara algo brusco.

―Bueno, eres un chico súper amable, por lo que veo―Namjoon habló con sarcasmo y Jin rodó los ojos, mirándole atento y esperando una explicación. ―Bien...―se acomodó y suspiró. ―Soy un hechicero.

Jin le miraba atento, pero cuando este notó que eso era todo lo que el mayor iba a decir, miró a otra dirección incómodo.

―Ajá... ¿Y qué haces para que todo vuele? ―Namjoon sabía que no podría contentar al tritón tan fácilmente, se veía que era curioso y que hacía todo lo que estuviera a su alcance para saber lo que quería.

―Bueno, déjame traer algo de café, porque estaremos aquí por un largo tiempo―Jin asintió confundido, ya que no tenía ni idea de lo que era el café, pero asintió de igual forma.

Solo esperaba que sus dudas fueran resueltas rápidamente.

Así había comenzado su historia.

Jin llegaba todos los días a la casa de Namjoon, quien le recibía con un poco de cerveza de raíz, bebida que le había encantado desde la primera gota que probó, contándose cómo había estado su día y contestando las nuevas preguntas que el tritón tenía para él.

Namjoon cada vez se sentía más cómodo con el tritón, debía admitir que él se había mudado a esa parte del bosque para poder estar solo y concentrarse en sus asuntos, pero ese tritón no le había permitido el cumplir sus planes, aunque realmente no le molestaba para nada.

― ¿Qué estás haciendo? ―preguntó Jin cuando notó que el hechicero hacía algo sobre una cosa blanca, algo que no entendía ni conocía.

―Estoy escribiendo.

Jin se inclinó mucho, apoyando su mojada barbilla en la rodilla del mayor, viendo más de cerca.

―Quiero hacer eso ¿Puedes enseñarme?

Namjoon no sabía si tirarse de un puente o abrazar muy fuerte al tritón que le visitaba a diario.

Debía admitir que al inicio le frustraba las constantes visitas del chico, ya que siempre quería que le mostrara cosas nuevas o le hablara sobre su vida como hechicero. Pero cuando comenzó a pasar más tiempo con él, las cosas se comenzaron a acomodarse y ese sentimiento de necesidad por verlo comenzaba a picarle en el pecho.

El hechicero estaba tan ansioso de tener a Jin con él, que hizo una clase de lago que se conectaba de forma mucho más cercana a su casa, incluso colocando un puente pequeño, para que pudiera remojar los pies mientras hablaba con el tritón e incluso meterse al agua con él.

No era agua dulce, era agua salada.

Incluso había dejado un pequeño túnel para conectar con el mar y que fuera más sencillo para el tritón movilizarse.

Lo que logró marcar algo importante en la vida del tritón y el hechicero, fue el mes en que Jin no se asomó por el bosque, ni un día.

Al principio pensó que el tritón se había aburrido de él y no le tomó demasiada importancia, pero cuando notó que era demasiado tiempo, fue cuando realmente se preocupó. Se alistó para sumergirse en el mar y colocó una burbuja mágica de oxígeno para no tener problemas en su búsqueda.

Namjoon nunca se imaginó que se encontraría con los padres de Jin muy cerca del borde hacia el bosque, ambos iban con Jin detrás y este se veía bastante molesto.

En ese momento tenía a dos tritones y una sirena al borde de su casa, teniendo una larga conversación sobre sus intenciones.

Ese fue de los puntos que marcaron su relación y Jin siempre los recordaba con mucho anhelo, porque ese chico había sido muy importante desde el inicio y espera que se quedara con él hasta el final.

Jin suspiró cuando su mente dejó de torturarle con sus pensamientos, había recordado aquellos momentos que había tenido junto al moreno, cuando aún era un adolescente lleno de curiosidad.

Ronie se encontraba nadando a su lado, el pez en su forma delgada le hacía compañía, aún sintiéndose culpable por arruinar el plan de Jin y lograr que se peleara con su pareja.

― ¿Dónde te quedarás? ―le preguntó el pez a Jin, quien solamente parpadeó ante su vuelta a la realidad.

―No pienso ir a casa de mis padres, no quiero escuchar a mi madre reírse de mí por ser tan sensible por una tontería―Ronie dio una pequeña vuelta mientras nadaba, riendo un poco.

― ¿Por qué no vas a hablar con Namjoon? ―Ken, quien había estado en silencio al analizar a su mejor amigo, habló cuando notó que Jin no se sentía bien.

―Porque soy muy sensible y no quiero que me grite de nuevo, prefiero alejarme un poco, cuando esté más tranquilo―Ken asintió y tomó la mano de su mejor amigo, en señal de apoyo.

―Quédate en mi casa, justamente hace unas semanas compré un sofá cama nuevo, es de algas conservadas, muy cómodo―Jin soltó una risa cuando recordó la cara de Namjoon cuando le comentó de qué estaban hechos sus muebles en el mar.

―Bien, gracias amigo.

Ronie entró a la casa sin ser invitado, acomodándose también por algunas de las plantas y algas que Ken mantenía en casa, aprovechando para poder dormir sin temer hincharse en la noche por algún depredador inoportuno.

―Duerme bien Jin y deja de torturarte con lo que pasó―el tritón asintió ante las palabras del pez, intentando dormir sin pensar en que todo lo que hacía, era un fracaso.

Solo esperaba que Namjoon y Yoongi estuvieran bien.

Jimin miraba al techo con los ojos abiertos, su cabeza dolía y su cuerpo se sentía tieso, no pudiendo conciliar el sueño.

En la cama individual se encontraban tres personas. Yoongi estaba a la derecha, Taehyung a la izquierda y Jimin en el medio, siendo apretujado por ambos.

Nadie había querido dormir en el sofá, ya que no era para nada cómodo, por lo que todos se lanzaron sin importarles nada. Jimin le había dicho a Yoongi que se hiciera pequeño, en su tamaño de hada, pero él había dicho que odiaba dormir de ese tamaño, por lo que lo ignoraría.

Se levantó sin mucho cuidado y brincó fuera de la cama, bufando mientras tomaba su almohada y su manta, ya que había un frío terrible en la sala.

―Me congelaré el culo y me dolerá la espalda porque a esa hada no le gusta dormir en su tamaño de bolsillo―Jimin se quejó e hizo una mueca al recordar las palabras del pálido, lanzándose al sofá sin mucho cuidado y colocándose la delgada manta.

Suga, quien se vio perturbado en su siesta junto a la estufa, maulló y se acercó a Jimin, quien sonrió y estiró su mano a su dirección para darle unos mimos.

―Al menos tú me harás compañía, pequeño―habló con voz aguda mientras colocaba al peludo amigo en su pecho, dejando mimos en su barbilla y debajo de las orejas. ―Ven, no quiero que te congeles los bigotes con este frío.

Jimin colocó al minino acomodado a su lado, quien se hizo bolita y comenzó a ronronear a gusto.

Sonrió y fijó la mirada en la esquina de la sala, notando que en ese espacio quedaría lindo un árbol de navidad, pero en ese momento no tenía los recursos para comprar uno y menos para comprar todos los adornos y los regalos.

―Ve a tu cama, yo me quedaré en el sofá―la voz del hada sobresaltó a Jimin, quien por inercia, apretujó a Suga entre sus brazos, quien maulló incómodo. ―Uh, la cosa peluda está ahí.

Jimin suspiró e ignoró al hada, realmente no estaba para bromas y su orgullo no le permitía el volver a la cama, así que se mantendría en su lugar, como el rey del orgullo que era.

―Te estoy hablando niño, si no vas por tu cuenta, te mando volando―Jimin bufó y se acomodó boca abajo en el sofá, dejando a Suga cerca de su pecho.

El hada gruñó y se encogió de hombros, caminando de vuelta a la habitación del menor, no sin antes decir una cosa más.

―Jimin, hablemos ¿Sí? ―hasta al pequeño gato se erizó ante la gravedad que Yoongi usó para decir aquello, haciendo que el pelinegro suspirara y se sentara lentamente en el sofá, dejando espacio a su lado para el mayor.

El hada se acomodó y frotó sus manos en sus rodillas, intentando disipar el nerviosismo.

―Sé que empezamos con el pie izquierdo. Te hice putadas y te traté muy mal, espero me perdones por eso―Jimin suspiró al recordar sus inicios llenos de lodo y mierda.

―Bueno, aún espero el día para regresarte esas putadas.

Yoongi rio y se acomodó mejor en el sofá, sintiéndose un poco más cómodo y no sintiendo la necesidad de estar encorvado.

Suga se acomodó en las piernas de Jimin, no importándole nada.

―Bueno, ahora que todo está bien, puedo irme a tu cama sin culpas―Yoongi se levantó de golpe y Jimin soltó una risa por el cambio de panorama, notando que el hada sentía culpa anteriormente.

―Espero que tu casa sea reparada pronto―habló Jimin bajito, cuando Yoongi se dirigía a la habitación.

Yoongi pensaba que ese era su plan inicial, pero le estaba gustando quedarse con los humanos, aunque las cosas seguían siendo algo incómodas.

Yo no lo espero.

Namjoon se encontraba con los pies en el agua, esperando ver algún movimiento en el lago, algo que delatara que Jin estaba por ahí, pero no veía nada.

Se sentía muy culpable por haberle gritado al tritón, sabía que él no tenía malas intenciones, pero el hecho de que alguien estuviera a punto de morir por ese plan, le había hecho perder los estribos por unos minutos.

El silencio de la noche le deprimía, pensar que ese tritón eran quien alegraba sus días y ahora no se encontraba con él, generaba un dolor en su pecho que no podía soportar.

Se habría aventurado en el fondo del mar para buscar a Jin, pero a esas horas, los tiburones guardianes tenían prohibido dejar pasar a las colonias a otro ser que no pertenezca a estas, para evitar el perturbar la tranquilidad nocturna y él debía respetar aquello.

―Ugh, siempre termino arruinando todo―se rascó el cuello y miró por última vez el pequeño lago que él mismo creó para Jin.

Se levantó y con pesar comenzó a caminar hacia su hogar, todo, hasta que una voz muy aguda se dejó escuchar.

― ¡Hechicero Namjoon! ―una de las hadas de luz se acercaba rápidamente hacia Namjoon, en su tamaño de hada.

El moreno se detuvo y miró con curiosidad cómo esta se transformaba a su tamaño humano, sacando una prenda de la mochila que llevaba, la cual se encogía o agrandaba con ella.

―Dígame.

La hada tomaba la prenda como si fuera algo tóxico, Namjoon abrió los ojos cuando notó que era la sudadera que Jimin le prestó a Jin, la cual estaba en la casa de Yoongi.

―Necesito hablar con el hada Min Yoongi sobre esta prenda de vestir humana que se encontraba en su hogar, ya que como sabe, esto es prohibido en el bosque―Namjoon disimuló su sorpresa y su duda, pensando en una excusa rápida y creíble, ya que Yoongi podía ir a juicio y ser expulsado del bosque para siempre.

―Su casa fue destruida por aguas del mar ¿No es así? ―la hada de luz no entendió a qué venía la pregunta, pero respondió.

―Sí...estaba entre el desastre que dejó la gota de rocío y el agua del mar por los peces globo―la hada comenzaba a frustrarse y se le notaba por el color de su rostro, el cual se tornaba rojo. ―¿A qué viene esa pregunta? ¿Dónde está Min Yoongi?

―Esa cosa debió llegar ahí por medio del mar, sabes que los humanos tiran de todo en el agua, así que lo más probable es que eso llegara con los peces―la hada le miró con la ceja alzada por unos minutos, pensando en que realmente tenía sentido.

Namjoon soltó el aire cuando vio al hada regresar la sudadera en la pequeña mochila.

―Bien hechicero, disculpe las molestias. Tenga buena noche―Namjoon movió la mano en forma de despedida y bufó, tronándose el cuello por el cansancio.

―Al final tu plan resultó, Jinnie―pensó con una sonrisa triste mientras se adentraba a su casa, pensando en que, al día siguiente, lo buscaría por todos los rincones del mar, hasta disculparse y tenerlo a su lado nuevamente.

Después de todo, ahora él también quería saber y ayudar sobre la relación de Yoongi y Jimin.

¡Hola! estoy aquí después de muuucho tiempo y lamento eso, pero la universidad es un mundo que te absorbe por completo, pero ahora soy libre👀 al menos hasta finales de enero :(

La historia va un poco lenta, pero es porque llevamos pocos capítulos, pero ya he dado algunas pistas de lo que podría pasar ^^ espero les esté gustando la temática actual❤

Sin más que decir ¡nos leemos prontoooo!✨

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